Mientras la diosa y la capitana seguían discutiendo los resultados del entrenamiento, los tres idiotas se enfrentaban a una buena golpiza. Kain lanzaba golpes, los barría, golpeaba y proyectaba. Claro, todo sin armas, al menos él no las necesitaba. Kain decía -Aquiles, mantén tu guardia, para algo utilizas el escudo. Jason, porque pierdes tu tiempo, apóyate en Aquiles y ocupa las aberturas que genera con su escudo. Odiseo, ¿Qué haces? Porque no atacas, ¿a qué le tienes miedo? Mi espalda esta desprovista de protección-. Kain viendo que ninguno reaccionaba, los noqueo.
Al cabo de veinte minutos, se despertaron con un buen dolor de cabeza mientras Kain estaba apoyado en la pared con los brazos cruzados.
-¿Qué sucede?- pregunto -¿Por qué no me atacan? Siempre están a la defensiva-
Jason apretó su puño con un sentimiento de impotencia y le respondió en un grito -tenemos miedo. Por lo menos- dijo bajando el tono -yo tengo miedo-. Aquiles y Odiseo asintieron a las palabras de Jason.
Kain frunció el ceño y les dijo -bien, les quitare el miedo, el miedo a morir y el miedo a herirse. Parece que les falta una verdadera batalla a muerte-
Entonces Kain comenzó a realizar varios signos y coloco la palma sus manos sobre su cuerpo. Su torso y sus extremidades se llenaron de tatuajes de cadenas y se sintió agotado. Saco de su anillo dos lanzas y les dijo -pónganse en guardia, si no son mas fríos y capaces de atacarme, morirán-
-Es broma ¿cierto?- le pregunto Aquiles con incredulidad. No obstante, recibió una apuñalada a la altura de su hombro. Dio un grito de dolor mientras retrocedía dos pasos y los otros dos se colocaron enfrente de su amigo. Los tres respiraban con dificultad, les dolía el cuerpo y sentían que estaban en una pesadilla.
Jason tomo su lanza y se coloco en posición de combate -¿Por qué nos haces esto?- pregunto -es injusto. Eres mas fuerte que nosotros, solo te estas aprovechando-
Kain soltó un suspiro y dejo su postura con las dos lanzas -¿eres estúpido?- pregunto -¿De que me serviría golpearlos con todas mis fuerzas? en estos momentos tengo la fuerza de un nivel dos-
-Pero, en ese caso, Aquiles es un nivel cuatro. No deberías poder herirlo tan fácilmente-
-Me decepcionas Jason, siempre te digo que entrenes con la mentalidad de pulir tu técnica. Si solo te vuelves fuerte y veloz, serás poderoso. Pero si le añades a eso, técnica, te vuelves invencible. Ahora, luchen si no quieren morir-
-Al menos, al menos sananos. De esa manera aguantaremos mas-
-Bien- dijo Kain y lanzo una luz dorada que los sanos a los tres, listos para otro round.
Jason al recordar las palabras de Kain, sonrió y le pregunto -maestro ¿es cierto que solo tienes la fuerza de un nivel 2?-
-Así es ¿Por qué?¿crees que me puedes golpear?- pregunto Kain, soltó una carcajada siniestra y les dijo mientras los apuntaba con una lanza -vengan a mi si creen que pueden obtener su venganza-
Los tres idiotas se prepararon, ahora estaban confiados de poder dar vuelta las tablas, de equilibrar el marcador de derrotas. Porque así es la juventud, llena de expectativas y optimismo. Sin embargo, solo el trabajo duro nos puede hacer progresar. Tomando la iniciativa, Aquiles se lanzo hacia adelante cubierto por su escudo de Parma. Lanzo dos cortes pronunciados con su espada corta, los cuales fueron evitados. Después fue seguido por Jason con una gran y veloz estocada. Por ultimo, fue seguido por Odiseo y sus letales dagas. Un golpe tras otro, buscaba igualar el campo de batalla, pero nunca lograban golpear a Kain. Este ultimo esquivaba en todas las direcciones sin nunca utilizar las lanzas, se movía y trataba de estudiar su propia técnica. Fluir con el movimiento y golpear en el momento propicio. Una vez que volvió la arremetida de los tres idiotas, Kain empezó el contraataque. Aquiles se lanzo una vez mas con su escudo en alto. Trato de dar un corte con su espada corta, pero Kain lo esquivo y le perforo la rodilla. Aquiles bajo su escudo por un segundo y Kain aprovecho de apuñalarlo en el pulmón izquierdo. Después lo siguió Jason, que furioso por lo que le hizo a Aquiles, lanzo una poderosa estocado con sus dos manos. Kain no tuvo necesidad de esquivar. Solo lanzo una poderosa estocada, extendiendo al máximo su lanza derecha y lo venció por la longitud del arma, propinándole así una poderosa puñalada en el pulmón izquierdo, solo un poco mas arriba del corazón.
