Algunas arañas tenían ocho patas y otra vez diez, siendo de dos, tres y hasta cinco metros de altos.
Patas gruesas, peludas, múltiples ojos y el líquido que caía de sus bocas evidenciaba que eran venenosas.
Las sogas eran sus telas de araña y esas arañas se movieron directamente al edificio y Aurora de inmediato se dio cuenta de que no venían a saludar.
—Ten cuidado. La gravedad de este lugar hace que volar sea peligroso. Es preferible saltar o usar plataformas. Aunque dudó que duren demasiado.
Aurora, que estaba por saltar para darse vuelo, se detuvo al escuchar a su sistema y mirando hacia abajo, balanceó su espada.
El corte incoloro rompió la soga de la araña y justo cuando las arañas estaban por caer, la que iba primera lanzó otra soga de su trasero pegándola al edificio.
Luego con sus patas lo volvió a unir con un nudo y se siguieron moviendo.
Aurora no se inmutó y envió volando varios cortes incoloros, no solo al principio de la soga, sino que al final y si bien la isla flotante estaba a unos cien metros, el corte fue lo suficiente como para atravesar la soga.
"…"
Las arañas cayeron y algunos trataron de tirar sus telas de araña para balancearse a la parte baja de la isla, sobreviviendo.
Para Aurora fue obvio que esas arañas la querían atacar y tal idea se hizo evidente cuando más arañas aparecieron lanzando telas de araña.
De una tela de araña pasaron a tres y Aurora, que las veía moverse, frunció el ceño otra vez.
Aurora dejó salir un dron de comunicación y luego configuró su reloj holográfico para que pudiera conectarse con las personas cercanas.
"¿Aurora?" Dudó Sun Liang al ser contactado.
"Despierta a los otros. Y haz que busquen todo lo que puede ser útil. Unas arañas gigantes quieren venir al edificio." Dijo Aurora y viendo que las arañas seguían babeando, añadió. "También trata de guardar los restos de las personas."
No mencionó que no deseaba verlos devorados por arañas de pelaje negro y peludas.
Balanceando su espada otra vez, las telas de las arañas volvieron a ser cortadas y esta vez una araña saltó y repelió el corte del inicio de la tela de araña.
"Yo… Entiendo."
Escuchando la respuesta, ella dejó que el dron de comunicación volara con sus propulsores.
Estos drones los utilizaría Liam o Minerva si alguno de ellos estuviera a su lado, pero…
—Vigilaré los alrededores. Ten cuidado.
Su sistema dio la respuesta que ella deseaba y Aurora dejó los drones para que rodearan el edificio y la mantuvieran atenta.
Acercándose al límite del edificio, pisó el vacío y trató de crear una plataforma con las botas que tenía equipadas.
La plataforma duró un segundo antes de temblar y desaparecer, entonces cuando intentó volar, fue inestable y no funcional.
Su sistema fue certero con la idea de que no era bueno volar y Aurora en respuesta se lanzó del edificio.
Todavía no comprendía este mundo y tampoco podía investigarlo, al menos no cuando esas arañas estaban atacando el edificio.
Así que la respuesta fue simple.
"…"
Cortando las telas de araña, Aurora piso la ventana del edificio y salió disparada hacia adelante, cortando dos arañas por la mitad y usando la espalda de otra, saltó y giró en el aire.
Los cortes verdes volaron para todas partes y cuando la gravedad la llevó hacia abajo, produjo otra plataforma por un segundo, antes de volver a saltar a la isla.
Las arañas y las telas de araña por la cual se movían fueron cortadas y aquellas arañas que cayeron, se sostuvieron de la parte baja de la isla y escalerón.
Entonces, mientras ella volaba hacia la isla, otras arañas aparecieron y una araña de cinco metros la observó y…
"Ugg…"
Aurora gruñó al pitido en sus oídos que parecía atravesar su mente y aunque fue fuerte, no lo suficiente para distraerla y ella, contorsionando su cuerpo para esquivar un escupitajo verde, lanzó un corte incoloro.
Varias arañas fueron cortadas a la mitad y sus entrañas cayeron al suelo.
La araña gigante esquivó hacia atrás y si bien fue lenta, la velocidad fue de un rango S.
