Encuentro.

La ciudad parece estar tranquila después del combate desarrollado hace minutos. La preparatoria donde se estaba desarrollando la evacuacion esta repleta de infectados ansiosos por infectar o devorar a los supervivientes escondidos en el lugar. El sargento sigue hablando con la chica, parecen tener una amistad de años por la manera en la que están hablando, al otro lado de la oficina, el pequeño pelotón sigue informando sobre la situación en la que se encuentran. Una voz se escucha en toda la instalación, una persona hablando desde un megáfono informa que un escuadrón de fuerzas especiales está en la azotea del edificio sur y están evacuando a los supervivientes, los profesores junto a la mayoría de estudiantes con confianza y con algo de esperanza salen de la oficina y se dirigen al edificio sur en busca de los militares, el sargento junto a la chica y su escuadrón desconfían de la voz pues tiene un tono nada confiable. Juan y la pareja siguen en la oficina del director, la pareja obtuvo esperanza tras escuchar la voz tras el megáfono pero Juan desconfía de la ''voz'' pues no suena ''humana'' y se los hace entender a la pareja.

El sargento deja salir a los estudiantes y los profesores dejándolos a su suerte pues el hizo lo posible por decirles que nunca le contaron sobre un escuadrón de fuerzas especiales dentro del recinto.

-Oye Karla, no los sigas, tal vez sea una trampa por parte de los infectados.

-¿Esas cosas pueden hablar?

-Si, pero no les servirá de mucho con nosotros.

El sargento tiene planeado ir a la cafetería para poder conseguir algo de comida por lo que salen de la oficina con cuidado y se dirigen a la cafetería a recoger comida. El pequeño grupo de Juan está dudando sobre salir de la oficina del director y ir a la cafetería pues, necesitan comida.

Metros antes de la puerta que da a la cafetería, cinco infectados y dos cadáveres siendo devorados, tal parece que los que están siendo devorados son militares, los demás son civiles mutantes que el rastro de que alguna vez fueron humanos es mínimo, el sargento prepara su arma y ordena a su pelotón apuntar a los cinco infectados para matarlos al mismo tiempo, el escuadrón dispara sus armas...

Juan y la pareja llega al segundo piso del edificio norte, aún falta pasar el edificio oeste pero el peligro de ser encontrados por los infectados permanecen aún teniendo armas que tomaron de cadáveres, las municiones son suficientes para una pequeña horda pero no suficientes para un pasillo repleto de estos últimos. La cafetería está bajo sus pies, un pequeño agujero en el suelo les deja ver el escuadrón que acompaña Karla, la chica que Juan buscaba cuando la ciudad cayó ante la infección y la destrucción, Juan propone bajar por el agujero pero corren el riesgo de que el escuadrón bajo ellos los confundan y les disparan pero antes tienen que avisar, Brenda, la chica que estaba escondida junto a William en la oficina del director grita preguntando: ''¡¿Hay alguien ahí?!'' a lo cual un soldado le responde: ''¡Si! estamos aquí abajo!'', William es el siguiente en dirigir la palabra proponiendo bajar pero, una de las puertas cae al suelo y tras ella infectados entran tratando de infectar a los supervivientes...

Capítulo 2: Encuentro.