Capítulo 45. Xiao Meng ha llegado al local

«El primer intento del anfitrión ha fallado».

La voz del sistema resonó en la mente de Bu Fang, alarmándolo. ¿Cómo pudo fallar? Si la fragancia era tan fuerte…

Bu Fang levantó la olla de barro de la estufa y retiró la tapa, generando que saliera una densa cantidad de vapor mezclado con la fragancia del pollo y de la dulce esencia de las hierbas de salvia. Bu Fang estaba ligeramente intoxicado mientras lo inhalaba codiciosamente.

En la olla de barro, la carne del pollo rojo sangriento temblaba ligeramente como gelatina y la sopa seguía burbujeando. Cada vez que una burbuja explotaba, una rica fragancia salía a flote. El jugo púrpura de las hierbas de salvia se había tornado a lima después de cocinarse por un buen tiempo. Había una capa de espuma amarilla encima de la sopa; era la cristalización de las esencias de las hierbas espirituales.

—¿Hmmm? —Bu Fang frunció el entrecejo al observar el color de la sopa. Después de un largo rato, dio un suspiro con un toque de pesar en su rostro.

No había equivocación. Bu Fang había fallado. Si él hubiese completado satisfactoriamente la sopa de sangre de fénix con hierbas de salvia, la sopa no tendría un color lima. Para lograr que la sopa estuviese perfecta, el jugo de las hierbas de salvia debían impregnar completamente la carne, y así el color de la sopa sería ámbar.

«Sugerencia del sistema: durante el proceso de cocción en la cocina elixir, el anfitrión puede acelerar la impregnación de los jugos de la hierbas de salvia en la carne del pollo usando energía verdadera. Esto preservará con eficacia las hierbas espirituales e improvisará la textura de la carne», dijo el sistema.

—¿Usar energía verdadera para acelerar el proceso? —los ojos de Bu Fang se iluminaron. Básicamente no había errores en sus pasos, pero al final siempre fallaba. Rememoró lo que había hecho y pensó al respecto, pero todavía no sabía qué había hecho mal y solo pudo recordar su error después de que el sistema se lo dijo.

Él estaba cocinando cocina elixir y tanto los ingredientes como las hierbas eran extremadamente abundantes. Así que para neutralizar perfectamente la energía del espíritu de los ingredientes, no solo podía confiar en sus instrumentos de cocina para cocinar el plato, sino que también necesitaba usar energía verdadera como medio para completar este plato.

La verdad es que esto no era solo por la cocina elixir. En el futuro, Bu Fang necesitaría usar energía verdadera como medio para cocinar otros platillos. Esa era una de las razones por la cual el sistema ayudaría a Bu Fang a convertir cristales en energía verdadera.

Muchos ingredientes de alto nivel contienen tremendas cantidades de energía espiritual y no iba a ser posible solo contar con sus instrumentos de cocina para resolverlo. En caso de que cometiera un error, fácilmente causaría una explosión o algún otro problema. Bu Fang necesitaría considerar estos problemas una vez que comenzara a usar ingredientes que excedieran el quinto grado.

—Huff —Bu Fang inhaló pesadamente, entonces llamó a Whitey y colocó el producto fallido de la sopa de pollo fénix con hierbas de salvia en el estómago de Whitey para reciclar.

Estiró su cuerpo y bostezo. Era hora de dormir. Como un joven aspirando a convertirse en Dios de la Cocina. Bu Fang tenía que trabajar y descansar. Cuando tenía que dormir, no podía estar haciendo otras cosas.

Incluso cuando Bu Fang falló su primer intento en cocinar la sopa de pollo fénix con hierbas de salvia, se encontraba enigmáticamente más calmado y tranquilo que de costumbre.

Después de acariciar el vientre de Whitey, Bu Fang fue a su habitación y durmió plácidamente.

La mañana siguiente, se despertó y después de lavarse, comenzó el día.

Practicó la técnica de corte de meteoro como siempre completando la misión de ese día. Luego usó los rábanos para cocinar arroz frito con huevo y rábanos.

Después de que Bu Fang lo probara y quedase satisfecho con el sabor, inexpresivamente lo dejó para Blacky, quien dormía en la entrada.

El local estaba volviéndose popular. Al abrir el negocio cada mañana, veía a su leal ejército de hombres obesos afuera. El Gordo Jin y sus amigos iban todos los días, indiferentemente si hubiese lluvia o sol.

—Propietario Bu ¡quiero un servicio de shumais dorados! ¡Oh Dios, las costillas agridulces cuestan cincuenta cristales! ¡Ya que es bastante caro, tendré una porción también! —el Gordo Jin se echó a reír mientras la grasa en su cara se agitaba.

Los otros hombres obesos también ordenaron sus platos, y así, Bu Fang comenzó su laborioso día de trabajo.

Ouyang Xiaoyi llegó rápidamente. Después de trabajar por unos días había ganado un poco más de experiencia, desempeñándose mejor en su trabajo.

Durante las primeras horas Bu Fang estaba trabajando lo usual. No tenía tiempo para pensar sobre el método de cocina de la sopa de pollo fénix con hierbas de salvia y parecía estar calmado.

Xushi rápidamente entró al local. Desde que el príncipe heredero le ordenó que investigase el lugar, iba casi todos los días, aunque realmente estaba completamente cautivado por la deliciosa comida.

—¡Niña quiero un servicio de pescado hervido! —ligeramente Xushi asintió en dirección a Ouyang Xiaoyi.

