Capitulo 21: Jibaku

En la cima de una montaña nevada, un niño se encontraba flotando sobre el suelo con los ojos cerrados en un estado profundo de meditación.

Vestía un gi anaranjado y tenía unas vendas alrededor de la frente. No era otro que Gohan, que estaba meditando como habitualmente.

Sus últimos tres meses fueron sumamente productivos, no sólo porque su poder aumentó sino porque aprendió varias cosas cruciales.

Todo gracias al segundo deseo que le pidió a Shenron. Quizás pudo haber pedido algo mejor, pero no se arrepentía... fue una gran decisión.

Su cola saiyan estaba en torno a su cintura, lo cual era inusual ya que siempre acostumbraba a llevarla suelta... ¿a qué se debía dicho cambio?

No era el único cambio, se veía más alto y con más músculos, lo cual era bastante normal tras año y medio de extenuantes entrenamientos...

Pero de repente, sus párpados temblaron y su cola se erizó. Sintió un Ki alzándose rápidamente y junto a él habían otras energías poderosas.

"Ese Ki es de Yamcha, parece que ya comenzó todo" pensó Gohan abriendo sus ojos y se puso en pie después de muchas horas ahí sentado.

Había llegado el momento de probar su poder, los frutos de su entrenamiento durante un año, esta sí que sería su primera batalla de verdad.

Según la serie original, Goku debería llegar en cuatro horas. Pero con su deseo, el menor estimaba que él vendría dentro de una hora.

"Tiempo suficiente para detener a los saiyajin, espero que Yamcha no se confíe a pesar de su poder" indagó Gohan emprendiendo el vuelo.

Le había dicho mil veces que nunca bajara la guardia. Sólo esperaba que Yamcha le hiciera caso o terminaría tan mal como en el manga.

"Pero antes tengo que ir a buscar a Bulma y recuperar la semilla que le dejé" pensó el niño, "Con esa me quedarían dos. Uh, es suficiente"

Había usado una semillas Senzu en estos tres meses, así que le quedaban dos, y si contaba las que traería su papá serían más que suficientes.

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Yamcha liberó todo su energía en una enorme explosión de aura y se echó sobre los Saibaman sin temor, estaba decidido a acabar con todos.

Les demostraría su verdadero poder, ese del que tanto estaba orgulloso. Seguro que cuando volviera a casa, Bulma estaría muy contenta.

¡PAM!

Yamcha golpeó el abdomen de un Saibaman y pateó el costado de otro enviándole al cielo. No perdió tiempo y lanzó una potente ráfaga de Ki.

"¡Gaah!" el Saibaman intentó detener el ataque pero era demasiado poderoso, por lo que acabó siendo vencido por el gran ataque de Yamcha.

"Uno menos" declaró Yamcha confiado y tanto los dos saiyan como los Saibaman se quedaron atónitos por lo que había pasado, "¿No siguen?"

"¡Bien hecho Yamcha!" gritaron Krilin, Chaoz y Tenshinhan muy contentos por la victoria de su amigo. Piccolo se cruzó de brazos con apatía.

"Venció al Saibaman" musitó Nappa un tanto sorprendido por esa hazaña, pero Vegeta más que aturdido estaba enormemente enfadado.

"¡¡Ustedes!!" Vegeta atrajo la atención de los Saibaman, "Si pierden nuevamente contra ese insecto, ¡los mataré a todos personalmente!"

Los Saibaman asintieron con bastante miedo y se giraron hacia Yamcha sin ápice de vacilación. Si no terminaban con él... ¡serían exterminados!

Por lo tanto, los cinco Saibaman restantes se lanzaron sobre Yamcha a una gran velocidad. El bandido apenas pudo esquivar a dos cuando...

¡Rash!

Un Saibaman arañó su abdomen desgarrando así un trozo de tela del dogi y Yamcha gimió de dolor, por poco y ese ataque le dejaba afligido.

"Son más agresivos que antes" indagó Yamcha apretando los dientes impotente por los ataques cada vez más despiadados de esos Saibaman.

Dio un salto hacia atrás cuando un Saibaman lanzó una especie de ácido desde su cabeza. Si le hubiera tocado ahora sería polvo en el suelo.

"¡Yamcha!" clamó Krilin con la intención de ir a ayudar a su amigo pero una ráfaga de Ki cortesía de Vegeta le impidió que hiciera eso, "¡Maldito!"

