CAPITULO 37: LA GUARDIANA DE MI CORAZON

Finalmente se había calmado, James sacó su cabeza del hombro de Elizabeth, con una tierna sonrisa le dijo

- Está bien Elizabeth, ya puedes soltarme, me siento mejor… gracias a ti

- No tienes que darlas- le pidió Elizabeth con una sonrisa amorosa

- Comandante, usted… ¿podría transformarse en Metal otra vez?- le pidió Galius sintiéndose muy nervioso, con una sonrisa temblorosa, le rogó- ¿por favor?

- No sé si sienta fuerzas Galius yo… lamento lo que vieron, debo parecerles inaceptable en este momento. Su Comandante Do… Domi… ¡qué vergüenza siento de solo pensarlo!- se lamentó Zyorg quien se sorprendió a si mismo viéndose desnudo. Un rubor, casi violeta, proveniente de la vergüenza y la angustia lo tomó por sorpresa al punto de que nuevamente sintió deseos de llorar- por favor amigos míos, no me vean. No vean en lo que se convirtió su comandante

- En realidad si lo queremos ver- le contestó Ultrior con un tono de orgullo y mando- porque a menos que nuestras funciones ópticas estén erróneas, tu composición metálica ya no es cobriza sino de Bronce

- ¡¿Qué?!- exclamó Zyorg sorprendido

- Es verdad James- lo consoló Elizabeth secando sus lagrimas- tu cuerpo tuvo un cambio considerable durante nuestra pelea

- Eso no puede ser posible- dijo Zyorg con la vista perdida y una expresión de anonadamiento

- Por eso le pedimos que vuelva a su forma de Metal, Zyorg- le pidió Zitron, qué estaba siendo atendido por Galius en ese momento

- Está bien; pero no se qué ocurrirá. Elizabeth, por favor, toma un poco de distancia- le pidió Zyorg sonriendo, ella asintió alejándose unos dos pasos- bien, aquí vamos

Con esfuerzo y conteniendo un pequeño gemido, Zyorg, retomó a su forma original. Todos pudieron comprobar qué, efectivamente, su composición era otra. El brillo Cobrizo de Zyorg había sido cambiado por uno de Bronce. Mirando su cuerpo con asombro, Zyorg, solo pudo decir

- No puedo computar esto, simplemente me es imposible- mirando a Elizabeth, le contó- en los más de mil años que tienen los Metales de haber sido creados, esto nunca ocurrió ni tampoco se tiene datos de que haya pasado o que le haya sucedido a alguien en el pasado

- Pues ya saben lo que dicen James- le contestó Elizabeth sonriente, tomando su pierna con su mano- siempre hay una primera vez para todo

- Sabias palabras- se quejó Zitron levantándose del suelo después de que Galius lo curase

- ¡Pues pienso que es perfecto!- exclamó Lition riendo y sobrevolando sobre el cuerpo de Zyorg- porque ahora no soy el único Bronce en esta batalla. Bienvenido a mi composición amigo mío

- Quizás debamos volver a nuestra base para poder revisar a Zyorg y planear el siguiente ataque- sugirió Galius y Ultrior le respondió

- Estoy de acuerdo, ¿Qué dices Zyorg?- sonriendo le preguntó- ¿volvemos a casa?

- Claro que si amigo mío, claro que si- asintió Zyorg, vio a Xenón y añadió- volvamos todos juntos

Tomando a Elizabeth en sus brazos, Zyorg, junto a los demás volvieron a la mansión de Víctor quien tenía una grata sorpresa esperándolos una vez que volvieran.

En honor a haber salvado la ciudad de Huttentorg y Vigenterg, Víctor organizó una gala muy importante. Dicha idea la tuvo tras despertar solo en el bosque y al saber que habían secuestrado a Zyorg, no pudo evitar sentir una frustración interna seguida de una gran ira. No era ciego, sabía que Elizabeth le estaba ganando terreno casi a pasos de gigante. Quizás no pudo salvar a James; pero si iba a agasajarlo debidamente. Si hacia eso quizás, solo quizás, podría tener su corazón de una vez por todas, caso contrario…

Hasta él mismo temblaba de solo pensarlo; pero no era necesario el hacerlo si todavía no se celebraba dicha gala donde podría tener su corazón, de un modo u otro.

