webnovel

Primer combate - Parte 5

-Desde el punto de vista de Ryuji-

Les he mostrado algo muy malo a todos.

Cuando me di cuenta de que termino el combate, no sabía cómo describir la situación en la que me encontraba.

Había ganado, Max estaba inconsciente con el rostro destrozado, el entrenador me detuvo antes de que pudiera seguir, y por supuesto… el silencio abrumador que me rodeaba.

Pero qué buen primer combate acabo de hacer, ¿eh? Maldito idiota.

Es cierto que estaba enojado. Lo admito.

¿Pero hasta este punto? Yo… en serio no puedo creer lo que puedo hacer a veces. Mi problema realmente no radica en lo que hice, si no el cómo me sentía en ese momento.

¿Qué si me arrepiento? Veamos... Ya que si considero los motivos, lo que hice fue hacerle lo mismo que le hicieron a Collins. No tengo culpas de eso, lo que le hicieron fue rastrero y sin perdón. Sin embargo… ¿Tengo el derecho para hacerlo?

Me encontré con un problema que no me corresponde arreglar. Lo que dijo Max, en cierta parte tiene razón. No conozco del todo la situación, y aun así, metí mi mano en el fuego.

Y esta forma… lo que hice. ¿Esto como me hace ver? Estoy haciendo lo mismo que hacen ellos. Lo mismo que algunas ves me hicieron. Es cierto que nuestras mentalidades son diferentes, al menos eso quiero pensar. Pero esto no me hace tan diferentes de ellos.

No quiero. Realmente no quiero… pero lo que quiero llegar a hacer, sin duda está ligada a la violencia.

Yo ya me había decidido.

Entonces, lo importante es que esto no me cambie.

Tengo que ser mejor.

Ya no puedo remediar lo que ya hice. Eso fue un error, ya que pude haberlo manejado de otra forma. Ahora creo que tengo que lidiar con los demás… oh, cielos…

-¡Haaa…!

-¿Oh? Ese fue un largo suspiro. ¿Tan agotado estás?

Cuando pensaba en las consecuencias de mis actos. La doctora Valerie, quien estaba usando Retrieve para sanar el dolor en mi abdomen.

Además del severo daño en mis brazos, que ahora están vendadas en su totalidad hasta los hombros. Aparentemente, me rompí una costilla, supongo que fue aquel golpe que recibí de Max. Había utilizado Armored Rock para disminuir el daño, pero eso no me garantiza una defensa completa, además de que aún no estoy acostumbrado a usarlo y me hace falta tiempo para activarlo.

Fue un golpe realmente fuerte. Tuve mucha suerte la verdad. Por lo que la enfermera decidió concentrarse solamente en esa área para aliviar al menos el dolor.

-Solo estoy cansado. Gracias por ayudarme, señorita Valerie.

-Que me agradezcan por hacer mi trabajo es bueno, pero esto sobrepasa mucho mis habilidades. Sé más consiente de tu cuerpo, algunas veces ni yo voy a poder atenderte.

-Eso lo entiendo, tendré más cuidado desde ahora. Es solo que esta vez fue algo difícil de manejar.

-Sin dudas que lo fue. Ese chico Saifer aún no se ha despertado. ¿Paso algo malo entre ustedes?

Mientras terminaba de curarme, Valerie se encontraba expectante y con una mirada reprimida esperando una respuesta. Intento actuar lo más sereno posible, ya que es un tema del que no quiero revelar ni discutir.

-Realmente no… solo fue un combate difícil, es todo.

-Ya veo, bueno, esfuérzate para que no sigas teniendo combates difíciles. Me das más trabajo del que ya tengo.

-¿No sé por qué se queja tanto? Casi nadie viene aquí.

-Exactamente. El mejor trabajo de la vida es no trabajar. Si entiendes eso, por favor ten más cuidado.

Cuando dijo eso, no sé por qué razón me recordó mucho a mi hermana Rena. A veces no puedo entender a los adultos.

De todas maneras, aceptaré la advertencia por ahora y me despido de ella.

Aún me dolía todo el cuerpo, pero se nota la gran diferencia después de ser atendido. Creo que después de unos días de descanso estaré bien.

Ahora…

Caminando por los pasillos de la Academia, que se encontraban vacíos porque al parecer los estudiantes siguen estando en la arena viendo los demás encuentros.

Estoy seguro de que todos están ahí ahora. Chris y los demás también… seguro que vieron lo que pasó…

-¿Qué cara debería poner ahora?

Estaba muy inseguro, así que por eso voy a otro lugar, no importa cuál.

Solo necesito un momento para-

-¡Ry!

-¡¿…?!

Cuando estaba a punto de irme, escuche a alguien llamándome por mi sobrenombre, con eso puedo darme una idea de quien era.

Los reconocí de reojo. La que me llamo fue Ari, y junto a ella venían Chris, Sara y sus dos amigas.

