¡Reino Místico Supremo!

—¿Eso es todo? —preguntó Sun Minggu con prisa.

—Eso es suficiente —respondió Yang Luo—. Ahora, solo tenemos que esperar.

Mientras no haya contratiempos, los fundamentos del Dao de los tres ancianos serán reparados en máximo tres días.

—¿En serio?! —lució sorprendido Yue Daoyuan—. ¿En verdad se pueden reparar los fundamentos del Dao de los Ancianos?

¿Y solo toma tres días?!

—Por supuesto —asintió Yang Luo—. Si no me crees, espera y verás.

Mientras hablaba, Yang Luo le dijo a Mo Hongtu:

—Tío Mo, no dejes que nadie los moleste en los próximos días.

—¡No te preocupes, yo daré la orden! —dijo Mo Hongtu.

Yang Luo miró a los demás y dijo:

—Yo vigilaré aquí. Todos, pueden ir a hacer sus cosas.

—Nos quedaremos aquí —dijo Mo Hongtu—. Si el Fundamento del Dao del Anciano Li no ha sido reparado, no estaremos de ánimo para hacer nada más.

Mu Yuexin le pidió a Mo Qingxuan que se llevara a Mo Qingyu.

No había necesidad de que la pequeña niña los acompañara aquí.