¿Quieres intentarlo?

Saliendo de un negocio con una bolsa de papitas en su mano, Alice vio la enorme multitud.

El desfile acababa de terminar, pero la fiesta tan solo estaba en su apogeo y todavía faltaba el concierto anual y en diferentes plazas, otros tipos de grandes eventos.

Era posible que los pueblos alrededor de Zerzura también estuviera festejando y Alice levantó su mirada al cielo que estaba oscureciendo y que estaba lleno de drones.

"¿Sucede algo?"

Una voz sonó a su lado y Alice le dirigió una mirada a Nicole que la había acompañado a comprar sus aperitivos.

"No. Solo estaba pensando que no aproveche completamente mi día." Respondió Alice y viendo a Nicole mirarla extraña, explicó. "Demasiados lugares para visitar y muy poco tiempo."

Esa luchadora parpadeó tratando de mantener su expresión en control y Alice sin importarle, empezó a caminar hacia el grupo.

Entre la multitud pudo sentir que Nicole la seguía y Alice sintió cierta molestia que hubiera tantas personas en el camino.

Empujándose y tratando de pasar, el desfile fue masivo y ahora la multitud era enorme.

"¿Entonces necesitas algo de mí?" Preguntó Alice al detenerse de repente y girarse para mirar a Nicole.

Esa luchadora le dio una mirada de sorpresa y luego miró a sus pies, mientras era tragada por la oscuridad.

Alice también fue tragada por su propia oscuridad a la misma velocidad con Nicole y luego al estar en el interior de su sombra, hizo que la sombra se moviera entre la multitud en dirección en donde estuvieron sus compañeros.

"No… Solo… Sí." Respondió Nicole y al darse cuenta de que estaba un poco nerviosa, comentó. "Luego me gustaría hablar contigo."

Al escuchar esa respuesta Alice le dio un vistazo y pudo ver que Nicole dando una media sonrisa algo avergonzada y a la vez seria.

En este lugar sus sentidos estaban bloqueados, pero Nicole mantuvo su tranquilidad de forma espléndida a pesar de que seguramente ella solo había escuchado su voz.

"Es en parte personal y consejos para mi trabajo." Dijo Nicole cuando Alice le permitió recuperar sus sentidos y al ver que era observada, precisó. "Pero luego, hoy quiero disfrutar del aniversario y el concierto."

Alice tuvo una idea de lo que esa jovencita pediría y era fácil notarlo cuando esa luchadora no ocultaba esa mirada feroz en sus ojos.

"Esperaré." Dijo Alice y haciendo que ambas salieran de su sombra, señaló. "Vamos, ellos nos están esperando."

Ambas salieron de la sombra de Alice y aunque alarmó un poco a los transeúntes, gracias a la forma rápida que lo hizo, pasó desapercibido para la mayoría.

Cerca de un callejón, estaba presente Akira, Aeko, Shao Ya, Charlotte charlando con Clémentine, Leslie, Érica y Aurora.

"¿Los hicimos esperar demasiado?" Preguntó Nicole y con una sonrisa, murmuró. "Había una larga cola en la tienda."

"No se preocupen. Liam, Oscar, Santiago y Andrés fueron a por un lugar." Respondió Akira y con una risa entretenida, declaro. "César y Rupert los acompañó, así que estoy seguro de que irán rápido."

¿Qué pasaba si dos gorilas atronadores aparecían entre la multitud para asistir al concierto? Sí, no había duda de que la gente se haría a un lado para dejarlo pasar.

Alice al ver que Nicole se disculpaba por ella, dio una mirada pensante y por un momento dudo de si asistir al concierto.

"Yo tengo que retirarme para ir a la fiesta de aniversario." Intervino Aurora, al mirar la hora y con una expresión seria, declaró. "No sé a qué hora terminé, pero si termino temprano, me uniré con ustedes."

Su forma tan seria de hablar y dar la impresión de que todo se trataba de trabajo, hizo que Akira le diera una mirada directa.

Estuvo claro que esa psiónica de hielo sabía cuando mentía o la estaba engañando… Alice comió parte de sus papitas pensando que su hermana no era buena para ocultar sus emociones.

