Contratando a un luchador a largo plazo

Mientras los primeros rayos del sol matutino se filtraban por la ventana decorada, pizcas de luz podían verse iluminadas en los bordes del suelo, formando una imagen similar a la de una flor floreciendo, cálidas y hermosas.

En la habitación, Xiao Yan, quien estaba sentado de piernas cruzadas sobre el loto verde, abrió lentamente sus ojos. Un tenue brillo verde que era emitido de las pupilas negro intenso destelló de repente, y desapareció en segundos.

Estirando su cuerpo, Xiao Yan tomó un ligero respiro del fresco aire matinal, una sensación placentera surgió entre su corazón y pulmones la cual se esparció gradualmente por todo su cuerpo.

Luego de descansar una noche, el agotamiento en el rostro de Xiao Yan había desaparecido por completo, él descendió suavemente de la Plataforma de Loto Verde. Con un movimiento de su palma, la Plataforma de Loto Verde se convirtió en una distorsión de luz verde y fue succionada de nuevo en el anillo de almacenamiento.