Flechas y disparos fueron intercambiados a alta velocidad mientras los árboles eran golpeados.
La sala de entrenamiento bajo el edificio del grupo mercenario, tenía buenas instalaciones y esos árboles creados en medio del escenario, eran la prueba.
Un escenario arbolado que ahora tenía a una mecánica y una arquera… Leslie y Aeko se estaban enfrentando.
Aeko saltaba desde atrás de un árbol y lanzaba varias flechas con su arco en rápida sucesión hacia Leslie que estaba escondida detrás de una roca.
Las primeras flechas atravesaron la roca, destruyéndola, pero el verdadero ataque eran las últimas flechas que giraron en el aire para rodear la roca.
Leslie no era ninguna ingenua y estaba preparada para escapar cuando las flechas se acercaron.
*BOOM*
Con su rifle en su mano, corrió para esquivar y la explosión inesperada de esas flechas la expulso por el suelo con la onda expansiva.
Sin inmutarse, uso la fuerza para rodear y esquivar las siguientes flechas, tan solo para volver a levantarse y con su rifle en su mano correr otra vez, para ocultarse en otro árbol.
Esa jovencita respiró pesadamente mientras se preparaba y Alice que observaba todo entendió que Leslie estaba en un campo de batalla.
Esa era la única forma que podía describirse cuando uno veía la mirada expresión y los movimientos rápidos de esa mecánica.
*Bang*
Sin ni siquiera mirar, Leslie saltó del árbol y disparó en dirección a Aeko.
La bala fue exactamente a donde Aeko estaba oculta y antes de que golpeara el árbol, la bala giró en el aire.
*BOOM*
Aeko con sus instintos dio un salto para escapar y pudo escapar de esa bala explosiva, pero en vez de correr se detuvo.
La razón era Leslie que estaba de rodillas apuntando con su rifle y ambas entendieron cuál era el resultado.
"Seis a cuatro… Esta es mi cuarta victoria." Dijo Leslie, bajando su rifle.
No necesitaron disparar, ya que ambos sabían que Aeko no tendría posibilidades para escapar.
Era un entendimiento tácito entre individuos que luchaban a distancia.
"Creo que, si no hubiera entrenado, me hubieras derrotado de forma abrumadora." Confesó Aeko y dando una mirada a esa francotiradora, murmuró. "Me haces dudar de mi esfuerzo en el gremio."
Aeko tenía una edad más alta que Leslie y su experiencia también era más alta, pero a diferencia de esa francotiradora, tenía responsabilidades.
Cuando su 'capitana' no estaba era ella quien se encargaba de la administración del Gremio Tormenta Helada y dirigir a un gran gremio, no era una broma.
Quitaba por completo el tiempo para entrenar y era difícil evitar 'oxidarse'.
"En realidad, en el ejército estuve entrenando en realidad virtual. Por ahí obtuve experiencia." Reveló Leslie con calma.
Alice asintió para sí misma mientras observaba.
El ejército de una gran ciudad no era para nada simple y era posible que tuviera todas las ventajas para entrenar a sus soldados.
No era extraño que tuvieran alguna máquina de realidad virtual de alta capacidad para que los soldados entrenaran.
"No necesitas consolarme. Yo misma soy la responsable por haberme quedado atrás." Respondió Aeko de forma solemne y sin ninguna expresión.
La razón por la cual tomaba estas batallas como una perdida, era que Leslie solo usó su rifle de francotirador en tres de sus cuatro victorias.
En las otras batallas utilizó su escopeta o rifle de asalto, dejando ver que era aterradora con su arma principal y débil con sus otras armas.
Por tal razón, Aeko lo tomó como una perdida cuando había ganado seis veces.
"Por cierto, Alice... ¿Cómo estuve?" Preguntó Leslie al acercarse.
Su mirada un poco nerviosa, dejo en claro que la estaba viendo como alguien experimentada en batalla.
"Bien para estar en desventaja. Aeko es una combatiente a corto alcance y como francotiradora eres todo lo contrario." Respondió Alice con calma.
En realidad, ambas la invitaron a ver su entrenamiento de repente, así que no podía decir mucho.
Aeko era una arquera, pero por como movía su cuerpo entre los árboles, giraba y realizaba piruetas, estuvo claro que era hábil para el enfrentamiento cercano.
