Capítulo 52: Kuchiyose no Jutsu

Frente a el, dos copias idénticas se encontraban. Todos se miraron a los ojos por unos momentos hasta que el cuerpo de cada uno destello, desapareciendo en el aire.

*¡Clang!*

El sonido metálico resonó en el bosque, los dos clones habían atacado a Toru.

"Tienen casi la misma fuerza y velocidad…"

Cerrando los ojos, Toru suspiró. Los clones parecían ser idénticos tanto en apariencia como en estadísticas físicas y mentales. Hasta este momento ya han pasado veinte días desde que el entrenamiento comenzó. En este lapso de tiempo, Toru aprendió muchas cosas de si mismo, los clones lo habían ayudado bastante en su entrenamiento.

"¡Nii-san, eres asombroso!"

Levantando la mano, Hanabi miro a Toru, quien parecía estar pensando en algo relacionado a los clones. Aún así, estaba sorprendida por el talento para el ninjutsu que Toru tiene, era sorprendente sin duda alguna, eso sin contar los rumores que decían que los miembros del clan Asahi eran muy malos en el campo del ninjutsu, aunque es entendible hasta cierto punto, los Asahi básicamente son Uchiha defectuosos, ninjas que nacieron sin el talento para el ninjutsu y la capacidad de desarrollar los ojos malditos, es decir, el Sharingan.

(Ahora que lo recuerdo, Onikuma Enko, el jutsu que uso durante su pelea contra Hakuto me interesa bastante. Poder invocar a un aliado al campo de batalla puede llegar a ser muy útil, me pregunto si Yamato-sensei puede enseñarme ese jutsu)

Mirando al vacío, Toru se sintió curioso. El jutsu de invocación o también conocido como Kuchiyose no Jutsu, es algo que le interesa mucho a este chico, la utilidad que tiene en batalla es sorprendente.

"Nii-san, ¿Quieres ir a mi casa? Puedo hacer el almuerzo"

Acercándose a Toru, Hanabi se dio cuenta de la hora, esto lo llevó a pensar en una buena idea para poder llevar a su hermano mayor a su casa.

-Clan Hyuga-

El dojutsu de sus ojos estaba activo, mirando a la niña de cabello dorado frente a el, Hiashi suspiró. Hinata le había pedido que entrene a su compañera de equipo, pero esto era un desperdicio de tiempo, Ino no tenía talento para el combate cuerpo a cuerpo, no manejaba un taijutsu especifico, lo cual la convertía en una kunoichi mediocre.

"¿Estas segura de querer continuar?"

Levantando la palma de su mano, Hiashi vio a Ino, la cual estaba respirando con dificultad.

"Hah… Esto no es nada, aún puedo seguir por mucho tiempo mas"

Levantando la guardia, Ino apretó el puño con fuerza mientras miraba a Hiashi. En respuesta a esto, Hiashi negó con la cabeza antes de continuar con el entrenamiento.

Al mismo tiempo, Hinata estaba viendo esto con una expresión preocupada. Aunque ella accedió a dejar que Ino entrene junto a Hiashi, esto era demasiado. Pero parecía que el hombre de ojos blancos estaba tratando de no dañar a Ino, después de todo el conoce al padre de esta chica. Si Hiashi llegase a lastimar a Ino, al día siguiente un hombre estará tocando la puerta de su casa con un kunai en la mano.

"La posición de tus manos está mal, mantén tu espalda recta, no dejes ninguna apertura, de lo contrario el enemigo puede darte un golpe crítico en cualquier momento. Como kunoichi de esta aldea, debes tener la fuerza y la capacidad mental necesaria, de lo contrario solo serás una carga para tu equipo"

Cruzándose de brazos, Hiashi sabía que Ino solo es una novata, pero había que dejar en claro los errores que esta chica esta cometiendo. Los errores sin corregir pueden convertirse en problemas a futuro, así que era lógico tratar de arreglarlos para así no morir en manos de un ninja aleatorio.

Después eso, Ino se lanzó al ataque, pero Hiashi es un Jounin, para un genin lograr acertarle un golpe seria un logro que no muchos conseguirían. Así que, usando las palmas de sus manos, Hiashi detuvo un puñetazo de Ino, caro seguido, le dio un pequeño golpe en la nuca, haciendo que el cuerpo de Ino se debilite para después caer al suelo.

"Hm…"

Entrecerrando los ojos, Hiashi vio como Ino se levantó del suelo, de alguna forma logró ver algo de valentía en esta chica. A diferencia de Hinata, Ino es una chica mucho más extrovertida sin miedo a decir lo que piensa, aún que eso es lo único que la  caracteriza, ya que no es muy buena en el arte del taijutsu.

(Ino esta dando su máximo esfuerzo, es asombroso. Pero… soy una rosa que aún no florece, eh…"

Con una leve sonrisa, Hinata al fin estaba entendiendo que no había que forzar las cosas, simplemente era dejarse llevar por el momento, en algún momento, la hermosa y fuerte rosa blanca florecerá y le mostrará al mundo su belleza y fuerza.

"Onee-san, Otou-sama… Ino-san?"