"Está bien te avisaremos en donde nos encontraremos." Respondió Shao Ya con una suave sonrisa.

Esa mujer también era atenta y sabía leer a las personas, pero fue amable para cubrir a Aurora, permitiendo que escapara.

Cuando Aurora se fue y quedaron solas, gran parte del grupo se miró entre ellas.

"Va a una cita, ¿cierto?" Dudó Nicole y conteniendo su sonrisa entretenida, murmuró. "Debe ser su pretendiente… Me pregunto cuanto habrá avanzado."

Clémentine fue la primera en toser ante ese murmullo y las miradas dieron a parar a esa psiónica.

"Oh, por tu expresión sé que sabes algo." Dijo Akira y con una risa malvada, declaró. "Sabes, soy buena para los interrogatorios, si lo confiesas amablemente, no tendré que llegar a extremos."

Una mirada malvada que no ocultaba su diversión y entretenimiento, queriendo saber sobre la situación romántica de Aurora.

Estaba claro que deseaba conocer los secretos.

"Capitana, por favor contrólese." Intervino Aeko y con una mirada seria, señaló. "Aurora ya es grande y no podemos meternos en su vida privada."

Tan responsable y seria como siempre, sus palabras hicieron que Akira hiciera un puchero.

"Pero si no descubro los secretos por otro, Aurora nunca me los confesara." Refunfuño Akira y al ver que Alice daba un asentimiento, añadió. "Aurora es muy tímida para pedir consejos o para hablar de ese tema."

Alice estuvo de acuerdo completamente.

Su hermana en temas amorosos era una niña que no deseaba revelar su pequeño secreto y la mayor razón era que Aurora estaba tratando de ir más allá que tener un simple pretendiente.

Tal vez era lenta y lo hacía a su modo, pero el deseo de avanzar y continuar por ese camino estaba presente y Alice sintió que su hermana estaba creciendo.

¿Qué seguiría en el futuro? Aurora podría volverse novia de ese individuo y luego tal vez se casaría y crearía su propia familia.

¿Qué haría ella cuando ese momento llegara? ¿Cuándo su hermana no la necesitará?

Ella volvería a su…

"¿Alice, vienes con nosotras?" Preguntó Akira de repente y cuando ella le devolvió la mirada, esa jovencita dio una sonrisa y señaló. "Liam reservó la habitación privada de un hotel y recomendó que viéramos el concierto desde allí. Como da a la plaza en donde se realiza el concierto, la vista será más agradable."

Por lo general no iba al concierto al menos que su hermana asistiera y ahora que estaba sola, había dudado de si asistir al concierto.

Alice pudo notar la mirada de Akira y estuvo claro que ellos arreglaron ese lugar para también darle un gusto a ella.

Era imposible no terminar acercándose a alguien y aunque Alice estuvo segura de que Akira ni siquiera había notado lo que pensaba, su amabilidad era sincera.

"¿Puedo pedir comida?" Preguntó Alice, dejándose llevar.

Algunos dieron risas ante su sincera pregunta, pero Akira asintió.

"Claro."

******

Edward habló con la persona que le presentó James.

Estaba en la fiesta de aniversario de los altos mandos y él no pudo evitar estar impresionado por el número de personas que asistía.

No solo había muchas personas, sino que el estatus de algunos era bastante elevado.

El embajador de Sudáfrica y de Marruecos eran quienes destacaban, pero también estaban presentes embajadores de otras naciones, quienes interactuaban con el Ministro Turay.

Claro, también estaba presente Ronald Einhorn quien hablaba con algunos altos rangos líderes de gremios locales y extranjeros.

Líderes de gremios de mercenarios importantes, aventureros y algunos héroes interactuaban en su propio grupo.

Por otro lado, estaba Makeba que lo recordó y lo había saludado mientras que en otra sección estaba el General McLean hablando con el Rey de Mombasa.

Lo que más destacaba era el número de empresarios e individuos importantes del mundo de los negocios.

