Capítulo 91: Todo lo que haces regresa

Globo de Fuego tras Globo de Fuego descendió sobre los cadáveres. El olor a sangre todavía llenaba el aire, pero pronto fue dominado por el hedor de la carne quemada. El desagradable olor emanaba en todas las direcciones. Meng Hao recogió las bolsas de tenencia. Olfateó el aire, luego con una última mirada silenciosa al Mar del Norte, giró y se fue.

—No puedo quedarme en el estado de Zhao más. Tengo que irme.

Meng Hao sabía que si la Secta de la Corriente Sinuosa había aparecido, entonces el resto de las tres grandes Sectas también debían estar al tanto de la muerte de sus sacerdotes y Ancianos. Pronto, las montañas estarían repletas de Cultivadores de Condensación de Qi buscando determinar cómo murieron.

Meng Hao frunció el ceño. Mirando hacia la distancia, una imagen apareció en su mente, un mapa del Dominio del Sur. En el otro lado de estas montañas había una vasta llanura que era el límite del estado de Zhao.

—No está lejos, pero las cosas se pondrán violentas aquí muy pronto. No puedo quedarme más tiempo.

Meng Hao cambió su dirección. Estas montañas pertenecían a la región de la Secta Confianza. Él dejaría el estado de Zhao por una ruta diferente. Con su decisión tomada, Meng Hao corrió hacia adelante. Desafortunadamente, antes de que pudiera llegar lejos, entrecerró los ojos y se dejó caer al suelo. Frunciendo el ceño, miró hacia la distancia con ojos fríos. A unas pocas docenas de kilómetros por delante de él, un enorme escudo resplandeciente descendía del cielo. Se transformó en innumerables copos de nieve que cortaban los límites exteriores de la Secta Confianza del resto del mundo.

Flotando en el cielo, a lo lejos, había un hombre de mediana edad que vestía una larga túnica negra. Su base de Cultivo estaba en la etapa de Establecimiento de Fundación. En su mano sostenía un pedazo de jade congelado. Rayos de luz giraron alrededor de él lentamente. Este objeto mágico era la fuente del escudo de nieve volador que rodeaba todo y lo sellaba.

Alrededor del hombre había siete u ocho Cultivadores de Condensación de Qi, con expresiones dignas en sus caras. De su ropa, Meng Hao podía decir que eran de la Secta del Viento Frío.

—No me extraña que se llamen las tres grandes Sectas. Incluso con tantos Ancianos del Establecimiento de Fundación muertos, aparecen aún más.

El corazón de Meng Hao se hundió al darse cuenta de que este sello había cortado completamente su camino de escape. No tenía forma de irse ahora. Antes de que tuviera tiempo de examinar la situación aún más, de repente se lanzó hacia atrás. El escudo de nieve volador había comenzado a contraerse rápidamente.

Congeló por completo la tierra y los árboles por los que pasaba. Se movió rápidamente, dirigiéndose directamente hacia la posición de Meng Hao. Por supuesto, no estaba apuntando a Meng Hao; esto era solo una función normal del hechizo de sellado. La contracción no duraría por mucho tiempo; se movería hacia dentro unos pocos cientos de kilómetros, luego lentamente se detendría.

Meng Hao no estaba muy lejos de ese punto. Cuando se retiró, no tuvo tiempo de ocultar sus movimientos. Saltó sobre una espada voladora, transformándose en un rayo de luz, que por supuesto atrajo la atención de los Cultivadores de la Secta del Viento Frío.

—Esa persona…

—¡Es Meng Hao! ¡Vi su imagen!

—Entonces, es Meng Hao. Los Sacerdotes y los demás lo están buscando. ¡Agárrenlo! ¡Entonces finalmente podremos entender lo que sucedió aquí!

Los ojos de los Cultivadores de la Secta del Viento Frío brillaron con malas intenciones.

—Todos ustedes, vayan a capturarlo —dijo el Cultivador de Establecimiento de la Fundación—. Estoy consolidando el hechizo de sellado y todavía necesito unos momentos.

Tras haber activado la contracción del sello, no podía abandonar su posición. Sin embargo, en lo que a él respectaba, Meng Hao era incapaz de escapar. Tan pronto como las palabras salieron de la boca del hombre, los siete u ocho discípulos del Viento Frío se dispararon detrás de Meng Hao en su persecución.

Los ojos de Meng Hao brillaron. Él se lanzó hacia adelante, el sello se contraía detrás de él, los Cultivadores justo detrás de él, persiguiéndolo velozmente.

Mientras corría hacia adelante, el escudo del Viento Frío se acercaba cada vez más, hasta que estuvo a solo unos treinta metros de distancia. Finalmente, disminuyó la velocidad y dejó de contraerse. Se convirtió en un grueso escudo de hielo que cubría todas las regiones montañosas de la Secta Confianza.