Cayendo en la isla mientras su peso creaba un cráter, Aurora pudo percibir los alrededores y…
"¡Mierda!" Exclamó con cierta sorpresa.
La isla en la que había caído era una maldita selva y toda esa selva estaba llenas de arañas.
Cientos y cientos de arañas y en este momento varias salieron rápidamente queriendo aplastarla, clavarle los colmillos y algunas cortarlas con sus patas afiladas.
Aurora, que ya no estaba en el aire, se movió, cortando a las arañas por la mitad, esquivando y cortando más arañas.
El aura de rango S emanó de ella queriendo parecer lo más amenazante posible y sus cortes rojos partieron los árboles a la mitad y cortaron las patas, cuerpos y cabezas de esas arañas.
Ensangrentando todo el suelo, Aurora volvió a balancear su espada, esta vez con un aura incolora y dividió todo lo que estaba al frente de ella.
Un corte que avanzó más de cien metros, cortando hasta las piernas de la araña de rango S.
*Boom*
Dándole una patada en la cabeza de la araña, la onda explosiva de sus pies empujó los restos de la criatura y provocaron un pequeño temblor.
Sin embargo, incluso de ese modo las arañas no se rindieron.
—Hay movimiento en otras islas. Arañas similares están por tirar sus telas al edificio para moverse.
Aurora al escuchar la advertencia de su sistema volvió a balancear su espada otra vez, queriendo provocar la mayor destrucción posible y luego, dándose vuelta, se acercó para saltar de vuelta al edificio.
Antes de que pudiera hacerlo, ella se desvió a un lado esquivando lo que parecía una flecha blanca.
"…"
Cuando tuvo tiempo para mirar la 'flecha' se dio cuenta de que era un trozo de tela de araña puntiagudo que había volado, cayendo hacia abajo.
Sorprendida y sin mirar hacia atrás, saltó lo más alto que pudo usando la fuerza de un luchador y en medio de su vuelo, realizó un giro balanceando la espada.
Los cortes verdes volvieron a moverse, golpeando otro montón de arañas que antes había salido de lo profundo de la selva.
Controlando su cuerpo en el aire, produjo una plataforma y volvió a saltar, hasta caer en la parte destruida del edificio.
Todo el edificio junto a una porción de tierra estaba flotando en el aire y a pesar de lo tambaleante que era, de alguna manera mantenía el equilibrio, flotando similar a las islas.
Aterrizando con cuidado sin querer ser la causa de que el edificio perdiera el equilibrio y se derrumbara o se diera vuelta, Aurora se acercó al límite del otro lado y vio que las arañas de dos islas cercanas se estaban moviendo.
Ella al tener tiempo comprobó las islas y buscó una isla de menor tamaño y menos peligrosa.
"Aurora… Esto es…"
Sun Liang, que salió desde abajo llevando a la mujer con las piernas destrozadas y a los demás que despertaron, tartamudeó.
¿Fueron las islas flotantes? ¿Las arañas? ¿El gigantesco sol? ¿La oscuridad de abajo que parecía un abismo?
Tal vez un poco de todo.
"¿Se encuentran bien?" Preguntó Aurora y lanzando varios cortes verdes para cortar las sogas, añadió. "¿Recogieron todo?"
De las tres personas que Sun Liang salvó, uno era una mujer y los tres eran rangos A, que parecían guardias.
Estaban tensos, sorprendidos y uno se sostenía el estómago ligeramente pálido.
"Ya hemos bebido algunas pociones… Y estamos bien." Dijo el más viejo entre ellos y tragando, preguntó. "¿Qué haremos?"
Aurora, que volvió a lanzar más cortes verdes, ignoró a las arañas que trataban de interponerse en los cortes y vio como las sogas eran cortadas.
El corte verde, aunque débil, era lo suficiente para cortar las sogas de las tres islas y como viajaba rápido, evitó que las arañas se acercaran, siempre alcanzando lo que ella quería cortar.
Sin embargo, no iba a durar para siempre.
"¿Recogieron todo lo que podían?" Preguntó otra vez.
Estaban en un mundo desconocido y si bien ella no deseaba dejar que los fallecidos fueran devorados por las arañas, necesitaba ser pragmática.
