Capítulo 7: El mundo de mis sueños parte 2
Capítulo 7: El mundo de mis sueños 2Parte 1Una puerta arqueada, se mostraba impotente en aquel cuarto, su tamaño y aspecto daban mucho que decir, esos colores grisáceos que la conformaban, los símbolos que la pintaban por completo claramente no eran normales. Alan con cada paso que daba hacía sonar sus pisadas por todo el cuarto.—¿Esta puerta estaba aquí antes?Le bastó dar otro paso para caer postrado de manera abrupta, mirando hacia el suelo, como si una fuerza invisible lo obligara a estar en esa posición.—¡¿Qué es lo que está pasando?! ¡No puedo levantarme! Unos pequeños pasos se hacen presentes y con ellos una voz llamativa le habla a Alan.—¡Seas bienvenido, descendiente del clan Stellara! Yo soy un espíritu heroico, una entidad cuya existencia es tan efímera como real. No tengo una forma física permanente y, al igual que una fusión que se disuelve con el tiempo, mi presencia es transitoria. "Un ser inexistente que a la vez existe", eso soy yo. Sin embargo, aunque mi existencia es nula en términos absolutos, sigo siendo una realidad palpable mientras estoy aquí, presente para guiar a los descendientes de los 10 clanes.Alan estaba demasiado sorprendido que apenas podía asimilarlo, de pronto una voz lo había llamado y ahora estaba en el suelo escuchándola decir cosas extrañas que no entendía.—¿Qué... clase de broma es esta? ¿10 clanes?, ¿de qué estás hablando? ¡No lo entiendo!—¿Qué es lo que no entiendes? Pensaba que ya lo sabías todo, tus sueños te lo dijeron, ¿no es cierto?, sobre aquel mundo que tanto deseas ver.—¿Cómo sabes de eso?!, ¿qué está pasando?, ¿no lo entiendo? Alberto, por favor ayúdame.Aún postrado en el suelo, cierra los ojos y empieza a derramar lágrimas de su rostro.—¿Alberto? Acaso no es el nombre del otro de los últimos integrantes de clan Stellara junto contigo. Me enteré de que murió recientemente, dejándote como el último de tu clan, pero no pareces triste por su muerte.—. . .Empezó a dar vueltas en círculos, haciendo movimientos sin sentido con su mano, intentando encontrar una respuesta a lo que le pregunto a Alan. De pronto se detuvo, como si la respuesta fuera demasiado clara.—Ahora comprendo, has llegado a aceptar el fallecimiento de tu hermano, ¿verdad? Y las lágrimas que derramas son porque el mundo que anhelas, ese mundo que deseas descubrir y hacer tuyo, podría convertirse en realidad. No temas, te aseguro que es real, y así como fue pactado con los 7 dioses, te otorgo a ti, junto con los demás descendientes de los 10 clanes, el permiso de poder pasar a aquel mundo.—¡Es real! ¿Entonces nunca fue un sueño? —Soltó una carcajada. —No puedo ser más feliz. Yo realmente pensé que el sueño al que me aferraba nunca se haría realidad.Aquel espíritu inexistente, se veía satisfecho, Alan perdió una de sus razones de vivir, su hermano, pero ahora su anhelado sueño estaba a punto de cumplirse.—¡Alégrate muchacho! Pues ahora estás a punto de cumplir tu sueño. Un espíritu heroico al azar te acompañará haciendo de conexión entre este mundo y el otro mientras ambos cumplen sus sueños.El espíritu heroico inexistente se acercó hacia la gran puerta con la intención de abrirla, pero luego se detuvo ante la respuesta de Alan.—Muchas gracias, pero por ahora no puedo viajar a ese mundo, no sería correcto hacerlo, ¿me esperarías hasta entonces?Su respuesta lo tomó por sorpresa, estaba seguro de que no podía esperar ni un minuto más por entrar, pero él se negó a entrar ahora mismo. "Qué interesante muchacho, si fuera completamente real, me gustaría ver como terminara tu vida" pensó. —Claro, no hay prisa, nos veremos de nuevo Alan Stellara Santillan. Esperaré ansioso tu llegada.Cuando termino de hablar, simplemente desapareció junto con aquella puerta, parecía un sueño.Jadea —¡Ya puedo moverme…!Parte 2Un nuevo día llega, y con él un nuevo amanecer, los rayos del sol caprichosos se cuela sin permiso a través de las cortinas de la habitación.Alan abre los ojos lentamente, integrándose poco a poco en este nuevo día. Observa hacia el reloj colgado en la pared de su habitación.—Las 9:18 ha pasado mucho desde la última vez que desperté tan tarde. Menos mal fue un sábado.Cuando intento moverse para levantarse algo pesado, lo de tubo. Una hermosa dama estaba acostada a su lado haciéndole compañía.—¿Elsa? Es cierto, lo olvidaba, no recordaba que ayer no volvió a casa, estaba tan desconcertado por lo de ayer que simplemente lo olvide y me acosté en la cama como es costumbre.—Alan, ¿eres tú?, buenos días.—Claro… Buenos días.Monólogo interno de Alan: ¿Qué pasa?, ¿qué está pasando?, ¿siempre fue tan linda? No me molesta haber dormido con una chica, pero con Elsa es diferente, ella es la chica que he estado rechazando y evadiendo sus invitaciones. Espera un momento en primer lugar, ¿por qué estoy avergonzado? Solo compartimos la cama, no soy un niño como para avergonzarme por algo como esto. De un momento a otro, Alan volvió a la normalidad, como si nada hubiera pasado.—¿Dormiste bien?Alan se sienta en la cama mientras escucha la respuesta de Elsa.—Sí, disculpa, me quede dormida en tu habitación, espero que no haya sido una molestia.—No, no fuiste una molestia, al contrario, gracias a ti puede dormir a gusto después de tanto tiempo.—Pues me da gusto, por cierto te ves diferente, ¿llevabas esa ropa ayer?Alan queda un poco sorprendido a su repentina pregunta.—Sí, tome un baño anoche, me di cuenta de que no podía seguir con esto.—Eh y volviste para acostarte a dormir conmigo, es que acaso ¿deseabas tanto dormir conmigo? —¡Por supuesto! No siempre se tiene la oportunidad de dormir con una chica tan linda.Esta respuesta, por supuesto, sonrojo a Elsa, esta no era una respuesta que esperaba, solo se lo había dicho para molestarlo.—Es broma, yo también tengo un poco de sentido del humor, sabes. —Soltó una pequeña sonrisa.