Apareciendo detrás de la puerta, estaba Hanabi, quien vio con curiosidad al pequeño grupo de personas.

"¿Están entrenando?"

Mirando a la cansada Ino, Hanabi sacó una conclusión apresurada.

"Llegas temprano, has vuelto a salir sin mi permiso"

Con una mirada sombría en la cara, Hiashi estaba un poco enojado, después de todo su hija desaparece todos los días por la mañana para luego aparecer en la tarde, esto lo había estado incomodando desde hace veinte días.

"Eh… yo solo quería… jeje"

Tocándose la cabeza, Hanabi estaba un poco avergonzada, no podía decirle a su padre que salía de casa todos los días para encontrarse con un chico, eso mataría a Hiashi de un paro cardiaco, después de todo Hanabi conoce a su padre, ya no es el hombre estricto que solía ser, ella sabia que su padre se preocupa por sus hijas, así que esto la hacía feliz.

"No pongas excusas vacías, más tarde hablaré contigo, por el momento estoy ocupado"

Volviendo su mirada a Ino, Hiashi suspiró. Esto se estaba volviendo más estresante, y con el Byakugan activado pudo ver al chico que se ocultaba detrás de la puerta.

"Ha~ sal de ahí, es inútil ocultarse"

Escuchando la palabras del hombre, Toru salió de su escondite. Hiashi lo vio con un poco de asombro en su rostro, después de todo este chico nunca había puesto un pie en su casa, en el pasado, por más que Hinata lo invitaba a pasar, Toru se negaba y se iba a casa con las manos en los bolsillos.

"Buenas tardes, Hiashi-san" Dijo Toru mientras inclinaba la cabeza.

"¿Toru? ¡¿Qué haces aquí?!"

Sorprendida por la aparición de Toru, Ino dio un paso atrás, no pensaba encontrarse a su compañero de equipo en este lugar.

"Toru-kun"

Hinata por otro lado, miro a Toru con una leve sonrisa que nadie pudo ver. El después de todo la había salvado una vez más, ella sentía que le debía muchas cosas, pero no sabía cono pagarlas.

"Traje a Nii-san para comer el almuerzo"

Abrazando a Toru, Hanabi asintió con la cabeza mientras miraba a su padre. El hombre suspiró y también asintió.

Después de eso, todos entraron a la casa. De algún modo, Hiashi se sentía como una niñera, después de todo ahora mismo estaba rodeado de niños, aunque no sabía si llamar a Toru un niño, después de todo el es el sobreviviente de la noche carmesí junto a Sasuke. Pasar por algo tan horrible como la aniquilación de una familia entera debió obligar a Toru a madurar más rápido, eso es lo que Hiashi pensaba.

"¿Saben? Nii-san puede crear un montón de clones de sombra sin cansarse y lo mejor de todo es que los clones son igual de fuertes que Nii-san"

Poniendo las manos sobre la mesa, Hanabi habló con un tono lleno de emoción, después de todo estos últimos veinte días había estado entrenado junto a su hermano mayor, y podía decir con toda certeza que Toru no es alguien normal.

"¿Clones de sombra? ¡¿Yamato-sensei te está enseñando ese tipo de jutsu?!"

Atragantándose con la comida, Ino bebió un poco de agua y miro a Toru. No podía creer que el este aprendiendo un jutsu de nivel Jounin, es más, pudo dominar el jutsu sin dificultad, aunque abría sido más fácil si Yamato no se hubiera equivocado con los sellos manuales.

"Toru-kun es muy fuerte, no me sorprende mucho que haya aprendido ese jutsu"

Hiashi miró a Hinata, el sabia que en el clan Asahi estaban surgiendo muchos prodigios en los últimos años, pero es lógico, la sangre de los Uchiha corre por la venas del clan Asahi, era obvio que alguien como Toru tuviera tanto talento para ser ninja.

"Veo que te has fortalecido con el pasar de los años, tu familia estaría orgullosa"

Bebiendo una taza de té, Hiashi cerró los ojos y disfruto del amargo sabor de las hojas de té en el agua. Habían pasado ya cinco años desde aquel día, el clan Asahi y el clan Uchiha fueron masacrados sin tener piedad alguna. La mejor explicación que el Hokage pudo dar en ese momento fue que estos dos clanes se habían aliado para llevar a cabo un golpe de estado contra Konoha, lo cual no estaba equivocado, sin embargo, había algo más, alguien moviendo los hilos detrás de escena.

"Supongo que mi madre lo estaría"

Cerrando los ojos también, Toru tomó un pequeño sorbo del té. El sabor era un poco amargo, pero agradable al mismo tiempo, era una sensación un poco extraña de explicar.

"Ha~"

Suspirando una pequeña nube de vapor, Toru colocó la taza en la mesa. Las tres chicas vieron esto como si Toru y Hiashi fueran un par de ancianos teniendo una conversación cotidiana. Bueno, de Hiashi podría esperarse, pero con Toru era una sorpresa, el solo tiene doce años, no había forma en que actuara como un adulto de forma tan natural.

