Capítulo 231: La paciencia tiene sus recompensas

"¡Ah! Yuki-sama~..."

Gimiendo en placer, Demeter apretó sus puños, hoy era su día, en el que pasaría dos horas con Yuki.

Así mismo aprovecho para probar de esos deliciosos masajes que Freya recomendó, aunque es caro ella no se arrepintió, no con esas manos mágicas recorriendo su cuerpo.

"Relájese Demeter-sama~"

Yuki por otro lado sonrió, mientras aplicaba loción por todo el voluptuoso cuerpo de esta Diosa.

Como dueño del club, el tenia que cumplir su palabra y atender a estas Diosas.

(Con esto por fin podre alardear que probé una deidad)

Después de haber tocado y masajeado a varias diosas, su popularidad aumentó mas que antes, afortunadamente gracias a las reglas que el mismo dicto, las Diosas mantuvieron su distancia y su vida diaria no se vio afectada.

Después de todo, si una de ellas se atrevía a romper las reglas, su castigo seria severo y con el boleto dorado, las Diosas se mantuvieron obedientes.

"Ahhhh~~"

Gimiendo en voz alta, la entrepierna de Demeter sufrió un fuga, ella habia llegado al clímax y con Yuki tocando su parte sensible, Demeter sintió un profundo placer.

"Bien hecho Demeter-sama"

Tocando las mejillas sonrojas de Demeter, Yuki le dio un profundo beso, causando mas caos a su mente.

Aunque Yuki admitió este club es rentable, la cantidad de dinero inicial fue buena.

Y con el paso del tiempo, estas mujeres entrarían en un circulo vicioso del placer.

Tener fama y no aprovecharlo, seria un desperdicio, por lo que Yuki era mimado como el niño de azúcar de estas Diosas, tocar y jugar con ellas como el quería, este club era mas bien su harem en donde las Diosas pagaban por ser miembro.

Pero esto no era su culpa...

¿Quién dijo que los Campeones sean tan famosos?

Además también encontró otro uso para las cosas inútiles del chat, ese maldito capitalista vendía figuras usándolo como modelo.

Era un comerciante negro...

Pero Yuki era aun mas negro, ya que compro varias de esas figuras y estafo a estas mujeres.

¿Y el resultado?

Se vendieron como pan caliente...

Esto lo dejo sin palabras, ya que no podía entender como funcionaba esto.

Afortunadamente el Chat tenia la opción de traspaso de puntos Karma.

Y a diferencia de Hestia, estas Diosas eran ovejas gordas de puntos, por lo que Yuki las exprimió en seco.

Esto lo alivio ya que pudo ver algo de su dinero.

(Bien hecho, nada es mas reconfortante que ver a mujeres competir por ti)

Alabándose a si mismo por ser tan inteligente, Yuki le dio una ultima palmada al trasero de la Demeter y salió de la habitación.

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"Gracias por el trabajo Yuki-sama"

Una vez que termino, Yuki se encontró con su acosadora, Freya quien se inclino y agradeció con una sonrisa.

Pero al ver esa sonrisa, Yuki entrecerró los ojos, al mismo tiempo que estiro su mano, Apretando el jugosos pecho de Freya con Fuerza.

"Espero que este listo"

"¡Ah! Por... Supuesto... Yuki-sama, mis hijos ya están preparados"

Temblando en estasis y dolor, Freya trato de contener su gemido, desde que Yuki entro a su casa, ella cayó en sus garras sin ninguna resistencia, mas bien ella no quería resistirse, por lo que ahora ella podría considerarse su mas leal sirviente, con su influencia y poder, atrapar a todas en una red era fácil.

"No me decepciones"

"No me atrevería Yuki-sama"

Mirandola con desprecio, Yuki fue tragado en la oscuridad, Freya por otro lado tembló al ver su mirada, al mismo tiempo que su entrepierna comenzó a mojarse, su lado 'M' comenzó a mostrarse.

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"Bueno, es hora de ver a mi Renard"

*Puff

Disfrazándose de nuevo, Yuki estiro sus brazos, esto ya era una rutina, por el día se mantenía cazando en la mazmorra y por la noche salía a relajarse.

Aunque debido a su nueva casa, tanto Kurumi como Mana no lo dejaron tranquilo, cada vez que entra la noche, ambas iban a su habitación para atacarlo, Mana por placer y liberar su estrés y Kurumi para atarlo y evitar que salga, así mismo hacer crecer mas su cristal Sephira.

Pero afortunadamente tanto Est como Hestia detuvieron a esas dos, Est cómo su espíritu contratada, dormían en la misma cama y Hestia invento la excusa que se acostumbro a su calor, por la cual durmió también en su cama.

Aunque al principio pensó en echar a patadas a Hestia, al final no se negó, ambas era buena excusa para liberarse de las garras de sus novias y así salirse con la suya.

Y funciono, pero tenia que tener mucho cuidado, en estos días que Kurumi fue invocada, tanto ella como Mana llegaron a una tregua, pasaron de matarse a compartir información entre ellas, por lo que la seguridad nocturna era mas feroz.

