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Reverend Monarch of Falsehood

El viaje hacia la eterna longevidad es largo y solitario. Ante las adversidades, hay que sobrevivir y permanecer inflexible. Solo entonces uno podra avanzar y continuar su viaje hacia la cima para convertirse en la existencia más fuerte. El Monarca de la Falsedad vaga por la existencia misma fingiendo y adueñandose de las identidades y razas de otros, asesinando y sembrando el caos a donde sea que vaya, cometiendo incluso toda clase de actos sin escrúpulos en su camino con tal de conseguir estar siquiera un paso mas cerca de cumplir su tan ansiado objetivo...

Feng_Yinyang · Oriental
Pas assez d’évaluations
88 Chs

Reino Secreto del Señor del Cielo

"¡Shi Tianshi! ¡Estas actuando demasiado autoritario!" Grito Lang Zuren con un tono furioso mientras era enviado a volar.

¡Boom!

El cuerpo de Lang Zuren cayó, estrellándose contra el suelo mientras miraba fríamente a Feng Yang, inmediatamente después un rastro de intención asesina apareció en sus ojos mientras sacaba de su bolsa universal un sable rojo.

"¿Demasiado autoritario? ¿No será qué el compañero daoista es simplemente demasiado incompetente...? ¿Cómo puedes culpar a otros por tu propia incompetencia?" Pregunto Feng Yang con una fría sonrisa mientras también sacaba su Armamento.

El sacar sus Armamentos para luchar no estaba prohibido, pero los participantes no lo harían a menos que tuvieran un fuerte odio por la otra parte, en este momento al ser humillado a Lang Zuren no podía importarle menos el siquiera pensar en considerar sus emociones.

Estaba claro que sentía odio por Feng Yang por lo que simplemente sacó su Armamento de rango medio y miro fríamente a Feng Yang, él cual caminaba hacia él empuñando su lanza.

¡Clang!

¡Clang...!

En tan sólo un momento, Feng Yang y Lang Zuren se dispararon hacia adelante, las llamas que cubrían la lanza de Feng Yang comenzaron a arder más ferozmente y el frío viento fantasmal que cubría el largo sable de Lang Zuren comenzó a soplar aún más fuerte. Rápidamente ambas figuras se enredaron en una feroz batalla y los fuertes sonidos metálicos de los choques entre sus armas comenzaron a cubrir toda la plataforma.

"Jajaja... parece que aunque ese mocoso llamado Shi Tianshi es bueno, no puede compararse con mi buen discipulo." Se jacto el Anciano entre los nueve señores de las diversas ciudades Qing.

Este Anciano era claramente el Maestro de Lang Zuren, anteriormente había estado con una expresión sombría al ver como su discipulo era golpeado tan brutalmente, pero tras ver que Lang Zuren sacó su Armamento y comenzó a ser un poco mejor que Feng Yang. El Anciano realmente se alegro y no pudo evitar jactarse orgullosamente de su discipulo.

"¿Eso crees?" Pregunto Qing Xuanyuan mientras sonreía extrañamente.

Él creía que Feng Yang tenía la costumbre de buscar un patrón en los ataques de sus oponentes antes de lanzar su abrumador contraataque para derrotar a su oponente con rapidez, por lo que secretamente en su corazón se sentía extremadamente confiado.

"¡Eso creo!" Asintió vigorosamente el Anciano.

Al escuchar sus palabras, Qing Xuanyuan sólo guardo silencio y siguió mirando la batalla entre Feng Yang y Lang Zuren.

¡Clang!

¡Bam!

Feng Yang era como un fantasma que se movía de un lado a otro atacando a Lang Zuren con su lanza, Lang Zuren sintió que la lluvia de ataques de la lanza de Feng Yang era simplemente abrumadora.

Aunque tenía la ventaja, a diferencia de Feng Yang su mirada era sombría y sus emociones estaban en caos, simplemente no podía entender como había terminado tan rápido en una situación en la que él comenzaba a caer en desventaja.

¿No estaba en el Séptimo Orden del Reino Refinamiento de Qi? Incluso si no se había abierto paso hace mucho, era simplemente imposible que un sexto orden lo hiciera sentir tal presión... es más, mientras su oponente lo miraba inexpresivamente... le daba la sensación de que este encuentro estaba completamente perdido.

Esto sucedía por que a diferencia de Lang Zuren, Feng Yang no solía mostrar en su rostro las emociones que sentía en su interior por lo que a los ojos de los demás, él siempre parecía tranquilo, indiferente e imperturbable cuando luchaba.

Solo el mismo Feng Yang comprendía lo pesados que eran sus sentimientos y emociones al enfrentarse a fuertes enemigos.

Pero al luchar contra Feng Yang.

Lang Zuren no podía comprender la diferencia de fuerza entre él y Feng Yang, pero era normal, ¿cómo podría saber que Feng Yang entreno su cuerpo con una técnica secreta de una calidad extraordinaria?

A diferencia de Feng Yang, por no hablar de Lang Zuren, la mayoría de los cultivadores del Continente Inferior no se habían cultivado con una técnica secreta.

