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Suerte y perseverancia

Pequeña aclaración: Cada volumen es independiente del otro. Sigue su propia línea de historia y no se ve afectado por los volúmenes anteriores. Bueno, salvo por algún poder o habilidad que se viene arrastrando por el conocimiento y la personalidad del protagonista que va evolucionando. Volumen 1 Cross over entre nasuverso y Madam ou no Vanadis Volumen 2 viaje por Juego de Tronos, Señor de los anillos y Dark Soul 3 Volumen 3 Mushoku Tensei y Danmachi. Volumen 4 Naruto y muchos otros. -o- Kain, antiguo vástago del equilibrio. Renació en el mundo de Fate y vivió durante varios siglos. Sin embargo, al encontrarse con su viejo enemigo, el dios Hilden, lucho y perdió. Ahora su alma viaja a través del multiverso buscando el poder y la forma de volver a aquel mundo por la venganza. -o- Reglas del juego: 1.- No hay power up indiscriminados 2.- Todo se estudia y se gana hasta dominarlo 3.- El alma influye sobre el cuerpo, por ende, el cabello y los ojos siempre serán los mismo (ojos color lazuli y pelo blanco). 4.-La fuerza es proporcional al conocimiento adquirido, la técnica y la fuerza del alma. 5.- El nivel del mundo es proporcional al alma. Eso quiere decir que si el alma del protagonista es fuerte, irá a un mundo de mayor nivel.

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Mundo Shinobi - Un comienzo difícil - capítulo 9

Al día siguiente Kain estaba persiguiendo a los clones de Mito con todas sus fuerzas, pero la dificultad de alcanzarlas estaba más allá de sus posibilidades.

-Vamos Kain- le grito uno de los clones que perseguía en ese momento. Ella parecía estar divirtiéndose mientras que él parecía estar dejando su vida en este entrenamiento. Kain jadeaba y a medida que avanzaba por el bosque, se rasmillaba la cara con las ramas de los arbustos. A veces se resbalaba con las piedras, pero de alguna manera se las arreglaba para recuperar el equilibrio. Al mismo tiempo, habían dos versiones serias de Mito supervisando a los otros dos clones para que ninguno ayudara a Kain.

En medio de eso, Kain se resbalo con una piedra, se deslizo hacia adelante y cayó de espaldas golpeándose la cabeza. Al instante siguiente saltaron los cuatro clones y llegaron al lado de Kain para socorrerlo. El niño se quedó en el suelo, agarrándose la cabeza gracias al dolor que le provoco el golpe. Los cuatro clones quisieron ayudarlo al mismo tiempo, pero al ver la reacción de las otras se detuvieron.

-Yo lo veré- dijo una de los clones

-No, eres demasiado fría con Kain, mejor lo veo yo- respondió otro clon

-Solo soy estricta, es por su bien-

-También pienso lo mismo, pero tú te pasas, así que mejor lo veo yo- dijo otra

Al final, uno de los clones sin preguntarle a nadie levantó a Kain entre sus brazos y le pregunto -¿Te duele mucho?-

Las otras tres clones detuvieron su discusión y miraron a la oportunista como si fuera su enemiga. Sin embargo, la clon las ignoro y puso toda su preocupación en Kain. Por otro lado, Kain le hizo el gesto con la mano derecha para que se acercara. Así lo hizo el clon que lo sostenía, pero no fue la única. También lo hicieron las otras clones quedando a un par de centímetros de Kain. Este último estiro su pequeña mano y en un rápido movimiento les toco el rostro a las cuatro y les dijo -atrapadas-

Las cuatro clones se quedaron mirando unas a otras con rostros llenos de incredulidad. Fruncieron el ceño al mismo tiempo y le pusieron cada una un coscorrón en la cabeza. Kain grito aún más fuerte que cuando se cayó en las piedras.

Mas tarde esa mañana, las clones lo llevaron delante de la Mito original y esta le bajo los pantalones para darle veinte nalgadas.

-¿Qué te dije ayer, mocoso?- pregunto Mito en medio de repartir las nalgadas -estas entrenando, no jugando. Tómatelo en serio-

-Sí, tía- grito Kain en medio de su castigo -no me pegues más, seré un niño obediente-

Sin embargo, Mito no se detuvo hasta dejarle el trasero colorado e hinchado. Solo después de que ella se calmó, lo bajo. Para ese entonces Kain no se podía ni tocar el trasero.