Por su parte, Leslie era una francotiradora, su ventaja estaba a la distancia.
Ambas contrincantes se volvieron a mirar otra vez y Aeko le hizo una señal a Leslie para que se moviera.
"Escuche que tienes contactos con el gremio 'Los Cazadores Desenfrenados', quería ver si me podías relacionar con ellos." Pidió Leslie y con cierta vergüenza, murmuró. "Puedo usar a mi padre para que me conecte, pero si soy sincera… No quiero tratos especiales."
Alice asintió y…
"No tengo ni idea de que gremio estás hablando." Confesó Alice de forma honesta.
Prácticamente no recordaba la mayoría de los gremios y menos los nombres… Era imposible que lo hiciera cuando había tantos gremios en el área.
"Estuvo con nosotros en la misión asalto… El Gremio Escandinavo liderado por Henrik Vainio." Detalló Leslie y al ver que ella tampoco captaba ese hombre, murmuró. "La primera vez que los conocimos, te estaban atendiendo."
Alice le dio una mirada casual por un momento y luego simplemente, asintió.
Prácticamente todos lo que la conocían la trataban de esa forma y si alguien sabía de su posición en la Empresa Apicius, entonces ese trato era normal.
Aun así, a pesar de que el nombre le parecía conocido, no lo recordaba y la razón era simple… ¿Por qué debería acordarse de personas que no le importaban?
"Hablaré con James. Escuche que quieres probar ser cazadora… Haré que te envíen una lista de los gremios cazadores afiliados a la Empresa Apicius, es posible que encuentres este gremio ahí." Respondió Alice y viendo un mensaje del hospital, murmuró. "Tengo un asunto que atender."
Leslie asintió con una sonrisa y se despidió deseándole suerte en lo que deseara hacer, todo mientras Aeko daba una sonrisa.
¿Era posible que esa francotiradora encontrara su camino entre los cazadores?
Alice no pensó demasiado en esa pregunta y simplemente abrió un portal a la sala.
En ese lugar estaba presente su hermana, con los brazos cruzados y una mirada seria.
"¿Sabes lo que has hecho mal?" Preguntó Aurora con una expresión seria.
Esa mirada estaba clara que descubrió lo que hizo y Alice bajo su cabeza, sintiendo la molestia oculta de su hermana.
"Si… No fue mi culpa." Murmuró Alice y dudando un momento, añadió. "Iba a remplazar tu budín más tarde, pero me termine comiendo el remplazo."
La expresión de Aurora tembló ante su respuesta llena de pena, pero esta vez sus ojos se mantuvieron firmes y no se dejaron llevar por sus palabras.
"Sabes que te estoy hablando de Nicole. Usaste su reloj holográfico para enviar un mensaje que se iba por unos días y ocultaste el hecho de que ha estado hace tres días en el hospital." Reveló Aurora con un tono enojado.
"En realidad fueron cuatro, si contamos este." Respondió Alice y al ver a su hermana cada vez más molesta, sonrió y explicó. "Solo le di lo que me pidió. Ni más, ni menos."
Aurora dio una mirada algo enojada por su respuesta y Alice volvió a suspirar.
"Ella es una luchadora… Y una demasiado feroz. No está mal y me gusta. Pero ella no tiene un lugar para entrenar en donde los golpes sean curados o su cansancio se reduzca." Señaló Alice y al ver que la expresión de su hermana temblaba, añadió. "Ella pidió una batalla de ese tipo. Se la di y el costo fue su cuerpo."
¿Quería ver sus límites? ¿Quería sentir la muerte y tener una batalla de ese tipo? Para Alice estuvo excelente, se lo dio por completo.
Su hermana le contó cómo era el otro lugar en donde su maestro se encontraba y a diferencia de ese lugar que estaba diseñado para curar las heridas y recuperar el cansancio, la realidad era cruel.
Aurora podía entrenar y recibir la paliza de su maestra para templar su cuerpo y cuando salía de ese lugar solo estaría cansada, pero Nicole no tenía eso.
El arma de un luchador era su propio cuerpo y si esa arma era quebrada, necesitaba recuperarse para volver a ensamblarse más fuerte… Esta vez Nicole fue quebrada y solo se estaba recuperando.
"Admito que exagere un poquito." Admitió Alice y al ver que su hermana se enojaba ante la palabra 'poquito', confesó. "Pero la estoy reparando y poniendo todo en su lugar."
