De vuelta en Edén hay muchas cosas que hacer.
Me pongo en movimiento con todos mis cuerpos para explicar a todas las mujeres que he traído conmigo, a todas aquellas que arrojé por un portal directamente hasta aquí y a todas aquellas que capturé, que se encuentran perdidas, sin saber donde están o cómo han llegado hasta aquí.
Mientras juego con mis hijas.
También empiezo a presentar a las mujeres y a mostrarles un poco las zonas de Edén.
Les enseño los campos de formación, los campos de cultivo, los edificios, el coliseo y otras muchas cosas, pero son las propias veteranas las que les van a enseñar todo.
Hago una nueva localización, al lado del gran monumento de piedra, en el que creo una gran puerta de piedra, tipo portal oscuro del wow, con un portal que conecta Edén con mi submundo, para que las chicas puedan ir a visitar a sus seres queridos cuando quieran.
Tengo también disponibles las invocaciones, la invocación semanal y el huevo misterioso.
Pero voy a esperar a que todas las mujeres y chicas hayan empezado a acomodarse y acostumbrarse a vivir aquí.
Las fanáticas de las artes marciales han despertado su espíritu competitivo y han empezado a entrenar con mucho ímpetu.
Las chicas más jóvenes al enterarse que hay escuela y escuela de magia también están contentas.
Aunque hay alguna que esta enfadada por haber sido secuestrada, son una minoría y supongo que pronto dejarán atrás todo el rencor.
Voy a mi submundo para saludar y quitar las pulseras malditas y para ver si hay algo que necesiten los residentes.
A este mundo en lugar de llamarlo submundo voy a llamarlo Beta, ya que me queda feo no ponerle nombre.
Hago que todos los residentes tomen la poción de bienvenida y a todos les soluciono todas sus demandas y solicitudes, siempre que no sean contrarias a mis intereses.
Todos están contentos y hago algunas cosas como traer el Ryozanpaku a Beta y otras muchas cosas más, como fuentes de diferentes bebidas y licores para que puedan beber si quieren.
También les construyo un coliseo y otras muchas instalaciones de ocio.
Durante varios días, me paso solucionando problemas y disfrutando de la compañía de todas mis mujeres y de mis hijas.
Una vez que la vida en Edén y en Beta se ha normalizado, voy a hacer las invocaciones, empezando por la semanal.
Aparece la grieta espacial de costumbre y en ella aparece una mujer con una especie de chubasquero rosa, que está bastante desorientada.
Veo que su nombre es Kristina Lisina, tiene el pelo negro ondulado, peinado hacia atrás y le llega por debajo del cuello.
"Dónde estoy, lo último que recuerdo es estar cayendo desde la ventana de mi apartamento en el piso 22." (Kristina)
"Has muerto, ahora estás en Edén y yo soy Pedro un dios." (yo)
"¿Esto es el cielo?" (Kristina)
"No exactamente el mismo cielo que estás pensando, es algo así como otro mundo." (yo)
"¿Qué va a pasar ahora conmigo?" (Kristina)
"Vas a vivir aquí y vas a ser mi mujer para toda la eternidad, pero no te preocupes, no vas a ser obligada a hacer nada y no vas a estar sola, hay otras muchas mujeres, que supongo que a unas cuantas conocerás o al menos te sonará su nombre, con las que podrás disfrutar de una vida sin preocupaciones." (yo)
Suelta un suspiro de alivio y le digo sobre el proceso de bienvenida.
La idea de ser más hermosa, ser inmortal y eternamente joven, parece gustarle mucho y los inconvenientes como la vergüenza de verse desnuda y cubierta de mierda no la preocupa en absoluto.
Le digo que espere un momento, que voy a hacer otra invocación.
Saco el huevo misterioso, que brilla intensamente, con muchas luces de colores que giran.
Activo la invocación misteriosa y comienza el espectáculo de luces hasta que dan forma a una chica con ropa de escuela japonesa, con el pelo morado en dos coletas.
Su nombre es Gotoh Haiji, es una chica de Killing Bites y al verse en un lugar extraño, activa su transformación, las piernas se le cubren de pelo con forma de cabra como si fuera una sátira y le salen dos grandes cuernos donde tenía las coletas.
Tiene algún cambio más en su cara, se le pone la nariz roja y el pelo un poco de punta.
Trata de atacarme lanzándose a mi con sus grandes cuernos para golpearme, pero la detengo fácilmente y acaricio su cabeza despeinada.
Esto la deja sorprendida, pero da un salto hacia atrás y vuelve a cargar con sus cuernos.
La vuelvo a atrapar y ahora no solo acarició su cabeza, también aprovecho para rascar la parte de su espalda, que conecta con su mitad inferior que tiene rasgos animales, hasta llegar a agarrar su pequeña cola.
Unido a mi técnica de masaje, Gotoh Haiji pierde toda su fuerza y su intención de pelea, además adopta una posición más cercana y más cómoda para que la siga acariciando.
Kristina ha estado viendo todo el proceso con gran interés.
Ha sido bastante impactante ver aparecer a una chica de escuela, que repentinamente se transforma, le salen cuernos y su parte inferior del cuerpo cambia totalmente, como si fuera de alguna especie de animal.
Explico a las dos las partes del proceso de bienvenida y las llevo a dos a dos cubículos preparados para el proceso.
Les doy la poción y las dejo pasar.
Cuando han terminado, las limpio , las hago aparecer ropas para que se puedan vestir y las pongo mi anillo en sus dedos.
Restauro sus cuerpos y las esclavizo.
Una vez terminado todo el proceso, las digo que me acompañen, las llevo a conocer un poco más de Edén y a empezar a conocer a las demás chicas.
Las mujeres y chicas del mundo de Kenichi, se han dado cuenta que no tienen ninguna ventaja sobre las demás y que sus artes marciales aunque son de ayuda, les queda un largo camino por delante para ponerse al día con las demás.
Ding.
Misión aleatoria.
Ve a un mundo al azar.
Recompensa: Caja misteriosa.
Acepto la misión, pero el portal no se abre de forma inmediata, me da la oportunidad de elegir cuando abrirlo.
Viene a buscarme Alice Cullen, una de ellas y también viene con ella Kera Lynn y Hermione.
Quieren acompañarme, Alice al ser vidente, sabe que voy a decirlas que sí, pero incluso con sus poderes de predicción no consigue ver más allá del portal por el que vamos a entrar.
Vamos a ir a un mundo aleatorio y no se siquiera si voy a mantener mis poderes o mis habilidades.
Activo la creación del portal aleatorio de la misión, que es de color verde, no rojo como el anterior o azul como los míos habituales.
Los cuatro cruzamos el portal, que se cierra tras nosotros.
Aparecemos en medio de la naturaleza, con árboles y campo a nuestro alrededor, pero a simple vista en la distancia se puede ver una ciudad amurallada medieval, con un imponente castillo.
Típica imagen de un castillo de cuentos de hadas.
Veo que conservo intactos todos mis poderes y habilidades, por lo que no veo ningún tipo de peligro para las chicas o para mí.
Veo en el mapa del sistema que nos encontramos en las tierras que rodean Camelot, así que puedo deducir, que es un mundo de la mitología de Arturo Pendragón, ahora solamente queda descubrir cual es, ya que hay gran variedad de mundos sobre esta temática.
Sin nadie a nuestro alrededor, hago aparecer ropas típicas de la época para cambiarnos y que no nos hagan resaltar demasiado.
Las chicas se cambian sin problemas delante de mi, agradezco la hermosa visión que me muestran y yo hago que mi ropa cambie sin necesidad de desnudarme.
Llevamos ropas sencillas de algodón, sandalias y capas con capucha que nos cubren completamente, todas nuestras ropas a son de color blanco, pero no blanco puro ya que haría sospechar, son más bien, color marfil.
Traigo a Dulce y a tres hembras de unicornio más, para que nos lleven, las cuales están muy contentas de que las hayamos traído.
Hago una ilusión a su alrededor para que parezcan simples caballos.
Gracias a mi percepción he logrado reconocer a los protagonistas de este mundo y ya se dónde nos encontramos.
He encontrado a un joven Merlín, que está llegando a la ciudad, un joven Arturo y a su padre Uther.
También he encontrado a Morgana, la criada Guinevere, un viejo curandero llamado Gaius y un dragón capturado en una cueva debajo del castillo.
Nos encontramos en la serie <Merlín > del año 2008.
Creo recordar que la magia está prohibida y penada con la muerte en todo el reino.
Quiero saber lo que intentará hacer ese loco de rey Uther Pendragón, si se entera de nuestra existencia.
Llegamos mas o menos al mismo tiempo que el joven Merlín a la ciudad, en la que se va a dar una ejecución pública de un hombre, acusado de haber realizado magia y encantamientos.
No es que me importe mucho, pero le salvo con un chasquido de dedos, llevándolo a un lugar seguro a las afueras de la ciudad.
Su madre, que es una bruja y está presente, también es llevada junto con él.
No tengo ningún interés en esa bruja, no me atrae en absoluto.
Ante la mirada atónita del verdugo, el rey que esta presente en el balcón, Merlín, Morgana y un montón de aldeanos espectadores, el hombre que estaba a punto de ser ejecutado, desaparece como un pedo en el viento.
El rey se enfada y manda a todos sus soldados a buscar al hombre desaparecido, pero para Merlín que tiene un gran sentido de la magia y Morgana, que también lo tiene y no lo sabe, mis acciones no han pasado inadvertidas.