El sello en realidad no estaba completamente solidificado. Si solo estuviera en el noveno nivel de Condensación de Qi, no habría sido capaz de saberlo. Pero él era del gran círculo de Condensación de Qi. Al mirar el sello, pudo decir que no duraría mucho.

—No puedo salir, y no puedo matar en mi salida. Necesito superar las montañas lo más rápido posible. Al mirar este sello, puedo decir que comenzará a relajarse pronto. Una vez que lo haga, podré escapar.

Meng Hao apretó los dientes. Sabía que este plan era un poco improbable, pero no tenía muchas otras opciones. Encontrar una forma de ocultarse por un tiempo serviría, pero primero tenía que tomar la iniciativa para salir de su situación actual.

Con los ojos brillantes, dejó de huir. En cambio, se quedó allí, mirando con frialdad cómo se acercaban ocho Cultivadores de la Secta del Viento Frío.

—Ocho personas en total. Dos del noveno nivel de Condensación de Qi, cuatro del octavo y dos del séptimo. Todos ellos tienen artículos mágicos de vuelo. Parece que las tres Sectas están bastante ansiosas. No se privaron de nada para llegar aquí lo más rápido posible.

Meng Hao miró hacia el Cultivador de Establecimiento de la Fundación. Estaba manteniendo el hechizo y no podía moverse en ese momento. Sin embargo, como Cultivador de Establecimiento de Fundación, era extremadamente poderoso. Flotó allí, mirando fríamente a Meng Hao.

Cuando sus miradas se encontraron, los otros ocho Cultivadores se dispararon a través del escudo de nieve volador. Esta era una de las propiedades extrañas de este escudo en particular; se podía entrar, pero no salir.

Las ocho personas descendieron sobre Meng Hao, sus caras retorcidas con sonrisas viciosas. Él entró en acción. Apretó su mano derecha en un puño, dio un paso adelante y la estrelló contra el suelo. El poder del gran círculo de Condensación de Qi explotó cuando un vendaval se estrelló contra los ocho Cultivadores. Se detuvieron en seco, conmocionado.

Al mismo tiempo, dos espadas de madera aparecieron en las manos de Meng Hao. Silbaron en el aire, y las cabezas de los dos discípulos del séptimo nivel de Condensación Qi volaron en el aire.

—Una respiración —dijo Meng Hao para sí mismo.

El Cultivador de Establecimiento de Fundación dijo que solo necesitaba unos momentos. Meng Hao no estaba seguro de si eso era cierto o no. De cualquier forma, su propio requerimiento era que eliminara a estas ocho personas en el espacio de diez respiraciones.

En medio de los silbidos de las espadas de madera, los seis discípulos restantes se apresuraron a sacar objetos mágicos. Antes de que eso pudiera suceder, Meng Hao giró, corriendo hacia uno de los Cultivadores de octavo nivel. Él no usó un objeto mágico, sino su hombro.

¡Boom! Meng Hao se estrelló contra él y le salió sangre por la boca. Su cuerpo se derrumbó, y mientras volaba hacia atrás, Meng Hao sacudió su mano derecha. Apareció una Pitón de Llama masiva, de sesenta metros de largo. Rugiendo se disparó hacia otro Cultivador de octavo nivel. Un grito espeluznante sonó cuando la Pitón de Llama lo consumió entero.

—Cuatro respiraciones.

En cuatro respiraciones, Meng Hao había matado a cuatro personas. Los cuatro restantes miraron en estado de shock. Meng Hao había atacado con una brutalidad que nunca antes habían visto. Ahora que había revelado el poder de su base de Cultivo, los otros cuatro Cultivadores temblaron, incapaces de comprender lo que estaba sucediendo.

A lo lejos, el Cultivador de Establecimiento de la Fundación miraba impactado. Momentos atrás, había visto que Meng Hao estaba en el noveno nivel de Condensación de Qi; pero en el espacio de algunas respiraciones, su base de Cultivo había trepado de repente a una altura increíble.

—Seis respiraciones.

La mano de Meng Hao parpadeó en un conjuro, y las auras de espadas de las dos espadas de madera se filtraron. Los dos Cultivadores restantes del nivel ocho de Condensación de Qi trataron de defenderse con objetos mágicos mientras las espadas avanzaban. Gritos horrorizados resonaron cuando sus corazones fueron apuñalados. Sus cuerpos cayeron al suelo.

Ahora solo quedaban dos Cultivadores, ambos del noveno nivel de Condensación de Qi. Con caras pálidas, ya habían empezado a inclinarse hacia atrás. Cuando la fría mirada de Meng Hao cayó sobre ellos, se dispersaron, cada uno corriendo en una dirección diferente.

