Caminante, no hay camino, se hace camino al andar

—¡Vamos, más duro esos golpes, imaginen que sus vidas dependen de ello!

—Pero ya estamos agotados…

—Tengo ampollas en las ampollas…

—No se supone que un isekai debería ser así de complicado…

—¡Dejen de quejarse chamacos y sigan golpeando al ritmo del 1, 2!

Los gritos constantes de aquel grupo se han vuelto rutinarios, desde que tuvimos que huir del campamento por ese enfrentamiento entre nativos, las cosas van de mal en peor. Por fortuna Lety pudo a dar luz de forma natural, el problema es que no ha podido recuperarse como se debe, cada día la veo más agotada.

El bebé absorbe mucha energía vital de su madre, no solo nutrientes básicos. Es un saludable bebé oso, sin embargo, no sabemos nada sobre cuidados de un bebé bestia. Es nuevo incluso para nosotros.

Descubrimos recientemente que la madre el bebé comparten magia, lo cual fue muy útil pero se está haciendo peligroso. Desde que Lety supo que podía hacer crecer plantas a su voluntad al compartir el tipo de magia que su hijo, ha estado haciendo crecer frutas y tubérculos. Con eso podemos complementar la alimentación, el problema a su vez, radica en que se agota cada vez más. Su cuerpo no fue diseñado para manejar la magia, cada día es más frágil.

Lo que hemos estado haciendo Lion y yo, es compartir por las noches un poco de nuestra aura mágica, en sí, no ayuda mucho a menos que uno tenga magia de curación. Pero para emergencias, es bueno al recuperar la vitalidad del cuerpo. Lo usaban mucho en la aldea rasta. Cuando alguien se iba mucho tiempo de pesca al mar profundo y regresaba agotado, le compartíamos aura mágica para que descansará.

En el caso de las bestias ayudaba con que fuera solo una vez. Pero en el caso de Lety es complicado, el bebé es muy poderoso y absorbe todo cuando es amantado.

La situación se complica, aunque ahora solo somos un grupo pequeño, seguimos bajo persecución.

Los nativos siguen nuestro rastro dentro del bosque, aunque al parecer tienen miedo de entrar, mandan grupos de exploradores de dos o tres elementos. Son fáciles de aniquilar, pero ahora los mandan más seguido.

Por la situación de Lety avanzamos muy despacio, acampando al atardecer y partiendo al medio día. Lion deja que ella lo monte para desplazarnos, sin embargo, está Ray y tres adolescentes que nos siguieron durante el escape, si avanzamos rápido los dejaríamos atrás así que vamos a un paso calmado haciendo que solo caminemos pocos kilómetros cada día. Es desesperante pero no puedo culparlos. Aunque en el caso de Ray estoy segura que él podría valerse por sí solo, los que me preocupan son los jóvenes. Ellos son muy extraños e infantiles, aunque se puede decir que gracias a ellos tres los demás nos aceptaron, fueron los primeros en acercarse y preguntar por nosotros.

Además, uno de ellos actúa muy extraño con ademanes exagerados y palabras absurdas, aunque en retrospectiva fue el que nos dio la idea de que estamos en otro mundo, el otro es un sabelotodo que curiosamente sabe muchas cosas inútiles que de vez en cuando nos ayuda a encontrarle lógica al mundo que tenemos en frente, y la niña con su sentido del humor que nunca se acaba y la manera tan extrovertida de ser mantiene entretenido al bebé mientras Lety descansa, también por la noches nos incita a socializar entre nosotros, en sí esos tres jóvenes, por muy raros que sean, son la única pizca de cordura que nos queda.

Ray es un antiguo médico militar y experto en artes marciales, aunque está cerca de los 70 años tiene más vitalidad que muchos jóvenes, es un hombre muy amable, sin embargo, detrás de esa mirada calmada se ve el tormento y arrepentimiento de alguien que mató a mucha gente.

Este es nuestro nuevo grupo, es pequeño pero diverso.

Todos los demás perecieron.

Por ahora nuestra única meta es llegar lo más lejos posible.

Lo más profundo en el bosque y encontrar un refugio o al sujeto desnudo que nos salvó anteriormente. Si él se adaptó al bosque es probable que nosotros también. Pero necesitamos escapar de los nativos que nos persiguen. Solo así estaremos más calmados.

Un rugido brutal y desgarrador se escucha desde lejos, viene de la dirección donde estaba nuestro campamento, a pesar de estar lejos se puede sentir una mezcla de tristeza e ira. Los vellos de mi cuerpo se erizan al pensar que nos podríamos enfrentar a algo así. En este mundo no podemos confiarnos de nada, cualquier criatura podría ser potencialmente peligrosa.

—Señorita Lila, ¿usted le puede ganar a esa cosa verdad? —Me pregunta valery, con una sonrisa nerviosa mientras su cuerpo tiembla ligeramente.

—Claro que ella puede tonta, ella es la heroína de esta historia, además aún no ha despertado su power up, solo es cuestión de que el desarrollo de personaje surta efecto—interrumpió Simón mientras hacía poses raras con las manos.

—Eres tan imbécil que haces demasiado fácil insultarte, vamos a lavarnos para poder dormir, por el eco que produjo ese rugido puedo decir que se encuentra a unos veinte kilómetros de distancia, a las faldas de la montaña, así que es imposible que nos alcance antes de terminar la noche. —agrego Michel.

Los tres jóvenes dejaron de lado el entrenamiento vespertino de Ray y volvieron a ser ellos mismos. Por otro lado Lion no deja de estar alerta mientras Lety mira con melancolía al horizonte.

—Eso sonó como mi esposo…

—¿Estás segura de eso? —Interrumpió Lion

—…No sé decirlo a ciencia cierta, pero…es como si gritará mi nombre en ese rugido…

Su mente se desvaneció lentamente, cayendo profundamente dormida, como es habitual a esta hora. Parece ser que la falta de nutrientes y magia ya empezó a hacer efecto.

Ray en silencio prepara la fogata, mientras Lion le enseña a los niños como desollar la presa de esta noche, por mi parte permanezco a un lado de Lety compartiendo mi aura mágica, al mismo tiempo que el pequeño bebé es amamantado hasta dormirse, si no fuera por la situación en la que nos encontramos, es probable que el padre oso sea quien compartiera esta escena, aunque si él no tenía conocimientos previos o alguien que los ayudará, la historia sería igual de trágica.

La respiración de Lety se acelera y a nuestro alrededor crece un poco de pasto y algunas flores. Esto se ha vuelto normal, ella no sabe usar la magia y durante la transfusión muchas veces deja crecer plantas.

Lo bueno es que fue una habilidad bendecida como el control de naturaleza. En mi caso o el de Lion, fue complicado. Liberar ventiscas o escarchar todo a su alrededor era natural al dormir cuando empezábamos a manejar nuestra magia.

Si nosotros tuviéramos un bebé, sería un usuario mágico muy poderoso, y como la magia es extraña, a veces se hereda y otras sale una habilidad muy distinta, a la de los padres. Es posible que no pudiéramos controlarlo.

Es raro últimamente pienso mucho en eso, tener una familia con Lion. Sé que no es el mejor momento, pero ver a Lety y bebé oso me hace sentir muy extraña.

—¿Estas bien Lion? —Pregunto Ray algo extrañado

—Sí, solo un escalofrío, eso es raro ya que soy inmune al frío

Es gracioso ver la conexión entre ambos, pero debería dejar de pensar esas cosas, de todas formas, soy una guerrera en un mundo como este es mejor estar al cien, concentrada en la batalla.