Ha sido a propósito, ya que he empleado magia en lugar de otros poderes, para ver si eran capaces de sentirme.
Con los guardias buscando, la multitud se dispersa, Merlín va a buscar a Gaius, el médico de la corte y le salva la vida, igual que en la serie, evitando que se caiga del segundo piso poniendo una cama en el lugar donde va a caer.
Morgana se me queda mirando y al ver que también la miro cierra la ventana.
Le digo a las tres que me acompañan, que me sigan, salimos de la ciudad para reunirnos con el hombre que acabo de salvar y su madre.
No están cerca, vamos mentando sobre los unicornios y tardamos cierto tiempo en llegar.
Están a la defensiva y cuando nos acercamos tratan de esconderse.
"He sido yo quien le acaba de salvar, si quisiera haceros daño le habría dejado morir bajo el hacha del verdugo." (yo)
"¿Quién eres y que es lo que quieres?" (Mary Collins)
"Puedes pensar que solamente soy un viajero con unas cuantas habilidades, que no cree que la magia sea un delito y no le gusta ver injusticias." (yo)
"Muchas gracias por salvarme viajero y compañía, os debo la vida, perdonar a mí madre pero solamente se preocupa por nuestra seguridad." (Thomas Collins)
Hago aparecer una bolsa de cuero pequeña con unas cuantas monedas de este mundo, lo suficiente para vivir tranquilamente durante unos meses.
Se la arrojo al hombre que he salvado y le digo que tenga cuidado de no ser encontrado nuevamente y que vayan a otra ciudad o pueblo menos peligroso.
Los dos se marchan tras darnos las gracias.
Después de marcharse, junto a las chicas y mientras hablamos de la situación, volvemos a la ciudad, aunque nos paramos a comer por el camino.
Llegamos a la ciudad en la que siguen buscando al hombre desaparecido, nos registran para entrar y sin problemas nos dejan entrar en la ciudad, aunque miran a las chicas con lujuria.
No las hacen nada o habría tomado medidas.
Buscamos una posada y pasamos la tarde conociendo la ciudad, que se puede considerar un poblado que rodea al castillo.
Parece que el pueblo está de celebración porque hace 20 años consiguieron atrapar al dragón y eliminar la mayor parte de aquellos que practicaban magia en el reino.
Como es un pueblo muy pequeño, rápidamente lo recorremos entero.
Decido ir con las chicas a conocer a Gaius y a Merlín, a ver si son iguales que en la serie.
Las habitaciones de Gaius están dentro del propio palacio y los guardias al preguntar por su dirección nos miran de arriba a abajo, pero nos dejan pasar.
Llegamos y llamamos a la puerta.
Nos abre la puerta Gaius y nos pregunta que buscamos.
Me presento, sin decir que soy un dios y también presento a Alice, Hermione y Kera.
"Somo viajeros y nos gustaría hablar con usted y su sobrino Merlín de sus habilidades especiales, pero creo que es mejor hacerlo en privado." (yo)
Nos invita a entrar y cierra la puerta.
"¿Cómo os habéis enterado y que es lo que queréis?" (Gaius)
Viene también Merlín desde su habitación y me reconoce del lugar de la ejecución.
Hago aparecer una bola de fuego sobre mi mano, sin ningún hechizo ni encantamiento, solo poder mágico puro.
"No necesito nada para reconocer a aquellos que tienen la magia en su interior corriendo por sus venas, simplemente lo sé." (yo)
Me miran los dos con diferentes pensamientos.
En parte curiosidad y querer aprender y otra de preocupación por mis posibles intenciones.
"No temas Gaius, no tenemos malas intenciones, solamente estamos de paso en este lugar, pero vamos a quedarnos una temporada y nos gustaría al menos presentarnos a nuestros vecinos con conocimientos mágicos." (yo)
"¿Fuisteis vosotros quienes hicisteis desaparecer al hombre condenado a muerte?, ¿qué pasó con él?, ¿Cómo lo hicisteis?" (Merlín)
"Sí, fui yo quien lo salvó, les transporté a él y a su madre a un lugar seguro a las afueras de la ciudad y les di lo suficiente para que fueran a otro lugar y pudieran vivir sin problemas." (yo)
"Por cierto si vas por la ciudad y te encuentras con un hombre joven, de pelo corto de color rubio, que es un idiota arrogante, que intimida a los de alrededor. Te aconsejo no entrometerte, es el príncipe Arturo y es realmente un idiota arrogante, que te hará dormir en prisión además de posiblemente golpearte." (yo)
Ambos me miran intrigados.
Señaló a Alice y les digo, ella es vidente, además tenemos vínculos telepáticos por lo que podemos prever el futuro en cierta medida, aunque cambia constantemente con cada acción.
Nos vamos y volvemos a nuestra posada, dejando a los dos hablando hasta tarde en la noche.
Duermo con las tres en la habitación posada, que reformé nada más entrar en ella, sin más que un poco de sexo tranquilo antes de dormir.
Por la mañana, aún entre los cuerpos de las tres sobre la cama, con Hermione sobre mi y aún aún con mi polla en el interior de su coño, veo que aún con mi advertencia, Merlín se encuentra con Arturo y termina en la prisión del palacio.
Después de que se despiertan, nos limpiamos, vestimos y desayunamos en la habitación, salimos a la calle y damos un paseo por la ciudad.
La mañana es alegre y parece que los guardias han dejado de buscar al desaparecido.
Aún en mi percepción, veo a la madre y al hijo, que no han sido encontrados y que están cruzando la frontera del reino con seguridad.
Detecto también a la cantante que viene a cantar en el palacio para las celebraciones, una tal Lady Helen de Mora.
Llegará esta tarde junto con su escolta.
Nuestra presencia en la ciudad ha llamado la atención de Morgana, que sale a nuestro encuentro junto a su sirvienta Guinevere, la cual prefiere que la llamen Gwen.
Cuando nos encuentran, se mantienen a distancia, observándonos en secreto, o eso piensan y nos siguen por la ciudad hasta casi el medio día, pero durante este periodo de tiempo también, ellas también han llamado la atención del príncipe Arturo, que las ha reconocido y ha empezado a observar su comportamiento sospechoso.
Así ha descubierto que las dos nos están observando y también se intriga por nuestras identidades.
Hace como si se encontrara con ellas por casualidad y las pregunta por su paseo por la ciudad, lo cual es realmente raro en Morgana, que rara vez sale del palacio.
Morgana mira en nuestra dirección delatando lo que estaba haciendo al verme a mi, con cierto rubor en la cara de Morgana, pone algo celoso al príncipe, que manda a sus hombres, que siempre le acompañan a detenernos y averiguar nuestras identidades.
Antes de que puedan alcanzarnos, las chicas y yo nos mezclamos en medio de un grupo de personas de la ciudad y después en nos metemos en un callejón.
Hago que nos volvamos invisibles, lo que hace que los hombres de Arturo no nos encuentren por mucho que nos buscan.
Morgana, aunque débilmente ha podido sentir un escalofrío producido cuando he realizado algo de magia, al igual que cuando hice desaparecer al hombre condenado a muerte.
Ahora empieza a asociar ese sentimiento con mi uso de la magia.
Los hombres de Arturo vuelven con las manos vacías y este se enfada, le pregunta a las dos sobre nuestra identidad y no obtiene una respuesta, ya que ellas tampoco conocen nuestras identidades.
Las dos terminan molestas por la actitud del príncipe y vuelven al palacio a sus aposentos.
Las chicas y yo, las seguimos mientras somos invisibles y una vez que estamos en la habitación de Morgana y Gwen. Les pregunto porque nos estaba siguiendo.
Decido hacer que la puerta se cierre completamente y quede bloqueada.
Aíslo la habitación para que no se escuche nada en el exterior y si alguien se asoma a cualquier agujero o la cerradura, no verá nada.
Se dan cuenta que están atrapadas y tratan de abrir la puerta.
Sin hacernos visibles aún, las digo.
"Es inútil tratar de escapar, tranquilizaos, si quisiera haceros algo, ya lo hubiera hecho, ahora responder porque nos estabais siguiendo por la ciudad." (yo)
Las dos se asustan y me buscan alrededor.
Disipo la invisibilidad y aparecemos los cuatro frente a las dos mujeres asustadas.
"Mi nombre es Pedro God, soy un dios viajero, ellas son Alice, Hermione y Kera, son mis acompañantes y mis mujeres." (yo)
"¿Eso es magia?, ¿vas a matarnos o usarnos como rehenes contra el rey?" (Gwen)
"Jajaja, que mujer más graciosa, no te ofendas Gwen, simplemente me han hecho gracia tus preguntas. Si, es magia, pero no tenemos intención de hacer daño a nadie y menos aún a dos hermosas mujeres." (yo)
"¿Qué me has hecho?, ¿qué es esa sensación que siento cada vez que haces magia?" (Morgana)
La miro de arriba a abajo y le digo.
"Aunque me gustaría hacer varias cosas contigo, eso es otro asunto y no te he hecho nada, lo que sientes es tu propia magia en tu cuerpo que reacciona a la mía." (yo)
Un poco sonrojada, por mis palabras que implícitamente dicen que me gustaría tener sexo con ella, me responde.