Con una mirada fría en su rostro, Meng Hao levantó su mano derecha, que parpadeó con un conjuro. Apareció un enorme Hoja de Viento, de quince o veinte metros de largo. Avanzó con un agudo silbido. Al mismo tiempo, Meng Hao golpeó su bolsa de tenencia. El arco negro apareció en su mano. Echó hacia atrás la cuerda, y luego disparó una flecha hacia la otra persona.

—Ocho respiraciones —dijo Meng Hao suavemente.

Dos explosiones sonaron. La Hoja del Viento atravesó al primer cultivador del noveno nivel, partiendo su cuerpo en dos y enviando sangre y salpicaduras por todas partes. Simultáneamente, una flecha negra atravesó la cabeza del otro Cultivador, haciendo que explotara violentamente.

¡Ocho respiraciones, ocho muertes!

Meng Hao, inexpresivo, miró a través del escudo de nieve volador al Cultivador de Establecimiento de Fundación por un momento. Luego su cuerpo se transformó en un rayo brillante y se lanzó a la distancia.

Se movió, evitando bastantes Cultivadores. Pero el área cubierta por el hechizo de sellado no era grande. Con tantos Cultivadores de los niveles octavo y noveno de Condensación de Qi, no les tomaría mucho tiempo buscar en todas partes. En cuanto a los Cultivadores de Establecimiento de Fundación, podían volar y podrían buscar aún más rápido.

Meng Hao continuó eludiendo la detección, hasta que finalmente se acercó a la Secta Confianza. Fue entonces cuando aparecieron diez rayos de luz en el cielo, que se elevaron a gran velocidad. A la cabeza de este grupo de personas había un anciano de rostro sombrío. A diferencia de los otros que lo rodeaban, él no estaba elevado, sino que realmente volaba.

Los cultivadores de la etapa de Condensación de Qi no podían hacer esto. ¡Este hombre era claramente un Cultivador de Establecimiento de Fundación!

—La Secta del Anochecer Recto.

 Al verlos, Meng Hao suspiró. Finalmente llegó a aceptar que no podría escapar de este día. Podría tratar de esconderse, pero finalmente lo encontrarían.

—¡Meng Hao!

Al verlo, las caras de los cultivadores de la Secta del Anochecer Recto se torcieron. El anciano de la etapa de Establecimiento de la Fundación corrió hacia Meng Hao, con los ojos brillantes.

Los ojos de Meng Hao se oscurecieron cuando vio acercarse el Cultivador de Establecimiento de la Fundación. El poder masivo de la etapa de Establecimiento de la Fundación surgió del hombre. La inmensidad de este poder hizo que los Cultivadores de Condensación de Qi circundantes retrocedieran, sus bases de Cultivo tambaleándose.

Este era el poder del Establecimiento de Fundación. Voló por el aire con aparentemente ningún esfuerzo, imponiéndose hasta el extremo. Sin siquiera intentarlo, hizo temblar a los Cultivadores de Condensación de Qi.

Pero Meng Hao no era un Cultivador de Condensación de Qi ordinario. Un Cultivador del decimotercer nivel del gran círculo de Condensación de Qi no se había visto desde la antigüedad. Él tenía un Sentido Espiritual. Aunque no era muy fuerte, estaba allí. Su base de Cultivo no fue arrojada al caos como los demás.

Su cuerpo físico era más poderoso, sus pasajes de Qi más duros, incluso sus huesos eran más fuertes. A pesar de enfrentarse a un poderoso experto en Establecimiento de Fundación, se negó a retirarse incluso a medio ritmo.

—Entonces, la persona que creó todas estas ondas en el estado de Zhao es un Cultivador a medio camino de la etapa de establecimiento de Fundación —dijo fríamente el oponente de Meng Hao—. Hoy, sin embargo, si digo que morirás, entonces morirás.

En ese momento, otro rayo de luz radiante apareció detrás de Meng Hao y voló hacia ellos. Este no era otro que el experto de Establecimiento de Fundación de la Secta del Viento Frío. Irradiaba un aura asesina.

—He avanzado en el camino de la Cultivación pero no ignoro las reglas de la vida y la muerte —dijo Meng Hao fríamente—. Puedo matar a otros, así que naturalmente, otros pueden matarme. Pero déjame hacerte una pregunta. Las tres Sectas permitieron a Shangguan Xiu absorber la fuerza vital de los mortales de tres condados. Incluso dañó su longevidad. Los mortales no practican la Cultivación. Hacer daño a un Cultivador es una cosa, pero ustedes, por ganancia personal egoísta, permitieron un acto horrible. Esto es una violación de la ley que cambia todo.

Había querido decir estas palabras durante mucho tiempo.

—¿La ley? En el cielo y la tierra, las personas poderosas hacen las leyes. Y si se cambia, entonces será por algo, ¿no crees?

Meng Hao no dijo nada. Simplemente miró hacia el cielo.