-Mañana vamos a entrenar otra vez y si no te pones serio- dijo Mito alzando la mano como si le estuviera ofreciendo más de donde salieron los otros -habrá más castigo ¿Entendido?-

-Sí, maestra- respondió Kain con un gran puchero y los ojos acuosos

Mito tomo una profunda respiración, tuvo que calmarse ya que al verlo tan triste tuvo la tentación de abrazarlo y consolarlo, pero al final se abstuvo. Este niño era demasiado estatuto para su corta edad. No es como si fuera el único, muchos de los grandes clanes tenían bribones de la misma talla. Sin embargo, era malo que él subestimara a los adultos. Hashirama sería más duro cuando le tocara entrenarlo si seguía igual.

Después de eso, Mito llevo a Kain a la casa para que almorzaran. Dentro de eso tuvo una fuerte discusión con Naoko, quien se molestó porque utilizo la violencia con Kain. Pero como Naori estuvo de parte de Mito poco valieron sus palabras. Así que lo único que le quedo a Naoko fue abrazar a Kain y darle su cariño. Por otro lado, después de almorzar, Mito se llevó de nuevo a Kain a estudiar a una de las habitaciones de la mansión. Esta vez estuvo Naoko presente, sentada en un cojín al lado de Kain. Mito la quedo mirando algo sorprendida, pero la dejo ser.

Durante dos horas, Mito le estuvo enseñando a Kain las letras y los números, quedando encantada de lo rápido que captaba los conceptos. Así que como premio, le dio un poco de helado y compartió conocimiento de sus técnicas.

En ese momento, Kain comía helado de chocolate a medida que le convidaba a su madre. Esta última estaba entre feliz de probar algo tan rico y apenada por disfrutar con la misma alegría que su hijo. Al mismo tiempo, Mito sonreía ante la expresión de felicidad en la cara de ambas personas.

-Kain, pon atención- dijo Mito al frente de Kain, sentada en posición de seiza

Kain sentado al lado de su madre, probo la última cucharada de helado y asintió.

Mito continuo -lo que utilice se llama clon de sello. Es una habilidad desarrollada por los Uzumaki, mi clan de origen, y te permite duplicar tu cuerpo para realizar diversas tareas. En un principio fue utilizado para la guerra, pero con el tiempo se les fue dando otros usos. Lo importante es que tiene sus virtudes y defectos. ¿Pudiste ver alguno?-

-¿Los cuerpos son iguales, pero de mal carácter?-

Mito hizo una sonrisa que no lo era, mientras sentía que la vena en la sien le palpitaba -toman partes de la personalidad del original- dijo -es peligroso si alguien tiene una doble personalidad, pero mientras la persona tenga una mente equilibrada, el clon no saldrá muy diferente del original. Así que ten cuidado, puedo volverme estricta-

Mito levantó su mano derecha como ofreciéndole corrección. Al mismo tiempo que Kain se tapaba el trasero con ambas manos. Mito asintió un poco más contenta al recordarle quien estaba al mando y continuo.

-La habilidad de crear sellos por un Uzumaki se puede considerar de alto nivel entre los demás clanes. Ya que se necesita un alto nivel de concentración, control del chakra y calculo al desarrollar el sello. No obstante, para nosotros los Uzumaki es una habilidad básica-. Mito puso un rostro cargado de orgullo y dijo -así que estudia mucho para que en el futuro puedas aprender esta habilidad y otras más-

-¿La maestra me va a enseñar sus habilidades?- pregunto Kain asombrado

-Claro, por algo soy tu maestra. Pero para los niños poco serios no hay nada, así que mañana entrena como se te pide-

-Pero la abuela me dijo que no le enseñara las habilidades de fuego a nadie. Dijo que era el precioso conocimiento de nuestros ancestros y no deberíamos compartirlo con los extraños-

-De que hablas mocoso- dijo Mito llena de confianza -por algo te dije que soy tu maestra. Hay una frase que dice "Maestro por un día, padre para toda la vida". Soy tu maestra, así que también me puedes considerar tu madre-

Sin embargo, al momento que dijo esas palabras alguien se quejó.

-Kain es mi hijo, no te pases Mito- dijo Naoko en un tono estridente, como si fuera una fiera a punto de saltar al ataque. Abrazo a Kain que estaba a su lado y frunció el ceño completamente enojada.