"Yo no soy una bruja." (Morgana)
"La magia no es algo que eliges, todos los seres tienen magia en su cuerpo en mayor o menor medida, también está en el mundo y en cada cosa y en tu cuerpo aunque dormida hay mucha magia, que ha empezado a despertar." (yo)
"Pero las personas que hacen magia son malvadas, lady Morgana no puede ser una bruja, tienes que estar equivocado." (Gwen)
"Gwen, la magia no es buena ni mala, igual que un cuchillo, si se usa bien es una herramienta muy útil, pero también se puede usar para matar a alguien, lo que importa es la intención con la que se usa." (yo)
Las chicas se presentan a las dos y después nos despedimos.
"Tendréis mucho de lo que hablar, si queréis encontrarnos estaremos en la ciudad y en la taberna durante una temporada, confiamos en vuestras discreción y si tenéis alguna duda podéis venir a preguntar cuando queráis." (yo)
Abro la puerta y los cuatro salimos andando tranquilamente, también salimos del palacio sin que ningún guardia nos detenga.
La seguridad de este lugar es realmente deprimente.
En la habitación las dos se han quedado hablando de lo que acaba de ocurrir y lo primero que le dice Morgana a Gwen es.
"Te has fijado, es un hombre realmente guapo y atractivo, creo que es mucho mejor que ese bruto de Arturo, que solamente piensa en pelear, aunque reconozco que también es bastante obsceno aunque no me importaría acabar con él en la cama." (Morgana)
"Tienes razón lady Morgana, pero ha dicho que esas tres mujeres hermosas son sus mujeres, además es un un loco y un mago, ha dicho que es un dios, te lo puedes creer." (Gwen)
"Tiene tres mujeres hermosas y las tres parecen muy felices a su lado, no creo que le importe tener una o dos más, además si lo que dice es cierto, yo también tengo magia en mi interior." (Morgana)
"Lady Morgana, tenga cuidado con lo que dice, es peligroso tener cualquier relación con la magia, el rey no dudará en matar a aquellos que hagan magia o brujería." (Gwen)
Merlín aún continúa en la celda, Gaius no sabe qué está ahí y hasta la mañana siguiente no logrará que lo suelten.
Las tres chicas y yo volvemos a la posada y allí pasamos la tarde.
Arturo ha mantenido a sus hombres buscándonos y solamente han encontrado a gente que nos ha visto por la ciudad desde ayer en nuestra llegada, pero que no saben nada sobre nosotros, salvo que soy un hombre guapo con el pelo largo de color plata, que vamos con ropas y una capa de color claro y que voy acompañado de tres hermosas mujeres.
Aunque nos buscan por toda la ciudad, no saben dónde estamos y no consiguen dar con nosotros.
Esto pone de mal humor al príncipe.
Llega a la ciudad casi al anochecer la cantante Lady Helen de Mora, acompañada por su escolta.
Cuando pasan por delante de la posada en dirección al castillo, salgo de la posada dejando allí a las tres tranquilamente jugando en una videoconsola.
Me aparezco en un lugar por el que tienen que pasar para llegar al palacio, la esclavizo una vez que pasan a mi lado, hago que el caballo se asuste, se encabrite y la haga caerse.
Como soy un gentil caballero, al verla caer, reacciono y la atrapo entre mis brazos antes de su caída al duro suelo.
De forma dramática, la atrapo en mis brazos y mis manos de forma totalmente 'inocente y accidental' acaban agarrando su teta y su nalga apretando ambos lugares para comprobar su elasticidad y firmeza.
Para añadir dramatismo y credibilidad, al atraparla y salvarla de la caída, me caigo con ella en brazos al suelo, lo que evita que ella sufra ningún daño, pero me facilita el contacto íntimo con su cuerpo.
Sus escoltas vienen a ayudarla, comprueban que ella está bien y ven que yo he quedado inconsciente al golpearme con la cabeza en el suelo mientras estaba salvando a lady Helen de la caída.
Aunque Helen siente que todo su cuerpo ha sido tocado y profanado de alguna forma, esta muy agradecida por mi providencial ayuda.
Todos sus escoltas han visto que su caballo se ha encabritado y la ha arrojado de su montura, pero antes de caer, como estaba cerca, la he conseguido salvar de una peligrosa caída, aún a cuesta de mi propia seguridad.
Siguiendo la petición de lady Helen, me llevan con ellos al palacio para que alguien mire por mis heridas.
Informo a las tres en la habitación gracias al anillo y la conexión mental y siguen jugando a la consola sin preocuparse y simplemente me dicen que sea gentil con la nueva hermana.
Me llevan a una habitación y me dejan sobre una cama, poco tiempo después entra en la habitación Gaius para tratar de curarme, pero al verme sobre la cama tumbado tranquilo, me pregunta por mis intenciones.
"Solamente quiero crear unos antecedentes para vivir cerca del palacio, además que esa lady Helen tiene cierto encanto y su cuerpo no está mal." (yo)
El rey y el príncipe se enteran de mí acto heroico y ha dicho que quiere conocerme e invitarme al banquete de celebración y aunque el príncipe Arturo me reconoce por la descripción dada, no dice nada.
Después de hablar un rato con Gaius, se marcha, yo también salgo de la habitación para ir a buscar a lady Helen, 'comprobar detalladamente' que su cuerpo está perfectamente y no ha recibido heridas en la caída.
Enseguida encuentro su habitación y tras unos momentos de presentación, expresar mis inquietudes sobre su bienestar, ella termina entre mis brazos mientras nos besamos.
Nuestras ropas una a una acaban en el suelo.
Restauro su cuerpo totalmente, nuestros cuerpos se entrelazan y acabamos tendidos sobre la cama, que pese a estar en el palacio real son una mierda, que no aguanta ni siquiera dos asaltos antes de romperse sus patas y acabar con el colchón en el suelo.
Descubro que ciertamente tiene una hermosa voz con sus cantos de sirena, gimiendo con fuerza, mientras mi polla invade su interior, haciendo que sienta más placer que lo que nunca hubiera soñado.
Gracias a que aíslo la habitación soy el único que escucha sus dulces y musicales gemidos, que me hacen sumergirme en la lujuria.
Antes del amanecer, me despido de ella con un beso y le digo que la veré esta noche y también espero poder verla durante el banquete que organiza el rey, con motivo de las celebraciones mañana.
Esta agotada pero muy satisfecha, mejor de lo que nunca se ha sentido y de alguna forma, su cuerpo y todo su ser anhela volver a sentir otra vez mi toque y ese placer que ha tenido.
Solamente sabe mi nombre y que la salvé de la caída, pero siente que se ha enamorado sin remedio y que no puede vivir sin mi de ahora en adelante.
Su mano baja hasta su coño y su culo, que hasta hace poco contenían en su interior mi polla.
Ambos agujeros aún tiene semen saliendo de ellos y el recuerdo de mi polla permanece latente en sus agujeros.
Sin que nadie me haya visto, vuelvo a la habitación en la que me dejaron y me tumbo en la cama, como si estuviera recuperándome de mis heridas.
Creo varios vendajes en mi cuerpo y hago que tengan olor a hierbas y medicina.
Una doncella rubia, entra a verme y al verme herido y tan guapo, se acerca a mi a comprobar mi estado.
Cuando va a tocar mi cara y los vendajes de mi cabeza, abro los ojos asustándola y agarro su mano, pero no muy fuerte.
"¿Quién eres y donde estoy?" (yo)
"Está en el castillo del rey Uther Pendragón y yo soy una simple doncella que venía a comprobar su estado, señor." (doncella rubia)
"¿Como he llegado hasta aquí?, solamente recuerdo que alguien se caía del caballo cerca de mí y trate de ayudar." (yo)
"He oído que salvó a lady Helen de Mora de una grave caída y le han recompensado invitándolo al banquete de celebración que se realiza mañana, con el rey y todos los nobles." (doncella rubia)
La he mantenido agarrada por el brazo y tirando un poco de ella hago que caiga sobre mi en la cama.
La esclavizo.
La abrazo y ella me dice que no debo a hacer ese tipo de cosas, que ya está prometida y se va a casar pronto, pero cuando mis manos recorren su cuerpo, mi boca invade el interior de su boca y nuestras lenguas se encuentran, cualquier indicio de resistencia desaparece.
Después de unos minutos se escucha una respiración pesada, golpeteo rítmico y débiles gemidos en el interior de la habitación.
Su cuerpo, que había mantenido virgen hasta ahora, me pertenece totalmente.
Se puede decir que es una justa recompensa por salvarle la vida de forma indirecta, ya que iba a morir en la historia original.
Su prometido no podría importarme menos.
Durante dos horas reclamo su cuerpo entero y su alma, hasta quedar grabado firmemente en su corazón y en sus entrañas, con mi semen llenando su coño y su ano.
La doy un beso, la digo que siempre que quiera puede venir en mi búsqueda, que mi puerta siempre estará abierta para ella.
Ella, se sonroja, se limpia un poco y se arregla como puede, antes de salir andando como un pato de la habitación, para continuar con sus tareas.
Merlín ha sido sacado de la prisión, está encadenado al cepo del pueblo y le tiran verduras podridas a la cara.
Esa es la condición para dejarlo salir de la prisión.
Durante la mañana, a la doncella rubia, que se llama Bronwen, es despedida del palacio y su prometido la insulta y la repudia al enterarse de alguna forma de su infidelidad, rompiendo inmediatamente el compromiso.
Abandona el palacio llorando, sin saber a donde ir, pero unos brazos fuertes la rodean y le dicen.
