La humillación de la reina demonio: Sara Loset

Luego de que Rebeca se fuera, me dirigi a la casa de mi primera víctima, Sara Loset, una brabucona de mi curso, como su objetivo favorito, tengo la obligación de vengarme a mi ya todas las personas que ha acosado todos estos años, y con la lista que Rachel me entrego, tengo el papel perfecto para que ella interprete.

Cuando llegue a la casa de los Loset, toque a la puerta mirando el punto donde aparecerian los ojos de Sara si es que fuera ella la que abre la puerta, tengo que ser cuidadoso, una conducta sospechosa desde hoy y me podrian tomar como el escogido del monstruo, por fortuna, en cuanto la puerta se abre, puedo escuchar como alguien de derrumba detras, con una tenebrosa sonrisa, entro a la casa y cierro la puerta detras de mi.

Con bastante esfuerzo, pude llevar a Sara a su habitación, mientras admiraba su figura indefensa en su cama, empece a darle las órdenes necesarias para que cumpla el papel que quiero que interprete:

 - ¿Tienen cámaras en tu casa? Además, ¿has visto tu reflejo hoy?

 - No hay cámaras en mi casa, no he visto mi reflejo hoy.

 - Olvida que te desmayaste en la entrada, esto fue lo que paso, me invitaste a pasar amablemente, cuando entre me dejaste en el salón mientras ibas a tu habitación a prepararte para molestarme.

 - Fingi amabilidad afuera, te obliga a estar en el salón, me preparaba para molestarte.

 - Esto es lo que pasara, notaras que la piel de tus manos y brazos esta morada, iras al baño para lavarte, pero al verte en un espejo notaras que toda tu piel es morada y que te han crecido una cola y cuernos, estarás tan nervioso por tus cambios que olvidaras que ibas a molestarme, en cambio, te terminaras de preparar e iras a conversar conmigo, en algun momento creeras que no veo tus cambios, cuando pase vas a ver los recuerdos de una orgullosa reina demonio, cada vez que pase una parte de la personalidad de la reina demonio se quedará en ti sin que te des cuenta, cuando hayas visto todos los recuerdos notaras los cambios en tu personalidad, pero será demaciado tarde.

 - Vere mi piel morada, un espejo revelará unos cuernos y una cola, olvidare molestarte, conversare, vere recuerdos de una reina demonio, su personalidad se quedará en mi, notare los cambios muy tarde.

 - Cuando diga "cuenta", contaras hasta 5 y despertaras con las órdenes que te he dejado, ahora "cuenta".

Dejandola contarme dirijo a su salón para que no haya diferencia entre lo que le ordene recordar y la realidad, luego de unos minutos aparece Sara con chaqueta, guantes y gorra, al parecer intenta esconder los cambios que le ocurrieron, se sienta en el sofa frente a mi y comenzamos a conversar, luego de un rato noto cambios en su postura y forma de hablar, paso de estar relajado y con un lenguaje algo vulgar a una postura orgullosa y con un lenguaje refinado que acercaba la conversación cada vez más a una conversacion entre dos jefes de especies completamente diferentes, de pronto note como subitamente su cara se torno en sorpresa, feliz por lo que pasaria desde ahora, comense con mi tarea.

 - Sabes Sara, desde que llegue a tu casa lo he notado pero, ¿te preparas para una fiesta de disfraces o algo parecido? tu disfraz de demonio encubierto te quedo muy bien hecho, y tu forma de hablar de recien hace parecer que estoy frente a una verdadera demonio.

En cuanto esas palabras llegaron a su oido, el rostro de Sara quedo blanco como la nieve, torpemente intento excusarse.

 - No, solo probaba el disfraz anoche para una humana amiga mia y me quede dormida, la forma de hablar es por practicar para una obra y se me quedo sin querer.

 - Sinceramente me pone un poco incomodo, ¿podrias sacartelo un rato?

 - Voy a continuar probandolo luego por lo que me lo dejare puesto.

 - ¿Y solo la mascara, puede ser?

En cuanto escucho eso, supo que no tendria excusas, por lo que mientras pensaba en que decir, decido seguir hablando.