Junto a su confesión salió una risa divertida y lo único que su hermana pudo hacer fue suspirar.
Cuatro días de inconsciencia era imposible que fuera relacionado con 'poquito'.
"Ella no es un juguete o una muñeca, Alice." Regañó Aurora y dándole una mirada seria, sermoneó. "Y sabes que estoy enojada de que trates ocultar todo."
Ocultar el hecho de que estuvo en el hospital y usar el reloj holográfico de esa joven para tratar de engañar a todo el grupo… Esa era una razón válida para estar molesta y enojada.
"¿Incluso si la otra parte lo pidió?" Preguntó Alice y al ver que su hermana quedaba en silencio, reveló. "Si quisiera ocultarla, no la hubiera llevado al hospital de la ciudad."
Lo que buscaba Nicole no era un simple entrenamiento espartano, lo que buscaba era una batalla que la hiciera sentir eufórica y a la vez la pusiera al límite.
¿Qué creerían sus compañeros cuando supieran lo que Nicole estaba buscando?
¿La mirarían raro por amar las batallas? ¿Por arriesgarse de esa forma? ¿O tratarían de 'curarlo' como si su emoción fuera una enfermedad?
Nicole entendió que luchar siempre en los límites era la mejor forma para avanzar y para alguien que deseaba ser implacable, esas batallas la moldeaban mejor.
Tenía que vencer sus miedos, el terror y tenía que tener la fuerza para no ser contenida, aunque para lograrlo tenía que usar métodos extremos.
En vez de arriesgarse en contra de desconocidos, vino a ella, para imitar esas batallas y Alice lo acepto.
"Yo… No pensé en eso." Murmuró Aurora bajando la cabeza de forma sincera y con un suspiro, añadió. "Lo siento."
Solo estaba cumpliendo la voluntad de la otra parte… Era imposible enojarse con ella, cuando Nicole era la que había deseado esto.
"Está bien. Sé que tienes mucho que pensar." Dijo Alice y al ver que su hermana seguía un poco avergonzada, le dio un abrazo y susurró. "No te preocupes, te acompañaré a Los Ángeles y veremos qué hacemos con esa falsa heroína."
Nerviosismo por enfrentarse a esa falsa heroína y a la vez por la posibilidad de reencontrarse con alguien de su pasado.
Añadirle a esa mezcla este suceso, estuvo claro que la hizo susceptible y por eso Alice no le dio tanta importancia a ser regañada.
Cuando Aurora lo abrazó, Alice dio un suspiro aliviado… Después de todo, si había exagerado y agradeció de que su hermana lo descubriera hoy.
Ya que, si hubiera descubierto el estado de Nicole luego del entrenamiento, era posible que, de castigo, le prohibiera las papitas.
******
Una voz lejana y cuchicheos extraños sonaron a la distancia y la mente de Nicole trató de enfocarse.
Su conciencia empezó a despertar y lo primero que sintió… Fue dolor.
"Ug…"
Desde la punta de sus dedos del pie hasta el último pelo en su cabeza, sentía que todo le dolía.
"Su pulmón ha sido reparado. Nuestros magos han estado trabajando durante dos días sin parar y ahora podemos decir que ha salido de su estado crítico."
Esa voz sonó cerca y a la vez lejos.
"La magia no puede ser usada de forma continua. Los magos que han venido para apoyarnos son excelentes, pero el problema acelerar la recuperación natural, consume demasiada energía. Las células necesitan más nutr…"
"La Empresa Apicius se encargará de su dieta desde ahora. Gaspard hace comida deliciosa y hará que ella se recupere en unos días."
¿Esa voz lejana pertenecía a Alice?
Nicole trató de abrir sus ojos y lentamente lo hizo tan solo para ver el techo de un hospital y sentir el dolor de su cuerpo perfectamente.
Peor que cualquier paliza que Víctor le había dado.
Su cuerpo no solo estaba adolorido, sino que no podía mover sus brazos ni piernas y lo único que podía mover era su cabeza, pero al intentarlo el dolor era terrible.
La primera figura que apareció en su visión fue Alice y un doctor de mirada seria.
"Solo deja que el médico te revise." Ordenó Alice sentándose cerca de ella y abriendo una bolsa de papitas.