"No tengas miedo, jamás de abandonaré." (yo)
Reconoce mi voz, y aún llorando se da la vuelta y me abraza.
La llevo a la habitación donde he tomado su cuerpo y su virtud, sin que nadie parezca darse cuenta de nuestra existencia.
Allí me cuenta todo, desde que salió de la habitación, el despido por haber estado ausente durante dos horas y la sospecha de haber tenido relaciones durante el trabajo.
Después su prometido la ha insultado, la ha repudiado y roto el compromiso.
Ha estado llorando hasta que la he encontrado.
La beso, la digo que nunca la abandonaré y la capturo mientras la doy un beso en los labios.
Una vez capturada, dejo la habitación recogida y salgo hacia la posada donde están mis tres mujeres.
Cuando llego a la habitación, aunque ya lo sé de antemano, me encuentro a las tres aún durmiendo.
Las despierto con unos cuantos besos y las digo que se vistan y se arreglen, que el rey quiere que vaya a conocerlo.
Les doy ropas nuevas a las chicas, las tres a juego sin nada ostentoso, ni revelador.
Ropas de seda, amplias y casi todo el cuerpo cubierto, parecen más bien ropas de sacerdotisas, que no son en absoluto provocativas ni seductoras, aunque las chicas mantienen su atractivo.
No van a tener calor y son muy cómodas ya que es están encantadas.
Yo me pongo algo más refinado, pero no ostentoso, no destaco a simple vista, aunque un buen ojo podría decir que la ropa es de increíble calidad.
Preparo el desayuno para las tres, que me preguntan por las nuevas hermanas.
Les digo, que de momento hay dos, una que está descansando dentro de mí, en captura y la otra, aún tiene que hacer cosas en este mundo, pero que mañana se unirá a nosotros o irá en primer lugar a Edén.
Mientras desayunamos, Merlín vuelve a encontrarse con Arturo y vuelven a enfrentarse, con un resultado similar, en el que Merlín acaba golpeado pero al final no lo mandan a prisión.
Cuando las tres terminan el desayuno y están listas para salir, vamos hacia el castillo.
Durante nuestro recorrido hacia el castillo, Arturo nos ve con sus hombres, pero al ver que vamos hacia el castillo, simplemente nos sigue, ya que también sabe que su padre quiere conocerme por mi acto de salvar a la cantante.
Entramos en el palacio y dos guardias nos escoltan hacia el salón del trono.
Una vez allí, entramos y somos recibidos por Uther Pendragón.
No hacemos ninguna inclinación ni reverencia, simplemente un gesto de reconocimiento y respeto.
"He oído que salvaste a lady Helen de una fatal caída de su caballo, por eso estoy muy agradecido." (Uther)
"No tiene importancia, rey Uther Pendragón, cualquiera en mi lugar habría hecho lo mismo." (yo)
"¿Quién sois?, no recuerdo haberos conocido." (Uther)
"Perdón por mi descortesía, debía haberme presentado nada más llegar a tus tierras y más aún a tu ciudad y tu castillo, mi nombre es Pedro God, señor de Edén, estás tres señoritas son mis mujeres y acompañantes en este viaje, son Lady Alice God, Lady Hermione God y Lady Kera God.
"¿Sois un rey?" (Uther)
Arturo que también entra en la sala del trono iba a intervenir, pero se que atrás y al escuchar que soy un rey se queda algo paralizado.
"Se podría decir que sí, pero es algo más complejo, ya que bajo mi protección hay varios reinos. Aunque más que un rey, me ven como un dios." (yo)
"Es un honor tener semejante visita en mi reino, y donde supuestamente está vuestro reino." (Uther)
"Es algo lejano, más allá de los mares del sur, fuera de estas tierras a las que llaman Albión, más allá de aquellas tierras llamadas Europa, a meses de distancia a caballo y en barco." (yo)
"Qué interesante, pero no recuerdo haber sido informado de la llegada de alguien con el equipaje que representa semejante viaje." (Uther)
"Es es cierto, me adelanté al resto de mi grupo con mis tres acompañantes, mi equipaje llegará esta tarde o mañana a más tardar." (yo)
Uther ve a su hijo al fondo de la sala del trono y lo llama.
Nos presenta y dice claramente en su presentación, que soy alguien que dice ser un rey, llamado Pedro God.
Aún con esa falta de respeto, se la voy a pasar por alto, pero creo un cuerpo invisible en secreto y voy a preparar una entrada digna de un gran rey, no tan vistosa como Aladín, pero si muy lujosa, pero simplemente con droides disfrazados de soldados medievales y caballeros, con grandes carruajes con mucho equipaje.
Cerca de 30 soldados totalmente armados con armaduras y armas relucientes, que imponen miedo a quienes los ven, por su tamaño, que cada uno es de dos metros y muy músculos, y por su estricta formación.
Cuando llegan a la puerta de la ciudad, se presentan como los guardias del rey Pedro God.
Los guardias de la ciudad no se atreven ha hacer movimientos sin informar, por lo que mandan esperar a mis supuestos guardias y van a informar al rey Uther de nuestra llegada.
Mientras tanto en la sala del trono, tanto el padre como el hijo tienen algún duda de nuestra identidad, pero no lo han expresado directamente.
Sin vernos afectados por su falta de modales seguimos hablando ligeramente de nuestro reino.
Mientras que veo como llega el guardia que viene corriendo, les cuento a los dos Pendragón orgullosos, que me han preguntado, sobre el modelo educativo en Edén.
Les digo que la educación básica es obligatoria, para todos los menores de edad y que la formación de defensa personal no es obligatoria pero casi toda la población la realiza de forma voluntaria.
Me preguntan por la población de mi reino así en broma y les digo que hay bastante población, decenas de miles de habitantes, pero no hay falta de espacio y recursos. Ya que la tierra es muy grande y las condiciones son muy buenas.
En esto, llega el guardia y educadamente se acerca al rey y le da cierta información.
Los ojos de Uther se abren como platos y su actitud hacia mí, cambia de forma radical.
Le dice a su guardia que escolte a mi séquito al palacio. Su actitud cambia de forma radical y empieza a tratarme como un verdadero rey y su igual.
También le dice a Arturo a modo de corrección, que sea más educado con los invitados, que como príncipe heredero, debe comportarse adecuadamente en presencia de otro rey.
Arturo capta el mensaje y hace una especie de reverencia.
Ahora que me toman en serio, mi actitud también cambia ligeramente y les empiezo a hablar algo más serio.
"He escuchado que la magia en este reino está prohibida y perseguida, sin embargo en mis tierras, la magia es estrictamente controlada y aquellos que la pueden emplear son educados y entrenados para ayudar al reino y a sus gentes, por lo que podíamos llegar a un acuerdo que beneficie a ambos reinos." (yo)
"En efecto, como bien dices, la magia en mi reino está penada con la muerte, no conozco tu reino pero te aconsejo hacer lo mismo, la magia no se puede controlar, no obstante escucharé tu propuesta." (Uther)
"En mi reino, la magia se considera como una herramienta, que si se emplea bien y se educa adecuadamente a esas personas, una persona con magia puede realizar fácilmente el trabajo de treinta personas con facilidad. Por ese motivo, estaría dispuesto a ofrecer grandes cantidades de oro u otros bienes, si aquellas personas y seres mágicos en lugar de ser condenados a muerte, son puestos bajo mi custodia y llevados a mi reino para su educación." (yo)
A mitad de mi oferta, la puerta de la sala del trono se abre una vez más y entran en la sala Morgana y Gwen detrás de ella sin hacer ruido.
"Es ciertamente una propuesta interesante, muy generosa, pero también muy peligrosa, que debo meditar antes de darte una respuesta. Por el momento disfrutad de nuestra hospitalidad, rey Pedro, me han informado que su séquito acaba de llegar a la ciudad y está siendo conducido al palacio." (Uther)
Ve a Morgana al fondo de la sala del trono y la llama para que se acerque.
"Rey Pedro, dejadme presentaros a mi protegida, Lady Morgana." (Uther)
Hago una pequeña muestra de aprecio a una dama y le doy un beso en la mano como un caballero.
"Es realmente un placer poder conocer a una dama tan refinada y hermosa." (yo)
Tenemos un rato de charla informal, en el que nos separamos en dos grupos, hombres y mujeres.
A mi me toca quedarme hablando de política con el rey y con Arturo y las chicas se van todas juntas a otro lugar menos formal.
Hablando con los dos, me doy cuenta que este reino es un desastre, que aún mantiene gestión del tipo feudal, que recauda los impuestos de forma abusiva, llevándose el 70% de las cosechas y producción, sin un control real de lo que se produce o como se produce en el reino.
De todas formas, no he venido a cambiar las cosas en ese aspecto.
Mientras hablamos, Arturo me pregunta cosas de la magia que puedan beneficiar al reino.
Le cuento que en mi reino hay ninfas de diversos elementos, que pueden controlar en cierta medida la naturaleza y generalmente se encargan de la agricultura, el cuidado de las cosechas, los árboles y todo lo relacionado con la naturaleza.
Uther, sigue insistiendo que es peligroso, pero le digo que no es más peligroso que la ciencia y la tecnología que investigan los estudiosos, que con ingenio se pueden realizar armas y otras investigaciones mucho más peligrosas que la magia.
Le digo que mande a buscar a uno de mis hombres y que me traigan un arco de poleas compuesto y le digo al rey que prepare el también en la zona de entrenamiento un blanco de madera, a cien metros, con un escudo de caballero, una cota de malla y una armadura normal.