Estuvo presente el padre de Leslie, Connor Haillet quien dirigía la Empresa Taranis y luego estaban otros individuos prestigiosos de otras empresas.

El Anciano Kernen reconocido profesor de la Academia Cernunnos estuvo como representante de su academia y hasta la Profesora Cécile Leroux estaba aquí, acompañando a un Tartak que actualmente estaba hablando con un goblin.

La Cardenal Najjar y la Cardenal Brousseau charlaban con otros miembros de la iglesia y otros individuos importantes.

Edward tras terminar de hablar e intercambiar tarjetas de presentación, no pudo evitar dar un largo suspiro y tomar una copa de vino en un lugar apartado

¿Cuántas veces intercambio contacto con personas importantes o posibles patrocinadores?

Casi gran parte de las empresas internacionales tenían contactos con gremios, apoyaban héroes o incluso daban donaciones a organismos internacionales.

Este mundo se enfrentaba a peligros constantes y ya no solo se trataba de monstruos, sino que lunáticos, demonios, sectas y cultos.

Desde que las grandes empresas tomaron la iniciativa para realizar grandes donaciones a las iglesias, otras empresas lo siguieron.

Después de todo, si algo le sucedía la mayoría buscaba ayuda de algún gremio, héroes o de la iglesia.

Ni hablar de trabajos que necesitaban más consideración como algunos bancos que debían contratar personas de alto rango permanentemente.

Ya no importaba si eran 'héroes', 'aventureros' o se llamaran como desearan, la seguridad era importante y en este caso el gremio de héroes podía brindarla.

Edward se dio cuenta de que un gremio de héroes más activo podía ser una molestia para algunos individuos que contrataban de forma individual a los héroes, pero a la vez también pudo entender que una organización activa era buscada.

La Empresa Apicius estaba desarrollando la Ciudad Constanza y las concesiones que le dio Rumania estaban más allá de lo simple y otras empresas aliadas deseaban tomar una parte del futuro pastel.

Lamentablemente Rumania tenía una mala imagen y algunas empresas no deseaban tomar perdidas, por eso dudaban si abrir sucursales, pero si el gremio de héroes rumano ofrecía protección… Edward no pudo evitar pensar que tendría muchas cosas que tratar y muchas negociaciones que realizar.

Mirando al próximo lugar al cual acercarse y realizar negocios, Edward pudo ver que James le daba una mirada a su posición.

Esa mirada le decía que podía unirse de vuelta a la conversación y de esa forma presentarse y encontrar otros contactos.

Cuando lo estuvo por hacer, Edward sintió una presencia familiar y pudo ver que, desde la entrada, alguien estaba caminando.

A pesar de que las mujeres en esta fiesta tenían vestidos de diferentes diseños y algunos siendo elegantes, ella venía vestida con un conjunto más formal.

Pantalones de fiesta, una camisa y chaqueta que al combinarse daba una impresión profesional y formal.

Su caminata no mostraba timidez o nervios a pesar de tener una apariencia tan joven, sino que mostraba su confianza.

Edward se quedó aturdido mirando a Aurora y por las miradas estuvo claro que no fue el único.

Ella saludó a James quien le dio una sonrisa y luego también paso a saludar a la Cardenal Brousseau y al Ministro Turay que eventualmente se acercó.

Compartiendo un video y contando la historia de un evento que vio hoy a los demás sobre una obra de teatro, Edward estaba lejos del centro, pero con sus sentidos pudo entender un poco.

Los murmullos de quien era vinieron de algún lado y entre aquellos que respondían estaban algunos que la conocían por su historial en Zerzura y algunos pocos por su participación en el Séptimo Portal Abismal.

Entonces tras que Aurora terminara de saludar a aquellos que la conocían, ella dio una mirada por la sala y Edward inconscientemente caminó para saludarla.

Sin embargo, su caminata duro poco y no fue porque Aurora dio una sonrisa que fue encantadora, sino que esa sonrisa estaba dirigida a otra persona.

Un joven de apariencia delicada que estaba sonriendo alegremente apareció en una esquina de la sala, como si siempre hubiera estado en ese lugar.