Sus hombres hicieron todos los arreglos necesarios, ni bien Zyorg llegó acompañado de los demás, Víctor salió a recibirlos.

- ¡James!- exclamó Víctor emocionado al verlo llegar- ¡gracias al cielo que estas bien! yo… no tengo palabras para poder expresar mi vergüenza, te soy más un estorbo que una ayuda, lo siento mucho

- Está bien Víctor- rió Zyorg- no todo el mundo está hecho para el combate. Me alegra ver que lo reconoces, sin embargo me gustaría que me explicaras porque hay tantos arreglos en la mansión

- Es que organicé rápidamente una gala en honor a ti y a los Guardianes del Metal- le respondió Víctor sonriente- casi toda Holanda vendrá aquí

- ¡¿Qué?!- exclamó Ultrior furioso y sorprendido- ¡¿está reuniendo a varios humanos en una base de combate secreta?! ¡¿acaso estás loco?!

- Pues yo pensé que sería… ¡oh cielos!, lo volví a arruinar ¿verdad?- gimió Víctor derramando algunas lagrimas mientras ladeaba su cabeza

- Está bien Víctor, no hay problema- sonrió Zyorg- no veo nada malo en que haya una fiesta después del arduo trabajo que hacemos por su bienestar

- ¡Comandante!- exclamó Ultrior indignado y Zyorg riendo le dijo

- Busquen algo elegante con que poder asistir y es una orden Ultrior- mirando a Elizabeth dijo- no hay problemas en que nos veamos dentro de una hora, necesito cambiarme y trabajar en algo

- Me encantaría- dijo Elizabeth sonriendo retirándose de allí

- Galius, por favor, busca algo para que nuestro amigo Xenón no se encuentre casi cojo durante toda la fiesta- pidió Zyorg con un tono cálido. Galius le respondió

- Encantado señor- mirando a Xenón le dijo- vamos amigo mío, te ayudare a que ya no tengas que arrastrarte

- Gracias… amigo- dijo Xenón con dudas al usar por vez primera aquella palabra; pero sus facciones pasaron de dudosas a de autentica felicidad- incluso me gustara el poder vestir algo para esa gala

- Estoy seguro que si- rió Galius llevando a Xenón a donde estaba la enfermería

El resto se dispersó para iniciar los preparativos para la gala que se daría aquella noche.

Recostado en su cama, Xenón, veía como Galius construía una pierna nueva para él

- Muy bien, dentro de poco vas a poder caminar bien otra vez- le informó Galius construyendo dicha pierna, silbaba al hacerlo

- Los juzgué mal y deseo disculparme- se lamentó Xenón con un autentico pesar al ver como sus antiguos adversarios se preocupaban por él- ustedes si tienen honor y códigos correctos de conducta, yo…

- Está bien amigo- lo consoló Galius con un tono dulce- no es tan terrible el equivocarse, sé que siempre creíste que hacías lo correcto, yo también lo creí en su momento, supongo que debes saber algo de mi ¿verdad?