Me aguanté mis ganas de huir y les saludo de forma normal y casual.

También sonreír, eso no puede faltar.

-H-H-Hola, ¿Cómo están?

¡Mierda! ¡Eso se escuchó muy agudo!

-Te estuvimos buscando, ¿te encuentras bien?

-S-Si, solo estoy cansado.

Tengo que mantener la calma. Me sorprendió mucho que Ari preguntara eso, esperaba otra cosa diferente.

Parecía estar más tranquila cuando le respondí. Fue entonces que Sara, con una mirada seria y templada, dio un paso hacia mí.

-¿Qué…?

-Toma, los guardé como querías.

-¿…?

Al ver que Sara extendió su mano, me di cuenta de que me estaba dando mis anteojos. Es cierto que le había pedido que me los cuidara antes del encuentro. Así que solo me quería dar eso, eh.

Me tranquiliza un poco, pero solo un poco nada más.

-Gracias.

-De nada.

Sin mucho apuro tomé mis anteojos y me los volví a poner. Sonará extraño, pero me siento más ligero (de la vista) ahora.

-Oye, Ry. Te tengo una pregunta.

-… ¿Si?

Por un momento sentí un escalofrío.

Sara no dejaba de mirarme inexpresivamente, mis ojos cayeron lentamente inconscientemente. ¿Qué es lo que querrá preguntarme? Ella no tiene reparos en hablar, por lo que me puedo dar una idea.

"¿Por qué fuiste tan lejos?", "Eres desagradable", "eres muy extraño y anormal", "¿siempre fuiste así?"

Algo así…

Pero fue entonces cuando dijo.

-¿Por qué no dijiste que eras tan fuerte? Idiota.

-…. ¿Qué…? ¿Ah…?

-Sabes lo angustioso que es ver un combate en el que no sabes lo que va a pasar. Sabía que eras fuerte y eso, pero eres un Singular. No tengo idea de cómo ibas a sobreponerte a estas cosas, y ahora me siento estúpida luego de haber visto lo de hoy. ¡Debiste explicarlo mejor, idiota!

-...

Me pregunto qué expresión tengo ahora. Seguro una idiota como ha dicho Sara.

-Sara tiene razón. ¡Eso fue algo increíble de ver, Presi! Todos estábamos sin aliento viéndote pelear. Incluso Lucy parecía estar a punto de desmayarse del susto.

-¡¿Quién dice que se estaba desmayando?! ¡E-Es cierto que algo como eso no se ve todos los días! ¡Pero no es como si hubiera estado asustada por culpa de este tonto! ¡¿Me estás escuchando?!

Gaby y Yers comenzaron a tener unas palabras que me costaba seguir. Estaba anonadado por la situación, y fue cuando deje que mi mente se liberara y deje algo innecesario.

-Ustedes… vieron como terminaron las cosas… el cómo termine dejando a Saifer…

Justo en ese momento, recordé el cómo me miraron todos al final.

-¿… Eso no estuvo mal de mi parte…?

Al terminar de hablar, me dio la impresión de que fruncieron el ceño.

Sara habló primero.

-Si te refieres a como le rompiste la cara a ese tipo, ¿Eso realmente importa?

-¿Eh…?

-Si la razón por la que antes actuabas tan raro fue por algo que hizo él. Estoy segura de que se lo merecía. Que se joda ese idiota, ganaste, y es lo que importa.

La sorpresa que me lleve era grande, solo pude responder con silencio. Y fue cuando Ari se acercó.

-Sara tiene una forma extraña de decirlo, pero tiene razón en lo que dice, Ry.

-¿Um? ¿Qué quieres decir con eso?

-Realmente no entiendo de estas cosas, pero lo que si se es que prefiero es que tú estés bien. No me importa el cómo lo hagas, solo quiero que puedas salir caminando por tu cuenta al final de todo.

-Oye, no me ignores, ¿a qué te refieres con extraña?

Jamás en mi vida llegué a esperar a escuchar algo como esto. Trato de no pensarlo demasiado, ya que si lo hago terminare diciendo cosas más innecesarias, terminaré hundiendo más la imagen que tienen sobre mí.

Y eso hace que me sienta desagradable.

Eso no es verdad… en realidad yo…

-Ry.

-¡¿…?!

Una mano se colocó en mi hombro cuando tenía pensamientos negativos.

Al ver que se trataba de Chris, quien tenía una mirada solemne y una ligera sonrisa.

-Felicidades por pasar la primera ronda. Acabas de hacer algo único, por lo que deberías de estar feliz por eso. No tengas dudas y continua, nosotros te apoyamos.

-...….

Mientras dice esto, Chris comienza a sonreír aún más, de hecho, todos lucían contentos.

Lo que hice, estuvo mal. Aun así, ellos siguen aquí.

¿Estaba esperando esto? ¿O hubiese preferido de otra manera?

Bueno… qué más da.

-Sí, gracias. Eso haré.