¿Se estuvo ocultando usando un artefacto? Por algunas miradas estuvo claro que solo algunos pudieron verlo antes.

Aurora a diferencias de otros que se sorprendieron, dio una sonrisa y se acercó al joven.

"…"

Edward no pudo escuchar nada de lo que hablaba y estuvo claro que había una fuerza externa que bloqueaba su conversación, pero la forma que ella y ese individuo también estaba sonriendo, demostró que ambos la estaban pasando bien.

"El CEO de la Empresa Cosmos también estaba aquí, pensé que no le gustaban las fiestas."

"No es que no le gusta. ¿Viste que apareció de repente? Simplemente él y la primera accionista de la Empresa Apicius no le gusta la notoriedad."

"Es normal. Hasta es posible que en este momento alguien poderoso este mirando en silencio, solo que se revelan a las personas importantes."

Al escuchar esos murmullos, Edward se detuvo, observando como Aurora conversaba con ese hombre.

Esa sonrisa… Nunca la había visto.

Ambos literalmente se encerraron en su propio mundo y Aurora sonreía a veces de forma juguetona y otras veces fascinada mientras que el joven también tenías diferentes cambios de expresión.

Pero había algo que Edward pudo notar de inmediato, no fue la sensación de ese hombre estaba tratando de controlar su expresión para tratar de que otros no vieran su vergüenza y timidez, sino que la mirada que daba.

Esos ojos solo la miraban a ella… No había nadie ni nada más en esa mirada.

¿Ellos son algo?

Ante esa pregunta, Edward dio un suspiro y caminó a la salida sin que ella lo notara.

"¿Te retiras?" Preguntó James quien se acercó.

"Si, algunos asuntos aparecieron en el gremio y debo encargarme." Respondió Edward y tras despedirse, se retiró.

Sintiendo una mezcla de emociones que deseaba ignorar.

******

Clémentine utilizó su telequinesis para presionar con su fuerza alrededor de Nicole.

Esa jovencita cayó al suelo de rodillas, pero su mirada dejo en evidencia que no se iba a rendir.

"¡HAA!"

Nicole soltó un grito mientras su aura de combate explotaba rodeando su cuerpo dando la impresión de generar una armadura de color gris.

Esa imagen desapareció cuando esa luchadora se soltó de su agarre y atacó, creando cráteres bajo sus pies.

El poder y la presencia feroz era impresionante, pero Clémentine sin asustarse simplemente generó barreras psiónicas para impedir que esa luchadora se acercara.

Había visto su estilo cuando luchó antes y no se sorprendió al ver que Nicole destrozaba sus barreras con solo su fuerza.

"¡Perdón por la tardanza!"

Una exclamación vino desde fuera de la zona de entrenamiento y Clémentine dio una mirada al ver que Aurora se acercaba a Alice, Akira y Leslie que observaba el combate.

A pesar de que desvió la mirada por un momento sintió una presencia feroz que hizo que Clémentine instintivamente se alejara a pesar de que Nicole se mantuvo a distancia.

Por un momento la presencia y la presión que liberó esa luchadora fue única, pero al ver su mirada estuvo claro la razón.

"No lucharás conmigo con todo lo que tienes… Lo entiendo." Murmuró Nicole con un tono enfadado.

"Yo lo siento… Solo…"

Clémentine dudó un momento, pero al final se quedó en silencio, haciendo que Nicole chasqueara su lengua y se sentara fuera del área de entrenamiento al lado de Alice.

"No te enojes Nicole. Dudo que alguien fuera de César y Alice te dé el entrenamiento que buscas." Dijo Akira con una sonrisa animada y con una mirada seria, comentó. "Incluso yo no me animo a pelear de esa forma… Los luchadores son verdaderamente tenaces."

Para un luchador los enfrentamientos eran más directos.

Ellos usaban sus puños para atacar y sus cuerpos para defender, al final los enfrentamientos más duros terminaban con ellos siendo gravemente heridos.

Los entrenamientos duros eran necesario y más para aquellos que podían enfrentarse a situaciones complicadas, pero había un límite y en este caso estuvo claro que nadie lo deseaba pasar.