Jason sentía que el tiempo se había detenido, escuchaba la voz de Kain que le decía algo, pero era como si estuviera muy lejos. Por otro lado, podía escuchar su jadeo y respiración. Incluso el latido de su corazón. De repente miró hacia abajo y vio que una lanza le perforaba el pecho. Soltó un par de lagrimas, pensó que iba a morir y se desmayo.
-¡Maldito!- grito Odiseo con una voz llena de desesperación. Se lanzo contra Kain, lanzando un corte tras otro. Buscando su garganta y puntos débiles. No sentía el cansancio, no sentía en donde estaba, solo sabia que sus ojos estaban cubiertos de lagrimas y como respuesta de eso, lanzaba golpes cargados de ira. Kain por su lado, miraba como Odiseo perdía su raciocinio. Era como perro rabioso que trataba de morder todo lo que estuviera a su alcance. La furia habitaba en sus ojos. Este muchacho siempre era así, escondiendo su emociones. Tratando de permanecer astuto y frio, pero esos sentimientos, los sentimientos por sus hermanos estaban ahí y ahora le habían quitado todo su raciocinio. Kain negó con desaprobación y en un súbito movimiento. Se deslizo evitando un par de cortes, y posicionándose detrás de Odiseo, lo apuñalo en los pulmones con ambas lanzas. Después las saco y el cuerpo cayó inerte al piso. Todos estaban inconscientes y sangrando. Kain lanzo un milagro y los curo. No obstante, la sangre no se fue a ningún lado. Cubría parte de las murallas y el piso. Los espero por media hora, pero ellos no se despertaban. De repente, Kain sintió una presencia familia y dijo -puedes salir-
Un poco mas allá estaba Irene, en el camino que daba a las escaleras. Este lugar, durante dos semanas se había vuelto un lugar exclusivo de los cuatro. Gracias al entrenamiento de Kain, ni los guardias querían estar en este lado de la muralla. Durante todo este tiempo, solo hubo una persona que se atrevió a espiarlos. Ella salió de las escaleras. Irene miraba a Kain con indecible furia. Sus labios estaban rotos, lo mas probable que de tanto mordérselos y sus manos estaban apretadas.
Kain le dio una mirada de soslayo y le dijo -si quieres decir algo, dilo. No tengo tiempo para los reproches de un niña-
Irene respondió con una voz baja -esto es un acto barbárico. A menos que una amazonas odie a otra, nunca, ni siquiera nosotras, dejamos así a nuestros compañeros-
-Puede ser, pero luchar es barbárico. Este mundo es barbárico. El calabozo es barbárico. El campo de batalla es barbárico. No puedes esperar a que alguien te tenga compasión. No puedes esperar a que tu enemigo te tenga paciencia. Nadie te esperara hasta que logres superar una débil mentalidad. Se entrena para no morir en el campo de batalla-
Irene vio a Aquiles medio chueco, apoyado en una muralla. Derramo algunas lagrimas y le dijo -aun así, no estoy de acuerdo-
-Esta bien- dijo Kain -aun así, es la decisión de estos tres idiotas y tu no puedes hacer nada. Si ellos no quieren entrenar mas, bien, que me digan y lo dejamos hasta aquí. Pero si quieren entrenar y volverse los mas poderosos, los capacitare para que sobrevivan al peor escenario posible-
-Así es, maldito anciano- dijo Jason con una voz lastimosa. Se apoyaba en una de las murallas. Tenía un rostro pálido y le costaba respirar. Aun así, él continuo -yo seguiré con esto. Pero no se me olvidara, algún día me volveré lo suficientemente fuerte y te devolveré cada golpiza que me diste, jejejeje-
-Yo también- dijo Aquiles desde el rincón que daba a la muralla. Tenía los ojos cerrados, pero trataba de gesticular una sonrisa
-Te devolveré este dolor cien veces- prometió Odiseo boca abajo desde el suelo, ni siquiera se podía mover.
