Creciendo, confrontando peleas peligrosas y peleando con mi hermano, llego el día del enfrentamiento que esperábamos Yujiro y yo, nos dirigimos a las profundidades del bosque cerca de la guarida de los tigres y con nuestra altura de 1.6 cm con lo poco que nos queda de la ropa que trajimos de los primeros días, sin armas por que tanto Yujiro como yo odiamos tener cosas en las manos silenciamos nuestros sonidos.
Pensando que estamos a punto de cumplir 10 años creo que nuestro linaje es el mejor y siempre me provoca una sensación de orgullo llegamos a nuestro primer combate a muerte desde que estoy en este mundo.
Hay un total de 6 tigres 4 adultos y dos pequeños, de color blanco como la nieve, iniciamos nuestro plan de ataque emboscando a los dos hombres que salen a cazar, al parecer según mis recuerdos los tigres no son nativos de Japón y los más cercanos al archipiélago japonés se encuentran en los bosques siberianos de Rusia por lo que estos pueden ser los únicos que hay en todo Japón de su tipo por lo que quiero conservar a los pequeños y domarlos para que sean nuestros compañeros en futuros viajes pues sé que tanto Yujiro como yo necesitamos experimentar el mundo y no podremos estar todo el tiempo juntos.
Intentare meterle todo el sentido común que pueda y evitar que los errores como violaciones y masacres innecesarias, en lo personal no me gusta América, pero no me gustaría que sus soldados estuvieran molestando a mi familia.
Pasando las 8 de la noche tal como esperamos dos salieron y se separaron, con una mirada salvaje nos vimos a los ojos y fuimos por nuestras presas.
...........................................................................
Corriendo sin parar unos minutos y cubriéndome de arbustos bajo la luz de las estrellas altamente brillantes espero el comienzo de mi primera excelente pelea, siento como me hierve la sangre y mi respiración es algo errática, como si mi cuerpo se moviera solo, es extraño pues no siento miedo es más como si fuera una expectativa, mi corazón bombea sangre y mis ojos se sienten como si observara hasta la más mínima partícula en el aire.
Comencemos con la caza.