En menos de media hora todo está organizado, aunque tenemos más publico de lo que esperaba, la mitad de los caballeros de la ciudad nos esta mirando.
Han colocado un blanco de entrenamiento de madera, totalmente equipado de caballero, como si fuera una diana en una competición de tiro con arco.
Le enseño el arco al rey y al príncipe que han venido a ver eso de lo que hablo.
"Esto es un arco largo, compuesto, con poleas y sus componentes incluido el tensor esta formado por diferentes metales, que le aportan más resistencia y son más ligeros que la madera.
Le enseño el arco y la flecha a los dos, son muy diferentes de los que usan en esta época, que son arcos simples y la flechas mediocres que son únicamente empleados en la caza.
Tomo el arco y la flecha y les hago una demostración sobre el blanco con armadura.
Mi flecha atraviesa el escudo, la coraza y la cota de malla, quedando firmemente clavada en el tronco de madera.
Cuando van a ver el resultado, se quedan horrorizados de las posibilidades.
Sus caballeros caerían como moscas si son enfrentados a una guarnición de hombres con estos arcos.
"Esto no es magia, pero es peligroso, si un ejército de hombres entrenados tienen este tipo de arcos, los caballeros y sus armaduras habrán caído antes de llegar siquiera a la batalla." (yo)
Como no quiero que comience una carrera armamentística, hago que uno de mis hombres, desmonte el arco y se lo lleve para guardarlo adecuadamente.
Los caballeros a los laterales del campo de tiro con arco improvisado aún no han asimilado lo que han visto.
Me marcho con el rey Uther y Arturo de vuelta al palacio.
Morgana, Gwen y las chicas han mantenido una agradable conversación entre chicas, donde he sido el tema principal de la conversación.
Les preguntan a las chicas si alguna de ellas tiene habilidades mágicas y Hermione les dice que ella es una maga, pero siendo muy modesta, que en comparación conmigo no es más que una aprendiz que aún está estudiando las cosas más básicas.
Alice les dice que ella es una vampiresa y que es vidente.
Kera en último lugar dice que ella es una mujer normal, pero que está esforzándose en el entrenamiento para no quedarse atrás en comparación con sus hermanas.
Las cinco hablan sin ninguna reserva ni prejuicios, Morgana incluso las pregunta si yo estaría dispuesto a aceptarla como esposa.
Las tres se ríen y antes de que pueda malentender sus intenciones, Alice le dice.
"Esto no se trata de si te acepta o no como su mujer, es más bien lo contrario, si serás capaz o no de escapar de sus encantos, ya que el es como una gran luz en la noche para las mujeres, él acepta y ama a las que se le acercan sin importar si son reinas, nobles, plebeyas, o esclavas, pero una vez en sus manos ya es imposible alejarse de él." (Alice)
"¿No estáis preocupadas por qué pueda remplazaros por otras mujeres? (Morgana)
"No nos reemplazará, sabemos que traerá a más hermanas, pero jamás abandona a una mujer, una vez que es suya." (Kera)
Continúan hablando hasta que una doncella las avisa, que es la hora de la comida y las estamos esperando.
También se une a la comida lady Helen.
La comida es bastante tranquila, pero demasiado formal para mí gusto.
La mesa es muy grande para los asistentes que somos.
Están Uther, Arturo, Morgana, Helen, Alice, Hermione, Kera y yo sentados a la mesa, mientras que Gwen como es considerada una criada esta de pie junto a la puerta del comedor.
La he preguntado si quiere sentarse en la mesa con nosotros y me ha dicho que no, que prefiere mantenerse lejos de las complicaciones y no quiere causar problemas innecesarios.
Helen se comporta muy cercana a mí, pero cuando el rey le pregunta al respecto, solamente dice, que es debido a que soy su salvador.
La intuición femenina es asombrosa y todas saben que hay algo entre nosotros, aunque mis tres mujeres ya lo sabían.
La zona del palacio que nos han asignado esta cerca de la habitación de Helen, a mis supuestos guardias los han dejado habitaciones más modestas en la zona de los sirvientes.
Por la noche, no tengo ni siquiera que ir a buscar a Helen ella misma viene a mi habitación sin que nadie la vea.
El la habitación insonorizada, con las cuatro mujeres tenemos una pequeña fiesta sexual.
Mientras tanto, en la habitación de Morgana están Gwen y Morgana hablando de varias cosas, pero tienen un tema en común, que soy y la posibilidad de que acabe una de ellas o puede que las dos a mi lado y como se lo tomarían el rey y Arturo.
Uther y Arturo, cada uno en sus respectivos aposentos, están dándole vueltas a la cabeza, pensando en las opciones que plantea mi oferta, de 'Intercambiar personas y seres con magia, a cambio de oro u otros bienes.
La demostración con el arco, ha demostrado que la magia puede ser peligrosa, pero también hay otras cosas que son peligrosas y no por ello se persiguen y se prohíbe su uso.
Los dos se duermen en sus camas, mientras me follo a la supuesta mejor cantante del reino y a mis mujeres.
Por simple diversión, creo una pequeña conexión entre Morgana y las chicas en mi habitación, comparta ligeramente los sentimientos y sentidos de las cuatro mientras tenemos sexo.
Va a tener una noche muy larga.
En cuanto se establece la conexión se despierta y empieza a sentir el ardor de la lujuria en su cuerpo.
Durante horas siente en su cuerpo una mezcla de placer, anhelo, ansiedad y picazón, que no desaparece y es como si estuviera atrapada entre el placer, que siente pero que al mismo tiempo es algo incompleto, lo que la hace arder en deseo de sentir realmente aquello que su está sintiendo de forma indirecta.
Merlín durante la noche conoce al dragón y le cuenta todo eso de su destino y un montón de mierda más.
Por la mañana, Helen vuelve a su habitación de forma discreta, aunque andando un poco raro.
Las chicas y yo desayunos en la habitación, ya que nuestros gustos, están más acostumbrados a los desayunos modernos, que a otros desayunos más medievales.
Aunque Alice ha tomado un desayuno especial que tomado directamente de mi cuello con sus colmillos una vez que se ha marchado Helen.
Quiero ver directamente la cara y las ojeras de Morgana, pero me tengo que contentar verla con mi percepción ya que se escusa durante toda la mañana y aprovecha para dormir hasta el momento que la avisan que va a comenzar la fiesta y el banquete con la actuación de Helen.
Por la mañana, las chicas y yo no hacemos nada, aparte de salir y dar una vuelta por el palacio y la ciudad.
Al parecer el rey está de acuerdo con mi propuesta, me habla sobre el dragón y me dice que, dejará a mi cuidado a todas las personas y seres con magia que se encuentren en el reino, y que seré responsable de su viaje y custodia, pero que el dragón se va a quedar donde está.
"No tengo ningún interés en un viejo dragón, que lleva 20 años encadenado debajo del castillo y seguramente guarde mucho rencor, sería realmente un dolor de cabeza, sería un asunto muy diferente si se tratara de un ejemplar joven, una cría de dragón o un huevo, ya que podría educarse para que no ataque a las personas y a su entorno." (yo)
"Muy cierto, entonces tenemos un acuerdo entre nuestros reinos." (Uther)
Llegan todos los invitados al banquete, tenemos asientos reservados en la mesa principal.
Morgana al entrar en el salón y establecer contacto visual conmigo, baja la mirada avergonzada y se ruboriza.
Se perfectamente lo que está pensando.
Da comienzo la actuación de Helen y el banquete transcurre sin incidentes hasta que por obra del destino, un sirviente trata de asesinar al príncipe y gracias a la intervención rápida de Merlín, se salva y lo nombran sirviente personal de Arturo.
Detienen al asesino y se lo llevan a prisión, termina el banquete y la actuación de Helen.
Por la tarde Lady Helen se despide del rey diciendo que debe volver
cuando va a despedirse de mi prometiendo volver lo antes posible, le digo que nos encontraremos antes de lo que piensa.
Cuando abandona la ciudad con su escolta, la sigo en secreto con otro cuerpo y cuando se detienen a pasar la noche, la capturo, dejando en su lugar, un cuerpo igual que el suyo, con una mordedura de serpiente.
En el palacio sin enterarse de esto, están realizando los preparativos para comenzar el torneo de caballeros, cuyo vigente campeón es el propio príncipe Arturo.
El premio son mil moneda y la compañía de lady Morgana durante el banquete tras finalizar el torneo.
Durante la tarde, le expreso al rey Uther mi deseo de participar en el torneo, pero que si logro quedar vencedor, no quiero las monedas del premio, es suficiente para mi poder gozar de la compañía de lady Morgana.
El rey esta de acuerdo y aunque sepa que es falso y apoya a su hijo, hace un brindis deseándome suerte en el duelo.
Morgana viene y me entrega un pañuelo de seda, que es un símbolo, que refleja claramente su favoritismo hacia mí y me da su apoyo para el torneo.
Esto hace que Uther frunza el ceño y que Arturo se ponga celoso.
En un momento que me quedo solo con Morgana, le digo al oído.
"Ganaré el torneo para ti y si estás de acuerdo, le pediré al rey tu mano, ya que eres su protegida, si dice que no siempre puedo convertir a todos los hombres del reino en cerdos y llevaros conmigo a mi hogar." (yo)
"Esperaré vuestro éxito con anhelo, y aunque podría ser una visión divertida, espero no tener que llegar a ese extremo." (Morgana)
"Espero que volváis a tener una placentera noche." (yo)
Me mira con horror, dándose cuenta que sé, lo que ha sentido toda la noche.
