Imán de Problemas

—¡Hay algo en la ciudad que podría exterminarnos a todos! —El cuerpo de Rhea temblaba mientras las partículas grises en su cuerpo luchaban con la energía de los cristales rojo sangre.

Poseidón encontró esas palabras difíciles de creer, pero sabía que ella no tenía razón para mentir. ¿No era suficiente su fuerza incluso para defenderse de esa existencia?

—¡Ugh! —El rostro de Rhea se volvió pálido mientras intentaba controlar la corrosión dentro de ella—. Había algo mal con el futuro que vi. Ese hombre podía percibir mi existencia e incluso atacarme. ¿Cómo es posible que alguien en el futuro ataque a alguien del pasado? A menos que...

Rhea pensó en algo espantoso pero rápidamente apartó su conjetura.

—¡No! ¡Eso debería ir en contra de las mismas leyes del universo! Ni siquiera los de mi mundo natal pueden hacer eso. Pero entonces...

Ella miró a Poseidón y dijo:

—Mi deber es guiarte y no ordenarte. Si todavía quieres actuar, entonces no te detendré.

—Tienes todo el derecho de ordenarme —Poseidón hizo una reverencia y respondió—. No quiero que mis ambiciones destruyan la sonrisa de mi familia y la gente de Atlantis.

—Bien —Rhea suspiró profundamente—. Necesito descansar un poco.

—Entiendo —Poseidón se despidió.

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Parque de la Emoción, Ciudad Delta

A 12 millas sobre el suelo, un hombre y dos mujeres caían hacia abajo. ¡Llevaban puestos los equipos de buceo estándar, excepto los paracaídas!

Una de las mujeres tenía un aspecto muy emocionado, mientras que los otros dos no tanto.

—¡Disfruta de la caída! —la mujer disfrutaba del aire pasando junto a ella y miró al hombre—. ¡No tendría que hacer esto si no fueras tan introvertido! ¿Qué tipo de hombre derrama lágrimas de alegría porque una celebridad va a ser padre?

Zed sonrió amargamente. Lamentaba sus acciones en la cafetería cuando se difundió la noticia de que Kiba iba a ser padre.

¿Cómo iba a saber que Felicity le reservaría una atracción de adrenalina?

Otra mujer a su lado quería llorar:

—¡Felicity, yo ni siquiera estaba allí, entonces por qué estoy saltando con ustedes dos!?

La mujer pensó que tenía suerte al hacerse amiga de Zed y Felicity, pero ahora se dio cuenta de que estaba contenta demasiado pronto. Después de que cerraran la academia, Felicity la invitó a dar un paseo.

¿Cómo iba a saber que el paseo significaría una caída libre desde millas sobre el suelo?

—¡Jessica, esto te hará fuerte! —Felicity respondió, sin importarle si sus palabras tenían sentido o no—. De todas formas, ¡solo disfruta!

Zed vio cómo el suelo se acercaba y el miedo que sentía aumentaba. Si él fuera Kiba, no le importaría caer desde la órbita de la tierra, pero no como Zed.

Si Kiba era un hombre con alas, entonces Zed era alguien a quien le habían cortado las alas. Era como un policía que se da cuenta de que no lleva armadura mientras se encuentra como blanco de un ladrón con una pistola. 

—¡Daniel, pronto pagarás un precio! —Zed intentó distraer su mente culpando a Daniel—. ¿Crees que te vas a salir con la tuya después de crear tantos problemas en mi vida?

—¡Ahhh! —Jessica gritó al sentir que el suelo se acercaba rápidamente.

—Qué decepción —Felicity agitó su mano y un colchón de flores brotó del suelo sobre el que cayeron.

Zed y Jessica suspiraron aliviados al saber que no sufrieron ninguna lesión, mientras que Felicity comentó lo aburrido que fue.

—Felicity, me siento mal, así que tengo que volver a casa —Zed sabía que ella intentaría encontrar más atracciones emocionantes, así que trató de poner una excusa.

—Tengo una cita también, así que debería irme —Jessica ajustó sus gafas.

—¡De ninguna manera! ¡Tengo una buena atracción en mente! —Felicity ignoró sus palabras de protesta.

Pero pareció que los dioses estaban a favor de Jessica y Zed cuando de repente el teléfono de Felicity sonó.

—¿Papá? —Felicity sintió un dolor de cabeza después de ver el nombre del llamante. A regañadientes, contestó la llamada.

—Estoy ayudando a Zed con una emergencia médica —Felicity respondió en su llamada—. Así que no, no puedo volver y dejarlo morir.

Los labios de Zed se retorcieron.

—¿Qué quieres decir con que hay invitados? —Felicity estaba molesta, pero luego se emocionó—. ¿Prometes dejarme ir a la selva? ¡Bien! ¡Ahora mismo vuelvo!

—.... —dijo Zed.

—Algunos invitados del gobierno están llegando, así que tengo que irme para darles la bienvenida —Felicity guardó su teléfono y dijo.

Jessica sabía que el padre de Felicity era senador, así que no le sorprendió.

—Habrá más invitados la próxima semana —Felicity comenzó a maldecir en voz alta—. ¡Quiero matar a la persona que creó esa escena en el yermo! ¿No podría haberlo hecho en otra ciudad?

—T__T —dijo Zed.

Jessica se sobresaltó. Preguntó:

—¿Escena en el yermo? Pero, ¿no se creó el relámpago dorado debido a una prueba de misiles?