El doctor empezó su revisión y no solo utilizó técnicas profesionales, sino que también combinó su magia.
"¿No sientes alguna falla en tus sentidos?" Preguntó el doctor y con una mirada seria, explicó. "El estado en el que llegaste fue…"
Nicole al escuchar los detalles, solo pudo parpadear.
Era imposible señalar una parte de su cuerpo que no había sido dañada y el mayor problema fue su pulmón que tuvo que ser regenerado por completo.
Hueso, músculo y piel… Desde sus piernas, cadera, torso, brazos, cráneo y cuello.
En mayor o menor medida todo había sido lastimado y en un punto Nicole se preguntó cómo seguía viva.
"Nuestros médicos y curadores estuvieron trabajando en ti durante cuatro días seguidos. Y solo fue gracias a que el daño fue metódico has sobrevivido." Dijo el doctor y respirando hondo, preguntó. "Es mi deber preguntar… ¿Estas en algún problema? ¿Necesitas ayuda?"
Nicole al escuchar esa pregunta trató de recordar… Y todo el color de su piel fue desapareciendo hasta que quedo pálida.
Su cuerpo tembló de forma instintiva y el dolor volvió, logrando que los recuerdos difuminados volvieran a perderse.
Sin embargo, dio una mirada Alice que ya había abierto una bolsa de papitas y estaba mirando como si todo fuera una gran obra de teatro.
"No… Esto fue un entrenamiento, que yo pedí." Respondió Nicole, buscando controlar sus emociones.
El doctor suspiró y dejando unas recomendaciones, se retiró con una expresión seria.
"Agradable, ¿no? Es el jefe del hospital." Dijo Alice y con una pequeña sonrisa, murmuró. "También me delato con mi hermana. Me sorprende que lo hiciera cuando la Empresa Apicius pidió silencio."
Nicole mantuvo una mirada en esa jovencita que estaba comiendo sus papitas con una sonrisa.
Su cuerpo temblaba de miedo inconsciente y sus recuerdos estaban algo difuminados, pero a la vez había cierta ira innatural, que deseaba salir y que era incapaz expresar.
"¿Perdí?" Preguntó Nicole con cierta expresión extraña.
Era una pregunta tonta, ya que estaba en el hospital y al frente de ella solo estaba Alice, sin ninguna herida.
Si lo que el doctor decía era correcto y ellos estuvieron 'trabajando' en su cuerpo, entonces significaba que ella misma estuvo inconsciente durante cuatro días.
Una paliza que la dejara en este estado… A una luchadora de rango S que podía soportar el disparo de un tanque, era sin duda alarmante.
Y apenas aceptó el hecho, Nicole dio un suspiro y se recostó en la cama, sintiendo su cuerpo y viendo si podía moverlo.
"Estoy adolorida. Mis huesos están débiles y mis músculos están tensos. Creo que me recuperaré en un mes." Murmuró con cierto fruncir de ceño.
Víctor luego de cada paliza le hacía que sintiera sus propios cambios en su cuerpo y la obligaba a revisar su condición.
También la dejaba que se curara de forma natural, ya que, de esa forma, su cuerpo se adaptaba y su regeneración se volvía más eficaz.
Si el doctor estaba en lo correcto, entonces la curación fue 'natural'… Eso significaba que estimularon su cuerpo para que se curara de forma acelerada, obligándolo a reparar todos los daños.
Aun así, como consecuencia todo su cuerpo estaba debilitado y ella misma estaba cansada.
Era hasta el punto de que sentía que su cuerpo no tenía energía mágica para reforzar su propio cuerpo de forma natural.
"En realidad, demorará menos." Dijo Alice y al ver que no entendía, envió un mensaje.
Nicole dudó de que era lo que deseaba hacer, pero tras varios minutos una enfermera trajo un cuenco con una sopa y diminutos trozos de carne.
"¿Quieres que te alimente?" Preguntó Alice señalando a la enfermera.
Volviendo a sentir su cuerpo, Nicole retomó su control y se movió gruñendo ante el intenso dolor.
La enfermera se encargó de doblar la cama y ayudarla con las almohadas, permitiéndole estar inclinada al comer.
Aunque su brazo dolía demasiado, Nicole se forzó para comer y cuando levantó su cuchara y trago la comida, sus ojos se abrieron.