"Tranquila, esta noche dormirás perfectamente, sin sentir nada extraño y sin pesadillas, me encargaré personalmente qué así sea." (yo)
"Gracias." (Morgana)
Busco en la tienda una poción para tener sueños agradables y la transformó en un pequeño caramelo, sin que pierda las propiedades.
Se lo doy discretamente y le susurro.
"Tómate esto antes de acostarte, pero no lo muerdas o te lo tragues, hay que dejar que se deshaga en la boca." (yo)
Se que este intercambio no ha sido pasado por alto y que hay varios pares de ojos que se han dado cuenta.
Uno de ellos es el propio Arturo, que viene a preguntar directamente.
Me pide que le muestre lo que le acabo de dar a lady Morgana.
Gwen también lo ha visto y hago que aparezco dos caramelos normales en el interior de mis bolsillos.
Meto la mano en el bolsillo y los saco.
"Me has descubierto príncipe, esto es una pequeña delicia que descubrieron los cocineros de mi reino, los han llamado caramelos y los producen con los jugos de una planta, que tuesta al fuego lentamente." (yo)
Le entrego uno a él y otro a Gwen que no se atreve a pedirlo.
"Hay que mantenerlo en la boca mientras se va deshaciendo, y tiene un sabor dulce." (yo)
Veo que hemos llamado también la atención del rey, pero no dice nada y sigue hablando con un noble.
Arturo mira su caramelo de forma extraña y para que no piense que le estoy envenenando, llamo a Merlín, que estaba por ahí dando vueltas.
Le digo.
"Toma esto, métetelo en la boca y chúpalo hasta que se disuelva totalmente, después le cuentas al príncipe, que no se trata de un veneno." (yo)
Merlín mira al príncipe y Arturo le mete prisa para que lo haga.
Se mete el caramelo en la boca y como es un caramelo sencillo de melaza, no le dura mucho tiempo.
Le intenta explicar a Arturo lo que siente, pero solamente consigue decirle que es delicioso.
Aún más intrigado, quita el envoltorio del caramelo y se lo mete en la boca.
Sus ojos se abren y empieza a saborear el caramelo.
Gwen, ha decidido guardarlo para más tarde, ya que no quiere que la vean igual que esta Arturo ahora.
El rey está intrigado en lo que está haciendo su hijo pero su orgullo no le permite hacer ningún movimiento.
Le doy dos más a Arturo diciendo que son los últimos que tengo encima y que puede darle uno a su padre, que parece estar interesado, pero no creo que sea oportuno dárselo en este momento.
Arturo mira a su padre y ve que mis palabras son bastante acertadas.
Por la noche nos despedimos cada cual a sus respectivas habitaciones.
Gwen le pregunta a Morgana por su caramelo, ya que se ha dado cuenta que es especial y ella le dice que además del dulce, tiene una poción para no tener pesadillas por la noche.
El rey también ha conseguido un caramelo de Arturo y lo ha probado en su habitación sin que nadie lo vea.
A todos les ha gustado el dulce.
Las dos también lo han probado antes de acostarse y les ha encantado.
Mis tres acompañantes, no están celosas y no quieren ese tipo de caramelos, por la noche en la cama, tenemos una fiesta con nata, leche condensada, chocolate fundido y fresas, que es mucho más dulce y mucho más entretenida.
Por supuesto, todo ha quedado grabado para que podamos vernos a nosotros mismos.
Morgana ha dormido mejor que nunca, teniendo sueños felices y agradables.
Por la mañana empieza el torneo de caballeros, con la introducción del rey, que anuncia el premio de mil monedas de oro para el vencedor, además de disfrutar de la compañía de lady Morgana en el banquete una vez que termine el torneo.
Veo al tramposo con el escudo mágico, el caballero Valiant, voy a hacer que el sorteo sea muy desfavorable para él, haciendo que le toque contra mí en su primer combate.
Somos 25 contendientes, lo que dificulta ligeramente el orden del torneo.
En la primera fase, todos los escudos menos el de Arturo como vigente campeón, van a entrar en un bolsa de tela y van a ir saliendo uno a uno, por la mano inocente de lady Morgana, quedando uno al final de la primera ronda que quedará automáticamente clasificado para la segunda ronda.
Arturo va a inaugurar el primer combate contra el primero que salga de la bolsa.
El torneo va a durar cinco días, teniendo lugar los combates de cada fase en un día, dejando para la mañana del quinto día, el duelo final.
Arturo gana su duelo sin problemas y pasa a la segunda ronda que se llevará a cabo mañana.
Yo que soy un poco tramposo y para sacar a Valiant antes de que pueda hacer daño a alguien de forma innecesaria, lo emparejo conmigo, haciendo que sean nuestros escudos de armas los que salgan de la bolsa justo a continuación.
Morgana siente el cosquilleo de cuando uso mi magia y sabe que estoy haciendo algo, pero solamente me ve sonreír.
En el segundo duelo de la mañana, me enfrento a Valiant, pero como no me gusta ser discreto, le abrumo con fuertes golpes de mi espada contra su escudo, haciendo que se le entumezca el brazo.
El segundo golpe también es pesado, y el tercero ya prácticamente no puede levantar el brazo del escudo.
Mientras él trata de golpearme con su espada pero lo detengo con mi escudo sin siquiera molestarme y cuando trata de empujarme o pisarme las botas para provocar mi caída, es el quien pierde el equilibrio y casi se cae.
La gente está asombrada en varios sentidos, ya sea por mi fuerza al golpear, mi habilidad al esquivar y detener sus ataques o ambas cosas.
Viéndose arrinconado y que va a perder de forma tan humillante, Valiant se lanza sobre mi con el escudo embrujado, que está lleno de abolladuras y ordena a las serpientes que me ataquen.
Logro esquivarlo sin problemas y queda expuesto usando magia.
Una vez expuesto, arremete contra mi salvajemente, sabiendo que no hay vuelta atrás, intentando tomar ventaja atacándome al mismo tiempo que las tres serpientes.
Son criaturas creadas de magia sin conciencia, por lo que no tengo interés en ellas.
Las mato de un solo movimiento de mi espada.
Esquivo y detengo todos los ataques de Valiant sin ningún esfuerzo y le doy un fuerte golpe en la cabeza con mi propio escudo, que le hace perder el conocimiento.
Todo el mundo en el público me aplaude y los guardias de Uther se llevan al inconsciente Valiant.
Los duelos de la mañana terminan después del sesto y continuarán por la tarde hasta que termina el duodécimo duelo de la primera ronda y un caballero pasa a la siguiente ronda.
Habiéndome clasificado podría irme, pero como soy un invitado especial, debo sentarme en la tribuna junto a mis mujeres que me esperan hasta que termine, aunque con una pausa de un par de horas para ir a comer al castillo.
Una vez que termina y vamos a cenar al castillo, el rey me pregunta si quiero a Valiant o el escudo.
"No estoy interesado en ese caballero tramposo, el escudo después de haber perdido las serpientes, parece un escudo ordinario muy maltratado que solamente sirve como chatarra, sin embargo estaría muy interesado en descubrir donde ha podido adquirir el escudo." (yo)
Creo que esa información podría beneficiar a los dos, haré que lo interroguen antes de que lo ejecuten.
"Considero la ejecución un castigo poco provechoso, mis condenas no desperdician la mano de obra cualificada. Es un hombre fuerte, que con la debida supervisión y el alimento justo, puede hacer tareas que a nadie le gusta hacer. Cómo puede ser, picar piedras, trabajar en las minas, limpiando las granjas de cerdos, es solamente un consejo. Además si se niega a trabajar con las cadenas, puedes decirle, que si no trabaja no come." (yo)
Uther me mira como si fuera un genio.
Creo que acabo de instaurar la cadena perpetua y los trabajos forzados en este mundo.
Viene a hablar conmigo también Morgana y me pregunta por mi actividad mágica y si sabía que Valiant hacía trampa.
"La firma mágica de su escudo ha llamado mi atención y quería certificar si hacía trampas, por eso force la selección para que saliera como mi rival y si realmente hacía trampa no hiriese a ningún inocente." (yo)
"¿No tenias miedo de salir herido?" (Morgana)
La digo que me siga un momento y vamos a una habitación vacía.
Le doy la espada y le digo que sin ningún temor me ataque con todas sus fuerzas.
Ella me mira asustada.
"Hazlo sin miedo, si consigues hacerme sangrar con esa espada en tu ataque, te concederé todos los deseos que tengas durante un año." (yo)
Ella sin vacilar un segundo más levanta sobre sus hombros la espalda y la baja con todas sus fuerzas contra mí cabeza.
La espada golpea mi cabeza pero no corta ni siquiera uno de mis cabellos.
Vuelve a intentarlo y sigue sin hacer nada.
"Si cualquiera te viera como tratas de golpearme, pensaría que te he quitado la virtud, que no quiero hacerme responsable y me guardas mucho rencor." (yo)
"Idiota, has sido tú el que me ha pedido que le ataque, y no digas esas cosas, si no te haces responsable te perseguiré hasta el fin del mundo." (Morgana)
Me acerco a ella la rodeo entre mis brazos y situó mis labios a unos milímetros de los suyos.
