Luchemos (3).

Para sorpresa de Feng Wu...

Murong Linhai de repente saludó a Feng Wu. "Nos rendimos."

¿Qué?

Feng Wu no era el único sorprendido. La multitud y los otros equipos estaban todos mirando a Murong Linhai con asombro. ¿Rendirse?

¿Cómo podía Murong Linhai abstenerse de una competición tan importante? ¡¿Qué hijo había criado la familia Murong?!

Yan Qian fulminó con la mirada a Murong Linhai. "¡No me digas que te has rendido porque te ha conquistado su belleza y quieres hacerle un favor!".

"¿Ayudarla?" Murong Linhai pensó para sí. "Ojalá pudiera, pero necesito ser lo suficientemente capaz para hacerlo".

Por supuesto, Murong Linhai no dijo eso en voz alta. En lugar de responder a la pregunta, ahuecó los puños hacia Feng Wu y dijo con indiferencia: "Sabemos que no somos Feng Wu en esta ronda. Le deseo lo mejor".

Feng Wu miró a Murong Linhai y asintió.

Los demás no sabían qué decir. ¡Feng Wu era tan arrogante!. Feng Wu miró a Liang Jin al no oír respuesta.

Liang Jin era el anfitrión de esta batalla.

Liang Jin sonrió amargamente en su interior, pero aun así dijo: "Feng Wu ha ganado esta ronda. La siguiente ronda será la batalla entre la residencia del Príncipe Yan y la Pagoda Primordial".

Feng Wu y los demás abandonaron la arena.

"No sabía que Murong Linhai renunciaría. Je." Feng Xun se regodeó.

Cruzándose de brazos, Yu Mingye dijo malhumorado: "Estaba deseando luchar contra él. No sabes cómo mira a Xiao Wu".

"¿De qué estáis hablando? Disfrutad del juego". Feng Wu tuvo que cortarles.

Yan Qian lideraba su equipo, y la Pagoda Primordial estaba liderada por Chanxin, un monje.

Cada bando enviaba a un miembro al principio, y los ganadores continuaban luchando en el escenario, mientras que el equipo perdedor enviaba a un segundo miembro.

La batalla continuó.

Estaban igualados, y pronto, ambos bandos tenían al último jugador, Yan Qian era la última de su equipo. Por parte de la Pagoda Primordial, Chanxin fue la última en aparecer.

Yan Qian era definitivamente más capaz que la Princesa Yan Ling, pero no era tan buena como el Príncipe Yan Yu. Ahora que lo pienso, estaba más o menos al mismo nivel que Feng Xun.

Feng Wu miró por encima de su hombro a Feng Xun, que asintió. "¡Estoy segura de que puedo derrotarla!". Frotándose la barbilla, Feng Wu se quedó perpleja.

Se suponía que la gente del Imperio Dayan tenía tanto talento e ingenio que podían hacer avances mucho más rápido que los forasteros. Sin embargo, después del entrenamiento de Feng Xun, había alcanzado el nivel de la Princesa Yan Qian.

Feng Wu no estaba segura de la capacidad de la gente del Imperio Dayan, así que le preguntó a Ji Xingcheng: "¿Qué nivel tiene la Princesa Yan Qian?".

Ji Xingcheng dijo seriamente: "La Princesa Yan Qian es la segunda mejor estudiante de la generación más joven en la mansión Yan, sólo superada por el Príncipe Yan Yu. Eso ya es muy impresionante".

Feng Wu preguntó: "¿Hablas en serio?".

Ji Xingcheng asintió. "Por supuesto. Además, su clan familiar ha invertido muchos

recursos en ella. Por lo tanto, entre la generación más joven, Yan Qian es la chica con más talento. Es increíble".

Feng Wu tenía una idea aproximada, Mientras tanto, la batalla estaba llegando a su fin.

Con sus inteligentes movimientos, la Princesa Yan Qian ganó finalmente la batalla contra la Pagoda Primordial.

Liang Jin anunció la siguiente batalla: La Secta de la Espada Sin Forma contra la Sala de la Pluma Roja.

La Secta de la Espada Sin Forma era buena con las espadas, y la Sala de la Pluma Roja sólo tenía miembros femeninos. La batalla fue muy rápida..