La madre de Jack no había llevado a su hijo al hospital para que le curaran la herida de inmediato para complacer a Pete.
Durante muchos años, su familia había hecho lo posible por convertir a Jack en la mano derecha de Pete. Por desgracia, tanto Pete como Justin eran muy indiferentes a los demás.
Esto era especialmente cierto porque Pete también tenía un autismo leve, lo que le llevaba a no tener a nadie cerca en casa. Por eso la madre de Jack vio este incidente como una oportunidad, a pesar de su lesión.
Ella dijo: —Sí, Pete, dile lo que pasó. Rápido, dile a tu padre lo molesto que es ese chico. A menudo pierde los estribos y acosa a los demás sin motivo. Es demasiado dominante. También es muy salvaje y no tiene ningún tipo de modales. Haz que tu padre lo eche de casa, o llévatelo y haz que lo eduquen antes de que vuelva a instalarse. Si no, con tantos niños en la casa, ¿quién sabe quién sería el siguiente en ser mordido?
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