"¿Eso significa que soy el afortunado al que le vas a entregar tu virtud?" (yo)
"Eres un idiota lascivo." (Morgana)
"Te equivocas, no soy un idiota lascivo, soy el idiota lascivo o más precisamente, tu idiota lascivo." (yo)
Mis manos descienden a su cintura y a su culo y mi boca avanza esos pocos milímetros que la separan de la suya.
La beso en los labios y durante unos instantes el tiempo parece detenerse.
Me retiro del beso, nos separamos un poco, recojo mi espada y le digo.
"Creo que nos buscan, no los hagamos esperar o podrían llegar a pensar que estamos haciendo algo inapropiado juntos." (yo)
Morgana esta muy quieta, asimilando todo lo que ha pasado en esta habitación vacía.
Yo salgo y un minuto después me encuentro con Gwen que nos está buscando a los dos.
Me dice que vaya al comedor que nos están esperando y que mis mujeres ya están allí junto al resto de nobles caballeros y el propio rey.
Me pregunta si he visto a Morgana y le digo que me pareció verla quieta como una estatua en una habitación siguiendo por el pasillo.
Va a ver que le pasa y se la encuentra aún en la misma posición en la que la he dejado, con la única diferencia es que se ha llevado una mano a los labios.
Cuando Gwen la habla parece despertar y salir de un trance.
Después de unas palabras de reconocimiento a todos los participantes y lo que consideran una esplendida cena, cada uno va a sus respectivos aposentos después de despedirse del rey y el resto de asistentes.
Le entrego a Gwen un puñado de caramelos, para que los compartan ella y Morgana, con varios que están claramente marcados que son los que debe tomar Morgana antes de dormir.
Morgana ha pasado la cena sonrojada y sin atreverse a mirarme a los ojos.
En el segundo día, al igual que en la primera fase hay números impares, somos 13 contendientes, que igual que el día anterior son sorteados al azar.
Arturo gana su combate con bastante facilidad y yo también lo hago, pero sin humillar a mi rival demasiado.
Al igual que el día anterior un caballero pasa automáticamente a la tercera fase.
En el tercer día de competición, sucede algo similar con 7 competidores, pero para las semifinales quedamos solamente 4.
En el cuarto día del torneo son las semifinales, me enfrento a un caballero de piel morena que habría muerto por las serpientes y Arturo también gana su duelo.
Los dos nos enfrentaremos mañana en el duelo final del torneo.
Aunque durante mis combates, Morgana ha estado muy pendiente de mí, cada vez que miro en su dirección aparta la mirada.
Mis mujeres que están con ella y Gwen a su lado, saben que ha caído bajo mis encantos.
Gwen también, pero es menos evidente.
Su comportamiento de estos días también es muy evidente para el rey y para el príncipe.
Uther mismo, que ve hacia donde avanzan los sentimientos de Morgana y que yo acepto sus sentimientos, le dice a Arturo que se esfuerce por acercarse a Morgana, si realmente siente algo por ella.
Arturo no le da importancia, aunque está celoso, piensa que como ya tengo tres mujeres hermosas, no voy a buscar conseguir más.
Llega el día del duelo final, Merlín ayuda y acompaña a Arturo como su escudero y para mí sorpresa, a mi habitación para ayudarme viene Morgana.
No hace falta que les diga nada a las tres, Alice también la ha visto venir y avisa a Hermione y Kera.
Las tres se preparan y están esperando su llegada.
Alice incluso la abre la puerta antes de que llegue a tocarla.
"Recuerda, soy vidente además de vampiresa, ¿quieres conocer de tu futuro o prefieres que sea una sorpresa?" (Alice)
"Alice no intimides a nuestra nueva hermana, es suficiente con que lo haga él." (Hermione)
Las ignora un poco y se acerca a mí, a terminar de colocar correctamente mi armadura.
Me dice que no sea demasiado duro con Arturo o Uther estará molesto y no accederá a tu petición.
"Tengo mis métodos para siempre conseguir lo que quiero, algunos son sutiles y otros no tanto, pero siempre lo consigo. De todas formas no tengo intención de humillar a Arturo, voy a luchar contra él para que sea un buen combate, con el que todos estén bastante satisfechos aunque Arturo pierda." (yo)
Después de terminar de ajustarme la armadura, se despide de las tres que se ríen y se va a su asiento para esperar a que empiece el duelo final.
Las chicas me dan un beso en los labios cada una antes de marcharse también.
Salgo detrás de ellas para dirigirme hacia el lugar del duelo, una vez allí, Arturo aún no ha llegado, Merlín le está terminando de colocar todas las piezas de la armadura.
Llega cinco minutos después con merlín siguiéndolo casi corriendo.
Antes de empezar el torneo ante la vista de todo el mundo, saco el pañuelo de lady Morgana y me lo ato en el brazo, en señal de que esta pelea la estoy realizando en honor suyo.
Empieza el duelo final y lucho más o menos en igualdad contra Arturo, sin hacer que parezca aburrido para el público, parece un combate interesante hasta que veo que se está cansando y antes de que cometa errores, le hago soltar su arma con una finta y pongo mi espada en su cuello.
Después admite con honor la derrota y todo el mundo aplaude, incluso el propio rey Uther, porque les ha gustado el torneo.
Voy a recibir el premio, aunque posteriormente lo devolveré y mi premio particular, ya que espero recibir un beso de la mujer a la que he representado en el torneo.
De forma muy cortés y correcta, aunque algo avergonzada, me da un beso lady Morgana delante de todos los espectadores.
Dejamos el terreno del torneo, y con Morgana, Gwen y mis tres mujeres voy camino del castillo.
Arturo se ha quedado solo con su padre y se disculpa por haberle avergonzado.
Uther que vio mi primer combate, ya sabía que su hijo iba a perder y no está disgustado por eso, si no por la inactividad de su hijo, cuando le están robando delante de sus narices, a la mujer que ha estado preparando para él durante años.
"Has peleado bien, pero te falta experiencia, deberías preguntarle al rey Pedro si estaría dispuesto a enseñarte y guiarte, podrías aprender un par de cosas de él, no debe tener muchos años más que tú y ya es rey y tiene al menos tres esposas o más. Además no creo que tarde demasiado en pedirme la mano de lady Morgana, por la manera que ambos se miran." (Uther)
"Pedro ya tiene tres hermosas mujeres, no pienso que pueda estar interesado en lady Morgana, ella es vuestra protegida y tiene un carácter complicado." (Arturo)
Da este asunto por imposible con lo espeso en estos temas que es su hijo.
De vuelta en el castillo, cada uno va a sus dependencias para limpiarse y prepararse para el banquete.
Morgana pone especial atención a su baño y le dice a Gwen que debería arreglarse también.
Gwen esta mañana se ha lavado a fondo y lleva unos días colocando flores silvestres entre sus ropas y en sus armarios.
Durante el banquete, el rey anuncia a su hijo Arturo, felicitándolo por su gran duelo y después me anuncia a mí, que soy el campeón.
Entro en el salón de banquetes precedido de mis tres mujeres y todos los asistentes me aplauden.
Me acerco al rey, le agradezco y el llama a lady Morgana para que venga a mi lado.
Usando un poco de sugestión mágica y con mi mano tomando la mano de Morgana.
No uso magia que sea perceptible por Morgana o Merlín.
"Rey Uther, quiero pedirle sinceramente la mano de su protegida, lady Morgana, para unirme con ella en matrimonio." (yo)
Pone su mano sobre nuestras manos unidas y gran una sonrisa en su cara bendice nuestra unión y deja a mi cuidado a su protegida.
Todos los asistentes están felices y se alegran de esta unión, menos la cara de Arturo, que es todo un crucigrama que no sabe que sentir al respecto.
El banquete es muy alegre para todos menos para Arturo, que está pensando en sus cosas.
Gwen está contenta por Morgana, pero un poco celosa.
Después de terminar el banquete, voy a buscar a Morgana y Gwen, dejando a Alice, Hermione y Kera con otro de mis cuerpos en la habitación.
Morgana y Gwen están hablando emocionadas de los acontecimientos de esta noche, no pensaban que el rey aceptaría tan fácilmente el compromiso.
Cuando escuchan a alguien llamar a su puerta.
Antes de que Gwen pueda venir a abrirla, ya he entrado dentro, atravesando la puerta como si no estuviera ahí en primer lugar, sin tocarla.
Las dos se asustan al verme aparecer.
"¿Qué estás haciendo aquí?" (Morgana)
No respondo, pero me ve sonreír, con una brillante sonrisa de oreja a oreja.
Gwen, que ve que puede haber un momento romántico y no quiere estorbar, trata de salir de la habitación, pero se da cuenta que la puerta está bloqueada y no se mueve en absoluto, como si fuera parte de la pared.
Me acerco lentamente a Morgana y la rodeo por la cintura con mis brazos.
Acerco mis labios a los suyos y la beso.
Mi lengua traviesa, logra entrar entre sus labios y atraviesa las defensas de sus dientes hasta encontrar a su escurridiza lengua.
No me olvido de Gwen, hago otro cuerpo, que la agarra por detrás mientras aún está intentando abandonar la habitación y la llevo cargada sobre mis brazos hasta la cama.
Da un fuerte chillido y patalea para defenderse hasta que se da cuenta que soy yo, que de alguna manera me he dividido en dos.
Mientras tanto, para hacer las cosas bien, estoy llamando a la puerta de su casa, donde está su padre el herrero, para informarle y pedirle su bendición al respecto.