Tenían varios heridos y solamente dos rangos S.
Necesitaban conseguir los suministros que las personas tenían guardadas en los anillos espaciales y si bien no sonaba bien saquear, era necesario.
"Si… He obtenido algo." Respondió Sun Liang tratando de mantener la calma.
A pesar de que no lo mostraba, parecía conmocionado e impactado por lo que estaba sucediendo, tal vez incluso porque ella le ordenara revisar los anillos espaciales de otros.
Sin embargo, al igual que los demás que estaban temerosos, mantuvieron la calma porque ella mostró seriedad y tranquilidad.
No era la primera vez que Aurora caía en un mundo desconocido y la atacaban criaturas, aunque si era sincera, estar sola era más fácil que ayudar a otros.
Y ellos la esperaban a que decidiera, sin molestarse de que haya tomado el liderazgo.
Volviendo a balancear su espada, Aurora volvió a mirar la isla y en medio vio al dron, moviéndose.
¿Así que su sistema ya fue a revisar siguiendo la idea que tenía en su mente? Quedarse en un edificio tambaleante no era la mejor idea y si bien las paredes y pilares eran resistentes, Aurora prefería un lugar más tranquilo.
Incluso si era necesario limpiar una pequeña isla.
"Nos moveremos…"
"¿Qué es eso?"
La mujer de rango A que estaba evitando que las arañas pudieran moverse al edificio elevó su voz apuntando a la lejanía.
Aurora se acercó de inmediato y a lo lejos vio una nube gris, cubriendo toda la visión a la lejanía y ocultando islas enteras.
Sacando un binocular de su anillo espacial, la expresión de Aurora cambió de inmediato.
"Usen artefactos de sigilo y ocultación y muévanse. No pueden volar, y necesitan producir plataformas bajo sus pies o si no caerán." Dijo Aurora de inmediato.
Su tono cambió y mostró un poco de pánico, así que las expresiones cambiaron y la mujer cuyas piernas fueron destrozadas, empezó a sollozar.
Viendo que los demás se acomodaban y que un hombre de rango A, se llevaba a la mujer en su espalda, diciéndole que la sostuvieran, Aurora sintió algo de alivio.
Lo que estaba viniendo no era una nube gris, eran miles de criaturas voladores, que parecían arrasar todo como langostas.
"¡Vamos!" Gritó Aurora tras romper un pergamino de ocultación.
Una nube los cubrió dando la sensación de que desaparecieron y luego se movieron corriendo por el cielo.
No huyeron a la isla que Aurora había estado mirando, sino que buscaron alejarse lo máximo posible del camino de esa supuesta nube.
Corriendo con rapidez, Aurora se quedó a la espalda, cubriendo a todos mientras Sun Liang tomaba la delantera con su lanza en sus manos.
Abajo en las otras islas, las arañas estaban ocultándose en los bosques y árboles e incluso otras criaturas estaban huyendo como si hubieran sentido el peligro de la nube gris.
Girándose hacia atrás, Aurora vio como el edificio chocaba con la nube, explotando los vidrios, las paredes y las arañas que habían llegado a ese lugar fueron tragadas.
No tuvo que imaginar lo que sucedió una vez que fue tragado.
"No miren hacia atrás. Sigan moviéndose." Ordenó Aurora en un tono bajo.
El grupo obedeció y corrieron por el aire produciendo plataformas para moverse y saltando.
La nube gris estaba a dos islas y ellos aterrizaron a una isla que tenía una montaña y un pequeño bosque alrededor.
Aurora activó varios artefactos de barrera y seguridad al llegar y ocultarse, no solo para que las criaturas que conformaban la nube gris no la vieran, sino que para otras criaturas no la molestaran.
Entonces vio la nube pasando a más de unos doscientos metros y todos quedaron en silencio al ver lo que sucedía.
Los árboles, las criaturas y las bestias desaparecían completamente, dejando tierra seca a su paso.
Era como una plaga de langosta que comían todo a su paso y Aurora se quedó en silencio.
"¿En qué clase de mundo hemos llegado?" Murmuró Sun Liang totalmente sorprendido.
Aurora no tenía respuesta, aunque estaba seguro de que era uno complicado.