Aunque la mayoría no entrenaba con una técnica secreta porque no la tenía, Lang Zuren la tenía, pero simplemente no quiso entrenar su cuerpo con una técnica secreta.

Lang Zuren siempre creyó que no había nada que su sable no pudiera cortar y por su defensa no se preocupaba mucho, creía que incluso si su cuerpo no era duro y fuerte, podría soportar los ataques de los cultivadores en su mismo nivel.

Simplemente creía que siempre y cuando derrotara rapida y elegantemente a su oponente con su sable, no debería de preocuparse mucho por su defensa.

Incluso ante la insistencia de su maestro, rechazo una y otra vez el entrenar con una técnica secreta, la razón principal era que al practicar una técnica secreta como la de su ciudad, su agilidad se reduciría en gran medida y él, que siempre soño con ser un rápido y ágil cultivador de sable no quería esto, porque al la técnica secreta no ser de un nivel muy alto, tenía el defecto de reducir la agilidad a cambio de fortalecer el cuerpo.

Aunque la técnica secreta no era como la técnica de cultivo y se podía cambiar en el futuro si se encontraba una mejor, Lang Zuren sintió que era simplemente mejor esperar a que su maestro encontrara una que se ajustara a él antes de comenzar a entrenar su cuerpo.

Pero en este momento, se sintió realmente arrepentido... aunque podría haber reducido su agilidad si practicaba la técnica secreta de su ciudad, al menos podría soportar más tiempo contra enemigos con duros cuerpos como Feng Yang.

[¡Mierda! mierda... ¿Por qué...? ¡Por qué tuve que ser tan estúpido! Si hubiera practicado con la técnica secreta de la ciudad... si tan sólo hubiera escuchado al maestro... no terminaría perdiendo tan miserablemente...]

Mientras Lang Zuren pensaba y se sentía arrepentido, se defendío hábilmente de los ataques de Feng Yang que lo atacaba rápidamente sin descanso.

Al ver que la postura de defensa de Lang Zuren estaba llena de defectos mientras su expresión cambiaba constantemente, Feng Yang curvo levemente sus labios. Él sabía mejor que nadie lo que significaba esto...

Lang Zuren había comenzado a perder todo rastro de esperanza en su corazón y todo su ser había comenzado a ser invadido por sus arrepentimientos.

¡Bam!

Con decisión, Feng Yang apareció junto a Lang Zuren, hace unos momento ya había arrojado su lanza en el suelo.

Sus manos se abrieron y rápidamente dirigió una hacia la cabeza de Lang Zuren mientras pateaba la mano de Lang Zuren que sostenía el sable, el sable cayó al suelo y la rodilla de Feng Yang presionó la espalda de Lang Zuren tirando el cuerpo de éste último al suelo mientras le neutralizaba ambos brazos.

Cuando Lang Zuren estaba con el cuerpo y la cabeza contra el suelo mientras Feng Yang presionaba y neutralizaba sus brazos y cabeza.

Lang Zuren reaccióno de repente...

Todo paso en un instante y cuando se dio cuenta su cuerpo yacía completamente inmovilizado por Feng Yang, pudo sentir como una fuerza anormal presionaba la posición de su columna, esta era claramente la rodilla de Feng Yang. También sintió como una mano de Feng Yang presionaba su cabeza fuertemente contra el suelo y como otra apretaba sus brazos contra su espalda.

"Compañero daoista Lang, debería de rendirse, si se rinde, simplemente perderá algo de cara... pero si decide seguir estorbandome, perderá más que simplemente sus extremidades..." Susurro suavemente Feng Yang mientras presionaba a Lang Zuren, su voz era tan fría y escalofriante como la de un fantasma y Lang Zuren pudo sentir la fria y escalofriante intención asesina oculta en los turbios ojos claros de Feng Yang.

Sentía que incluso si su maestro estaba presente, Feng Yang lo mataría...

De hecho si fuera en otro momento, Feng Yang difínitivamente mataría a cualquier oponente contra el que luchara, a los ojos de Feng Yang si estaba luchando contra alguien, debía de matarlo lo más rápido posible.

Si estaban luchando mientras liberaban una intención asesina hacia su oponente, naturalmente no era por que se llevarán bien. En tales casos, Feng Yang creía que era mejor acabar con el problema desde la raíz de una sola vez.

Sería molesto dejar vivir a alguien que luego le causaría problemas...

Pero Feng Yang no podía matar en este momento, era muy débil y estaba bajo el techo de otro....

Feng Yang tenía muy clara su situación y sólo podía ser sumiso ante los verdaderos expertos, por que sabía que si matará a Lang Zuren, incluso Qing Xuanyuan que lo llamaba 'Hermano menor' trataría de tomar su vida e incluso si no lo hacía personalmente, no impediría que otros lo hicieran.

¿Cómo podría, él, Feng Yang, ser más importante para Qing Xuanyuan que los verdaderos miembros de sus Nueve Ciudades Qing?

