Capítulo 5

Al momento en que subí juré que había visto al chico Rosternat en mi habitación, pero cuando entré ya no estaba, quizás me estoy imaginando cosas. La antigua dueña de la casa también se llamaba Elizabeth, asique Bera era la hermana, la dueña de los otros libros, incluso de uno de los diarios. Bera, no podía quitármela de la cabeza, si eran hermanas que le habrá pasado que no tomó la casa como heredera después de la muerte de su hermana, después de todo era la familia más cercana y ni siquiera estoy segura de ser su familia.

Ya dentro de mi habitación me dediqué a ordenar mi ropa, era mucha, iba cajón por cajón, uno para pantalones, otro para las poleras, otro para los chalecos y así sucesivamente. ya cuando terminé quise seguir leyendo el libro que había empezado pero luego recordé que desde que llegué no checo el email, ni los mensajes del celular y tengo que hablar con mis amigos.

_"Hola... me han extrañado" 09:21pm -mandé un mensaje a nuestro grupo de WhatsApp.

_"Obvio que sí" 09:22pm -respondió Alfredo, mi mejor y único amigo.

_ "Claro que sí amiga" 09:23pm -respondió Luisa, mi mejor amiga.

_ "Cuéntenme, ¿Cómo les ha ido? 09:24pm -respondí.

_ "Muy bien y, ¿A ti? 9:24pm -respondieron ambos al mismo tiempo.

_ "Mmm y porque será" 9:25pm -respondí, pensé que ya eran novios, ya que cuando nos juntábamos se notaba mucho que a Luisa le gustaba Alfredo y que a él le gustaba ella.

_ "Tú ya lo sabes, somos novios" 9:25pm -respondieron al mismo tiempo nuevamente, si que les pico fuerte pensé.

_"Que bueno, hacen muy linda pareja" 9:26pm -mencioné.

_"Tenemos algo más que decirte" 9:27pm -dijo Alfredo.

_"No me digas... ¡Luisa, estás embarazada!" 9:28pm -escribí yo.

_"¡No loca! 9:28pm -respondió Luisa.

_"Encontramos a Max" 9:29pm -dijo él. Max era mi perro, antes de mudarnos mi madre dijo que se había escapado, les comenté esto a mis amigos y ahora me dicen que lo encontraron.

_"Imposible, Max está perdido... eso me dijo mamá" 9:29pm.

_"Foto" 9:30pm -no es posible, en verdad era Max.

No podía creer que me hubieran mentido... y con Max, mamá sabía que él era lo más preciado para mí, ahora solo hay dos opciones, la mujer que llamaba madre, dejó a Max en alguna parte para que no lo encontrara y así dejarlo, o en realidad se escapó y él no era de esos. No podía creer que mamá lo haya dejado solo, Max es de la familia y yo prácticamente lloré mucho cuando supe que había desaparecido.

Estaba enojada, probablemente si bajaba haría un escándalo. Me dedique a leer el libro, era uno acerca de hombres lobos, además, era de Bera, tendría que averiguar más acerca de ello, por ejemplo, ¿Por qué no heredaría ella la casa, u otra persona de la familia? Era mucho más lógico eso, es más creo que Elizabeth ni siquiera sabía quiénes somos.

_Elizabeth. -escuché y casi muero.

_Me asustaste, no te enseñaron a tocar la puerta... espera, esa voz... ¿Tú? -volteé y era el chico Rosternat. - ¿Qué haces aquí?

_Tú madre dice que bajes a comer, mi familia esta abajo. -no me había percatado de la hora, pues estuve toda la tarde hablando con mis amigos y después leyendo.

_Y a mí que, no quiero cenar.

_Tienes que hacerlo Elizabeth, es por tu bien. Se lo que paso con Max pero, pueden resolverlo.

_ ¿Cómo dijiste? ¿Cómo sabes lo de Max?

_Yo, yo te escuché, Elizabeth. -dio mirándome fijamente.

_No... no te han enseñado que espiar es... es malo. -poco a poco me fui perdiendo en su mirada.

_Sí, en algún punto de mi vida me lo han dicho. -dijo él como si fuera mayor.

_ ¿En algún punto? ¿Cuántos años tienes?

_Sí, bueno, tengo veinte, pero no estábamos hablando de eso.

_Lo sé, yo tengo diecisiete.

_No te lo pregunté o ¿Sí? Ven, vamos a cenar.

_No tienes porque ser tan serio ni distante.

_No lo soy.

_Sí lo eres. No bajaré, es mejor que te vayas chico Rosternat. -pero que acabas de decir Beth, de nuevo metiendo la pata hasta el fondo.

_ ¿Cómo me llamaste?

_ ¿Yo? ... no sé de qué me estás hablando.

_Me llamaste chico Rosternat, creo que así se llama el lugar donde nos encontramos hace unos días, ¿No?_Si.

_Pero la pregunta es, ¿Por qué me llamas de esa manera?

_Pues fácil, porque no sé tú nombre.

_Fácil, lo hubieras preguntado. - mencionó él.

_Cada vez que lo intentaba te ibas. -dije encogiendo los hombros.

_Ah ... -¿Qué? Primera vez que no tiene algo que decir. -Bueno ... ahora me tengo que ir, diré que no quieres bajar.

_A eso me refiero. No importa, bajaré.