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The Legend Of Zelda Ocarina of Time

Link es un niño de la tribu kokiri, habitantes del bosque, pronto se ve empujado fuera de su hogar para cumplir una tarea encomendado por la Deidad Protectora del Bosque y partirá hacia una aventura de proporciones épicas. Conocerá diversas razas, reinos y desafíos en su camino por establecer la paz a su mundo. Hará aliados de todo tipo que le guiaran para establecerse como un héroe legendario. Visitará y participará en distintas culturas adoptando sus costumbres y protegiéndolos de aquel hombre que busca hurtar el tesoro para dominar el mundo. Dos niños nacidos del destino, uno en el desierto y otro en los bosques serán quienes forjen el futuro del Reino de Hyrule

Gabo96 · Fantasi
Peringkat tidak cukup
67 Chs

La Llanura de Hyrule

Link salió del tronco final hacia el exterior. Empezaba como un pasillo que doblaba a la derecha. Ya no había bosque, ni se sentía ese toque mágico de los kokiri, aunque sí había unos cuantos árboles. Mientras Link daba la vuelta al pasillo, una voz grave lo sorprendió. Era un búho posado en una rama, que le dijo:

—¡Buu! ¡Buu! ¡Mira aquí arriba, Link! ¡Creo que ha llegado el momento de que comience tu aventura! En el camino te enfrentarás a muchas dificultades... Es tu destino. ¡No te rindas, aunque pases momentos difíciles! Este sendero va hacia el Castillo de Hyrule. Allí te encontrarás con una princesa... Si te pierdes y no sabes por dónde seguir, consulta tu mapa de Hyrule. Podrías dirigirte a muchos puntos del mapa, si no sabes por dónde debes continuar. ¿Lo has entendido? —Link asintió —Bien. ¡Nos vemos luego! ¡Buu!

Link empezó a caminar por la pradera. A lo lejos veía más árboles, un río, unas plantas demasiado grandes para ser plantas y hasta una edificación en el centro de la pradera que le llamó mucho la atención, pero antes de que pudiera curiosear, Navi lo detuvo y le dijo:

—El Gran Árbol Deku nos pidió ir al Castillo de Hyrule a hablar con la princesa. ¿No deberíamos ir?

Link asintió y siguió caminando hasta que divisó unas murallas como de castillo y supo que había llegado. A pesar de no haber caminado tanto como esperó, pronto atardeció y el crepúsculo se acumuló en el horizonte.