Capítulo 125: Fastidiando.

—Estaba en mi camino —dijo Qin Chu luego de darle un vistazo a Huo Mian.

Por lo tanto, Huo Mian no dijo nada más y entró al auto.

Una noche exhaustiva le había dejado muerta, así que luego de entrar al auto cerró los ojos y descansó por un rato.

Qin Chu no dijo nada; en su lugar, encendió el sistema de audio.

Una dulce melodía invadió el auto, la cual Huo Mian reconoció como una canción de su adolescencia.

"Ya que soñé que te marchabas desperté llorando

Cuando ves el viento por la ventana, ¿puedes sentir mi amor?

Cuando seamos ancianos, ¿aún estarás a mi lado?

Mira como esas mentiras y esos pactos se desvanecen con nuestro pasado.

Mucha gente envidiaba tu aspecto durante la juventud, pero ahora nadie quiere cargar con los crueles cambios de la vejez.