El pescado hervido era el plato favorito de Xushi. Le gustaba más que las lías de pescado o la sopa de cabeza de pescado con tofu. El sentimiento de placer de cada pieza suave y tierna entrando a su boca era simplemente intoxicante para él.

Después de recibir las órdenes, Bu Fang asintió y caminó hacia el tanque de peces. Sus manos rápidamente entraron en el agua y sacó un pescado negro fuera del tanque. El pescado de agua dulce que tomó era de un grado menor a una carpa plateada del trueno. Sin embargo, la textura de su carne era más firme que la de la carpa plateada del trueno.

Cuando Bu Fang colocó al pez en la tabla para cortar, este le escupió agua, mojándole la ropa.

Bu Fang se encontraba inexpresivo al momento de cortar la cabeza del pescado con el cuchillo. Luego habilidosamente descamó y destripó al pez. Finalmente el pez fue cortado en pedazos. Después de varios días de entrenamiento su técnica de cortar era estupenda, haciendo que su habilidad al cortar el pescado fuera extremadamente rápida.

Una vez que el pez era cortado, los demás pasos eran más sencillos. Después de manipular los vegetales espirituosos, se colocaron en una olla para hervir. Cuando se desprendió una fragancia, lanzó las rodajas de pescado que se calentaron ligeramente con agua de jengibre para eliminar el olor. Después de hervir por un tiempo, el plato estaba preparado.

El fragante y brillante pescado hervido fue colocado frente a Xushi, causando que sus ojos de repente se iluminaran para revelar una expresión ansiosa en su cara.

Tal vez el príncipe heredero no sabía que su tutor número uno era un amante de la comida.

Un hombre de mediana edad, con un rostro hermoso que parecía haber sido esculpido en mármol, entró en el local con las manos detrás de su espalda. Su mirada era firme y fría, mientras que su aura era tensa.

La rica fragancia que se esparcía en el interior del local causó un ligero asombro en el rostro del hombre de mediana edad.

Cuando el hombre de mediana edad vio a Ouyang Xiaoyi, estaba sorprendido y desconcertado y preguntó: —¿Hmm? ¿Xiaoyi? ¿Qué estás haciendo aquí?

Al momento en el que su voz resonó en el local, Xushi, quien estaba a punto de poner un pedazo de pescado hervido en su boca, de repente tembló haciendo que el pedazo de pescado volviese a caer en el tazón. Como resultado, su barba fue salpicada por la salsa del tazón.

—Genial…¿el gran General Xiao Meng? —cuando Xushi giró su cabeza pudo ver quién era, inmediatamente se puso de pie desde su asiento y saludó mientras realizaba un saludo con puño y palma. En el mismo momento pensó: «Cielos…¿el gran General Xiao Meng realmente apareció en un restaurante como este? Esta es una importante información. Debo informarle al príncipe heredero».

Xiao Meng asintió. Él naturalmente reconoció al tutor número uno del príncipe heredero. Él apreciaba la habilidad de Xushi para planear estrategias y esquemas también, y reconocía su talento.

—Tí… tío Xiao, ¿qué haces aquí también? —Ouyang estaba algo asustada de Xiao Meng. Después de todo, era el número uno dentro de la Ciudad Imperial; el más prestigioso.

—Ya que estoy en un restaurante, naturalmente vine a comer —Xiao Meng simplemente respondió girándose hacia el menú. Los valores astronómicos no le sorprendieron y su expresión no cambió en ningún momento.

Como era de esperar de un Santo de Batalla de séptimo grado, su temperamento era firme.

Xushi secretamente asintió y dio un pulgar arriba a Xiao Meng en su mente.

—Costillas agridulces, arroz frito con huevo mejorado, lías de pescado, shumai dorado… y también una jarra de vino de urna de corazón jade de hielo —Xiao Meng calmadamente leía los nombres de los platos mientras seguía de pie, con sus manos detrás de su espalda.

Después de memorizar la orden, Ouyang Xiaoyi fue hasta la cocina y transmitió los platillos a Bu Fang.

Bu Fang se sorprendió ligeramente mientras pensaba: «Parece que vino un gran gastador, esta cantidad de platillos costarán muchos cristales». Después de asentir sin expresión, Bu Fang comenzó a cocinar.

Después de que Xushi terminó rápidamente con su pescado hervido, se despidió de Xiao Meng y se fue rápidamente. Tenía prisa por informar al príncipe heredero sobre las noticias.

Dado que el Gran General Xiao estaba visitando el restaurante, era una buena oportunidad para que el príncipe heredero hiciera sociales.

No mucho después de que Xushi se fuera, Ouyang Xiaoyi tímidamente sirvió cada plato que Xiao Meng había ordenado.

Cada plato emitía una rica fragancia. Incluso alguien tan calmado como Xiao Meng no pudo evitar estar sorprendido al descubrir que el sabor de los platos era mucho más delicioso de lo que había esperado.

Eran mucho mejores que los platos del restaurante número uno en la ciudad imperial, el restaurante del Fénix Inmortal.

La última orden, el vino de urna de corazón jade de hielo, fue personalmente servido por Bu Fang. Mientras caminaba fuera de la cocina, fue rápidamente notado por Xiao Meng.

Xiao Meng bajó sus palillos, miró a Bu Fang con una sonrisa falsa y dijo: —¿Eres tú el dueño? ¿El propietario Bu quien lastimó a mi hija y reclamó ser capaz de salvarla?