Kain mostro una sonrisa carnívora y les dijo -espero que llegue ese momento. No me hagan espera, jajajajajaja-. Después de eso, Kain miró a Irene y le dijo -llévatelos. A la tarde llevare medicina para que restituyan su sangre-
Irene solo asintió y fue a llamar a las otras novias de los idiotas. Cada una tomaba a su novio y miraban a Kain con odio. Este último solo sonreía y cuando todos se fueron, se paso las manos por la mejilla. Sangre. Kain sonrió y murmuro mientras miraba al grupo irse -bien hecho Odiseo-
-o-
Kain volvió a su casa como a eso de las once de la mañana, cruzo el portón y se encontró con tres jardineros o mejor dicho, tres pequeños duendes del jardín. Todos con ropa de "trabajo", listos y preparados para ensuciarse. Los tres grandes le estaban ayudando a Reida a regar las plantas. Ya para estas alturas del año, el pasto había crecido y las plantas florecieron. Los niños se estaban divirtiendo mientras Reida regaba las plantas con una cubeta y un gran cucharon de madera. Mojaba cada una de las plantas y de vez en cuando, les lanzaba agua a los niños. Los tres grandes reían con sus pequeñas voces chillonas. Reida se calmaba, seguía con sus plantas y al rato después, los tres grandes volvían pidiendo más. Así que Reida dejaba lo que estaba haciendo y les lanzaba más gotas de agua.
Kain se paro a unos cinco metros mas allá y les pregunto -¿parece que se están divirtiendo?-
Los niños vieron a Kain y con sus grandes sonrisas, corrieron hasta él y chocaron contra las piernas -///papá///- gritaron los tres. Kain los tomo en sus brazos y les beso la frente, al igual que lo hizo su madre cuando él era pequeño.
-¿Cómo te fue querido?- pregunto Reida, dejo el cucharon en la cubeta y se acercó para darle un pequeño beso en los labios.
Kain por su parte, se agacho, correspondió el beso y agrego -bien, tuve que ponerme un poco serio, pero nada grave-
-¿Quedaron bien?-
-Mas o menos. Voy ir a ver a Miach. Ojala tenga algo para ayudarlos, de lo contrario, no hay más entrenamiento por esta semana-
-¿Quieres que te acompañe?-
Kain miro ese inflado vientre y le pregunto -¿esta bien?-
Reida también se miró el vientre, se acarició con su mano izquierda y le dijo -me hace bien hacer algo de ejercicio-
-Bien-
Después de eso, Kain entro a la casa y saludo al resto de su familia. Reida por su parte, volvió a lo que estaba haciendo. Los tres grandes, por otro lado, se fueron a trabajar en la tierra. Habían excavado en un rincón del patio. Era un agujero de unos diez centímetros hecho con palitas de madera. Cualquiera que los viera diría que estaban haciendo algo importante. Cada vez que excavaban ponían rostros serios.
Una vez dentro de la casa, Kain se lavó las manos y tomo a su princesa, Sakura. Su pequeño retoño que cada día estaba más hermosa. Sobre todo esas pequeñas orejas puntiagudas y su sedoso cabello azabache. Kain se ganó en uno de los sillones de la sala de estar. A su lado estaba Maaya y al rato después llego Catalina y Lilia.
-¿Cómo les fue?- pregunto Lilia mientras se sentaba al otro lado de Kain, en el mismo sillón
Catalina por su parte se sentó al frente y le pregunto -¿no fuiste muy brusco?-
Mientras Kain jugaba con Sakura y le daba pequeños besos en la frente y en las mejillas, les respondió sin mirar -hablan como si fuera un ogro. Algún maestro sádico que se alegra en el sufrimiento-
-¿No lo eres?- pregunto Catalina con una sonrisa burlesca
-Solo soy estricto-
Maaya con su suave voz, añadió -la abuela también es estricta y gracias a eso, llegue a donde estoy-
-Ves, una emperadora de la espada te lo dice- dijo Kain -además, Haruki ya es un rey del norte ¿no?-Así es, esposo-
Catalina levanto el ceño y le dijo -Maaya, deberías de dejar de seguirle la corriente a este hombre. Uno de estos días te va a pedir algo escandaloso-
-¿Algo como que?- le pregunto Kain mirándola a los ojos
Lilia lo pellizco y le advirtió -no hables de esas cosas aquí. Esta la niña-
-Ok, ok. Sin violencia mujer-
Lilia bufo y le dijo en un tono serio -acuérdate de que mañana tenemos la subasta-
-Ok- respondió Kain -acuérdate que mañana es nuestro aniversario y después de la subasta, nos vamos a otro lado. Así que no te comprometas ¿entendido?-
-Ojala te acuerdes tu-
-¡Hey! Yo me acorde y prepare todo-
-Fú, eso lo dudo. A lo mejor alguien te ayudo-
-Sí, sí, mujer, alguien me ayudo ¿Feliz?-
-Idiota- dijo Lilia, se levanto y se fue
En cierto sentido, Lilia tenía razón. Catalina era el salvavidas de Kain. Que en medio de la noche, después de tener unas cuantas rondas de amor, ella le recordó algunas cosas. Esta era la principal. Digamos que Kain no tiene muy buena memoria. Así que por lo usual, Catalina lo anda salvando en este tipo de asuntos. Después de todo, entre ellas hablan y se quejan de Kain y de su mala memoria. Así que Catalina funciona como un doble agente y le da esta pequeña asistencia.
