BUENOS AMIGOS

"Erika estaba tan sin palabras que lo único que podía hacer era mirarle con la boca abierta. «¿Hace años? ¿Este chico experimentó amor a primera vista o qué?», pensó ella.

Se aclaró la garganta y dijo suavemente:

—Ethan, agradezco el hecho de que me ames pero lo siento, no puedo corresponder los sentimientos que tienes por mí. Ethan es un hombre muy atractivo y cualquier mujer mataría por tenerlo, pero Erika acaba de salir de un matrimonio roto y estar en una relación ahora le da miedo. Sí, admira el buen aspecto de Ethan, pero eso no basta para convertirse en amor.

Ethan, por otro lado, estaba un poco desconsolado pero no se rendirá así como así. —Ella ya me gusta, puedo verlo —pensó él—. Todo lo que necesito hacer es convertir ese gusto en amor.

—Ethan, ¿estás bien? —preguntó Erika cuando lo vio mirando en blanco a la nada—. Lo siento mucho pero somos buenos amigos, ¿verdad? Espero que esto no obstaculice nuestra buena amistad. Erika pensó que estaba triste porque ella lo rechazaba. Era medio verdad pero también estaba pensando en formas de conquistarla totalmente.

—No, por supuesto que no —dijo él—. Entiendo completamente por lo que estás pasando. Quiero decir, tienes miedo de que pueda cambiar como Adrain pero no lo haré. Él la miró profundamente a los ojos y añadió:

—Erika, te prometo esto, haré todo lo que pueda para conquistarte. Te amo y eso nunca va a cambiar.

Erika solo pudo morderse el labio inferior y murmurar:

—Gracias.

Ethan confirmó que Erika debe tener sentimientos por él pero no está segura de ello porque si fuera otra mujer ahora, se habrían excusado y se habrían ido inmediatamente. Pero ella estaba tranquila e incluso le sonreía.

Ambos continuaron charlando como amigos normales y disiparon la incómoda atmósfera. Comieron alegremente, con Ethan bromeando con ella de vez en cuando. Se volvió empalagoso ahora que ha confesado sus sentimientos por ella y Erika solo podía reírse de él porque esa naturaleza empalagosa no le pegaba en absoluto. Y en poco tiempo, limpiaron toda la comida de la mesa o Erika limpió la mayor parte de la comida de la mesa.

—¿Eres tú quien hizo todos estos platos? —no pudo evitar preguntar porque todos eran deliciosos.

—Por fin lo notaste —hizo pucheros como un niño al que le han quitado un dulce.

Erika estaba sorprendida con esta nueva expresión en su cara y rápidamente le tomó una foto.

—¡Oye! ¿Qué estás haciendo? —intentó arrancarle el teléfono."

—Lo siento, Sr. Anderson, pero no pude evitar tomar esta linda foto tuya. Quiero decir, mírate —le mostró la foto en su teléfono y él tuvo que admitir—, ella tomó un buen ángulo de la foto.

—¡Realmente parezco lindo! —exclamó.

—Eso es lo que estoy diciendo —guardó la foto y su teléfono en su bolso.

Miraron la hora y ya era casi medianoche. «¡Vaya! El tiempo realmente vuela rápido cuando te diviertes.», pensó Ethan. Quería pasar más tiempo con Erika, pero entonces ella bostezó indicando que estaba cansada. La llevó hasta el coche y comenzó a sentirse agradecido de que no hubiera incluido el alcohol en sus bebidas, de lo contrario, esta noche podría haber resultado en un caos. También entró y la llevó de vuelta a su mansión.

¡CLIC!

Alguien les tomó una foto. No era otra que Jazmín. Seguía a Ethan discretamente con diferentes coches cada día para que él no sospechara nada y sus instintos estaban en lo cierto. ¡Ethan ha estado viendo a otra mujer detrás de sus espaldas! Olvidando completamente que él nunca estuvo en una relación con ella para empezar.

Miró la foto que tomó y su enfado estalló. ¿Cómo se atrevió esta mujer a intentar arrebatarle a su Ethan? No esperó ni un segundo y llamó a alguien rápidamente. —¿Hola?... Sí, soy yo. Necesito que hagas algo por mí. Voy a enviarte la foto. ¿Qué?... no, solo la mujer. Hazlo cuidadosamente y te recompensaré perfectamente. Sí, enviaré el pago anticipado ahora. Escucha, quiero despertarme mañana con buenas noticias, ¿me oyes? ¡Perfecto!

Jazmín sonrió triunfante. —Oh mujer, quienquiera que seas, nunca te gustará haber estado involucrada con mi hombre —dice y se ríe maniáticamente.

Ethan dejó a Erika en la entrada de la mansión. —Gracias por la maravillosa noche, Erika —dice dándole una sonrisa de niño.

—No, gracias a ti por la maravillosa noche, Ethan —ella responde.

—Jaja... bueno, buenas noches, duerme bien y no olvides soñar conmigo —dijo, pero su rostro serio le delató indicando que no era muy bueno en ese campo.

—Veré si es posible, buenas noches —y entró en la mansión. No quería pensar demasiado en la confesión, así que se fue directamente a la cama después de cambiarse. «Bueno, mañana será otro día», dice. Sin saber que alguien ya había planeado un ataque contra ella."