Prólogo

Todo empieza en un mundo oscuro, un cielo abisal carente de cualquier luz sobre un desierto rojo que se ve y se mueve como carne viva

No hay plantas, pero la propia naturaleza orgánica del suelo es irregular, y de este salen lo que parecen extrañas extremidades y órganos de diversos tamaños y formas

La única fuente de luz son innumerables cristales blancos, la mayoría medidos en centímetros, muchos en metros, unos pocos en kilómetros, que desde la distancia parecen estrellas que adornan la tierra en vez del cielo

Y estos dejan ver que el aire no es tal, corrientes delatan su naturaleza líquida, pues este paraje es el fondo de un océano. Pero no un océano de agua, el fluido que lo cubre todo casi no ejerce presión, ni resistencia al movimiento de los objetos o la transmisión de la luz

Se ve, escondido bajo la sombra de una protuberancia, a Jeff, un humanoide que viste un simple buzo blanco con capucha, y unos pantalones y calzado negros similarmente poco llamativos, con la contextura física de un joven de 20 años aproximadamente y pelo negro que le cae hasta los hombros… pero su piel es blanca como el hueso y sus características faciales dejan notar una ausencia de nariz visible y unos ojos y boca bizarramente grandes

Jeff: Por fin no tengo que volver aquí

Detrás de él se genera una silueta oscura como si fuera su propia sombra, pero extrañamente no es totalmente oscura, mostrándose con expresiones faciales distintas

Ffej: NO ESTÉS TAN SEGURO

Jeff: Ya no tengo que depender de este lugar para viajar

Ffej: ¿CÓMO SABES QUE A ESE QUE SIGUES AHORA ES MEJOR?

Jeff: Da la primera impresión de todo menos de ganador al premio del hijo de mil putas multiversal

Ffej: JAJA, EL VENENO MENOS TÓXICO

Mientras hablan, en un terreno más alto el suelo parece inflarse, como si una criatura estuviera moviéndose bajo tierra como si fuera una sábana. La criatura parece notar a Jeff, y se le acerca un poco. Jeff y Ffej lo notan

Ffej: CARAJO, TE OYÓ

La criatura sale del suelo, aunque sigue como "conectada" con éste. La criatura es como una red enmarañada de tuberías flexibles de carne, tan roja y palpitante como el suelo, su parte más gruesa y central es una boca grande y siniestra, que también tiene una especie de tubo en el interior. Tiene un único ojo al final de uno de sus tubos, con un iris que cambia rotundamente de tamaño dependiendo de su emoción. Tiene otros tentáculos que tienen orificios como oídos en las puntas, y apuntan para todas direcciones posibles

Se le conoce como "El Acechador"

Acechador: ¡Jeff, gracias por ayudarme en encontrarte!

Jeff: … ¿Ahora te volviste más irónico?

Acechador: Sólo contigo ¿Te parece una mejor comunicación?

Jeff: Ya me di cuenta que sólo quieres burlarte

Acechador: Entonces todavía no entiendo cómo hablarte ¿No era que contigo es todo una burla?

Jeff: ¿Y por qué mierda te importa eso ahora?

El Acechador empieza a agitarse hacia los lados, como si se estuviera riendo

Jeff lo observa con una mezcla entre exasperación y confusión, pero la expresión facial de su "sombra" es bastante más alarmada

Ffej: TIENES QUE CORRER

Acechador: ¡Te oí, Jeff! ¡Ahora todos saben! ¡Saben que sigues al Operador!

Ffej: ALGUIEN ESTÁ MIRANDO, ALLÁ ARRIBA

Jeff se queda serio, y se gira hacia su izquierda. Desde un terreno no demasiado alto, lo observa un ser de la talla de un oso polar, pero con extremidades más delgadas y largas que lo hacen incluso más alto

Su cuerpo es vagamente humanoide, a pesar de tener una pose cuadrúpeda, y está totalmente cubierto de pelaje negro con excepción de su cabeza, que se asemeja al cráneo de un animal con boca alargada

El Comesemillas

Jeff empieza a correr, y el Acechador lo sigue a su misma velocidad, mientras se sigue agitando, aunque sin perder de vista a Jeff con su ojo y varios de sus oídos

El Comesemillas sale corriendo también, persiguiéndolo. Aunque su cuerpo es vagamente mamífero, una vez se pone en movimiento este recuerda más a como corren las arañas

Jeff se gira mientras corre, mirando al Acechador

Ffej: ESTÁ SIGUIENDO AL ACECHADOR. LIBÉRATE DE ÉL

Jeff: ¡Gracias por la obviedad, ahora dame soluciones!

Jeff escapa, siendo ágilmente seguido por el acechador, y el Comesemillas empieza a alcanzarlos. Jeff mira bien al acechador, y saca una esfera metálica con símbolos ininteligibles y una flexibilidad impropia del metal del que parece estar hecha. La arroja hacia el acechador, y éste lo nota, pero no la esquiva a tiempo. La esfera se comprime imposiblemente sobre sí misma, momentos antes de liberar una explosión con un radio antinaturalmente preciso, que desintegra al acechador

Jeff corre hacia un lugar escondido, y poco después el Comesemillas llega. Empieza a buscarlo, y Jeff se aleja de él medio despreocupado. Sin embargo, nota algo, y ve que aparece otro cuerpo del asechador arriba de él. También se agita

Acechador: ¡Qué bueno que llamé a otro! ¡Me burlo de ti! ¡Me burlo de ti!

Jeff: Hijo de…

El omnipresente líquido transparente sufre una corriente brusca que lo hace visible, y Jeff nota ese movimiento, al mirar hacia arriba encuentra al Comesemillas, trepado sobre una protuberancia, mirando hacia él

Comesemillas: Retrasar la caza porque la presa es invisible es un golpe de suerte que no voy a darte

Jeff sonríe, aunque algo nervioso

Jeff: ¿Sabes que a veces hablas como retrasado?

