Diego

Diego solo partió cuando todas las personas a su alrededor se fueron a sus respectivos hogares o lugares de trabajo. Sin duda la ley que más llamó la atención entre la multitud fue: la minifalda. Algunos hablaron de lo absurdo que un señor les diga cómo vestirse pero la gran mayoría simplemente acepto el decreto como si nada, había incluso muchas mujeres que rompieron sus vestidos allí mismo.

Cuando Diego llegó a lo que parecía la casa de su tía, no tuvo que tocar pues su tía y sus dos hijas estaban a punto de entrar también.

"¡Tía!" Gritó para llamar su atención.

Una mujer morena y de cabello blanco se dió la media vuelta sorprendida. Miró con detenimiento a Diego de arriba abajo ante de correr a él y enterrar su rostro entre las dos grandes montañas que se asomaban por su escote.

" Diego ¿En serio eres tú?" Alina sostuvo el rostro de Diego por sus mejillas con una sonrisa. "¡Mírate! ya estás tan grande."

"Eso no es cierto." Diego bajo la cabeza avergonzado. Apenas tenía 10 años a unas pocas semanas de cumplir los 11.

Alina lo invito a entrar en la casa junto a sus dos hijas Wendy y Lora.

Una vez dentro lo primero que hicieron las tres mujeres fue cortar su vestidos como lo ordeno maxwell.

"¿Cómo me queda?" Preguntó Wendy de cabello rubio peinado en dos coletas, al inclinarse hacia adelante prácticamente mostrandole todo el culo a Diego.

"Unmn ah sí." Diego se mostró muy nervioso sin saber que hacer y asíntio con la cabeza.

"¡Eso no es justo!" Se quejó Lora. Con el cabello blanco igual al de su madre, Lora parecía una copia idéntica a Alina, la única diferencia era que su cabello era corto hasta los hombros.

Lora se sentó en las piernas de Diego y paso su brazo por sus hombros. Abrieron un poco las piernas para mostrar su piel morena, Lora preguntó. "Quien está mejor, Wendy o yo."

Lora fue tan lejos que tomó una de las manos de Diego y la puso en su muslo para que acariciará.

Diego no tenía idea de que hacer, se encontraba en una situación muy extraña que no entendía ni un poco.  Sus mejillas se sonrojaron mientras su pequeño amiguito empezaba a reaccionar allí abajo.

"¿Que crees que haces?" Wendy se enojo con Lora y pego sus tetas en el rostro de Diego. "Definitivamente soy mejor que tú."

Wendy sacó el pecho orgullosa, sus grandes tetas en definitiva eran más grandes que las de Lora.

Lora no quiso quedarse atrás y abrió su propio escote para sacar sus dos tetas al aire libre. Wendy hizo lo mismo para en solo unos segundos Diego se encontrará con Lora sentada en sus piernas, una mano en los anchos muslos de ella y dos pares de tetas en la cara.

Diego volteo a mirar a su tía pidiendo ayuda con la mirada pero está solo se quedó observandolos con una sonrisa en su rostro.

"Chicas dejen descansar a su primo, debe estar muy cansado por su viaje." Después de unos segundos tortuosos para Diego, su tía intervino. Lo saco de las garras de las dos chicas y lo llevó a darse un baño.

Dentro del baño su tía se desnudo muy lenta y sensualmente en su presencia, quedando completamente desnuda frente a él y mostrando todo sin vergüenza.

Diego bajo la cabeza avergonzado, no sabía porque se sentía así pero sentía que estaba haciendo algo malo. Su tía también lo desvistió por completo y comenzó a bañarlo al restregar su espalda con un trapo mojado.

"Lamento el comportamiento de mis dos niñas pero tienes que entender que es muy raro para ellas encontrar un hombre soltero y sin compromiso."

Diego no podía entender lo que decía su tía.

¿Eso que tiene que ver? ¿Y porque necesitan a un hombre?

"Aunque eres su primo, esa clase de relación no está mal vista en general. Aún eres muy pequeño..." Su tía paso su mano por su pecho y bajo a su entrepierna hasta agarrar su pequeño pene. "Este pequeño puede ser utilizado."

Si tía comenzó a realizar un movimiento de arriba abajo con su pene, lo que lo hizo sentir muy bien pero también preguntarse si lo que estaba haciendo estaba bien.

"Solo necesitas decir que si." Su tía susurró a su oído mientras lo masturbaba. "Y podrás tener no solo a las dos, también podrás tenerme a mi."

Su susurró pareció tener consigo la tentación del diablo ya que Diego eyaculó en el suelo del éxtasis para solo segundos después sentirse culpable sin ninguna razón aparente.

Su tía miró su mano llena de semen para un momento después pasar su lengua con una sonrisa en el rostro, a la vez que le guiñaba el ojo.

Diego no pudo mirar a su tía a los ojos por el resto del baño. Después de unos minutos salieron y se cambiaron.

Tiempo después su tía lo llamo para ir a comer, pero la comida no podía ser más incómoda. Tanto Wendy como Lora se sentaron a su lado y en vez de comer su comida comenzaron acariciar sus piernas, Wendy en la izquierda y Lara en la derecha.

En algún momento ambas no se saciaron con eso y tomaron las manos de Diego y las colocaron en su entrepierna.

Diego sintió algo cálido y húmedo tocando sus manos. Mientras que Wendy y Lora comenzaba a lamer su oreja y cuello lentamente.

Cuando Diego levantó la mirada para pedir ayuda a su tía, la encontró con ambas tetas afuera. Se mordió el labio y guiño un ojo con una sonrisa.

"Solo tienes que decir que sí." Dijo.

Los ojos de Diego se pusieron rojo y quitándose a ambas chicas de encima corrió hacia la puerta, abrió y corrió a la distancia.

"¡¡Diego!!"

"¡¿A dónde vas?!"

Wendy y Lora gritaron preocupadas, tratando de ir tras él.

"¡Déjalo!" Dijo Alina.

"¡Pero mamá!" Replicó Lora.

"El no tiene a dónde ir, eventualmente regresará. No hay de que preocuparse." Alina sacudió la cabeza con una sonrisa. "El en realidad creé que vino a la ciudad a trabajar."

"Después de todo, no le pagué todo ese dinero a mi hermana para tener un trabajador más en la casa jeje."

...

Diego corrió como loco por las calles que no conocía, corrió tanto que pronto ya no sabía dónde se encontraba hasta que chocó con un hombre.

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Faltan 10

Cómo ví que a casi todos no le gusta maxwell cómo protagonista, traje a este chico que es una clara representación de un típico protagonista princeso 🤣🤣🤣

jajajaja ese título: soy re-troll.

Por cierto ¡¡¡petro presidente!!!

Eso es todo, cambio y fuera.