- Galius, el respetado doctor de Hierro. Claro que sé quién eres, incluso tengo grabaciones de fiestas en las que tú y el ex General Ultrior solían asistir, nunca tuve la oportunidad de poder hablar contigo sobre tus avances médicos dentro de la sociedad de Wintago; pero siempre me fue un poco admirable el cómo pudiste curar aquel virus tan peligroso que se dio décadas atrás- lo halagó Xenón, Galius riendo le respondió

- Si, fui todo un héroe aquel entonces…- su risa se apagó lentamente hasta desaparecer por completo cuando recordó lo sucedido. Con su voz casi quebradiza le respondió- sin embargo, a pesar de todos mis esfuerzos, no pude curar a mi hermano. Ese virus lo ha carcomido desde hace años; pero él sigue en acción, intenté reclamar ante Corgana de que me diese la oportunidad de poder continuar mi investigación con él; pero ese déspota dijo que si aun era funcional para su labor entonces no había problema en que tuviese un potente virus en su CPU que día a día lo corromperá al punto de que si será peligroso para todos los que se encuentren a su lado

- ¿Y cuál era la función de tu hermano?- le preguntó Xenón sorprendido y Galius le respondió

- Je, es ahora a mí a quien le corresponde decirte que es una sorpresa que no hayas oído de él, porque trabajabas a su lado

- ¡¿Acaso hablas de..?!- exclamó Xenón sorprendido

- Exacto, Prometio es mi hermano y ese virus lo ha corrompido al punto de que desea aniquilarme; pero no sé si pueda hacerle frente. Cuando vi la actitud ilógica de Corgana y Zyorg quedo esa vez a mi cuidado, yo… Corgana es un mentiroso Xenón. Los utiliza a todos porque hay algo malvado en su CPU, se supone que nosotros no tenemos nada parecido a los sentimientos o las emociones; pero ese monstruo si los tiene y son los erróneos. En realidad, todos los Metales tenemos sentimientos, solo qué… son tan complejas que no las podemos analizar debidamente en nuestro procesador- tomando la nueva pata de Xenón, que era de color negro con un extraño circulo en el medio, Galius dijo- muy bien, déjame colocarte esto… ¡perfecto! Como nueva

- Para que es el círculo- preguntó Xenón. Riendo, Galius, le respondió

- Es un artefacto que larga electricidad al suelo. Sirve para aturdir al enemigo, pensé que te serviría en caso de que entres en combate

- No sé si tengo los datos de batalla suficientes para poder desenvolverme perfectamente en combate- se lamentó Xenón ante tal revelación

- Yo creo que los tienes- lo alentó Galius riendo- si es verdad lo que me dijeron de ti cuando enfrentaste al Comandante, entonces tienes datos de guerra en tu interior amigo

- Gracias- sonrió Xenón al oír eso, poco a poco estaba comenzando a apreciar a sus nuevos aliados, quizás sus primeros amigos en toda su función vital.

Las emociones ya no solo le eran imposibles de controlar, sino que deseaba rendirse a ellas. Sentado delante de su escritorio, Zyorg, escribió unas partituras especiales para la música de esa noche, al hacerlo tenia la imagen de una persona en particular dentro de su corazón y sus memorias. Posiblemente se hacía tan humano que olvidaba su parte maquina; pero no importaba, porque si ser humano era el sentir aquellas hermosas emociones y aquella felicidad constante de amar con profundidad a la única persona que lo entendía, defendía e incluso amaba en toda la galaxia. Pues, entonces, sería un honor el ser un Humano apasionado antes que una fría y lógica maquina sin sentimiento alguno.

Con esas emociones cubriendo todo su interior, al punto de salir al exterior, escribió algo en honor a la mujer que amaba, la guardiana de su corazón.