Esto hizo sudar frio a Yuki, ya que mas de una vez casi lo atrapan y sintió un profundo miedo por su pequeño hermano, afortunadamente el es un ninja, sus métodos de encubrimiento son superiores al de Kurumi, por lo que podía evadir las sombras.

Desde que llego a este mundo, su vida estaba llena de mujeres, desde el amanecer hasta el anochecer.

Incluso él no sabia cuando fue la última vez que durmió.

"Arce-sama bienvenido de vuelta"

"¡Arce-sama! ¡Lo hemos estado esperando!"

"¡Arce-sama!"

"Hola señoritas~"

Llegando al distrito del placer, su reputación era bien conocida entre las prostitutas y Berbenas, quienes al verlo lo rodearon y lo tomaron de los brazos, él llego a ser muy popular entre ellas.

Y habia tres motivos...

Una, porque el pagaba muy bien por la noche, mas que el cliente promedio, dejando buenas propinas...

Dos, por que era un caballero y las trataba muy bien.

Y tres, su técnica sexual era muy adictiva, tanto quienes la probaron se volvieron incapaces de olvidarlo.

En especial las amazonas, ellas al tener un apetito sexual mas fuerte que un humano, Yuki era su hombre favorito.

Y debido a esto, las Berbenas eran atraídas como moscas en miel y Yuki no desaprovechó esto, ya que las controlo con leve Genjutsu, para ellas una palabra de Yuki era suficiente para volverse locas.

Se podría decir que su arduo trabajo esta dando frutos, ya que con esto el distrito del placer cayo en su garras, sin necesidad de visitar a esa molesta Diosa.

Aunque hubo contratiempos, al final el resultado fue el deseado.

"Arce-sama... Porque no viene a mi habitación, hay muchas cosas que deseo hablarle~"

Sujetando su brazo, Lena la amazona trato de llevarlo, sin embargo Yuki se negó.

"Hoy no, aun tengo algunos pendientes~"

Guiñando el ojo, Yuki soltó su brazo así mismo, miro hacia una dirección en especial, donde otra amazona le hizo señas.

"Mou~"

Hinchando sus mejillas en insatisfacción, Lena dejo caer sus hombros.

"No te preocupes, que si termino pronto, voy a visitarte"

"¡Si!"

Tocando con cariño sus mejillas, Yuki se alejo, mientras que Lena asistió con felicidad.

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"Señorita Aisha~ me alegro verla"

"¡Hmp! ¿Qué haces? Haruhime te esta esperando"

Resoplando con frialdad al saludo de Yuki, Aisha apuntó a una habitación, este hombre habia pagado por ella después de todo y dejarla esperando no es de caballeros, en especial con este bastardo coqueteando con otras mujeres.

Además, desde que este hombre llego al distrito, muchas cosas habían cambiado, Haruhime ahora sonreía con mas frecuencia, además que la atmosfera del distrito era mas animando.

"Me duele que me veas así Aisha... Vamos también nos hemos divertido antes"

Tomando por la cintura a esta mujer, Yuki acerco su rostro, dando un leve beso en su cuello, al que Aisha tembló.

Esta mujer se hacia la difícil, pero al igual que las otras amazonas ella le gustaba que le dieran duro...

"¡Cállate! ¡Tienes prohibido decirle esto a Haruhime!"

Tratando de alejar al hombre frente a ella, Aisha se sonrojo, después de todo ella también habia compartido la cama con este hombre antes, aunque odiaba admitirlo, el era muy bueno en eso y también muy dentro de ella esperaba pasar otro buen rato con este hombre, aunque su consciencia le picaba, ya que sabia lo mucho que este hombre significaba en la vida de Haruhime y meterse con el hombre de su protegida, no era una buena sensación.

"Si tu lo dices~"

*Pa

"¡¡Hm~!!

Dándole un beso en sus labios, Yuki no se contuvo y acarició su regordete trasero, así mismo lo abofeteo con fuerza, causando que Aisha se sorprendiera.

" ¡Bastardo! "

" Hehehe"

Con una sonrisa en el rostro y lamiéndose los labios, Yuki le guiño un ojo antes de caminar hacia la puerta.

Aisha por otro lado no sabia que pensar, ella ya habia descubierto su identidad y aunque sabia que si su diosa se entera, ella al igual que las otras Berbenas serian exiliadas, además que el distrito dle placer entraría en caos, Aisha pensó que valía la pena, ser capaz de compartir la cama con alguien de escala mundial, es algo que incluso su diosa sueña por hacerlo.

Y aunque hubo muchas molestias con su capitán, ella al igual que las otras Berbenas lo protegieron de ese sapo, a pesar que no lo necesitaba, Aisha sabia que Yuki no podía revelar su verdadera identidad, por lo que ella lo apoyo en eso.

Además, este hombre le prometió que la ayudaría con su situación y con Yuki siendo alguien que salvo el mundo, Aisha no pensó que le mentiría.

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Nota Autor: Lo veo de nuevo a los 680