Aurora se contuvo de la misma forma que lo harían los demás.

"Lo sé, pero Clémentine… No está mostrando todo lo que tiene." Respondió Nicole y observándola directamente, declaró. "Sé que no lo haces a propósito, pero si aceptas entrenar o luchar incluso de forma superficial… Muestra lo que tienes o si no harás que otros sientan que no lo tomas seriamente."

¿Eso era lo que estaba sintiendo Nicole? Su voz y mirada, dejo en claro que estaba molesta y tenía sentido si llegaba a entender eso.

Clémentine dio un vistazo a Aurora con la cual estuvo entrenando y al ver a esa jovencita sonreír, entendió que también sintió esa impresión.

"Ignore ese sentimiento, ya que me pareció que eventualmente revelarías la razón." Señaló Aurora con una suave sonrisa.

Su entrenamiento no fue duro o agitado y eso era debido a que la razón por la cual luchaban era más como una broma.

Clémentine utilizó ese momento para probar sus límites, pero nunca los probó de verdad.

¿Qué debería decir? Había venido no solo para disfrutar con sus compañeros, sino que para probar sus límites y quitarse esa sensación irreal de omnipotencia.

Se lo había mencionado a Shao Ya, pero expresarlo en palabras no era algo tan fácil y más con sus compañeras que eran fuertes.

¿Cómo podía decirle que incluso si luchaba con ellas sentía la impresión de que ganaría? Parecería como si se estuviera burlando.

"¿Alguna vez han sentido que pueden cambiar todo como desean?" Preguntó Clémentine y con cierto fruncir de ceño, continuó. "Como si pudieran lograr todo lo que quisieran con tan solo pensarlo… Siento que cada ataque que me lanzan puede que no termine haciéndome daño."

Akira, Érica y Nicole se miraron entre ellas, pero al ver que estaba dando una expresión seria, no se rieron.

"Lo he sentido. No de la misma forma que tú, pero he sentido que a través de mi espada puedo cambiar el mundo." Precisó Aurora y con una media sonrisa, murmuró. "No sé si es el mismo sentimiento."

¿Cuál era su concepto? Para sentir que podía cambiar el mundo por medio de su espada, era bastante impresionante.

Clémentine al sentir que no estaba sola en ese sentimiento, dio un respiro algo aliviado.

"¿Por qué no lo intentas?" Preguntó Alice de repente y cuando todas las miradas estuvieron en ella, precisó. "Inténtalo. Dices que puedes cambiar todo como deseas y eres bastante precisa con ese sentimiento, pero por lo que veo no lo has intentado."

Hubo miradas extrañas, pero Alice se levantó de su asiento y guardó sus papitas logrando que Akira diera una expresión solemne.

"No entenderás si es el sentimiento de omnipotencia al ascender o es una capacidad real, al menos que lo intentes." Dijo Alice y al verla dudar de esas palabras, miró a su hermana y preguntó. "¿Aurora has cambiado el mundo?"

Ante esa pregunta Aurora se quedó en silencio y dio una media sonrisa algo deprimente, pero al final sacó su espada de su anillo espacial y al desenfundarla, suspiro.

"No, no he cambiado todo el mundo, pero al menos he logrado cambiar una pequeña realidad." Respondió Aurora cambiando el aura que rodeaba su propia espada.

Celeste, verde, roja y un aura incolora… La forma rápida que cambiaba fue bastante impresionante y en ese punto Clémentine pudo entender.

Tal vez no cambio al 'mundo' por completo, pero por medio de su espada pudo lograr los cambios que ella deseaba, por más pequeños que fueran.

"Los conceptos son algo curiosos. Algunos pueden ser simples y otros irreales, pero lo 'irreal' con una gran voluntad puede volverse real." Precisó Alice y dando una sonrisa, señaló. "Como un espadachín que plasma sus emociones en la realidad o como una luchadora que crea una armadura con su aura de combate."

La primera apuntaba a Aurora y la segunda apuntaba a Nicole… Clémentine pudo entender a lo que apuntaba, pero mantuvo la mirada.