La gala era magnifica. Casi toda Huttentorg estaba allí, llevando sus trajes y vestidos de gran magnificencia. Las luces de las velas en los candelabros, que colgaban en el enorme salón de baile cuyas paredes amarillas y baldosas marrones, eran iluminadas con la magia de aquella hermosa noche. Manteniendo una distancia de los humanos Ultrior, Zitron, Galius, Lition y Xenón se encontraban cerca de donde estaba la sección de alimentos. Los cinco tenían un moño negro en sus cuellos, con excepción de Ultrior que también tenía un paladar blanco con puntos negros sujeto por su propio moño. Las danzas en dicho salón eran espectaculares, incluso los movimientos de los bailarines eran un perfecto lenguaje que aquellos cinco Guardianes del Metal podían entender perfectamente en base a su fría lógica proveniente de su CPU. Víctor se encontraba sentado en una silla esperando a que Zyorg apareciera, su traje era un saco rojo, con un pantalón negro y un chaleco negro que cubría una camisa blanca. En la expresión de su rostro se encontraba la amargura de saber que estaba alejándose a cada minuto de tener el corazón de su amado James Van Zyorg. Con su mano temblorosa, tomó la copa de vino y la acercó de forma lenta a su boca dispuesto a beberla cuando vio a la distancia a Elizabeth. Su vestido era demasiado bello y esplendoroso. Un vestido de color violeta con una línea en V color azul claro en el centro de su pecho y abdomen, con sus hombros al descubierto con sus brazos siendo ocultados por unos guantes blancos demasiado elegantes, su boca estaba pintada de un rojo demasiado pasional, sus parpados tenían una sombra color morado y su cabello estaba recogido, una flor blanca estaba a su costado izquierdo. Con un suspiro, Víctor, miró hacia otro lado esperando aun a Zyorg.

Los cinco Guardianes Del Metal vieron a Elizabeth y se sorprendieron de su esplendorosa belleza, ella les sonrió y dijo

- Hola chicos ¿Cómo se encuentran?

- Nuestras funciones están en optimo estado, gracias por preguntar- le respondió Lition sonriendo- incluso Xenón tiene una pierna nueva

- Me alegra oír eso- sonrió Elizabeth- ¿han visto a James?

- Aun no sale de su habitación; pero estoy seguro de que en cualquier momento…- le respondía Ultrior cuando Zyorg exclamó

- ¡Hola muchachos! Que gusto verlos ¿han visto a Eliza…?

Bajando por las escaleras, sosteniéndose, con su guante blanco, del pasamanos, llevando unos pantalones negros y un saco color blanco, con un cinturón dorado sujetando sus caderas, dos hombreras doradas con varios cordeles del mismo color colgando sobre ellos, unos zapatos negros y una pequeña tira dorada sobre el costado de su cuerpo. Zyorg apareció en escena. Las mujeres dieron un suspiro al verlo y los mismos hombres sintieron envidia e incluso un cierto malestar al notar que ese muchacho era demasiado atractivo para ser solo un guarda espaldas del Conde Van Torner.

Elizabeth sintió a su corazón detenerse ni bien lo vio y Zyorg tuvo la misma sensación cuando la vio a ella con ese hermoso vestido. Víctor lo vio desde lejos y sintió como aquel apuesto hombre le robaba la respiración debido a su admirable belleza.

Terminando su descenso al salón de baile, Zyorg dijo con una voz tímida y carente de todo disimulo de sus verdaderas emociones ante la prometida de Van Torner

- Elizabeth… hola, te vez hermosa

- Tu tampoco te vez nada mal James- le respondió Elizabeth sonriendo

- ¿Deseas… deseas bailar conmigo?- le pidió Zyorg sonrojándose ante tal petición ofreciéndole la mano para bailar

- Pensé que nunca me lo preguntarías- rió Elizabeth aceptando su invitación.

- Comandante se ve muy bien esta noche- lo saludó Lition; pero al ver que Zyorg conducía a Elizabeth al salón de baile sin decir ni una palabra más, Lition preguntó- ¿comandante?

- Al parecer tiene una misión importante entre manos amigo- rio Zitron al ver eso

- Si eso parece- asintió Ultrior con cierta incomodidad al ver como Zyorg se volvía cada vez más humano a medida que avanzaba el tiempo en dicho disfraz

Ambos se adentraron al salón, Zyorg colocó su mano izquierda sobre la cadera de Elizabeth y con la derecha tomó la palma de su mano, mirándose con una pasión más que evidente para los demás, quienes no tardarían en dar los susurros maliciosos de siempre, iniciaron el baile en el mismo momento en que la orquesta tocaba una canción nueva en su listado de música para esa noche. Eran las notas musicales de un tema llamado "La Guardiana de mi Corazón", con dicha nueva música Zyorg y Elizabeth iniciaron su danza.