Desde que el jugo entro a la garganta, un calor empezó a extenderse desde su garganta por todo su cuerpo y tras tomar otros sorbos, la sensación aumentó.
Fue hasta el punto de que ella sintió su cuerpo mejoraba sutilmente y el mayor efecto fue la recuperación de la energía magia.
"Delicioso, ¿no? Pedí a la Empresa Apicius que te prepara algo para ayudar a que te recuperes." Reveló Alice y dando una mirada a la enfermera, detalló. "Ella no es una enfermera, sino que la asistente del chef y el plato es una comida medicinal."
Comida medicinal… Empresa Apicius…. Chef… Con cada palabra Nicole entendió que la estaba ayudando y su expresión se hizo seria.
"Gracias. No necesitabas hacerlo, yo misma sabia a lo que me metía." Dijo Nicole y mirando la comida, preguntó. "¿Cuándo costo todo? No quiero deberte más de lo que ya debo."
Entendía que, al pedir una batalla extrema, no solo ella iba a terminar en este estado, sino que la propia Alice… Claro, su esperanza de lograr herir a esa glotona, ahora parecía una broma, pero el punto era que el riesgo que ambas tomaban era real.
Sus recuerdos no estaban muy bien, pero Nicole misma sabía que a diferencia del control perfecto de su propia fuerza que Alice tenía, ella era deficiente.
¿Qué hubiera pasado si uno de sus puñetazos hería a Alice de una forma extrema?
Por eso para ella era un gran favor de que Alice hubiera aceptado a pesar de las posibles consecuencias.
No deseaba deber más de lo que le debía y en el fondo ella estaba un poco orgullosa, ya que trabajar para Víctor le daba más dinero que limpiar mazmorras.
"No lo sé, pero no es necesario. No me importa el dinero y no es tanto problema para mí." Respondió Alice y cuando ella le dio una mirada seria, insistiendo en devolverle todo, esa glotona miró a la mujer vestida de enfermera y preguntó. "¿Cuánto cuesta?"
"Los trozos de carne es de una salamandra de Terra nova. Ayuda a recuperar el cuerpo y mejorar la regeneración física." Dijo la enfermera y al ver que Alice le instaba a decir el precio omitiendo detalles, reveló. "Fue creado por mi maestro y en nuestras subastas, un plato se vende entre cuarenta a sesenta millones de dólares."
Nicole se congeló completamente.
Según lo que recordaba una criatura de rango S, tenía un valor superior a un millón de dólares y si bien el valor oscilaba con respecto al tipo de bestia, el precio que le acababa de decir… Hizo parecer como si su salaria fuera un vuelto
"¿Tanto? Recuerdo comerlo seguido." Murmuró Alice con cierto fruncir de ceño.
"Los materiales pueden ser comprados, pero la 'mano de obra', es lo que cuesta más. Nadie, excepto mi maestro, le dará los efectos curativos que tiene." Respondió la mujer vestida de enfermera.
Solemne, respetuosa y a la vez sin contener su orgullo en su voz.
Lo primero que pensó Nicole fue sobre el 'Maestro Culinario' y al darse cuenta, se volvió a quedar en silencio.
"Come. Necesito curarte rápido. Le prometí a Aurora que te ensamblaría y pondría todo en su lugar." Señaló Alice con cierta sonrisa y viendo que ella temblaba, confesó. "Y fue divertido."
Divertido… ¿Qué fue lo que le divirtió? ¿Dar una paliza de muerte?
A todo eso la forma que decía 'ensamblarla y poner todo en su lugar', la hizo sentir como si fuera una muñeca y lo gracioso era, que Nicole no podía negar que eso fue.
Sus recuerdos volvían de forma lenta, pero estuvo claro que, por su estado, ella había sido un muñeco de entrenamiento para alguien como Alice.
"Si te sientes incómoda puedes tomar esto como una inversión o un favor. Es bueno tener un favor de un rango S con potencial." Añadió Alice y Nicole suspiro.
Volviendo a comer en silencio.
Le gusto más de esta forma, ya que a pesar de que sabía que Alice a su manera algo 'curiosa' estaba mostrando su aprecio, pensar que todo era por intereses era más fácil para aceptar.
Después de todo, estaba claro que este almuerzo solo era la primera de múltiples comidas que la ayudarían a recuperarse e incluso a mejorar un poco.