El Comesemillas salta hacia él, y Jeff lo esquiva con esfuerzo. El Comesemillas le ataca con sus garras, aunque Jeff es ágil y logra mantenerle el ritmo. El Acechador los mira fijamente, mientras sigue señalando a Jeff con los oídos

Comesemillas: Y aun así, pretendes actuar como cazador

El Comesemillas lo acorrala hasta una protuberancia parecida a una roca alta con hueco de forma circular. Jeff saca el cuchillo, y se empieza a ver desquiciado

Jeff: ¿Desde cuándo pretendo?

El Comesemillas corre hacia él. Jeff sostiene el cuchillo, sonriendo con locura

Jeff: SOY UN SUPERVIVIENTE

Jeff corre y aprovecha el hueco en arco de la "roca", caminando por la pared y haciendo una voltereta. El Comesemillas llega hacia él, pero Jeff salta lo suficiente para pasar por encima. El Comesemillas casi se choca, pero se detiene con las manos. Jeff, al llegar al suelo, le acuchilla la parte trasera de ambas piernas

Jeff sale corriendo, mientras el Comesemillas intenta equilibrarse y girarse. El acechador ve que Jeff se dirige hacia él, y empieza a moverse velozmente hacia atrás

Acechador: ¡No me alcanzas!

El acechador parece sonreír, mientras huye "caminando hacia atrás" a una velocidad similar a la que Jeff lo persigue. El escenario deja mostrar (ya visto antes) que está rodeado de varios caminos con el terreno irregular, y varias "rocas" con deformaciones raras

El acechador empieza a girar por un camino, y observa la esquina donde vendría Jeff. Sin embargo, sale otra especie de bomba, y ésta explota pero como luz, mientras emite un sonido de baja frecuencia. Acechador se estremece un poco, alejándose de la explosión

Llega a un punto que sigue observando, pero ve que Jeff no sale a perseguirlo. Enfoca los oídos, y escucha unos pasos alejarse. Se ve a Jeff huyendo, aprovechando el terreno

Empiezan a aparecer varios acechadores más a lo lejos, yendo en dirección de Jeff, aunque se nota que ahora están algo más perdidos. Jeff ve que hay una pequeña estructura de cristal, que tiene un hueco en el interior y un dodecaedro transparente enfrente.

Hay una especie de máquina, crecida en el cristal mismo de la estructura y hecha de dicho material, que emite un rayo de luz blanca concentrado, casi un láser, que se encuentra a poco de pero sin tocar el dodecaedro

Jeff golpea el dodecaedro para hacerlo girar y mueve el láser hacia este, de modo que choque con el dodecaedro en movimiento, y al hacerlo el láser se descompone al pasar por el dodecaedro y sale por el otro lado como una proyección sobre una superficie plana de la estructura cristalina, en la cual aparece un portal, que cambia rápidamente de aspecto de lo que muestra dependiendo de la velocidad que gira el dodecaedro

Se para, y apenas lo hace, Jeff salta hacia el portal, desapareciendo. Sin embargo, un acechador llegó a poder observarlo, y el Comesemillas lo alcanza

Acechador: Se escapó

Acechador mira al Comesemillas. Éste ni se inmuta

Comesemillas: Nadie escapa realmente

El acechador ve cómo el Comesemillas corre hacia el portal y entra en él. El acechador parece "abrir" sus oídos, donde no es que abre más el agujero, sino que "desenvuelve" los orificios, además de abrir un poco más la boca

Acechador: Hay que avisarle

Se ve un lugar donde está oscuro, pero extrañamente hay oscuridades más oscuras que ese lugar, las sombras se agrupan en un espectro concéntrico que cada vez deja ver menos, todas centralizadas en un punto específico. Un acechador sale algo cerca, por encima de la "oscuridad menos oscura", y ésta deja mostrar el mismo tono de rojo del suelo como antes

Acechador: Se encontró a otro seguidor del operador

Asechador: El saboteador en este caso resultó ser un traidor, adquirió la misma invisibilidad a nuestros ojos de sus otros agentes

Entre la oscuridad más oscura y lejana, se abren dos ojos luminosos, totalmente blancos

Acechador: Jeff

Las sombras más oscuras se amontonan en el punto de los ojos

Acechador: El que hace chis-

Heraldo: ¿Dónde está?

Acechador: Se escapó a otro universo. No tuvo tiempo en cerrar el portal, nos la hizo fácil

Las sombras se juntan hasta formar al Heraldo del fin de los tiempos, que se deja sobreponer ante todo el escenario más iluminado. Se muestra como una figura humanoide pero totalmente oscuro, así mismo "unido" a sombras que hasta parecen tangibles que forman una especie de armadura, y con dos largos cuernos en la cabeza, cada cuerno a su vez lleno de espinas 

Heraldo del Fin de los Tiempos

Acechador: El Comesemillas lo persiguió

Heraldo: No será suficiente

Acechador arquea el Ojo

Acechador: Será invisible, pero no invencible

Heraldo: No se trata sólo de matarlo

El Heraldo camina, y mientras lo hace, es elevado por sombras que funcionan como escaleras

Heraldo: Todo aliado es un peón impredecible. Necesita rellenar las debilidades de su líder

Las sombras crean como una especie de "alfombra negra" ante el Heraldo, y él camina por ésta con una presencia superada

Heraldo: No necesito aliados, e indudablemente no es el mismo caso con nuestro enemigo

El Heraldo se muestra imponente

Heraldo: Sólo necesito destruir estas alianzas

Fin del Prólogo