La llamada telefónica

Zhen-Zhen estaba de buen humor porque Tristán la dejaría acompañarlo durante su viaje de negocios fuera de la ciudad. Estaba realmente emocionada por su viaje juntos. Los dos estaban sentados ahora en la sala de estar.

—Tristán, ¿está muy lejos la Ciudad de Oceaniz de aquí? —le preguntó, sus ojos llenos de mucho interés.

—Sí. Podemos ir allí de tres maneras. ¿Qué prefieres, viajamos por tierra, por mar o por aire? —Tristán la consultó de repente.

—¿Cuál es la diferencia entre las tres? —indagó Zhen-Zhen, antes de darle una respuesta.

—Usaremos mi coche si viajamos por tierra. Sin embargo, tomará 12 horas llegar a nuestro destino. Luego, si viajamos por mar, tenemos que tomar un ferry. El viaje durará aproximadamente 4 horas. Por otro lado, si viajamos por aire, usaremos un avión. Llegaremos a nuestro destino después de media hora.

—Mmm, entendido. Ya experimenté viajar usando tu coche. Quiero probar otro medio de transporte. Así que tendré que elegir entre un ferry o un avión.

Zhen-Zhen hizo una pausa por un momento, contemplando qué elegiría entre las dos opciones. Tristán simplemente esperaba en silencio su respuesta.

—Mmm… Como amo el cielo, quiero probar el avión.

—¡De acuerdo! Reservaré dos boletos de avión de inmediato. Te haré experimentar el Vuelo de Primera Clase. Zhen-Zhen, aquí la gente puede volar incluso sin superpoderes. Ese es el poder de la tecnología y las invenciones humanas —dijo Tristán con orgullo, alardeando ante Zhen-Zhen.

—Tristán, ¿podemos llevar a FaMo con nosotros? —le preguntó, acordándose de FaMo.

—¿Eh? ¿Quiere llevar a FaMo, su gato? ¡Vaya... estoy empezando a sentir celos. Se encariñó con ese gato enseguida! Hmmph

Pero al ver su mirada suplicante, Tristán no pudo negarse.

Tomó un suspiro profundo y dijo:

—Está bien, le pediré a Matthew que consiga un permiso de viaje para FaMo. También llevaremos a tu mascota con nosotros.

Zhen-Zhen aplaudió las manos, sintiéndose agradecida y feliz. Tristán también había permitido que FaMo los acompañara.

—¡Gracias, Tristán! Eres muy amable conmigo y con FaMo.

Tristán le pellizcó las mejillas. —No tienes que agradecerme. Haré cualquier cosa por mi Zhen-Zhen, mi futura esposa.

Ahora, Zhen-Zhen no podía evitar sonreír porque Tristán era muy generoso y dulce. La trataba muy bien, a ella y a FaMo.

Continuaron tomando una siesta cuando Tristán recibió una llamada de Matthew.

—Señor, estoy de vuelta en la oficina. ¿Dónde está? Escuché que el Presidente estaba molesto cuando salió repentinamente durante el almuerzo —dijo Matthew.

—Oh, no importa al abuelo. ¡Nada nuevo! Siempre está molesto cuando se trata de mí. Jajaja. De todas formas, estoy aquí en mi casa ahora mismo. Volveré en un rato —respondió Tristán.

Entonces Tristán se volvió hacia Zhen-Zhen, que estaba sentada a su lado. Cuando ella escuchó que Tristán se iba a ir de nuevo, Zhen-Zhen frunció los labios. Tristán se rió al ver su reacción, así que se retractó de sus palabras.

—Oh Matt. Cambié de opinión. No voy a volver a la oficina hoy. Solo dile al abuelo que me estoy preparando para mi Viaje Fuera de la Ciudad. Avísame si hay algún asunto urgente en la oficina —le dijo Tristán a Matthew mediante la llamada.

—Ok Señor. Tomo nota —aceptó Matthew.

Después de eso, Tristán colgó el teléfono. Cuando volvió su mirada a Zhen-Zhen, ella ya estaba sonriendo de oreja a oreja como si hubiera ganado la lotería.

—¡Maldición! Zhen-Zhen tiene una forma única de hacer que haga algo de buena gana solo para satisfacerla. —Tristán sacudió la cabeza impotente.

Después, los dos simplemente reanudaron ver películas en la televisión. FaMo se aburrió de quedarse en la habitación de Zhen-Zhen, así que salió a unirse a ellos. 

Se acostó en el regazo de Zhen-Zhen mirando hacia la televisión. Los tres estaban absortos mirando la película cuando el teléfono de Tristán sonó una vez más.

Esta vez fue una llamada de una de sus antiguas conquistas. Su nombre era Vanessa, una actriz emergente de la generación actual.

Tristán frunció el ceño al ver su identificador de llamadas. No tenía interés en entretener a ninguna mujer hoy, excepto a Zhen-Zhen. Ignoró la llamada. Pero Vanessa continuó llamándolo.

Para hacerla parar, Tristán tomó su teléfono y le envió un mensaje.

[Vanz, no puedo contestar tu llamada. Actualmente estoy en una reunión importante con los directores y la gerencia. Te devolveré la llamada cuando esté libre.]

Después de enviar el mensaje, Tristán colocó su teléfono en la mesa delante de ellos. Fue entonces cuando se dio cuenta de que todavía llevaba puesto su traje de ejecutivo.

Tristán se levantó pero se detuvo cuando sintió que el brazo de Zhen-Zhen agarraba su codo.

—Tristán, ¿te vas? —le preguntó ansiosa.

Él soltó una risa suave.

—No, no me voy. Solo voy a cambiarme de ropa.

—Mmm, está bien. —Zhen-Zhen soltó su codo.

Tristán se dirigió directamente a su guardarropa. Cuando se fue, su teléfono sonó una vez más. Vanessa no dejaba de llamarlo. ¡Qué chica tan persistente!

Tristán no pudo leer su último mensaje ya que ya había ido a su habitación a cambiarse de ropa. 

Su mensaje fue: [Bebé, usa tu auricular y contesta mi llamada. No tienes que hablar. Yo haré el habla. Solo escúchame.❤ ^^,)]

Había un emoji de corazón y un emoji guiñando el ojo al final de su mensaje. Parecía que ella tramaba algo. 

El timbre del teléfono de Tristán continuaba. FaMo no podía concentrarse en la película debido al fuerte tono de llamada del teléfono de Tristán. Sin saberlo, FaMo se había aficionado a ver dramas en la televisión igual que Zhen-Zhen.

FaMo empujó la mano de Zhen-Zhen y dijo:

—¿Puedes contestar la llamada para que el tono deje de sonar?

Después de escuchar la petición de FaMo, Zhen-Zhen movió la mirada al teléfono de Tristán que estaba sobre la mesa. Zhen-Zhen lo recogió y presionó el botón de contestar. Tristán ya le había enseñado cómo contestar una llamada.

Movida por la curiosidad, acercó el teléfono a su oído, tratando de escuchar a la persona al otro lado de la línea.

Luego, después de unos segundos, escuchó la suave voz de una mujer, hablando muy dulcemente.

—Hola Bebé, ¡te extraño tanto!