Historia Paralela La Caída Capítulo 82: Lo es para ti.
15 de marzo de 2042
Una mujer condujo un auto por la carretera saliendo de la ciudad de Moscú.
La mujer de cabello rubio y ojos celestes era guapa y llevaba un traje de oficina y si uno la miraba superficialmente pensaría que era una oficinista que trabajaba para una empresa.
Absolutamente nadie podría descubrir que ella era un rango S, miembro del Gremio The Eternal Guards.
Muchos pensaban que los miembros del gremio eran jugadores 'lunáticos', pero la realidad era muy diferente. Malik, desde que el Gran Cataclismo viajó por todas partes del mundo e hizo múltiples contactos y aliados.
Atraía gente para el gremio, no solamente de manera oficial, sino también extraoficial.
Héroes, políticos, militares y personas que eran respetadas y trabajadoras eran miembros del gremio y ayudaban a avanzar al gremio. Apoyaban tanto con los negocios externos como internos.
La mujer era de la primera clase. Ella apoyaba al gremio con contactos en Rusia y en este momento se estaba dirigiendo a una reunión con un cliente.
Ella estaba apurada, ya que luego tenía una reunión con otros colegas.
Quizás ella no era una de los altos mandos, pero estaba varios niveles abajo que eran igual de importante y era necesario reunirse y trabajar duro.
Malik Zamora destruyó la ciudad de Jerusalén con un único hechizo y el mundo estaba en pánico y el mundo declaró la guerra a ese hombre.
Para personas como ella, tales asuntos estaban lejos y en lo que debía concentrarse era cómo sacar ventajas y obtener ganancias de este conflicto.
La mujer, cuando vio una carretera de tierra, se giró y se dirigió a esa área entrando a tierras privadas.
"Debería hablar con los militares." Murmuró la mujer pensando en los negocios.
La venta de armas era un negocio rentable que estaba en auge en tiempos de guerra y como el conflicto estaba empezando, ella necesitaba tener preparadas armas para vender al gremio y aliados.
Los países de Sudamérica eran controlados por corruptos y mafias y ellos eran perfectos para obtener armas, pero ella estaba muy lejos de ese continente, así que tenía que priorizar negocios locales.
Contactar con uno o dos militares para que 'pierda' un cargamento de armas era tarea fácil y más cuando Rusia, en su unificación, trajo muchos individuos que estaban descontentos con el cambio.
Ella se concentró cuando vio una casa y el almacén, y ella condujo a la entrada preparada para los negocios.
No era raro que los clientes quisieran encontrarse con ella en zonas alejadas o privadas y ella lo respetaba.
Al bajar del auto, ella frunció el ceño y levantó su mano con temor.
"Ugh…"
Al instante en el que el espacio se selló, un corte de aura roja vino desde la casa, cortando la barrera, el auto, y el aura asesina surgió de repente.
Ella abrió aún más los ojos cuando vio la figura que la atacó usando una máscara blanca, una coraza plateada y si bien ella era incapaz de ver el rostro de esa reconocida 'heroína', pudo sentir la sed de sangre y la fuerza de un rango S.
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"¿Somos los únicos?" Preguntó un hombre calvo y tuerto al entrar a una sala.
En el interior se encontraba un hombre delgado y una mujer pálida y ambos asintieron.
"Sí. Irina parece que no vendrá hoy." Respondió el hombre delgado haciéndole una señal para que entrara.
El hombre tuerto entró y se sentó mirando a sus colegas. El hombre delgado trabajaba en el tráfico de órganos y la mujer pálida trabajaba en el tráfico de personas.
Ambos negocios eran altamente beneficiosos. El mundo todavía tenía múltiples clientes, desde magos a quienes les gustaba realizar investigaciones humanas, ritualistas o conocedores de artes oscuras que necesitaban cuerpos humanos.
La venta iba más allá de la prostitución o la mano de obra forzada, se trataba de negocios aún más turbios y que se encontraban activos en distintas naciones.
Mientras existiera un mercado, existirían aquellos que ofrecieran tales 'productos' y ambos eran esa clase de personas.
"¿Cómo van sus negocios?" Preguntó el hombre tuerto con una sonrisa.
"Durante y después de la destrucción de Jerusalén fue muy beneficioso. Mi gente pudo sacarle provecho." Dijo la mujer y sonriendo, añadió. "Y sigo haciendolo. La guerra es muy beneficiosa."
El conflicto inició y las autoridades entraron a las tierras de otras naciones, pero no lograron avanzar demasiado.
Al menos en algunas naciones existían gobiernos títeres y si las naciones europeas querían entrar, necesitaban declararles la guerra a esas naciones cuyos ejércitos, si bien eran débiles, resultaban ser numerosos.
Se le declaró la guerra a Malik, pero nadie encontró a ese hombre que había desaparecido y todos los miembros del gremio también se ocultaron.
La guerra no necesitaba suceder abiertamente… No cuando se enfrentaban a todo el mundo.
"Sin duda los tiempos de guerra son beneficiosos. Especialmente con la captura de usuarios de habilidades. No puede ser que tantos idiotas traten de invadir nuestras tierras sin conocer sus límites." Gruñó el hombre delgado soltando un bufido y luego una risa sádica.
¿Cuántas personas murieron tratando de ser héroes al entrar a Iraq? Esas tierras eran consideradas las tierras sin ley por los miles que no respetaban las leyes y que buscaban beneficios.
Aquellos héroes idiotas que entraban descuidadamente eran devorados por la oscuridad que ocultaba esas tierras… Y quienes sacaban beneficios de esos usuarios de habilidades capturados eran ellos.