Catalina en un tono serio le dijo -deberías ir a verla. No seas tan duro con Lilia-
-Supongo que tienes razón- respondió Kain. Le entrego la bebé a Maaya y fue a la cola de Lilia.
Como otras veces, cuando se enoja, Lilia estaba en la cocina. Su largo pelo rojo como el color del vino le llegaba hasta la cintura. Lo tenía amarrado en un larga cola. Su rostro estaba serio mientras preparaba algunas cosas. Desde hace un tiempo o por lo menos, desde su aventura con los drakes, a tomado la costumbre de vestirse con ropa de aventurero. Hoy no es la excepción. El pantalón delinea su bonito trasero. Después de tener un hijo, se volvió más prominente. Por otro lado, como ha mantenido el entrenamiento con la espada, su estómago esta plano y su cintura firme. Sus senos grandes y llenos estiran la blusa, forzando la resistencia de los botones. Por último, su delicado cuello sigue siendo terso como cuando Kain la conoció.
Kain camino sin hacer ruido y la abrazo por atrás, le dio algunos besos en el cuello y le pregunto -¿Por qué te enojas?-
Lilia dejo de hacer lo que estaba haciendo y le pregunto -¿porque no le das ninguna importancia a nuestro tiempo juntos?-
-Eso no es cierto, y lo sabes-
-Siento que lo estas tomando como una tarea molesta-
-¿Por qué dices eso, mujer?- Kain la dio vuelta, pero Lilia aun así no lo miro a la cara. Kain le levantó el rostro y le dio pequeños besos. Lilia a su vez estiro sus brazos y se colgó del cuello. Kain la abrazo por la cintura y así estuvieron durante unos minutos. Un beso tras otro llevo a uno mas apasionado y si fuera mas tarde, Kain se la hubiera llevado a la habitación. Pero eso en estos momentos, no era posible. Así que solo disfruto de los lindos labios de Lilia.
Lilia se separo y le dijo -no podemos hacer mas, están los niños-
Kain le dio un último beso y le respondió -lo sé. Por otro lado, no te pongas celosa ¿entendido? O te tendré que castigar-
Lilia bufo con indignación y le dijo -apenas me das tiempo-
-Oh, necesitas que te castigue ahora-
-No, saca tus manos de mis pechos- dijo Lilia en un apuro. Estaban sus amigas en la habitación de al lado, los podían escuchar. Pero Kain no se detuvo, con una mano en el seno derecho de Lilia y otra en la nalga izquierda, la empezó a acariciar. Para que no hiciera ruido, le tapo la boca con la suya. Lilia por otra parte, estaba espantada ¡alguien podía venir!. Cosa que sucedió. Llego Victoria con algunos platos y vasos a la cocina. Ella sonrió, camino hasta Kain y lo abrazo por detrás. Kain sintió las pequeña manos de Victoria y se detuvo.
-¿Te quieres unir a la fiesta?- le pregunto Kain
Victoria con una voz seductora le susurro mientras le agarraba el pene -mientras me des algo de esto, puedo esperar mi turno-
-Suficiente- dijo Lilia con un tono estricto -tranquilícense los dos. Es pleno día y los niños están afuera. Parece que recién llegaron a su mayoría de edad-
-Está bien- dijo Kain, mientras se alejaba de Lilia y Victoria hacia lo mismo. Después Kain continuo -después del almuerzo voy a ir a ver a Miach, pienso llevar a los niños y a Reida ¿quieren venir?-
-Yo no, es mejor que aproveches y pases tiempo con Reida. Le das mucho menos tiempo que a mí- se quejó Lilia
-Ahí vamos de nuevo- respondió Kain tornando los ojos al cielo. Esta vez Lilia solo sonrió al verlo fastidiado, le dio la espalda y siguió en lo que estaba haciendo. Kain por otro lado, le pregunto a Victoria -¿y tu?¿quieres venir?-
Victoria respondió -no lo creo querido. Pero si me llevas a la zona comercial y compramos algunos de esos maravillosos aparatos, estaré feliz-
-No hayas como obtener ese conocimientos ¿verdad?-
Victoria mostro la sonrisa de una comerciante -por supuesto- dijo -si logro replicar esa tecnología, seré la mujer mas rica del mundo-
-Déjamelo a mi-
-Esta bien. Voy a tener altas expectativas, querido- y después de decir eso, le guiño un ojo y se fue contoneando sus caderas.
Kain quedo mirando ese lindo trasero, hasta que de repente le pegaron con un sartén
-Oh, lo siento, solo quería colgar esto- dijo Lilia en su tono estricto. Los celos eran visibles en sus ojos.
Kain por su parte la tomo, se la echo al hombro y se la llevo a la habitación.