Tras dejar vacío el cuenco, la mujer vestida como enfermera se retiró en silencio llevándose todo y Alice le dio una mirada.
"Dijiste que tenías dos temas que hablar conmigo. ¿Cuál es el que falta?" Preguntó Alice con cierta curiosidad.
El entrenamiento era el primer tema y el segundo era hablar de cómo podía aprender a causar miedo.
Ahora al sentir su cuerpo temblar ante los sutiles recuerdos que volvían de forma lenta, Nicole dio un largo suspiro, al darse cuenta de que si replicaba una parte de ese miedo que le dio Alice, podría lograr completar su tarea.
"Aunque tengo una idea de lo que quiero, me gustarían más consejos de un profesional." Dijo Nicole y con una media sonrisa, explicó. "En realidad…"
Ella empezó a contarle todo.
Desde la misión que le dio Ersin para controlar todo el bajo mundo de Sudamérica y sobre la reunión de la Reina del Norte y la idea del miedo que debía causar.
También sobre el consejo de María de buscar lo que más le causaba miedo y replicarlo.
"Entonces yo soy quien te da más miedo. Me agrada." Murmuró Alice y dándole una mirada, dudó. "¿No estás subestimando la tarea? Me parece que no ves todo el panorama."
Tenía una idea de cómo dar miedo gracias a lo que estaba sintiendo su cuerpo de forma instintiva, pero ante las últimas palabras, Nicole dio una mirada seria.
"Te has centrado en las palabras de la Reina del Norte, pero no has visto todo lo demás." Dijo Alice y mirándola de forma detenida, preguntó. "¿Por qué las personas se convierten en criminales? Estoy hablando de individuos de rango A o S que son capaces de ganar dinero matando criaturas o limpiando mazmorras."
Había muchos rangos A, pero eso no significaba que ellos no pudieran vivir una buena vida y más cuando había tantas mazmorras naturales y temporales en el mundo, ni hablar de otros trabajos.
Los rangos S eran apreciados como la base fundamental de fuerza y eran contratados tanto por gremios, organizaciones e incluso empresas.
¿Entonces porque esos individuos se convertían en criminales?
"¿Están locos? ¿Quieren poder? ¿Aman la autoridad?" Respondió Nicole de forma dudosa.
Locos que no seguían las reglas y buscaban hacer lo que desearan, maniacos del poder que le gustaba la autoridad y liderar a su gusto, siendo reyes de sus propias 'colinas'.
Nicole al sentir la mirada de Alice, frunció el ceño al pensar en su última opción.
"Dinero." Murmuró, dando su última opción.
Esos criminales estaban arriesgando su vida no solo al enfrentarse a las autoridades, sino que a sus competidores y Nicole sabía que era más fácil matar un monstruo, que a un humano.
¿Por qué tomaban ese riesgo?
Dejando de lado, a los que buscaban poder, autoridad o estaban locos, lo que quedaba era dinero… Ellos ganaban más dinero que matando monstruos o trabajando para gremios.
No era un trabajo fácil, pero las ganancias superaban los riesgos.
"Mierda…" Murmuró Nicole bajando su cabeza al darse cuenta de la tarea que le dio Ersin.
Esa elfa le dio la misión de controlar todo el bajo mundo de Sudamérica, pero Nicole vio el 'control' solamente como una manera de ponerlos bajo su mando y evitar que ellos actuaran.
"No necesitas el miedo para unir a la gente. El miedo solo se usa cuando ellos van en contra de ti. Lo que necesitas es un modelo de negocios… Una 'zanahoria' para atraer y solo usar el miedo como un 'palo'." Respondió Alice y sin ocultar su diversión, cuestionó. "¿Crees que eres capaz de gestionar negocios ilegales? Incluso dejando de lado, los negocios más ilegales como asesinato, trata de personas y esclavitud. ¿Puedes mantener los otros negocios?"
Podía unir a la gente con el miedo y a la fuerza, pero la pregunta más importante… ¿Sería capaz de controlar el bajo mundo?
Lo que de verdad representaba el 'bajo mundo' era todos los negocios ilegales y prácticamente todo aquello que estaba prohibido.
Ersin no le pidió que erradicara todo y destruyera las mafias, ya que Víctor lo había hecho y ellos volvieron lentamente, lo que pidió esa elfa era que 'controlara' el bajo mundo.