Mito se rasco la cabeza algo asombrada por lo preocupada que siempre estaba esta mujer de que le quitaran a su hijo -nadie te va a quitar a Kain, Naoko- dijo Mito en un tono reconciliador -es solo que yo como su maestra pondré un cuidado especial en él ¿entendido?-

Naoko asintió dejando de abrazar a su hijo, pero manteniendo un rostro molesto. Mito soltó un suspiro y tomo nota de no decir esas palabras en el futuro, al menos, delante de Naoko.

Después de eso, le siguió explicando otras habilidades que podían hacer con los sellos. Como guardar objetos y hasta elementos. Curar algunas lesiones menores, almacenar chakra y otras habilidades demasiado prácticas para ignorarlas. Kain estaba atento a todo lo que decía Mito mientras que Naoko a su lado esperaba a que terminarán la clase.

Al día siguiente, Kain una vez más se dedicó a perseguir con todas sus fuerzas a los cuatro clones. Esta vez siendo más serio que los otros días. Sin embargo, el resultado fue el mismo. Termino exhausto y no pudo atrapar a ninguna de los clones. En ese momento quedo tumbado entre el pasto y la tierra del bosque mientras los frondosos árboles lo protegían del implacable sol.

-¿Qué pasa Kain?- pregunto el clon al que perseguía, se acercó al niño y se puso en cuclillas mientras lo miraba jadear. Estiro su mano derecha y le pincho las mejillas regordetas -¿Te rindes?-

Kain negó entre jadeos y apoyo sus pequeñas manos en el suelo para levantarse y retomar su carrera. La clon lo encontró lindo en sus pequeñas ropas de ejercicio. Eran las ropas bases de un uniforme de combate que cualquier shinobi de la aldea ocupaba.

-Vamos, Kain, tú puedes- dijo animándolo, se puso de pie y se alejó tres pasos.

Kain asintió mientras sentía que le faltaba el aire. Dio una profunda respiración y comenzó a correr detrás del clon, evitando las piedras, cubriéndose de las ramas de los arbustos y buscando la sombra arcoíris.

Al mismo tiempo, la Mito original estaba tomando el té sobre el pasillo que bordeaba la casa por detrás. Naoko y Naori la acompañaban en ese momento. Ellas bebían en completo silencio hasta que Mito decidió contarles lo que había aprendido.

-¿Sabían que el niño podía ver el chakra en forma de nube de color?- pregunto

Naoko negó algo avergonzada por desconocer lo que le pasaba a su hijo. Por otro lado, Naori asintió en un suave gesto -no es hace mucho, pero lo he notado. El niño hace un año, más o menos, empezó a caminar mirando hacia todos lados. En un principio pensé que era por la novedad de vivir en un nuevo lugar, pero después lo descarte. Ya que cuando llega por las tardes Hashirama-sama, Kain es el primero en acercarse a la puerta para recibirlo-

-¿Es algo de tu clan?-

-No, para nada- dijo Naori -debe ser un don propio. Para empezar, Kain ni siquiera ha activado el sharingan, así que deberías descartarlo-

Mito asintió varias veces y al ver a Naoko afligida por desconocer lo que le pasaba a su hijo, le dijo -no te preocupes, Naoko. Kain es tan pequeño que dudo que sepa lo que le pasa a sus ojos. Sería difícil que te lo comunicara. Para él debe ser como algo interesante que solo puede ver él-

Naoko asintió algo afligida mientras Naori le pasaba la mano por la espalda para reconfortarla. Ojalá pudiera ser mejor madre, pensó Naoko.

Mito solo puso una sonrisa llena de entendimiento. Ojalá Naoko supiera que no es la única que se siente así, pensó. Mito también se sintió igual cuando su hijo estaba creciendo. Ya que lo trajo a este mundo violento, en una época de transición, mientras su padre estaba luchando para establecer esta aldea shinobi. Fue una época difícil, ya que tuvo que negar la niñez a su hijo. Todo con el fin de que creciera como un buen shinobi y se pudiera defender a sí mismo.

-Ojalá Kain no tenga que pasar por lo mismo- murmuro Mito, pero conociendo al padre del niño y como de violento es este mundo a pesar de todos los cambios, lo dudo. Lo mejor era fortalecerlo para que él pudiera seguir los pasos de Hashirama. Ya que Mito aspiraba a que Kain siguiera el camino correcto y no llegara a ser como su padre.