"La Unión Europea movilizará sus equipos en grupos pequeños. Dudo que vayan a por todas." Murmuró el hombre tuerto y vio de reojo que la mujer soltaba un bufido. "¿Saben algo que yo no sepa?"
La guerra en contra de Malik Zamora estaba sucediendo, pero las tierras de Oriente Medio eran conflictivas y peligrosas. Un avispero con miles de lunáticos dispuestos a saciar su sed de sangre.
Lunáticos que tenían experiencia en la guerra civil estadounidense y en la guerra civil europea. Si los primeros eran dementes que buscarían cualquier oportunidad para dejar salir su locura, los segundos eran vengativos y estaban deseosos de golpear duramente.
Esta vez, los lunáticos no iban a luchar abiertamente. Para lastimar a las naciones, no se dirigirían a sus militares, sino a su gente. Iban por las ciudades, los pueblos más alejados y las aldeas más remotas.
Con la muerte y la sangre, mostrarían lo peligroso que eran… La pregunta era si las autoridades europeas lo esperaban.
"Espera quince minutos y lo veremos." Respondió la mujer, inconsciente de cuáles eran los pensamientos del hombre tuerto.
El hombre tuerto asintió como si supiera que tenía que esperar y en vez de hablar, simplemente esperó en calma. Cuando estuvo llegando a los quince minutos, el hombre delgado proyectó una imagen.
La imagen tenía el logo del Gremio The Eternal Guards y luego de unos minutos, la proyección se activó y apareció un trono en un lugar desconocido y un hombre sentado en ese trono.
El hombre tuerto no pudo evitar fruncir el ceño al ver el aura gris que giraba alrededor de Malik y notó cómo las almas revoloteaban alrededor del hombre.
Malik Zamora, que normalmente era guapo y carismático, levantó la cabeza y abrió los ojos de color blanco. El cabello plateado revoloteó por un viento intangible.
"Hoy empezaremos nuestra conquista. Nosotros conquistaremos el mundo." Declaró Malik y la proyección terminó con esa frase.
El hombre tuerto se rió… No, Víctor se rió a carcajadas por el rápido mensaje.
Él había estado buscando a ese idiota, pero al encontrar una pista, no pudo evitar reírse a carcajadas. Desde que descubrió que Malik estaba apuntando a convertirse en un Dios, él estuvo atento para interceptarlo en el momento más crítico.
Sin embargo, hoy con esta declaración y al ver el estado de ese hombre, se dio cuenta… Malik Zamora había elegido un camino de destrucción y de muerte y para lograr su objetivo necesitaba causar destrucción.
Una destrucción que le permitiera a él ascender.
"Está más demente de lo que había imaginado", respondió Víctor disfrazado del hombre tuerto y, mirando a sus 'colegas', sonrió. "¿No escucharon la orden de nuestro jefe? ¡Vamos a conquistar el mundo!"
Si al principio pensaba detener a ese lunático, esta vez él cambió de opinión. ¿Por qué detendría a un lunático que iba directo al matadero? Era mejor alimentar esa locura y aumentar el caos. De esa forma, él tendría un escenario perfecto para mostrarse al mundo.
Víctor sonrió.
Quizás él no tomó el título del primer rango SSS de la tierra, pero aun así tendría una revelación de su identidad llamativa.
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Aurora respiró hondo al ver el auto partido a la mitad y una mujer cortada en medio por su espada. Su aura roja rodeaba su espada alimentándose de la sangre roja y, a pesar de que ella tuvo arcadas, apretó su agarre.
"¿Dónde hay otro?" Preguntó Aurora de inmediato.
La mujer era un cadáver, pero su pregunta no iba a esa criminal, sino que a su sistema.
—Por ahora es mejor volver. No es tan fácil encontrar a esas personas.
La respuesta de su sistema llegó a su mente y Aurora frunció el ceño de inmediato.
"Lo es para ti." Replicó Aurora de inmediato.
Ella le había pedido a su sistema que la ayudara a encontrar esas personas. Su sistema era desconocido en todo sentido, pero sus capacidades no parecían tener límites.
Aurora no se preguntó cómo él encontraba la información o cómo lo lograba, lo único que le importó era obtener lo que quería… Los nombres y localizaciones de los altos mandos del Gremio The Eternal Guardas.
Ella necesitaba objetivos para apuntar su espada.
—Si puedo encontrarlos, pero si ellos desaparecen con frecuencia, los otros se ocultarán y la dificultad para volverlos a encontrar es alta.
Si ella quería seguir vengándose, lo mejor era ir paso a paso con calma… Tal era la idea que su sistema trataba de dar, pero tal idea era una excusa.
Aurora podía sentir que él estaba preocupado por ella. Su estado y sus emociones, y él se excusaba usando esa idea para evitar que ella se dejara llevar.
A pesar de que ella lo entendía, no pudo criticarlo y ella chasqueó la lengua.
La oscuridad bajó sus pies se movió y Alice salió mirándola cuidadosamente para ver si tenía una herida.
"Por ahora volvamos. Pediré a James que se encargue de lo demás…" Dijo Alice y deteniéndose unos segundos, la miró y añadió. "Y también de obtener información."
Aurora al ver la mirada de su hermana cerró los ojos y apretó el agarre de su espada, pero luego exhaló.
No preguntó cómo Alice encontraría la información de un cadáver y lo dejó estar.
Ella no quería involucrar a su hermana en todo este asunto, pero ahora más que nunca la necesitaba… Para la venganza y para que estuviera a su lado.