No esclavizara, erradicara o dominara, sino que 'controlara'.
"No sé lo que desea Víctor. Tal vez busca que aprendas a limitar tus 'valores' e 'ideales' con respecto al 'objetivo'. Aprender a encontrar el equilibrio no es fácil. Algunos aprenden de forma dura y cuando caen, son marcados o no vuelven a levantarse y se hunden en la oscuridad. Otros salen manchados y no vuelven a ser los mismos." Dijo Alice jugando con sus papitas y con un tono indiferente, añadió. "Yo prefiero estar abajo."
No trataba de referirse a simplemente ser 'bueno' o 'malo', sino lo que uno podía hacer entre sus 'valores' y sus 'objetivos'… ¿Para lograr el segundo tenía que quitar el primero? ¿O el primero debía prevalecer sobre el segundo?
Nicole deseaba alcanzar sus objetivos sin que nadie la detuviera y por eso trataba de al menos aprender la astucia de Víctor y Ersin la estaba ayudando.
En su caso estaba presente su objetivo de ser implacable e imparable, pero para lograr ese objetivo, tenía que deshacerse de algunas cosas.
Como lo hizo con sus dudas y emociones al matar la persona que estaba queriendo asesinar a María.
"La tarea que te dieron es el extremo para encontrar ese equilibrio. ¿Dejaras de ser una heroína y controlaras el bajo mundo como una criminal? ¿O destruirás a las mafias incumpliendo tu objetivo? Esos son los dos extremos." Preguntó Alice y dando una sonrisa, especificó. "Y la última opción… ¿Intentarás encontrar el equilibrio?"
No se trataba de dejar de lado sus valores, sino que saber equilibrar sus valores e ideales con su objetivo… De esa forma no se iría por ningún extremo y si aprendía sobre el equilibrio, sabría cuando debía avanzar o retroceder y cuando detenerse.
En teoría sonaba bien y parecía fácil, pero no lo era.
Si se convertía en una mafiosa en busca de controlar el bajo mundo tenía que decidir los negocios que se harían, buscando obtener ganancias para mantener a sus miembros contentos, pero a la vez necesitaba no exagerar.
El miedo que le recomendó la Reina del Norte solo era la forma más primitiva de control que si bien era necesaria, no podría mantenerse por siempre.
"Por ahora tienes tiempo para pensarlo. Te vendré a visitar de forma recurrente antes de que me vaya a Estados Unidos." Dijo Alice y levantándose de su asiento, le dio una mirada y comentó. "Si decides buscar tu propio equilibrio, puedo ayudarte."
Nicole se sintió un poco animado por esas palabras, pero la sonrisa de esa jovencita aumentó.
"Si aceptas mi ayuda, te daré la oportunidad de que lo que sea que logres, será tuyo y no de Víctor ni del Imperio Sudamericano. Ya como lo uses y como consigues que ese emperador, no trate de quitártelo, es otro tema." Añadió Alice y usando su reloj holográfico, precisó. "Te dejaré las grabaciones de nuestra batalla."
Con esas palabras Alice se fue y Nicole se quedó en silencio… Aturdida.
Esa era la única forma que podía estar cuando se dio cuenta de que esa jovencita que le gustaba comer papitas era más que una glotona e incluso más profunda que alguien que le gustaba luchar.
Nicole nunca pensó muy lejos, pero ahora Alice lo hizo.
¿Qué pasaba si ella lograba cumplir su tarea y controlaba el bajo mundo de toda Sudamérica? Debido a que Víctor y el Imperio Sudamericano lo estaba ayudando, técnicamente pertenecería a ellos.
Sin embargo, Alice le estaba ofreciendo una 'ayuda' que, si la aceptaba, haría que no tuviera que depender del emperador y, por ende, una vez que controlara todo, no tendría necesidad de entregárselo a Víctor o al Imperio Sudamericano y lo que sea que lograra, seria suyo.
Y si seguía con esa idea, era posible que Víctor no le gustara el resultado y tratara de quitárselo… O destruyendo esa posible organización que controlaría el bajo mundo que estaría bajo su mando.
Ante esa idea descabellada y aterradora, Nicole sintió que no conocía a Alice o sería mejor decir que esa mujer en realidad nunca se reveló ante ella.
Sin querer pensar en la 'escala' que estaba hablando esa glotona, Nicole trató de relajarse utilizando su reloj holográfico y dando inicio al video de la batalla.
