¡Lucha!

"¿La conoces? ¿Sabes donde esta ella?" Yamano sacudió el retrato.

No todas las personas de Dongsang podían hablar el idioma del Imperio Junwu, pero Yamano lo hablaba con fluidez.

Sheng Changtian se sintió en conflicto.

Tenía que admitir que no le gustaba Feng Wu.

Ella lo había derrotado, y era comprensible que él la abandonara.

Sin embargo, ella era Feng Wu, ¡la chica con la Sangre Divina del Fénix!

Su talento era tan precioso para el Imperio Junwu.

El Reino Dongsang quería atraparla probablemente porque querían matar al joven genio.

Ante ese pensamiento, Sheng Changtian respiró hondo y tomó una decisión.

"¡No la conozco!"

Yamano lo miró fijamente. "¿Está seguro?"

Sheng Changtian insistió: "¡Por supuesto que estoy seguro!"

Yamano lo miró por última vez antes de volverse hacia Yang Wan.

Dado lo que le estaba pasando, Yang Wan no quería que Feng Wu pasara por lo mismo, por lo que sacudió la cabeza. "¡No sé quién es!"

Yamano los miró fijamente.

"Tienes algo de integridad, ¡pero solo te hará morir antes!

"Los otros tres ya no tendrán esa oportunidad. ¡Vete al infierno!"

Yamano agitó las manos con frustración. "¡Cortadles la cabeza!"

Sus compañeros de equipo habían estado esperando este momento y levantaron sus armas al unísono.

¡Pero justo en ese momento!

Yamano sintió algo frío en la garganta.

Cuando se dio cuenta de lo que había sucedido, la sangre brotaba de su cuello.

Yamano tembló.

Para derrotar al enemigo, siempre era una buena idea eliminar primero a su líder.

Feng Wu no podía asesinar a tanta gente a la vez, así que primero mató a su líder.

Sin él fuera, los miembros de su equipo estarían confundidos.

¡Fue increíble!

Feng Wu se movió tan rápido que antes de que Yamano se diera cuenta, su daga estaba en la garganta de otro hombre.

Feng Wu eligió asesinar primero a los Reyes Espirituales de Nivel 4.

En un instante, el enemigo perdió dos miembros de Nivel 4.

Solo quedaban tres Reyes Espirituales de Nivel 4 y cinco de Nivel 3.

Feng Wu cortó la cuerda que ataba las manos de Song Yao a la espalda. "¡Levántate y mátalos!"

No importa cuán talentosa fuera Feng Wu, todavía era muy joven y solo era un Rey Espiritual de Nivel 3.

Ella ya había ido más allá al matar a dos Reyes Espirituales de Nivel 4.

Solo había tenido éxito porque el enemigo no la había visto venir.

Song Yao estaba asombrado.

Había estado a punto de morir, pero sucedió lo más increíble.

Agarró la daga que Feng Wu le arrojó y apuñaló al Rey Espiritual de Nivel 3 detrás de él en el corazón.

El hombre murió antes de que pudiera darse cuenta de lo que había sucedido.

Sheng Changtian y los demás finalmente se dieron la vuelta para ver qué estaba pasando.

Sheng Changtian se asombró cuando vio a la chica de rojo moviéndose ágilmente de un enemigo a otro.

Incluso se frotó los ojos, preguntándose si estaba alucinando.

"¡Lucha!"

Habiendo experimentado esa humillación, Yang Wan reaccionó rápidamente y golpeó a Sheng Changtian en la cabeza.

"¡Sí! ¡Por supuesto!" Sheng Changtian finalmente se despertó de su desconcierto.

Sus heridas ya no importaban. ¡Solo lucha!