Quien dio el primer paso de baile fue Zyorg. Tomando a Elizabeth de su cintura con su mano izquierda y con la derecha sujetando su mano Zyorg dio un paso hacia adelante; pero Elizabeth no dio un paso hacia atrás sino que se mantuvo en su posición, Zitron vio desde lejos lo que sucedía y sonriendo dijo:

- Están conversando

- ¿Conversando?- preguntó Lition confundido- pensé que era un baile

- Es que con su baile están hablando- aclaró Zitron

- ¿Y qué es lo que dicen Zitron?- preguntó Ultrior intrigado ante los dichos de su compañero

- Con ese paso de baile, El Comandante se declara ante Elizabeth como su amante y ella se mantiene firme, lo que significa que ella no piensa huir ante tal declaración manteniendo sus sentimientos claros ante él

Zyorg tras dar el paso adelante, dio uno atrás; pero Elizabeth fue quien dio un paso hacia adelante. Manteniendo una especie de ritmo, los dos empezaron a moverse con más energía, sosteniéndose todavía; pero en movimiento.

- Elizabeth se ha declarado ante el Comandante: ella lo ama y ahora se dicen que ambos pueden entenderse- continuó Zitron

- Creo que eso ya lo sabíamos- añadió Lition señalando dicha obviedad

- Si, así es- sonrió Galius

Sosteniendo la cintura de Elizabeth, Zyorg, dio varias vueltas harmoniosas que los hacían ver como si fuesen planetas en órbita. Siendo dicho baile de gráciles movimientos aquello daba a entender con claridad lo que ocurría.

- Al parecer Zyorg desea llevarla con nosotros a Wintago una vez que esta guerra termine- tradujo Zitron- sin embargo hay algo mas… ¿acaso el Comandante se siente indefenso si Elizabeth no está a su lado?

- ¡Imposible!- exclamó en voz baja Ultrior sintiendo una gran indignación ante tal idea.

De un solo movimiento, Zyorg, soltó la cintura de Elizabeth; pero no su brazo y ella, sosteniéndose del brazo de su amado, se inclinó hacia atrás solo para sentir el brazo de Zyorg tomar su cintura nuevamente.

- Y ella también se siente indefensa si él no se encuentra a su lado- continuó con su traducción Zitron sintiéndose sorprendido- es como si ambos se necesitaran el uno a la otra

Reincorporándose, Zyorg soltó el brazo de Elizabeth para tomar su cintura y alzarla moviéndola hacia un costado, todos se quedaban en silencio viendo aquel bello baile para nada desprovisto de pasión. Incluso Víctor, quien estaba sentado en su silla sosteniendo su vaso de cristal con vino, observaba en silencio aquello. Su rostro mostraba un enojo y un dolor interno muy grande.

El proceso se repitió solo que esta vez fue Elizabeth quien tomo a Zyorg para alzarlo moviéndolo hacia un costado, Zitron, quien se había mantenido en silencio tras ver esos pasos, dijo conmovido

- ¡No puedo creerlo!

- ¡¿Que sucedió Zitron?!- preguntó Xenón sorprendido- ¡¿qué fue lo que dijeron?!

- Que ambos son… que Zyorg es el Guardián del corazón de Elizabeth

- Entonces eso significa qué…- susurro Galius con una sonrisa amorosa, tomándose de sus garras como si fuese a orar y acercándolas a su boca

- Si, significa que Elizabeth es…- con un suspiro de admiración y pesar, Zitron, finalizó- la Guardiana de su Corazón.

Tras hacer esos pasos de baile, Elizabeth y Zyorg continuaron su baile en calma y armonía, ya se habían dicho todo lo que necesitaban decirse. Mirándose en silencio, ambos sonrieron mientras la música llegaba a su fin. El baile había terminado.