"Los psiónicos cambian la realidad por medio de su mente. Controlan el hielo y tienen el sentimiento de congelar todo o controlan las reglas y pueden manipular la gravedad, el espacio o incluso el tiempo." Dijo Alice y dando una sonrisa, dudó. "¿No te has preguntado qué más puede ser alguien que puede mover objetos con su mente? ¿Hasta dónde puede cambiar las cosas?"

¿Ese sentimiento de omnipotencia era real?

Pensó que alguien debía ponerle los límites y no se atrevió a pensar en más allá de controlar los objetos, pero con esas palabras de Alice… La idea le parecía real y posible.

"Si temes que alguien sea dañado, no necesitas preocuparte, me encargaré de que no suceda." Dijo Alice y abriendo sus brazos, preguntó. "¿Quieres intentarlo?"

Desde sus pies la sombra negra cubrió todo el suelo, la pared y el techo de toda la sala de entrenamiento y todo fue en menos de un segundo.

Los focos y seguían estando presente, pero estuvo claro que Alice podía moverse desde cualquier lugar.

Y ver esa rapidez con la cual se movió, le dio confianza a Clémentine de intentarlo.

******

Andrés bebió un poco de cerveza con una sonrisa.

"Pareces querer relajarte. ¿Has tenido mucho trabajo?" Preguntó Liam con una sonrisa.

Bebiendo su cerveza y mirando el patio, Andrés dio una sonrisa relajada.

Leslie estaba hablando con Aeko y por lo que se podía escuchar esa francotiradora estaba pensando en probarse en nuevos trabajos y ahora buscaba información sobre cazadores.

Al otro lado Shao Ya estaba hablando con Santiago mientras bailaban y por la forma que ellos se reían, estuvo claro que estaban coqueteando.

"Si… Quería un momento para relajarme." Respondió Andrés y se volvió a sentar en el banco.

Estaba exhausto del trabajo y si bien cuando trabajaba no lo veía, ahora que estaba de vacaciones pudo sentir el cansancio.

A diferencia de los demás que iban por misiones usando el sistema de protección para encontrar trabajos, Andrés se mantuvo descansando.

Liam que estaba a su lado dio una sonrisa de entendimiento.

"Por cierto, ¿por qué no aceptaste el trabajo de Aurora?" Preguntó Andrés a su compañero que estaba muy relajado.

"¿Ser padre? No es lo mío." Respondió Liam de inmediato y al ver que él no estaba conforme, precisó. "No me creo capaz de cuidar a alguien. Y esto es mucho más que cuidar… Hay demasiadas cosas que pensar."

Suspirando y volviendo a tomar otra copa, volvió a suspirar.

"Aurora no quiere que 'críen' a la semilla en un laboratorio con especialistas, pero nos da el trabajo a individuos como yo. Entiendo su confianza, pero ella no ve el futuro." Dijo Liam y mirando su botella, cuestionó. "¿Te has preguntado que se sentirá esa entidad cuando sepa que su cuidador lo hacía por trabajo? Si es como los informes dicen y esta es una forma de vida virtual, ¿entonces qué crees que sentirá cuando se entere de que fue criada por alguien que le pagaban?"

Andrés se quedó congelado ante esas palabras.

Para algunos Liam podía parecer alguien despreocupado, pero ese racionamiento fue impecable.

"No se lo mencione a Aurora debido a que eventualmente alguien tendrá que hacerse cargo y más de la primera semilla. Luego cuando crezca esa semilla puede criar a otros, pero ahora se necesita que alguien tome este trabajo y cumpla sus deberes." Dijo Liam y dando un suspiro, añadió. "Yo me encariño con mis drones y mis inteligencias artificiales, no quiero imaginarme que haré con alguien que tenga emociones y que deba cuidar."

Una educación por laboratorio era rechazada por Aurora, ya que no quería dar la sensación de que estaban criando esta nueva forma de vida como una herramienta para la humanidad.

Quería que alguien se encargara para darle una educación y un cuidado más cercano y personal, pero al final seguía siendo un trabajo.