—No. Papá dijo que la prueba de misiles era solo una excusa para engañar a los ciudadanos comunes. Hay algún gran secreto, pero por lo que sé, probablemente algún científico sea responsable —Felicity respondió.

Viendo la expresión de incredulidad en el rostro de Jessica, Felicity continuó:

—No confíes en las noticias o en lo que te digan los demás. ¡Incluso la clase de historia no es más que propaganda!

Como hija de un senador, ella sabía cómo funcionaba el mundo.

—Lo más probable es que haya una investigación en el yermo. Luego está esa científica de bajo nivel desaparecida y su equipo —Felicity compartió los detalles que conocía.

Zed tenía una expresión indiferente durante todo. No estaba preocupado por la investigación porque él y Claudia habían borrado todas las pruebas que podrían conducir hasta él.

Estaba confiado en su capacidad para sobrevivir la próxima prueba incluso en el peor de los casos.

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—De todas formas, tengo que irme —Felicity se volvió hacia Zed y dijo—. Ya es tarde, así que acompaña a Jessica a su casa.

—No es necesario. Tomaré un autobús —Jessica sintió su corazón acelerarse.

—Él es rico, así que no creo que manejar su coche unos kilómetros extra sea un problema —la decisión de Felicity era final.

—N-no quiero causar un problema —dijo Jessica.

—No es un problema —a Zed no le importaba darle un aventón.

Abrió la puerta del aerodeslizador y permitió que Jessica tomara asiento primero. Luego él se sentó en el asiento del conductor y rápidamente enganchó el equipo.

Jessica estaba nerviosa pensando si debería iniciar una conversación o no.

—¿Quiénes están en tu familia? —Zed inició la conversación.

—Mi mamá, papá y un hermano menor —Jessica se alegró de que él tomara la iniciativa primero.

—Eso está bien —Zed asintió mientras su atención estaba en el camino adelante.

—¿Y tu familia? —preguntó Jessica.

—Mis padres murieron cuando era joven, así que vivo solo —Zed dio una excusa.

—Lo siento. No debería haber preguntado —se disculpó Jessica.

—No es problema —Zed sonrió.

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—Hemos llegado —Zed estacionó el aerodeslizador fuera de un edificio y acompañó a Jessica afuera.

La comunidad estaba bastante congestionada con edificios pegados uno al lado del otro. Miró alrededor y pensó que el área era bastante pobre pero todavía mucho mejor que las barriadas.

—Gracias —Jessica quería invitarlo a su apartamento a tomar un café, pero no sabía cómo preguntarlo.

—Si realmente me quieres agradecer, entonces ¡deja de agradecerme! —a Zed no le parecía gran cosa darle un aventón. Vivía la vida de Zed por múltiples razones, y una de ellas era experimentar cosas que no podía como Kiba.

Justo cuando Jessica encontró el valor para invitarlo a tomar un café, notó un grupo de personas familiar a cierta distancia.

—Z-Zed, nos vemos en la academia —Jessica dijo apresuradamente.

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—¿Hmm? —Zed también notó el grupo de personas. Por su ropa, parecían miembros de alguna banda local.

El grupo de personas llegó frente a Jessica.

—¿Por qué estás tarde hoy? —uno de ellos le preguntó.

—E-Estaba con mis amigos —Jessica intentó explicar.

—¿Tus amigos son más importantes o la vida de mis amigos? —exigió el hombre.

—No sabía que necesitaban mi ayuda —Jessica respondió nerviosamente.

—Vienes con nosotros ahora —ordenó el hombre. Notó la mirada de Zed, así que se volvió hacia él y preguntó:

— ¿Tienes algún problema con nosotros?

Jessica quería explicar, pero otro miembro la detuvo.

—En realidad, no —Zed respondió, totalmente relajado.

—Entonces, ¿por qué nos estás mirando en vez de largarte? —Al hombre no le gustaba la actitud de Zed.

—Solo tenía curiosidad si los había visto en alguna parte. Verás, he conocido bastantes bandas en los últimos años —respondió Zed.

Por la conversación entre estos hombres y Jessica, pudo juzgar la situación. La habilidad de curación de Jessica era definitivamente una bendición para las bandas locales.

El grupo de hombres estaba bastante molesto por la actitud relajada de Zed.

—Si tu curiosidad está satisfecha, entonces pírdete —el hombre sentía que Zed era desagradable a la vista.

—No puedo hacerlo ya que el deber que me han dado aún no ha terminado —Zed apuntó su dedo hacia Jessica y dijo:

— Tengo que acompañarla a su casa. Estoy fuera del edificio, entonces, ¿cómo voy a perderme?

—¿Quieres morir? —Otro hombre no pudo controlar su ira.

—No quiero morir, pero ¿y usted? —Zed preguntó con curiosidad.

Ese hombre quería golpear a Zed, pero el hombre de antes lo detuvo. Había notado el aerodeslizador de Zed y sabía que una persona que podía permitirse tal vehículo no era ordinaria. Quizás tenía un trasfondo influyente y el hombre no quería causar problemas innecesarios.

—Considera tu deber cumplido —dijo el hombre:

— Jessica está con nosotros, así que no te metas en nuestros asuntos.

—¿Es así? —Zed luego miró a Jessica y dijo:

— Hay algo que realmente quiero decirte.

—¿Qué? —Jessica estaba confundida. ¿Qué tipo de palabras quería decir en tal situación?

—Eres un verdadero imán de problemas.

...