webnovel

Capítulo 9: Los sentimientos de un corazón.

— Y dime chico, ¿Tienes novia?

En ese momento todos se quedaron en silencio por la pregunta de la chica.

— Y ¿si te dijera que no?

— Pues estaría genial.

— Qué lástima, porque si tengo novia y es la que está aquí.

Adán puso su brazo en los hombros de kotonoha y la acerco a él.

— ¿No es hermosa?

Kotonoha se sonrojó por la respuesta de Adán, pero se puso muy feliz de que en la presente como su legítima novia.

— Y ¿qué es lo que querías?

[Golpe] La chica se levantó y golpeó la mesa con mucha fuerza, que casi la quebró.

— ¿Qué, crees que juegas conmigo?

— ¿De qué hablas? Solo te presento a mi novia.

La chica quiso decir algo, pero rápidamente se tragó sus palabras y se sentó de nuevo.

— Y ¿cuál es tu nombre?

— Luna.

— Oh, que bonito nombre.

— ¿Cuál es el tuyo?

— Tú puedes llamarme, Adán.

Los chicos callados se sorprendieron de la respuesta de Adán.

— Oye, no puedes hacer eso.

Taisuke como un cagón, intento derribar las mentiras de Adán.

[Golpe] Adán patero a Taisuke por debajo de la mesa y evitar que derrame los frijoles.

— ¿Qué?

— Cuando yo esté hablando, tú te callas. — Dijo Adán en su mente—

[Golpe]

— ¿Puedes callarte?, eres molesto.

La chica Luna pateó a Taisuke por el ruido que hacía. Luna era alguien que entreno la magia y la fuerza física, por lo que el golpe en verdad dolió.

— Aheche, mi pierna… ¿Qué te pasa?, ¿estás loca?

— Estoy hablando con el dueño del circo, no con sus animales.

— Y ¿cuál sería la razón de venir hacia nosotros?

— Oigan…

— Bueno, me gustaría invitarlo, hacia un lugar muy divertido.

— Oigan me podrían ayudar, me duele mucho.

— Cuando dices: invitarlo, ¿es a mí y a los demás?

— Por favor ayúdenme, escucho borroso.

— No, solo a ti.

— Lo siento, tengo que declinar.

Adán no lo pensó dos veces, aunque tiene una teoría de por qué lo invitaba, él no quería nada con ella. Él ya tenía a kotonoha, después de verla en persona ya se olvidó del plan de estar con las otras chicas y solo quería que ella sea su esposa

[Golpe]

— ¿Me estás rechazando?

Luna golpeó de nuevo la mesa y esta vez dejo una marca.

— ¿Algún problema?

— Niño, será mejor que lo reconsideres.

— ¿Qué quieres?

Luna trató de calmarse y le dijo a Adán.

— Este es la ubicación de dónde voy a estar esta noche, ven y visítame hoy.

El tono de Luna ya dejó de ser solicitud y se convirtió en una orden. Luna le entrega a Adán una hoja de papel donde estaban escritos algunos garabatos, Este último aceptó la hoja y… [Romper] Adán, sin compasión, rompió la hoja en varios pedazos y la tiró aún tacho de basura cercano.

— Tú…

— Lo siento, ya te dije que tengo novia.

Luna estaba más que enojada, en su vida nadie la había desobedecido, ni ido en contra de sus órdenes, pero este chico que no sabe la diferencia entre el cielo y la tierra, la está rechazando. En su mente solo estaba una cosa.

— Si la presa se quiere ir, solo romperle las piernas y si aun así no se somete y trata de seguir escapando, solo mátala.

Luna trató de calmarse un poco de nuevo y miro a kotonoha.

— ¿Qué tiene esta perra que yo no?

— Eso no es tu problema.

Luna miró el cuerpo de kotonoha y se detuvo en sus pechos.

— ¿Son sus tetas?

— Oye ya estuvo, ya te dije que no.

Aunque Adán subió un poco la voz, este seguía con su sonrisa. A Luna ya no le importo más y se volteó mientras se alejaba del grupo.

— Qué mujer más terrorífica.

— Eso ya no importa. Solo ignorémoslo y divirtámonos.

— Si tienes razón.

Los chicos siguieron sus actividades sin complicaciones, solo tuvieron que evitar la mirada de las chicas y algunos chicos al rededor. Cada cierto tiempo una chica se les acercaba para tratar de crear una relación con Adán, pero al escuchar que tenía novia solo se retiraron.

Para todos fue un día muy divertido, pero para ciertas personas fue más que divertido, fue un día lleno de emociones. Para Adán, era un día muy emocionante.

.

— Oye ya se tardaron.

— Es normal que las mujeres se tarden al cambiarse.

— Y si las buscamos.

— ¿Quieres entrar al vestidor de chicas?

— Bueno, de paso ahí podemos ver algo más.

— Jejeje. — En los pensamientos de Adán— Si no estuviéramos en un lugar público ya te hubiera arrancado la boca y los ojos, maldito simio con retraso— No, solo esperemos algo más.

Mientras Adán y el ejemplo de que la humanidad no evolucionar estaban hablando, llegó kotonoha.

— Makoto-kun. Lamento haberte hecho esperar.

— No hay problema, recién acabo de llegar… ah no espera, esa es otra frase para otra ocasión.

— Qué divertido eres Makoto-kun. Una pregunta ¿El próximo domingo tienes algo que hacer?