 - Sabes, deberias sacartelo en algun rato, hay unos cazadores de demonios cerca y son de gatillo facil, por lo que podrian atacarte si te ven asi, tambien estan los del pueblo, sabes como son en estos dias, un cambio y a la hoguera.

Sara se derrumbo, estaba tan desesperada que ni siquiera noto la ridiculez en mis palabras, no existen cazadores de demonios y los del pueblo creerian que es una victima del hipnotista, por lo que no la quemarian, pero de todos modos confeso.

 - No es un disfraz, cuando desperte ya estaba asi, y unos recuerdos que no son mios aparecen en mi cabeza, alterando mi forma de pensar, sabes que debo hacer para que se me quite esto, ¿verdad? dime, hare lo que sea si lo logras.

Me sonrio a mi mismo, mi plan va mejor de lo que esperaba, pensaba que tendria que presionarla un poco para que se entregara, pero nunca pense que lo haria ella misma.

 - Por fortuna soy un semi-hechicero, creo que estas siendo transformada en la reina demonio, no soy lo suficientemente poderoso para revertir la transformacion, pero puedo usar una ilucion para esconderla de todos, pero por desgracia tendremos que juntarnos cada semana para recargar el hechizo.

 - ¿Que quieres a cambio?

 - Que seas mi esclava, no sera gratis, claro, el contrato de esclava permitira a la ilucion sostenerse una semana mas, por lo que es beneficio para ambos.

 - ¡NO HARE ESO, TENGO MI ORGULLO DEMONIACO ¿SABES?!

 - Esta bien, no lo haremos, pero tampoco te colocare la ilucion, si cambias de opinion tendras que añadir el lamerme los pies para que te ayude.

Me levante para irme, se sientio bien intentar engañarla para aceptar algo que ni siquiera necesita, pero cuando estaba a punto de abrir la puerta, una mano me agarro del hombro y me obligo a volver al sofa donde estaba sentado, al principio pense que me obligaria a ayudarla, pero de pronto se arrodillo y me comenzo a lamer los zapatos sin decir nada, luego de un momento saboreando el momento, saco un papel y un lapiz de mi bolsillo, garabateo un simbolo parecido a unas cadenas en forma de soga con mi nombre en la punta y lo dejo encima de la mesa, luego le dije a Sara:

 - Este es el contrato de esclavo, escribe tu nombre en la parte que encierran las cadenas y colocare la ilucion.

Ella no dijo ni una sola palabra mientras escribia su nombre, cuando comenzamos a conversar, saque el tema de su opinion sobre los demonios de mangas, ella los describio como orgullosos con delirios de grandeza y un desden por los humanos, por lo que se que con su mente mesclada entre humana y demonio esta situacion le es mill veces mas humillante que cualquier otra cosa que pude haber hecho, cuando termino de escribir me entrego el papel, pero antes de que ella pudiera desviar la mirada, use mi poder para volver a hipnotizarla.

 - ¿Recuerdas tus instrucciones anteriores?

 - Si, las recuerdo.

 - Recuerdalas y añadeles estas, desde el momento que firmaste el contrato, cada vez que cumplas una orden mia sentiras la mayor felicidad que puedas, pero si no la cumples, sentiras como pierdo mi confianza en ti, y tener mi confianza es tu principal necesidad.

 - Recordare las ordenes que tenia anteriormente, el contrato me da la mayor felicidad por cumplir tus ordenes, si fallo pierdo tu confianza, tu confianza es mi todo.

 - Desde hoy tendras tu apariencia y personalidad original, y si pasan dos semanas desde la ultima vez que te dije "renovar ilucion", comenzaras a notar como tus rasgos de reina demonio apareceran otra vez.

 - Mi apariencia y personalidad restauradas, pasar dos semanas sin "renovar ilucion" aparecera mi apariencia y personalidad de reina demonio.

La deje contando con una nota al lado diciendole que se desmayo por el contrato y que le coloque el hechizo, yo me fui a ver a Rebeca luego de su reunion con el alcalde.