La Pradera Sagrada del Bosque

Al parecer se había acabado el Bosque Perdido, porque Link apareció en una especie de jardín con muchos setos que lo convertían en laberinto, y no como en el que Link tomó la Espada Kokiri, sino que ahora sí parecía laberinto.

Empezó a caminar, pero cuando se iba a adentrar en el laberinto, vio que en la entrada había rejas, y luego se oyó un aullido. Link se dio la vuelta y un lobo, llamado Wolfos, apareció y comenzó a atacar a Link.

Gracias a las habilidades rápidas de éste, lo logró eliminar y las rejas de la entrada al laberinto se quitaron. Entonces entró y empezó a caminar. Aunque sí estaba algo confuso, era de esos laberintos que, si no era por un lado, era por otro y no tenía tanto pierde. Entre los pasillos se encontró matorrales como los que había dentro del Gran Árbol Deku, pero esta vez eran rojos y cuando Link usó su escudo para derrotarlos, éstos corrían y no le decían nada como los del Gran Árbol Deku.

Cuando los alcanzaba, les daba un espadazo y éstos desaparecían, así, sin más. Encontró a unos cuatro y a todos los derrotó. Cuando llegó al final, en el último seto había una escalera de mano para subir a estos y ver el laberinto desde arriba, sin embargo no subió porque no le llamaba mucho la atención.

Enfrente de la escalera de mano había otras normales que tenían al principio dos pilares, como si estuvieran llegando a un recinto importante. Link las subió y llegó a un pasillo entre otros dos setos más altos y con otros matorrales. Cuando los derrotó, notó que atrás de ellos había más escaleras. Las subió y llegó a un claro amplio. Al centro había un pedestal grande con la Trifuerza marcada en él y además un símbolo verde diferente encima. De la mitad hacia el fondo lo bordeaban paredes de lo que parecía ser un templo y las escaleras para llegar a él, que al parecer empezaban en el pedestal, estaban destruidas; además había un árbol a la izquierda de lo que quedaba de las escaleras, y a la derecha había un tocón con una persona tocando una ocarina... Era Saria.

Link se le acercó corriendo. Ella dejó de tocar y le dijo:

—Te estaba esperando, Link. Estás en la Pradera Sagrada del Bosque. ¡Es mi lugar secreto! Tengo la sensación... de que este sitio será muy importante para nosotros dos algún día. Si tocas la ocarina conmigo, te enseñaré a comunicarte con los espíritus del bosque. ¿Te gustaría? —Link pensó en Darunia e imaginó que la melodía le encantaría, así que asintió —De acuerdo, trata de seguirme —y Saria tocó algunas notas y Link la siguió tocando su ocarina. Al igual que en las melodías pasadas, sintió que ya se la sabía y tocó lo que faltaba. Saria se sorprendió y dijo —¡Estupendo! ¿Me prometes que nunca olvidarás esta melodía? Toca la Canción de Saria cuando quieras hablar conmigo... Es ésa.

Link sonrió a Saria y se fue, porquea hora tendría cómo comunicarse con ella, no importaba donde estuviera.