Dentro de la oficina del ministro estaba el propio ministro de magia, Cornelius Fudge. Un hombre un poco corpulento, cabello gris y arrugado, podría ser fácilmente reconocido por su estilo de vestir el cual seria descrito como bastante extraño: traje de raya diplomática, corbata roja, manto negro largo de viaje, botas color purpura y un sombrero de hongo color verde lima. William se preguntó a sí mismo si este ministro descendía de una familia de magos payasos.
El otro hombre en la oficina era fácilmente reconocible para William ya que se trataba de quien se suponía debía estar a su lado en todo momento, el director Albus Dumbledore.
La primera mujer dentro de la oficina fue rápidamente reconocida como la directora de Castelobruxo, Ana Guimarães. William había visto una fotografía de ella en un libro mientras trazaba su plan de acción. Una mujer un poco mas joven que Dumbledore, de tes oscura, labios gruesos, cabello ondulado de color gris, su estatura era solo un pies mas baja que la de Cornelius Fudge, pero de sus ojos William podia comprender lo sabia que era la mujer.
Por último y no menos importante estaba la otra mujer en la habitación, debido a la vestimenta, a la edad y su posición cercana al ministro Fudge, William pudo rápidamente notar que ella era la ministra del ministerio de magia brasileño. Rita Araujo.
William se inclinó levemente y saludo con la mayor cortesía a los presentes, siendo las dos mujeres y el director los primeros que devolvieron el saludo asintiendo con sus cabezas, Fudge dio pasos al frente y estrechó su mano con William mientras sonreía vigorosamente.
"El mundo es realmente diferente, reunir a dos ministros en la misma oficina solo por un muchacho" dijo Fudge casi riendo
"claro este es un evento que formaliza la amistad entre los ministerios con mayor intensidad que antes, el ministro Fudge debería estar contento con esto" respondió la ministra Rita con un tono amigable pero al mismo tiempo apático.
"Además este es un asunto académico, la verdad me sorprendió cuando el propio director Dumbledore recomendó un alumno para una transferencia temporal hasta Brasil, además según los documentos que llegaron a mi oficina este joven esta en primer año y tiene mucho potencial" la directoras Ana sonreía mientras estudiaba a William de pies a cabeza "será interesante instruir a este joven"
"Solo espero que no quieras que vuelva a Hogwarts" río Dumbledore mientras acariciaba su barba, la directora Ana simplemente pudo reír con el comentario de su contraparte aunque William podía sentir las chispas de la revalidad bajo la mesa, un poco sorprendente conociendo la personalidad de Dumbledore desde los libros.
Aun cuando todos estaban reunidos para la transferencia temporal de William, los asuntos tratados eran de diversas relevancia y sin darse cuenta William estaba en el fondo de la importancia, como tal el propio William solo estaba escuchando hasta cuando el ministro Fudge comentó que tenía otro compromiso que atender.
Dumbledore fue el primero en volver a Hogwarts, por otro lado William acompañó a la directora Ana y a la ministra Rita Araujo.
Llegar hasta Brasil fue casi instantáneo, William estaba sorprendido pero la sorpresa fue mayor al ver todo a su alrededor. Diferente de la contaminada ciudad de Londres.
William estaba apreciando todo a su alrededor, los trajes de las personas eran diferentes, no había mucho avance como en Europa pero no era de mucha importancia "La ministra Rita seguirá su camino desde aquí y supongo que nosotros debemos llegar al castillo lo antes posible. Tus pertenencias ya deben estar en su lugar así que no tienes que estar preocupado"
Con el asentimiento de William ambos desaparecieron del lugar y cuando volvieron a aparecer estaban frente a gran castillo de una altura inmensa, William juraba haberlo visto en su vida anterior mientras navegaba por la red pero esto era completamente diferente, el edificio era cuadrado, tiene muchas escaleras en los cuatro costados, al menos doscientos escalones por lado y todo estaba construido con roca dorada.
Según los libros de la biblioteca de Hogwarts, William sabía que el castillo estaba bajo un encantamiento que cambia su aspecto cuando hay muggle cerca, lo hace parecer una ruina de las tribus precolombinas.
Para cualquier lado que William mirara podía ver bosque, los libros que estudiaba no estaban tan incorrectos, pero llamarlos bosques es simplemente una falta. El nombre de esta conjunción de árboles es selva.
"¿impresionado?" pregunto la directora Ana al ver la expresion de William quien asintio sin cerrar la boca "es normal, pero no dejes que otros estudiantes de vean asi, todos sabran que eres extranjero" William cerró su boca.
"vamos, aun tengo que hacer todo el papeleo para que comiences tus clases y debemos hacer que te veas digno de nuestra escuela"
William miró sus ropas de Hogwarts "no me veo tan mal" murmuró William para luego seguir a la directora de cerca.
Como se esperaba de una escuela de magia, las escaleras doradas estaban encantadas y estas se movían de igual manera que las escaleras mecánicas de un centro comercial, un detalle que William agradeció desde su interior.
"Vamos, sígueme y no te pierdas"