Uther y Arturo también están manteniendo una conversación privada, en la que Arturo le pregunta a su padre, porque ha aceptado tan fácilmente el compromiso.
"¿Qué sugieres que hiciera al respecto?, por si lo has olvidado, Pedro también es un rey, si tu hubieras mostrado interés en Morgana, habría tenido algún pretexto para no permitir ese enlace, pero sin una justificación, no voy a crear conflictos entre nuestros reinos y menos aún por una mujer, aunque sea mi protegida." (Uther)
Merlín habla del tema con Gaius y aunque Merlín esta un poco celoso de mí y molesto por todo lo que va a tener que aguantar de los celos de Arturo, pero en el fondo está contento ya que Morgana a mi lado parecía muy feliz.
Gaius recomienda a Merlín que mantenga buenas relaciones conmigo, ya que se enteró del acuerdo que hemos llegado sobre los magos y los seres mágicos.
Uther le preguntó a Gaius al respecto antes de tomar una decisión y cree que, si todo sale mal aquí en Camelot y descubren a Merlín haciendo magia, si mantiene buenos términos conmigo, podría ir a mi reino y aprender magia de mi directamente.
Volviendo a la habitación de Morgana, mientras estamos besándonos, ver cómo Gwen es llevada en brazos hacia la cama por otro yo y trata de girarse para mirar.
Cuando se separa del beso para mirar, no tiene tiempo para preocuparse por Gwen, ya que siente que toda su ropa, hasta la más íntima, acaba de desaparecer sin dejar rastro y trata de cubrirse.
Para su sorpresa, al cubrirse, puede ver que la mía también ha desaparecido.
Ahora siente nuestro abrazo, piel contra piel.
La atraigo hacia mi, con sus tetas un poco apretadas contra mis pectorales y la vuelvo a besar.
Restauro completamente el cuerpo de las dos, aunque ambas son vírgenes.
Le susurro palabras bonitas y le digo que ya no tendrá que preocuparse jamás de nada, ni tampoco volverá a tener pesadillas, ya que es debido al excesivo poder mágico dormido en su interior que empieza a despertar y cuando la haga beber la poción de bienvenida, ese problema se solucionara al tener su cuerpo purificado, más fuerte e inmortal.
Aunque su cuerpo es idéntico al de Zara de Jurassic World, hay matices diferentes y es completamente especial y único.
Mientras nos besamos, también he desnudo a Gwen, la estoy besando y la he dicho que he informado a su padre y nos ha dado su bendición.
Además le he dado 500 monedas de oro para que pueda vivir más cómodamente sin tener que depender de su hija para todo.
Por lo visto en esta época no está de moda la depilación y hay varias zonas cubiertas de pelo.
Como estoy más acostumbrado y cómodo con la ausencia de bello púbico, salvo algún adorno ocasional bien cuidado, en la zona frontal marcando el camino, hago que todo el pelo que sale de sus cuerpos por debajo del cuello, desaparezca sin dejar señales de su existencia previa.
Con mi cuerpo principal, estoy abrazando a Morgana mientras nos besamos, la voy empujando lentamente hasta que llegamos a la cama, donde la ayudo a recostarse despacio.
Nuestros cuerpos se entrelazan mientras nos seguimos besando, con nuestras manos recorriendo y explorando nuestros cuerpos.
Sin necesidad de juegos previos, estando sobre ella, se la meto lentamente.
Mi polla desplaza y se abre camino entre su vulva, entrando en su agujero, abriendo sus labios vaginales de par en par y dilatando su estrecha vagina.
Empieza a gemir de inmediato y una vez que estoy totalmente enfundado en su interior y ella ha conseguido acostumbrarse, le digo que la amo y empiezo a moverme despacio.
Con Gwen estoy alargando los juegos previos y he bajado a contemplar y admirar su entrepierna, además de poder saborear sus jugos de amor que han empezado a desbordarse cuando he empezado a jugar con su clítoris y su coñito estrecho.
Follo con Morgana sin piedad y sin preocupaciones por ser interrumpidos o que se escuche algo de lo que sucede en la habitación.
Como bestias en celo Morgana y yo cópula os en diferentes posiciones.
Algo en ella se encontraba realmente reprimida y conmigo se puede liberar y deja salir en forma de lujuria toda su frustración.
Después de tres rondas rápidas, decido cambiar entre ella y Gwen y con mi otro cuerpo vengo a seguir follando con Morgana y con el principal voy a tomar la virtud de Gwen hasta ahora conservada.
Mientras esta tumbada en la cama, levantó sus piernas 90 grados y se la meto de golpe sin avisar, ya que después de más de 40 minutos de juegos previos eso ya estaba más que preparado.
Sin ninguna misericordia, taladro su interior y las dos gimen a coro con todas sus fuerzas.
Sin miedo me corro en el interior ambos coños cada vez que llegó a mi límite.
Después de eyacular en el moreno coño de Gwen varias veces, en la misma posición con sus piernas levantadas hacia arriba en 90 grados, simplemente empujando un poco más sus piernas, hago que su trasero quede más expuesto.
Saco mi polla de su coño, coloco la punta contra la entrada de su apretado agujero cerrado con firmeza y empiezo a empujar lentamente para meter la cabeza.
Hay algo de resistencia por su parte, tratando de apartarme y apretando con todas sus fuerzas para que no consiga entrar ahí atrás.
Pero cualquier resistencia es inútil y con un pequeño grito, marca la caída de su defensa, cuando la cabeza de mi pene se ha abierto camino en su interior.
Morgana esta viendo todo esto y me pregunta amorosamente mientras estamos follando con mi otro cuerpo, si voy a querer emplear de igual manera su agujero trasero.
En lugar de darle una respuesta con palabras, la doy un beso y empiezo a jugar con mi dedo usando nuestros jugos como lubricante en su ano, dándole a conocer mis intenciones.
Empieza a darme una charla sobre que es una dama, que hay cosas que no se pueden hacer y un montón de escusas que le vienen a la cabeza mientras seguimos follando.
Durante más de veinte minutos, que juego con mis dedos entrando y aflojando poco a poco sus defensas, la escucho y ella siente que está logrando convencerme.
Con mi cuerpo principal he terminado de correrme dentro del culo de Gwen y simplemente la estoy manteniendo abrazada con mi polla totalmente dentro de su estrecho agujero y estamos escuchando a Morgana su discurso mientras folla con mi otro cuerpo.
Le pregunto al oído que opina y me dice que debería de probarlo, que seguramente le guste la sensación, con una sonrisa pícara y se que está pensando, que si ella lo ha tenido en su trasero, Morgana también debería tenerlo.
Le susurro al oído.
"Discúlpame un momento, voy a terminar de conquistar el cuerpo de lady Morgana." (yo)
Salgo de su ano dejando un gran vacío en su interior y la dejo sola durante un momento en la cama.
Con mi otro cuerpo, le digo a Morgana que la quiero y la doy un beso.
Estoy dentro de su coño y lo que hago es abrazarla fuerte y darme media vuelta hasta que estoy en la posición de debajo y ella queda tumbada sobre mí.
Ella me dice que también me quiere sin darse cuenta que con mi cuerpo principal, he dejado a Gwen y me he colocado justo detrás suya.
De golpe y sorpresa, me tumbo sobre su espalda y se la meto por el trasero al mismo tiempo que aún tengo mi polla metida en su coño con mi otro cuerpo.
Llenando así sus dos agujeros.
Da un fuerte grito y me llama traidor mentiroso.
Comienza una nueva rondo de sexo de doble penetración, bajo los asombrados ojos de Gwen, que miran con gran intriga a su antigua señora y amiga.
No dura mucho tiempo así, con dos cuerpos más que no ve porque los he hecho invisibles, la estoy apunto de dejar en una posición similar.
Me hago visible con los dos y con un beso y diciéndole, que al igual que a Morgana, no puedo dejarla sin disfrutar del mismo sentimiento.
Seguimos con este enfoque de doble penetración y teniendo sexo hasta que están agotadas, que las dejo descansar sobre la cama y disipo mis cuerpos sobrantes.
Las doy la poción de bienvenida, aunque es bastante asqueroso en su estado, las limpio, las curo totalmente menos sus virginidades y las pongo a cada una de ellas mi anillo en su dedo, marcándolas como mis esposas.
Una vez que todo está limpio y arreglado, me tumbo en la cama entre las dos y las digo.
"¿Qué opináis acerca de ser las mujeres de un dios?" (yo)
Las dos a mis lados, me miran y no saben qué decir, recuerdan que me presenté como un dios viajero cuando nos conocimos, pero no me habían creído y ahora se creían que era un rey que tenía conocimientos de magia, pero la teoría de que soy un dios cada vez es más probable.
Ya que hago cosas maravillosas, y no digo encantamientos o otras fórmulas mágicas.
Por la mañana, cuando las dos se despiertan, las entrego ropas para que se puedan vestir adecuadamente a su nuevo estatus, vamos a buscar a Alice, Hermione y Kera y cuando las cinco se encuentran, Alice no puede evitar preguntarles que les pareció la sorpresa.
En el palacio es una gran sensación ver a las cinco hermosas mujeres, arregladas y vestidas de forma elegante a mi alrededor.
Es como si las dos mujeres que conocían hubieran pasado de piedras bonitas a auténticas joyas pulidas.
El que más babea es Arturo y Merlín sabe que le esperan unos días muy largos y complicados soportando sus enfados.