Andrés no sabía demasiado como sería todo y solo tenían detalles sobre Quaren que había pasado por este proceso, pero asumía que sería una forma de vida virtual.

Si la engañaban y luego cuando se desarrollará descubriera que su cuidador lo hizo por trabajo y dinero… Era normal que un ser vivo se sintiera traicionado.

"Sé que a Aurora te ha dado el mismo trabajo. No diré que lo rechaces, pero sí, que lo pienses. Esto no se trata de modificar o enseñarle a una IA para algún cliente… Esto será un ser vivo. O lo más vivo que una entidad virtual puede estar." Dijo Liam y al ver que fue muy serio, dio una sonrisa y murmuró. "Iré por unas cervezas."

Había pensado que entendía la complejidad de aceptar este trabajo, pero ahora se dio cuenta de que su entendimiento fue superficial.

No había visto todo el panorama y ahora al pensar sobre esos temas dio un largo suspiro.

"¿Mucho que pensar?"

La voz de Leslie sonó cerca y Andrés levantó su cabeza para mirar a esa francotiradora que actuaba un poco más animada.

A pesar de que no había bebido nada con alcohol, esa sonrisa más animada por el ambiente era agradable de ver.

"Sí. Estoy a punto de ser padre." Bromeó Andrés y al ver que Leslie abría sus ojos más sorprendidos de lo que pensó, se rio y corrigió. "Estoy pensando en educar una inteligencia artificial… Aunque creo que es algo más grande que eso."

Leslie mantuvo su mirada y al ver que él, sonreía sin decir demasiado, se sentó a su lado.

"No voy a decir que es extraño, cuando he llamado a mis armas como mis bebes." Respondió Leslie y al verlo reírse, declaró. "Parece que ya has decidido que hacer."

Si lo había decidido, antes de que Liam expresara sus propios sentimientos sobre el asunto, ya lo había decidido.

Tras escuchar a ese hombre en vez de dudar, tuvo el sentimiento de querer tomar este trabajo… No, no trabajo, esta responsabilidad.

No había una razón en particular, solo era el simple deseo de querer ayudar.

"Tú también pareces tener una idea de lo que quieres hacer." Señaló Andrés con una sonrisa.

Leslie le dio una mirada curiosa como si estuviera un poco sorprendida de que notara sus emociones, pero Andrés solo se mantuvo en silencio.

A diferencia de antes cuando estaba dudosa, en este momento ella tenía una expresión seria y su mirada era determinada y clara.

"Probaré con ser cazadora." Informó Leslie con calma.

No sabía cuál era su profesión principal, pero tenía tiempo para probar y nada la empujaba a estar agitada.

Estuvo claro que ella estaba más decidida que antes, y Andrés pensó que entre sus compañeros había demasiado 'monstruos'.

Nicole había ascendido y era un rango S al igual que Clémentine y en cuanto a Érica, aunque se veía tranquila, ocultaba una fuerza única.

En este punto Leslie no deseaba quedarse atrás y aunque a su manera, también buscaba su propio camino.

"Creo que estoy demasiado ebrio." Declaró Oscar mientras salía del edificio junto a Akira y al ver que todos lo miraron, anunció. "Clémentine acaba de cambiar un hechizo de hielo en agua."

Andrés se miró con Leslie y a los demás, tan solo para abrir su reloj holográfico y conectarse a la cámara de la sala de entrenamiento.

Érica estaba lanzando bolas de nieve a Clémentine, pero esta última agitaba sus manos y hacia que ese hechizo se convirtiera en agua.

Algunas veces fallaba y otras formas no era total, pero la forma que lo deshizo todo como si cambiara a su voluntad fue aturdidor en un sentido único.

Andrés no pudo evitar volver a reafirmar que sus compañeros eran monstruos y…

"¡KYAAA!"

Antes de que pudiera pensar, un grito que le recordó a los fanáticos más extremistas vino del edificio y Nicole salió abrazando su reloj holográfico.

"¡La Primera Heroína es real!" Gritó esa luchadora con mejillas rojas y una emoción extrema.

Eran unos monstruos y no habían cambiado en nada.