Las historias de los presos segunda parte

Escuché varias historias, algunas eran divertidas, emocionantes, tristes, graciosas, etc. Algunos se habían enamorado de personas que no eran de su reino o porque no quisieron casarse con personas poderosas, terminaron así. Uno de los presos fue un guardia que cuidaba al príncipe, él se echó la culpa para que no castigaran a su compañero. Después de todo él no tenía familia, pero su amigo sí, lo castigaron igual, ahora ya no era un guardia, lo habían echado ya los demás también. Solo a él lo habían castigado con prisión, a veces su amigo o los demás lo iban a ver. Habían salido a buscar unas cosas para el príncipe, cuando fueron los demás estaban inconscientes y el príncipe había desaparecido, los guardias buscaron por todas partes, cuando el rey se enteró de que su hijo no estaba, sé furioso mucho y mandó a castigar a los culpables, así terminé ahí como un criminal, ahora sabía lo que se sentía, no tener alas como los demás. Al principio le dolió mucho lo que estaba pasando, sin embargo, con el tiempo la misma gente que tenía que cuidar, a veces lo ayudaban. Cuando regresó a casa había una hermosa chica que lo esperaba con alegría, antes no tenía nada. A veces su compañero le llevaba algunas cosas, conversaban de cualquier cosa para entretener. Después de terminar la conversación apareció una chica muy linda, se puso hablar con él, luego de un rato aparecieron los guardias y les dijeron a todos que volvieron a sus casas. Ellos se despidieron de mí y yo hice lo mismo y regresé a la casa que me estaba quedando. Luego dos días había decidido irme de este lugar, solamente estaba consiguiendo algo de comida y algo más para el viaje. A la mañana siguiente, desperté porque se escuchaba mucho ruido, decía que dos de los presos se habían caído, los guardias intentaron atraparlo, pero el viento era muy fuerte y no podía llegar a ellos, ya no podía hacer nada y los que caía de las islas se daban por muertos. La gente estaba asustada por lo que había pasado, solamente algunos se quedaron mirando mientras que los demás regresaban a sus casas, por lo que había pasado los guardias no dejaban de los alrededores. Después de una hora y media, uno de ellos les dijo a todos los que estaban mirando que se fueran a sus casas oa trabajar. Como no me podía ir todavía, tome algunas cosas y fui a ver a uno de los mejores ladrones, eso decían algunos, sus historias eran muy interesantes y sorprendentes. Uno de los presos me contaba lo que había hecho antes de que lo atraparan los guardias. A veces lo visitaba y le traía algunas cosas y conversaban de cualquier cosa, luego de media hora me hablaba de cómo robaba las casas de los condes o de los ricos ya veces lo hacía para ayudar a la familia oa los amigos. Después de muchos años se aburrió de ayudar a los demás y no le daban nada a cambio o diversión las gracias, lo empezó a hacer por dinero o por algo más. Cuando lo atraparon su familia o los amigos no lo ayudaron y tampoco lo venían a ver, con en tiempo solo dos veces lo fueron a visitar. Uno de sus amigos fue a verlo, él estaba feliz, pero solo había ido a preguntar si le daba cosas que se había robado y donde estaban porque a él no le servían para nada. Para no tener que ver más a su ex amigo le dijo que había vendido algunas cosas y lo demás lo regalo. El dinero se lo había gastado con él y sus amigos antes de que lo atraparan. Cuando le dijo eso, se marchó muy enojado mientras él se reía, ja, ja, ja. No le iba a decir a nadie dónde escondió su tesoro, ni siquiera a su propia familia. La segunda vez fue su hermano pequeño, pensando que le preguntaría lo mismo que su ex amigo, sin embargo, él solo quería ver como estaba. Luego de una hora se fue, pero ante le dijo que si lograba escaparse de casa lo vendría a ver. Antes era el mejor ladrón, pero ahora era el tercero. 

Espero que les guste y me den su opinión.