"Se ve tan normal." Murmuró de forma inevitable al ver por su reloj holográfico la batalla.
El inicio de la batalla fue normal, ella misma mostró una fuerza de rango S y Alice en su forma de guerrero la enfrentó.
Sus recuerdos estaban volviendo al mirar esa batalla y el inicio fue una batalla agitada, en la que ambas estaban en condiciones iguales.
Nicole se vio a ella misma en la pantalla y según lo que recordaba, en ese momento inicial pudo sentir que Alice no iba con todo, fue por eso que ella decidió mostrarle lo que era capaz.
"…"
Debido a que tenía el volumen bajo, ella dio una sonrisa al verse usar su 'explosión de fuerza' en la forma de guerrero de esa glotona.
La sonrisa era debido a que su poderoso puñetazo desintegró la mitad de ese gigante negro repartiendo la oscuridad por todas partes.
Todo un brazo, gran parte del hombro y el pecho junto a la mitad de la cabeza… Su 'explosión de fuerza' fue aterradora, pero la sonrisa de Nicole duro muy poco.
Al igual que la confianza de sí misma en la pantalla.
"¿Eso es todo lo que tienes? Pensé que por tu confianza serias más… Poderosa."
La voz de Alice saliendo de esa gran criatura que se reformaba a sí misma vino y Nicole pudo sentir la ira de sí misma a través de la pantalla.
"Idiota…"
Y al recordar la batalla, esa fue su comentario al verse a sí misma cargar en contra esa gran criatura negra.
Alice solidificó la oscuridad a un nivel más aterrador y recibió su puño directamente, esta vez sin ser desintegrado como antes.
Incluso mirar como lo detenía, seguía sorprendiendo a Nicole, pero lo siguiente solo fue aún más aterrador.
Esa criatura tragó su brazo con su oscuridad y Nicole se vio a sí misma gritar de miedo y dolor, tan solo para verse sangrar cuando su piel fue devorada.
Y ahí empezó lo que ella había buscado… Le mostraron los límites y el miedo de forma directa.
Esa criatura atacó, su puñetazo la hizo retroceder, pero luego agarró su cabeza y la aplastó en contra del suelo.
En el suelo trató de rodar y la bestia con su gran pata negra aplastó una pierna, quebrándola.
"¿Qué mierda estaba pensando?" Maldijo Nicole al verse levantarse.
Lo recordaba… Desde ese punto, ella se dejó tragar por sus instintos de supervivencia y por la ira, y esa estupidez, molesto a Alice, que fue aún más cruel.
La criatura esquivó y soportó la furia de una luchadora, tan solo para esperar su momento y quebrarle un brazo, usar ese mismo brazo para tirarla en contra de la pared y en ese punto volver a golpearla.
Incluso así esa luchadora volvió a levantarse y Nicole recordaba entregarse a sus instintos… Instintos que la empujaban a la locura de la batalla y que era alimentado por el miedo que convertía en ira.
Y Alice como si ese estado le pareciera menos peligroso que antes, dejo de usar su forma de guerrero.
Solo hizo que la oscuridad transformara sus manos en garras y luchó de esa forma, esquivando con dos brazos negros que salían de su espalda.
Esquivaba los puñetazos furiosos de una luchadora en un estado enloquecido y cortó el estómago, los brazos, la pierna, y hasta que al final al verla continuar, atravesó parte de su pecho.
Precisamente en donde estaba su estómago.
Nicole que miraba tembló.
"…"
Su cuerpo temblaba de miedo ante la sed de sangre, la indiferencia y la frialdad, que esa glotona liberaba y que ahora era un recordaba con cierto terror.
La cámara no podía grabar la verdad de lo que sucedió en ese combate y no podía mostrar el miedo, terror y el sentimiento de muerte que esa glotona generó, ni tampoco la ilusión de que la devoraría.
Sin magia mental, Alice hizo que ella sintiera que ese combate era a muerte y logró darle lo que había buscado.
Ahora al mirarse a través de un video, vio todos sus defectos, pero también sus límites y su estupidez.
Alice le dio lo que deseaba y Nicole que estaba temblando de miedo a pesar de que todo su cuerpo dolía, sonrió.
Viendo el objetivo que deseaba derrotar… Y si era posible superar.