"Nii-san, te comportas como un anciano aburrido"

Acercándose un poco, Hanabi miro a Toru a los ojos con una sonrisa. El calor corporal y el aroma de Toru eran agradables para ella, era como abrazar un malvavisco tibio con olor a manzana.

Obviamente Hiashi miro esto con mala cara, después de todo estaba viendo frente a el como su hija abrazaba a un chico. Ella era demasiado joven para ese tipo de cosas, o eso es lo que pensaba Hiashi, aún así no pudo evitar sentirse triste, sus hijas estaban creciendo demasiado rápido. Hinata y Hanabi, las dos están forjando al personalidad que las acompañara por el resto de sus vidas, eso es algo bueno, pero le preocupaba que sus personalidades se vuelvan retorcidas por culpa de la vida ninja.

*Toc, toc*

La esquina de la puerta de madera sonó, interrumpiendo la pequeña reunión.

"Buenas tardes, señor Hyuga. Disculpe la interrupción"

"No te preocupes"

Negando con la cabeza, Hiashi no sabía cómo carajo fue que Yamato entró a su casa, aún así había que admitir que era sorprendente. Hiashi confiaba en Yamato, después de que fue escoltado por el equipo de este hombre, pudo presenciar el verdadero poder de un Jounin, además de que llegaron al País de los Ríos sanos y salvos.

"Vine aquí porque tengo que llevarme a Toru, después de todo desapareció a mitad de su entrenamiento"

Escuchando a Yamato, Toru cerró los ojos y se levantó del suelo, saliendo del lugar.

"Gracias por la comida…"

Habiendo dicho eso, Hiashi sonrió levemente, no sabía que clase de entrenamiento estaba recibiendo ese chico, pero no dudo en dejar la mitad de la comida en el plato con tal de ir a entrenar.

-Una hora después en algún lugar de Konoha-

"Ahora que ya casi dominas el Kage Bunshin no Jutsu, estaba planeando enseñarte algunos jutsu relacionados con el uso de agua"

Entregándole un pergamino a Toru, Yamato ya había pensando en los jutsu que le pueden ser de utilidad a su estudiante, sin embargo, Toru dijo algo que hizo que Yamato levantara las cejas en duda.

"Sensei, puede enseñarme el Kuchiyose no Jutsu [Técnica de invocación]"

La pregunta de Toru fue interesante para Yamato, el jutsu de invocación es algo fácil de hacer, sin embargo, se necesita el contrato de alguna familia de bestias que estén dispuestas a servir al ninja.

"No creo poder enseñarte ese jutsu, ya que yo nunca lo intente"

Aunque era un poco extraño, Yamato no tenía ninguna invocación o contrato con una especie, por lo que no podría realizar el jutsu, sin embargo, sabía los conceptos básicos de este jutsu.

"Puedo enseñarte las posiciones de manos, pero hacer eso sería algo peligroso"

"¿Por qué?"

Yamato se sintió obligado a responder, ya que aunque el jutsu sea fácil de ejecutar, no significaba que sea seguro.

"Debes entender esto, para realizar el jutsu de invocación, necesitas un contrato con una especie, ya sea animal o espiritual. Pero aquí está el problema, si no tienes un contrato y realizas el jutsu, serás transportado al lugar donde esté la especie que comparta afinidad natural con el usuario"

Explicándolo así, no era difícil de entender. Ahora solo había que arriesgarse.

"Sensei, ¿usted ha escuchado alguna vez la frase: 'Para buenos resultados-grandes sacrificios?'"

Escuchando esto, Yamato ya pudo entender a que se refería Toru. Al parecer este niño quería tomar el riesgo. Tampoco es que Yamato pueda detenerlo, después de todo lo que pasara será solo la propia responsabilidad de Toru.

"Hm… si eso es lo que quieres, no me opondré"

Después de eso, Yamato le explico a Toru paso a paso como realizar el jutsu. El chico lo entendió en seguida, así que decidió intentarlo.

"Sellos manuales"

Cerrando los ojos, el viento alrededor de Toru comenzó a soplar más fuerte, las hojas de los árboles comenzaron a bailar al ritmo del viento, y entonces Toru se mordió el dedo, dejando caer una pequeña cantidad de sangre en el suelo.

"Kuchiyose… ¡no Jutsu!"

Tocando el suelo con su mano, Toru ejecutó el jutsu. Al instante, una gran nube de humo comenzó a girar alrededor de su cuerpo. Yamato miro esto con los ojos bien abiertos, lo que paso después… es que Toru desapareció.

"Te deseo suerte, Toru"

Cerrando los ojos, Yamato solo pudo esperar.

-En algún bosque-

El mar de árboles lo rodeó por completo, ahora el paisaje había cambiado. Grandes árboles se elevaban hasta el cielo, y en los troncos se podían ver marcas de garras.

"¿Donde estoy…?"

Levantándose del suelo, Toru se sintió confundido, esto no era lo que esperaba, aún así estaba dispuesto a seguir con este jutsu.

"Humano…"

Pero cuando menos se lo espero, una siniestra voz femenina le susurró al odio.

Cuando Toru se dio la vuelta, lo que vio fue…