651 ¡Así Que Es Él!

Observando la eficacia de ese método, Sheyan lo replicó inmediatamente con la otra serpiente parásita. En su lugar, sintiendo que algo estaba mal, la plaga huésped hizo un gesto para que la otra serpiente parásita se deslizara hacia atrás, antes de asimilarla de nuevo en su cuerpo.

Temiendo que la plaga huésped escupiera otra abominación, Sheyan no se atrevió a ser impulsivo, pero vio lamentablemente como la serpiente escapaba.

Probablemente debido a la absorción de una parte de la esencia de la vida de Sheyan, los marchitos rasgos faciales podridos de esa plaga huésped se habían repuesto extrañamente un poco. A través de su horrible rostro, Sheyan pudo identificar las principales características de la plaga huésped.