Simplemente no podía, no se conocían por más de uno o dos días y aunque Qing Xuanyuan no era alguien desagradable, todos tenían prioridades en la vida y Qing Xuanyuan no era la excepción. Si tuviera que elegir entre alguien que conocía hace menos de unos días o una persona que compartía su misma línea de sangre, Feng Yang no podía tener más claro cual sería su prioridad.

Por que Feng Yang descubrió que aunque la mayoría de los participantes eran como él, invitados. Lang Zuren parecía ser más que simplemente el discipulo del Anciano entre los Nueve Señores de las Nueve Ciudades Qing.

Si Feng Yang no se equivocaba, Lang Zuren debería de ser un familiar o nieto no reconocido del Anciano, por lo que aunque no era del todo imposible matar a otros participantes, Lang Zuren no podía ser asesinado.

"Hmph, si no fuera porque todas esas cosas viejas me han estado observando fríamente desde el comienzo y en este momento soy extremadamente débil, ya hubiera asesinado a esta basura... e incluso a todos ellos." Resoplo interiormente Feng Yang mientras miraba a Lang Zuren y esperaba su respuesta.

Había comenzado a sentir gran disgustó y desagradó en su corazón por tener que actuar tan sumisamente y suprimir sus impulsos asesinos.

Aunque en este momento no podía ver las expresiones de los Nueve Señores de las respectivas Nueve Ciudades Qing, anteriormente cuando apunto con su lanza hacia el corazón de Lang Zuren, Feng Yang dirigió discretamente su mirada hacia ellos para ver sus expresiones y en ese instante se dio cuenta de que su situación era tal cual como pensaba.

Las expresiones de todos era espantosamente fría e incluso Qing Xuanyuan, tenía una expresión sombría, através de esto Feng Yang pudo ver claramente sus posiciones.

Por tal razón Feng Yang tiro su lanza y ataco simplemente con sus manos a Lang Zuren.¿Sino como podría, él, Feng Yang, dejar voluntariamente que sus víctimas siguieran con vida luego del primer encuentro?

"Yo... yo... me rindo." Respondió Lang Zuren con una expresión amarga y adolorida, sentía la impaciencia de Feng Yang ante su silencio.

Incluso la fuerza con la que Feng Yang apretaba su brazo, había aumentado con cada instante que se tardaba en dar una respuesta, sentía que sus huesos estaban comenzando a romperse y no tuvo más opción que admitir la derrota.

Al escuchar sus palabras, aunque todos sentían algo de decepción e incluso la expresión del Maestro de Lang Zuren era algo amarga, todos sabían que fue el mejor resultado.

Si Lang Zuren no se rendía y era gravemente herido o en el peor de los casos, asesinado, todo podría no haber terminado de forma tan tranquila y pacífica...

Al menos, los señores de las nueve ciudades sabían claramente que si Feng Yang dañaba de más a Lang Zuren, el hijo ilegítimo del Anciano, lo ejecutarian en el acto incluso si era un discipulo Interno de la Secta del Bosque Inmortal

No temían las represalias de la secta, la Secta del Bosque Inmortal al igual que todas las sectas sólo protegía a sus discípulos centrales y hacía en su mayoría la vista gorda ante las muertes de sus discípulos internos.

Aunque Qing Xuanyuan sospechaba que había al menos un Anciano en la Secta del Bosque Inmortal relacionado con Feng Yang y que lo apoyaba, podrían tapar fácilmente la ejecución de Feng Yang.

Después de todo, eran todos de las Nueve Ciudades Qing e incluso los que no lo eran, todos los presentes estaban del mismo lado, por lo que armar una cuartada no sería difícil.

Solamente Feng Yang estaba del lado contrario, como si no encajara. Por lo que si lo ejecutaban y la Secta del Bosque Inmortal pedía una explicación, todos los presentes simplemente podían inventar una excusa o mentira y compensar a la Secta del Bosque Inmortal por sus 'perdídas'.

Tal cosa ya había sucedido en el pasado, hubo una vez una persona que mato a un discipulo de una secta como la Secta del Bosque Inmortal y lo resolvió fácilmente sin tener que luchar.

"Parece que mi Ciudad Qing Xuan gano está vez..." Dijo Qing Xuanyuan rompiendo el solemne silencio.

Los demás no respondieron y simplemente asintieron.

Feng Yang ya había soltado a Lang Zuren y se dirigia a agarrar su lanza.

Un momento después, Qing Xuanyuan llegó frente a Feng Yang mientras sonreía y sostenía en sus manos una bolsa universal.

"Hermano menor..."

¡Crac...!

¡Boom!

¡Boom!

En un instante, sin que Qing Xuanyuan pudiera terminar de hablar. ¡El suelo de la plataforma comenzó a agrietarse y varias explosiones se hicieron sucesivamente presentes!

Causando que en menos de dos respiraciones, un par de enormes puertas blancas de cuarenta metros cuadrado con fenix y dragones negros tallados en ellas, aparecieran.

Estas puertas se abrieron y ambas desaparecieron instantáneamente dejando sólo un corredor vacío en el interior del marco de las 'puertas'.

"¡El Reino Secreto del Señor del Cielo!!" Gritaron los Nueve Señores de las Nueve Ciudades Qing con extrema conmoción.