"No te impacientes, la diversión apenas comienza" declaró Vegeta sonriendo por el espectáculo, "Esa basura está acabada"

Yamcha tenía más dificultades para esquivar los ataques de los cinco Saibaman. Después de todo, sus poderes sumaban 6000 unidades...

Yamcha saltó hacia atrás y viendo acercarse a los Saibaman flexionó su brazo creando una bola de Ki reunida en la palma de su mano izquierda.

"¡Sōkidan!" Yamcha disparó su ataque pero no impactó en los Saibaman. La bola de Ki ascendió guiada por dos dedos del bandido del desierto.

Y entonces, bajó los dedos. La esfera hizo lo mismo y aterrizó donde estaban los cinco Saibaman juntos cayendo de lleno en ellos.

Una capa de humo cubrió aquel sitio y Yamcha sonrió más relajado que antes, pero todavía con ese toque de presunción bajo sus ojos oscuros.

"¡Lo logró!" Krilin saltó emocionado por esa victoria y Yamcha se dio la vuelta enseñándole el pulgar, "¡Sí, sabía que lo conseguirías amigo!"

"Ese terrícola pudo acabar con los cinco sin problemas, ¡esto es absurdo!" exclamó Nappa rompiendo la pequeña piedra en sus manos.

"Ya vieron lo que puedo hacer" señaló Yamcha dando unos pasos al frente, "Ahora ha llegado el momento de pelear contra ustedes, saiyajines"

"Nada mal insecto, pero deberías cuidar tus espaldas" aconsejó Vegeta con una pequeña sonrisa y Yamcha se desconcertó por esto.

"¡¡Cuidado Yamcha!!" advirtió Krilin pero fue demasiado tarde. Dos Saibaman atraparon los brazos del bandido y otros dos sus piernas.

"¡¿Q-qué demonios es esto?!" exclamó Yamcha intentando liberarse pero le era imposible. Pronto el cuerpo de los Saibaman comenzó a destellar.

"¡Yamcha!" gritó Tenshinhan alarmado.

Yamcha siguió forcejeando pero le resultaba imposible liberarse del agarre de los Saibaman, estaba totalmente inmovilizado por los cuatro.

Los Saibaman brillaron hasta que de pronto liberaron todo su Ki en una explosión suicida, también conocida como Jibaku, o suicidio...

¡BOOM!

El lugar se iluminó y nuevamente el humo envolvió la zona ante la mirada atónita de los guerreros Z. Hasta Piccolo estaba atónito.

Y cuando el humo desapareció, el cadáver de Yamcha se hizo presente en medio de un cráter. Él... había muerto, y con él aquellos Saibaman.

La explosión de los cuatro Saibaman había liberado un poder cercano a 5000 unidades. Fue imposible para Yamcha sobrevivir ante esto...

"¡YAMCHA!" vociferó Krilin corriendo hacia su amigo y comprobando que efectivamente, había muerto. No pudo evitar soltar varias lágrimas.

"No puede ser... incluso con su gran poder" murmuró Tenshinhan bajando la mirada con pesar y Chaoz estaba en el mismo estado.

"Tsk... esos inútiles de los Saibaman murieron llevándose a esa basura consigo, ¡hpmf!" Vegeta resopló sin darle demasiada importancia a eso.

"¡Muy bien! Parece que ya ha llegado mi turno" Nappa empezó a estirarse con una gran sonrisa en sus facciones, "¿Quién va a ser el primero?"

Krilin seguía lamentándose por la muerte de su amigo, pero en cuanto oyó las palabras de Nappa sintió una enorme furia en su interior.

"Malditos saiyajin... ¡me las pagarán!" exclamó Krilin con una intensa sed de venganza corriendo por su torrente sanguíneo. ¡Vengaría a Yamcha!

Justo cuando se iba a lanzar contra los dos saiyajin, un poderoso Ki hizo acto de presencia dejando bastante intrigados a los presentes.

"¡Ese estúpido! Pese a que le dije millones de veces que nunca se confiara, ¡no me hizo caso! Menuda decepción ha resultado ser Yamcha"

Todos se desconcertaron al oír una voz en el cielo y al alzar la vista vieron que se trataba de un niño pequeño, ¡ese no era otro que Gohan!