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4 De septiembre. El inicio de un nuevo año escolar. Harper caminaba hacia sus compañeros para saludar y retomar su amistad luego de las vacaciones. Ya contaba con 15 años de edad. Se sentó y se dió cuenta de que habia un chico nuevo sentado frente a ella, no le dió mucha importancia y solo se limito a saludar con su mano y siguió hablando con sus compañeros. El chico hablaba como si conociera a los demás chicos, Harper no notó. Le preguntó a una de sud amigas y esta le respondía en voz baja mientras jugaba con el pelo rizado de la chica.

-Es amigo de Liam. Nos presentamos y es buen muchacho. Se nota que es inteligente y bueno en clases. Tendrás más competencia este año, Harper. -dijo mientras jugaba con los rizos de la chica-

-No voy a subestimar su intelecto, pero se ve que no le gusta estudiar. Tal vez me equivoque. -Dijo com sus ojos desenfocados, mirando a un espacio indefinido-

-Ya sabras como adaptarlo a tu modo. Oh, el timbre sonó. Vamos a escoger los nuevos asientos! -Dijo y corrió hasta llegar al aula, dejando a Harper en el banco sola.-

Que idiotez -penso-

La pelinegra de rizos se levantó del banco para ir hasta su aula y darse cuenta que sus amigas le habían guardado un lugar. Se sentó, dejó se mochila en el suelo y se fijó quien estaba a su lado izquierdo.

-Por que al lado de él? -le susurró a su amiga-

-Le dijimos que no lo querias en ese asiento y dijo "Ella no manda aquí. Si ella los compró, que venga y me lo diga ella" Intenté decirle que tus papás los compraron, pero no escuchó. Perdón. -dijo la castaña-

-No es tu culpa, Leah, Pero gracias.- Dijo sonriendo y sintió que algo golpeaba su cabeza. Se giró rapido y vió al chico nuevo lanzando papeles a la cabeza. No se levantó pero si se puso a maldecir en voz baja. Su amiga lo noto y se rió levemente-

-Tranquila, Harper. Solo es un chico común lanzando papeles a tu cabeza como va a molestarte...ahora que lo digo bien, si es algo. Ahí viene el profesor. Nuestro tutor es el profesor de educación física. Animate, Harper. -dijo buscando su cuaderno de deportes-

-Estoy bien...bien...bien...bien..- Sonrió y suspiro-

-tu pelo parece resortes -dijo una voz masculina de algun lugar-

La chica se giró para buscar de donde venia la voz y se dió cuenta que era el chico nuevo. Comenzo a respirar cada vez más rápido y este se dió cuenta.

-Me dijeron que no me querias aquí. Tu compraste las sillas?- Soltó el rubio nuevo en el colegio-

-Sus padres las compraron, pero a ella no le gusta decirlo para no presumir - dijo Liam - Trátala bien, chris, es una chica tranquila y muy muy inteligente.

-Sonrió la chica de pelo rizado y giró su mirada hacia el chico rubio- Decias?

-Solo bromeaba- Dijo y se sentó en su pupitre.-

Las tres primeras horas de clase pasaron, el timbre ya sonó y las dos guardaban sus cuadernos y buscaban su dinero para desayunar en la cafeteria del colegio. Ambas salieron del aula y la rizada sintió que la empujaban para luego caer lastimando sus palmas al presionarlas de golpe con el suelo.

-Que demo- -Miro hacia arriba y se encontro con el chico- Christopher..-se levantó sin decir nada más y siguió su camino junto a su amiga.-

Ambas llegaron hasta la cafetería y compraron su desayuno. Luego de esto, ambas se sentaron en una de las mesitas de dos asientos que abundaban en el lugar.

-Primer dia y ya lo quiero lejos de mi vida. ¿Por que le caigo tan mal?- Balbuceaba la rizada mientras comía su desayuno-

-No lo sé, Harper, habla con él a ver que le pasa.- Dijo su amiga mirando la cancha, donde se encontraba el chico que le gustaba, Luca. La castaña sonreía mientras comía.-

-No pienso hablarle, tendrá que acoplarse a la situación. Si es tan inteligente como dice, que se integre a las olimpiadas iniciales...-comenzo a sonreir maliciosamente- Aunque ahora que pienso, un dia no es nada.

18 de noviembre, El conflicto de los dos chicos aun no acaba. Se encontraban en educacion física, haciendo pruebas de velocidad y flexibilidad. Chicas y chicos se encuentran divididos.

-Leah, tu turno- dijo el profesor de deportes-

-claro- Se puso de pie y se tocó los talones sin doblar las rodillas-

-Harper, adelante -habló el profesor-

Harper copió la acción de su amiga mientras el profesor anotaba su nivel le flexibilidad. La chica de repente cae hacia adelante, notando de quien habia sido la culpa-

-Christopher -se levantó y se alejo de ahí yendo hacia un banco para relajarse-

El rubio se acercó a ella con una sonrisa y se sento a su lado.

-Ridícula, por qué eres tan así?-

-....-

-Tan tú, hemos estado casi tres meses en el colegio. Sabes, quiero que dejemos de pelear, te invito a comer un helado hoy en la tarde...te parece? -dijo moviendo sus piernas.-

-Quien te crees?-

-Perdona?-

-Quien te crees para llegar al colegio y al primer día comenzar a tratarme como una basura? Estoy harta de tí. Aléjate de mi vista antes de que yo misma lo haga.-

-A esto me refiero, eres muy agresiva. Tal vez por eso siempre andas sola. Aún teniendo a esas dos amigas tuyas, nadie más quiere andar contigo por tu carácter.- dijo el chico mirando a las personas jugando en la cancha-

-Sacaste boleto, idiota- dijo la chica para comenzar a tirar del pelo del chico y golpear su cara.-

Se estaba desahogando, no era su culpa. A veces, hay cosas que no se solucionan solo hablando y hay que recurrir a los golpes.

La chica se percató que de la nariz y labios del chico brotaba sangre y se detuvo en seco. Pensó en lo que hizo y lo llevó hasta la enfermería, dejándolo solo con la enfermera y sus heridas.

Volvió hasta su aula y se sentó, habían informado que no había llegado su profesora y que había hora libre. Solo entró al aula y todos se le acercaron.

"Que te hizo para que lo golpees de esa forma?"

"Estás loca para golpearlo así, solo estaba hablando contigo"

-Harper, ven conmigo- dijo su amiga y la llevó hasta su lugar, todos volvieron a lo suyo.- Esto te va a arruinar. Pensaste en las repercusiones que esto te puede traer? Cuéntame, cuál fué la causa? antes de comenzar a juzgarte.-

-El muy idiota me invitó un helado luego de pasarse casi tres meses molestando y haciéndome la vida imposible. También, comenzó a quejarse de mi forma de ser y pues, sacó su boleto. -Se cruzó de brazos-

Su amiga solo se rió por como la chica había reaccionado ante aquella invitación y las quejas del chico. Harper siempre fué de estás que solo estudiaban, pero salían a divertirse. Se puede ser bueno en los estudios y sacar buenas notas, pero si no te diviertes un poco se puede volver una tortura.