Y con esas palabras, decido dejar de lado todo lo ocurrido y uniéndome a ellos. Ya que parece que era el único quien no se sentía feliz por ganar. Sí que soy alguien raro.

-¿Qué harás ahora, Ry?

-No lo sé. El entrenador dijo que podía irme temprano a casa a descansar si quería. Aunque también quisiera ver los demás combates para ver quien es mi siguiente oponente.

-¿Uh? ¿A qué te refieres con eso? Tu oponente ya está decidido.

-¿Qué?

Me encontraba confundido. ¿A qué se refiere Chris con eso? ¿Acaso ya se decidieron los combates cuando estaba en la enfermería? Eso es rápido.

Viéndome con dudas, Chis solo murmuro con cansancio, diciendo que debería de prestar más atención a las cosas.

Pues me disculpo por eso. Como sabrán, mi cabeza estaba en otra parte por razones fuera de mi control.

-¿Recuerdas la tabla de los participantes? Había 2 puestos que sobresalían en ambos bloques.

-Oh… ahora que lo mencionas.

Si me pongo a recordar, es cierto que 2 puestos estaban conectados al primer encuentro, o sea el mío, y del último encuentro de la tabla. Lo curioso de esto, es que ambos se saltan la primera ronda y entran directamente con la siguiente.

-Esos puestos son para aquellos que quedaron en segundo y tercer lugar en el torneo del año pasado. Prácticamente, es una ventaja para que se salten un encuentro.

-¡¿Qué?! ¡¿En serio?!

Eso quiere decir…

-¿Quién es mi siguiente oponente?

Sus ojos se entrecerraron dando una sensación intensa, calmando su expresión a una más calmada.

-Jay Walker, quedo en segundo lugar el año anterior. Está en 2do año.

¿Otro de segundo año? ¿Y qué también fue finalista el año anterior? Eso es…

-¿Jay Walker? ¿Quién es él?

Lanzo esa pregunta al aire, estaba absorto de tanta información repentina que ya me da igual quien me responde. En serio es muy malo estar desinformado.

Y fue cuando una voz nueva se escuchó.

-Es el actual presidente del Comité Disciplinario.

-¡¿…?!

Todos volteamos nuestras cabezas para ver de quienes eran esas palabras. Y lo que vimos fue a una hermosa chica con anteojos.

La vicepresidenta del Consejo Estudiantil, Carina Roules.

-Felicidades por tu victoria, Ryuji Narukami.

-Oh, gracias. Superior.

-Solo llámame Carina si quieres.

-¿Qué estás haciendo aquí, Carina?

Luego de que Carina me diera sus felicitaciones. La cara de Sara decayó y se amargo tan pronto sus ojos se posaron en ella. Supongo que aún no olvida lo anterior. Aunque Carina no dejaba de sonreír por alguna razón.

-¿Qué acaso no puedo venir a dar mis felicitaciones, Sara? ¿No sé por qué te encuentro tan molesta?

-No te hagas la tonta, ¿Qué acaso olvidaste lo que me hiciste? Por tu culpa se me arruinaron mis planes.

-¿Por mi culpa? Ummm… no recuerdo haber hecho algo para que digas eso. Bueno, si no lo recuerdo es porque no era importante.

-¡¿Qué dices?! ¡Hija de…! ¡¿…?! ¡Gaby, Lucy! ¡Suéltenme!

Conforme avanzaba la conversación, aunque no mucho… Carina parecía estar reacia ante Sara, quien era retenida por sus amigas antes de que se lanzara contra nuestra superior. En serio esta chica tiene mal genio, pero no me desagrada tanto ese lado de ella. Me divierte.

-Bueno, bueno, calmémonos, ¿quieren? No vine aquí hacer un escándalo.

No. La del escándalo es solo ella.

-No solo me acerqué para felicitar, también quería presentarles… ¡¿…?!

Justo en ese momento, desde la espalda de Carina salió la figura de otra persona. Parecía estar escondida y en silencio todo este tiempo, pero ahora dio un paso adelante sobre los demás. Todos estaban atentos a esta persona desconocida cuando se presentó.

No… de hecho, acaba de pasar delante de todos. Y ahora se detuvo enfrente de mí.

-Ryuji Narukami.

-¿…?

Una suave voz pasó por mis oídos.

La primera impresión que tuve fue sin duda, es que era una hermosa chica.

Una piel blanca como porcelana. Ojos finos y grandes de color verde, con un delicado y largo cabello que estaba elegantemente recogido, su color parecía ser dorado pero a la vez blanco. No encontraba fallas en su rostro, y al estar tan cerca se podía ver un lunar debajo de sus labios.

Esta chica apareció de repente y no despegaba su vista de mí. También estaba sonriendo sin decir nada.

No sé cómo interpretar esta situación actual. Y al estar entre tantas personas, no sé cómo debería de reaccionar.

-¿Hola…?