Enredado en un plan

Un joven sirviente vino corriendo hacia Chris con una mirada ansiosa en su rostro.

—¿Qué has dicho? —Chris miró al joven sirviente nerviosamente.

—El Señor Enrique estaba justo forjando un arma en su sala de herrería cuando de repente escupió un bocado de sangre. Me preocupé por él así que le dije que descansara primero, pero él no me escuchó y continuó con su trabajo. Más tarde, su rostro se puso cada vez más pálido y escupió un gran bocado de sangre. Esta vez, se desmayó en el acto. Lo llevé a su cama, pero todavía estoy preocupado por su situación —el joven sirviente respondió con el rostro lleno de sudor.

—Hiciste bien en informarme de esto de inmediato. ¡Rápido! ¡Llévame a verlo! —luego miró a Leric y se inclinó en disculpa—. Sir Aethelwolf, lo siento, pero tengo que revisar la condición de mi primo.

Leric asintió suavemente con la cabeza mientras movía su mano. —Los asuntos importantes primero. No me importa.

Después de escuchar su respuesta, Chris salió inmediatamente con el joven sirviente.

Cuando se fueron, Leric olfateó el aire y frunció el ceño. —Este olor… es veneno —murmuró sorprendido.

—Parece que he llegado a ser testigo de una gran trama. Si dejo la tienda, me dejará un mal sabor de boca. ¡Tsk! —Leric hizo clic con la lengua mientras dudaba si involucrarse en esta conspiración o no. Sin embargo, se encontró siguiendo a Chris y al joven sirviente.

El dúo entró en la habitación y Leric decidió entrar también.

Chris se sorprendió al ver a Leric de pie detrás de ellos, pero optó por dejarlo ser y centrar su atención en su primo en su lugar.

Tumbado en la cama había un hombre fornido de mediana edad que probablemente tenía unos cincuenta y tantos años. Tenía un cabello negro largo y ondulado y un bigote espeso. Su rostro estaba pálido lo que destruía su imagen fuerte. Este hombre era el dueño de esta tienda de armas, el Herrero de Nivel 3, Enrique Maynard.

Chris frunció el ceño al ver la condición de su primo. Extendió la mano hacia el brazo de la otra parte para comprobar su pulso, pero a mitad de camino alguien lo detuvo.

—Sugiero que no lo toques por ahora, Señor Chris —Leric murmuró con una mirada seria.

El joven sirviente apretó los puños al ver esto.

Por supuesto, esta pequeña reacción no escapó a la detección de Leric. Esto también le hizo estar seguro de que este joven sirviente estaba relacionado con el envenenamiento de Enrique Maynard.

Chris frunció el ceño con una mirada agitada después de escuchar las palabras de Leric. —¿Qué quieres decir, Sir Aethelwolf?

Leric no le respondió. Se agachó cerca del inconsciente Enrique y olfateó su brazo. Luego se levantó y respondió en un tono grave. —Soy un Alquimista y puedo oler veneno en el cuerpo de Sir Enrique. Es bastante potente, pero no podría matar a Sir Enrique ya que es un Esper de Nivel 3. Sin embargo, su potencial disminuirá y su Hegel también podría verse afectado. Hay una alta posibilidad de que regrese a ser un Esper de Nivel 2, lo que a su vez lo hará un Herrero de Nivel 2 también.

Cuanto más hablaba Leric, más oscuro se volvía el rostro de Chris. Esto no eran buenas noticias. Siempre había tratado a su primo como a un hermano y lo respetaba mucho. Sabiendo que su primo había sido envenenado, estaba increíblemente furioso y ansioso.

—La cara del joven sirviente se puso pálida cuando escuchó las palabras de Leric. ¡Este hombre era realmente un Alquimista! ¡Qué mala suerte!

—Gerente Chris, buscaré a los mejores doctores en la ciudad y veré si tienen alguna solución para esto —murmuró el joven sirviente con la cabeza ligeramente inclinada—. No quería que vieran su mirada nerviosa.

—Chris tampoco lo sospechaba, así que simplemente asintió con la cabeza —Está bien. Tráelos aquí rápidamente y diles que nuestra Casa Maynard no los maltratará.

—Sí, Gerente Chris —El joven sirviente asintió con la cabeza y se dirigió inmediatamente hacia la puerta—. Sin embargo, una mano le impedía abrirla.

—Tú también tienes olor a veneno en ti. Qué extraño... —Leric sonrió extrañamente al joven sirviente.

—Chris no era un idiota y entendió inmediatamente la situación. Señaló furioso al sirviente con los dedos y rugió —¡Tú criatura vil! ¿Qué le has hecho a tu Señor!?— Luego saltó hacia el sirviente y le dio una buena paliza.

—La habitación se llenó de los gritos del sirviente y los gritos llenos de rabia de Chris.

—Leric los ignoró y continuó observando al Herrero inconsciente.

—Poco después, un Chris sudoroso se paró a su lado y preguntó —Sir Aethelwolf, ¿sabes algo sobre este veneno?— Este hombre fue capaz de identificar que su primo estaba envenenado con solo una breve olfateada. Parece ser un Alquimista hábil que se ocupó del estudio de los venenos. Quizás sepa qué pasa.

—Leric lo miró y luego hacia el joven sirviente que había perdido el conocimiento por la paliza —Podríamos haberle preguntado a ese tipo si tenía un antídoto consigo, pero creo que es demasiado tarde para eso.

—Chris se rascó la cara con vergüenza. No pudo controlar su ira antes y se desahogó en el sirviente —¿Hay algo más que podamos hacer, Sir Aethelwolf?— preguntó con una mirada esperanzada.

—Leric asintió con la cabeza —Hay. De hecho, este veneno no es tan difícil de curar. Solo necesito tres hierbas para eliminar las toxinas de su cuerpo, pero si quieres que salve su Hegel de ser afectado por el veneno, necesitaríamos dos hierbas más—. Estas son las cinco hierbas. Una… y …

—Chris enumeró las hierbas en un papel y después de escribirlas, inmediatamente pidió a otro sirviente que comprara las hierbas en la lista.

—Sir Aethelwolf, es nuestra buena fortuna que casualmente estés aquí —Chris estaba asustado cuando lo pensaba—. No sé qué hubiera pasado si no estuvieras.

—Después de convertirse en gerente de esta tienda de armas, hizo muchos enemigos. Esas personas podrían causarle problemas si algo le pasaba a su primo. Después de todo, Enrique Maynard era su único apoyo. Perderlo seguramente acabaría con su carrera e incluso su vida podría estar en juego.

—Gerente Chris, parece que Sir Enrique es víctima de una trama maliciosa —dijo Leric—. Si no me equivoco, debería estar pasando algo en la Casa Maynard. Sir Enrique es la persona más probable para heredar la posición de patriarca si el Conde, Sir Lucas Maynard, abdica de su posición.

—Las palabras de Leric dejaron estupefacto a Chris —Sus ojos se abrieron de par en par y sus mejillas gordas temblaban de arriba abajo. Luego frunció el ceño y lo pensó profundamente.

—Las palabras de Leric podrían ser posibles. Realmente había un conflicto de intereses entre los candidatos a patriarca de la Casa Maynard. Inicialmente, pensaban que nadie usaría trucos sucios ya que sólo eran una familia. ¿Quién sabía que alguien realmente envenenaría a su primo?

—Reportaré esto al patriarca —dijo Chris—. También llevaré a esa criatura vil a la familia y lo haré escupir el nombre del culpable. ¡Qué pandilla de bastardos!— Chris maldijo enojado.