— Mmm... la verdad no.

— Genial, no podrías venir de nuevo a mi casa, para visitar a Kokoro.

— ¿Kokoro-chan?... Ah, sí, tu hermana, claro, no hay problema.

— En serio, eso es genial, ella no deja de molestarme con que te traiga de nuevo a casa.

— Esa niña te trae dificultades eh.

— Sí, si no te importa también…

Kotonoha se acercó más a Adán y le tomo de la mano con mucha fuerza, pero a la vez con delicadeza.

— Pensamientos de kotonoha—Es muy suave, como lo hace para mantener una piel tan suave, pero según él es natural, que envidia, desearía tener una piel como la de él. Más importantes, por más que miro su cara no puedo dejar sorprenderme, desearía tenerlo solo para mí, creo hacer que se ponga más maquillaje para ocultar su apariencia, no bastara, podría cubrir su cara con una máscara o dejar de salir a la calle y al colegio…

— Pensamiento de Adán— Porque mi mano me duele mucho, que es eso suave que se aprieta a mi hombro y que ese líquido que veo en el suelo.

Mientras que una loca nacía, las demás chicas llegaron a dónde estaban los tres esperando.

— ¿Interrumpimos algo?

— Mmm, no.

— Jejeje, con que cariñosos.

Hikari trato de poner a la pareja en un momento incómodo para divertirse un poco, pero por alguna razón sus propias palabras le atravesaban el pecho.

Sekai al ver que Adán y Kotonoha seguían esperándolos, se enojó y llamo a Adán.

— ¡Makotoooo!

— Eh, ¿qué hice?

Sekai se acercó a Adán y lo jalo.

— Tenemos que hablar, ¿vienes conmigo un rato?

— ¿Puedo rechazarlo?

— No.

— ¿Entonces que puedo hacer?

— Vamos.

Las chicas no sabían qué decir, pero no pensaron que era algo importante.

— ¿Por qué no te fuiste con Kotonoha? Ya todos habíamos estado de acuerdo en hacerles tiempo para que partan.

— Lo siento, no lo sabía.

— Todos los estamos apoyando, así que despierta.

— Aunque no haya aprovechado tus planes, yo estoy haciendo mis propios avances con kotonoha

— Mmm…

— Tranquila, yo sé que antes actuaba como un tarado, pero ahora sé qué hacer. Solo déjame tratar mi relación.

— Mmm…

Adán miró los ojos a Sekai, dentro de esos ojos se veía la tristeza que era reflejada en frustración a través de sus acciones.

— Dime, ¿qué es lo que en verdad te molesta?

— ¿Eh?...

— Aunque no sé qué es lo que hay en tu corazón, sé que armar tanto revuelo por tan pequeña cosa es ilógico.

En ese momento Sekai intento voltear e irse a correr, pero antes de que partiera, adán la detuvo agarrando su mano.

— Dime la verdad y no trates de huir, solo dime ¿Qué es lo que hay en tu corazón?

Sekai volteo la mirada al suelo y [Goteo].

Unas lágrimas empezaron a caer de los ojos de Sekai y una sensación punzante desde el pecho que la mataba por dentro.

— Sekai.

Adán la acerco a Sekai y la abrazo, al ser abrazada y mantener su cabeza en el pecho de Adán, ella se sentía mejor, pero por alguna razón no dejaba de llorar.

— No te detengas, solo deja que tus emociones salgan.

Sekai abrazo a Adán más fuerte y dejo salir todo lo que sentía.

— Makoto, yo… te.

— No digas nada. Solo déjame m…

[Beso] Sekai ya no pudo soportarlo más y dejo salir su más profundo sentimiento y deseo. Sekai beso a Adán y con el mismo impulso, abrazo a Adán con mucha fuerza y metió su lengua en la boca de Adán.

— No, espera, no puedes hacer esto, déjame… por lo menos hazlo despacio y en un lugar más privado para que puedas violar… Espera no, no puedo, déjame salir. — Dijo Adán en su mente—

Adán opuso un poco de resistencia, tratando de alejarla de él, pero el asqueroso no parecía querer que ella pare.

— Makoto, Makoto.

Sekai, siguió besando a Adán, con mucha más fuerza le metió la lengua hasta la garganta de Adán. Mientras la legua de Sekai profanaba la boca de Adán, su mano empezó a bajar hacia la parte inferior de Adán.

Adán ya no pudo más, por más que su corazón le decía que se deje llevar, su mente y cuerpo le hicieron alejar a Sekai.

— Creo que seguir nuestro entrenamiento especial en un lugar como este es malo. No nos demos llevar.

Adán puso su mano en la cabeza de Sekai y quiso hacer como si nada pasara.

— Vamos, los chicos nos esperan.

Adán le dio la espalda a Sekai mientras se retiraba.

— ¿Vas a ignorar lo que paso ahora?

— Mmm…

Sekai se acercó hacia Adán y lo abrazo desde atrás, apretando sus pechos en su espalda. Ella no lo dejaría ir, por mucho tiempo aguanto sus sentimientos hasta el punto de ignorar lo que siente para hacer feliz a la persona que ama, aun a costa de su propia felicidad, pero ahora no quiere ocultarlo más.

— Makoto, te amo.

Fin del capítulo 9: Los sentimientos de un corazón.

Próximo capítulo: Viejas heridas.