"Juro por dios que esto no era lo que esperaba" - dijo Kurama mientras notaba como la mujer de cabello azul estaba succionando la vida de sus bolas con lo mucho que estaba succionando su pene.
La mujer de cabello azul tenía todo el cuerpo bañado con su semen mientras continuaba succionando su pene con todas sus fuerzas.
"Esto fue... más duradero de lo que esperaba..." - dijo Konan(?) mientras miraba a su otro yo. Ella solo pudo negar con la cabeza al ver la apariencia tan deplorable que su otro yo tenía.
"Déjame tranquila, ¿A caso no vez que estoy disfrutando mi vida?" - preguntó Konan mientras le giraba los ojos, solo para que su mirada se volviera vacía.
"¿Qué sucedió?" - preguntó Kurama cuando notó como por fin la mujer insaciable había parado.
"Ella está equilibrando sus personalidades para que ninguna de las dos sea predominantes" - respondió Konan(?) mientras ladeaba la cabeza - "Los cambios dentro de ella no serán tan bruscos porque su Lujuria a pesar de ser enorme, no se compara al peso de todas sus emociones juntas"
". . ." - Kurama se quedó en silencio unos segundos mientras le indicaba a la personalidad interna de la mujer que la ayudara con su apariencia.
* * *
"Ugh..." - Konan lentamente abrió los ojos, solo para soltar un agudo gemido por todas las sensaciones que todavía rondaban por su cuerpo.
"¿Cómo estás?" - preguntó Kurama.
"Siento como si un kunai hubiera atravesado cada uno de mis hoyos" - respondió Konan con neutralidad, solo para soltar un nuevo gemido - "Oh dios, me siento tan extraña"
"¿Extraña en qué sentido?" - preguntó Konan(?) mientras levantaba una ceja.
"Me siento... bien..." - respondió Konan mientras sus mejillas se prendían como luz de navidad.
"¿Oh? No esperaba esa respuesta" - dijo Konan(?) mientras negaba con la cabeza - "Supongo que con eso has recuperado un poco de tus emociones, o sea, no siempre puedo decir que estás avergonzada"
"Imposible no estar avergonzada luego de hacer todas esas cosas con Kurama" - respondió Konan mientras le giraba los ojos - "Aunque tengo que admitir que se sintió bien... OK, quiero que ignoren eso"
"Puedes usar esas nuevas emociones para crear una conexión conmigo" - dijo Konan(?) mientras tomaba la mano de la mujer de cabello azul.
". . ." - Konan se quedó en silencio mientras seguía las instrucciones de su otro yo.
Kurama solo vio como el lugar empezaba a temblar.
"Esto está a punto de terminar" - dijo Konan(?) mientras miraba a su otro, para luego mirar al pelirrojo - "Aunque no fue de la forma que esperé en un principio, muchas gracias por tu ayuda"
Kurama estaba a punto de decir algo, solo para notar como su visión se ponía en blanco.
* * *
"Ok, eso fue algo que no esperaba que sucediera" - dijo Kurama al ver que había vuelto a la realidad, solo para notar como Konan estaba en sus brazos durmiendo.
Él solo frunció el ceño cuando sintió como alguien parecía estar riendo en su subconsciente.
"Ugh, siento como si una carroza a toda velocidad me hubiera atropellado" - murmuró Konan mientras abría lentamente los ojos, solo para sonrojarse al ver la situación en la que estaba. Ella todavía podía recordar las sensaciones placenteras que había experimentado en su espacio mental, incluso podía sentir como su intimidad empezaba a empaparse con solo recordar lo que había hecho y las palabras que había dicho.
Kurama estaba a punto de decir algo, solo para sentir como la mujer lo empujaba hacia el suelo para iniciar una nueva sesión de placer.
* * * * *
"¿Dónde está Konan?" - preguntó Obito mientras fruncía el ceño al no notar la presencia de la única mujer del grupo.
"No tengo la más mínima idea, tampoco me interesa saber donde está" - respondió Zetsu mientras fruncía el ceño.
Había pasado un día desde que la raíz del Shinju había sido incinerada y todavía no encontraba al responsable de tal atrocidad.
Menma solo guardó silencio mientras ignoraba completamente a los dos... seres vivos que estaban discutiendo.
"¿Cuál es la posibilidad de que ella haya escapado?" - preguntó Obito con el ceño fruncido.
"Pregunta estúpida" - bufó Zetsu Negro con desdén - "Nagato sigue con nosotros y mientras él esté aquí, ella no se irá"
"Cierto" - asintió Obito mientras negaba con la cabeza - "Hablado de Nagato, ¿Cómo ha estado?"
* * * * *
Kurama y Konan se estaban vistiendo luego de unas cuantas horas de placer carnal, solo para darse una mirada incómoda porque sinceramente no sabían como reaccionar ante la presencia del otro.
Kurama no odiaba a Konan, pero no era como fueran amantes de un momento para el otro.
Konan por su parte solo pudo mirar a otro lado mientras sus mejillas se empañaban por un hermoso color rojo. Ella todavía no podía creer lo mucho que había cambiado, aunque luego de recordar todo lo que había sucedido, no era tan extraño.
"¿Ahora qué?" - preguntó Kurama mientras miraba a la mujer.
"No tengo la más mínima idea, nunca pensé que volvería a hacer algo como esto" - respondió Konan mientras negaba con la cabeza - "Aunque ahora tengo algo que preguntarte..."
"Habla" - respondió Kurama mientras miraba a la mujer. Era lo mínimo que podía hacer luego de haberlo hecho por tanto tiempo.
"¿Crees que estoy embarazada?" - preguntó Konan mientras ladeaba la cabeza - "O sea, lo hicimos tanto que no me sorprendería que lo estuviera porque ni siquiera sé si hoy es un día seguro o no"
Kurama intentó decir algo, pero no sabía que responder porque no sabía la respuesta. Él no había usado ningún método de protección para prevenir el embarazo porque estaba concentrado en otras cosas.
"Eso es un posible sí..." - murmuró Konan mientras negaba con la cabeza - "Supongo que lo descubriremos en el futuro. Como sea, mejor hagamos lo que sea que hayas venido a hacer, ¿Qué es lo que quieres?"
"¿Me vas a ayudar?" - preguntó Kurama en sorpresa - "¿Por qué?"
"Primero, porque esa es la decisión que tuvimos con Nagato, intentar buscarte para que nos ayudaras a detener a Obito y Zetsu" - dijo Konan con seriedad mientras miraba al pelirrojo - "Segundo, porque eres la única persona que en verdad puede ayudarnos, lo queramos o no"
"Comprendo..." - asintió Kurama mientras miraba a la mujer - "Ok, hagamos esto, voy a ayudarte lo mejor que pueda, pero a cambio quiero que me digas toda información que tengas sobre Obito, Zetsu y los actuales planes que ellos tienen"
"No tengo problema, de hecho, ese era uno de los beneficios que queríamos darte" - respondió Konan mientras le entregaba un cuaderno con toda la información que ella había reunido sobre Akatsuki.
"Comprendo" - respondió Kurama mientras tomaba el libro y lo guardaba en su sello.
"Con respecto a los planes de actuales de Uchiha Obito y Zetsu, no tengo la más mínima idea" - respondió Konan con seriedad - "Lo único que puedo decirte, es que Uchiha Obito ha logrado conseguir el Rinnegan"
"!" - Kurama abrió los ojos en sorpresa cuando escuchó esto, solo para fruncir el ceño - "Ya veo... eso explica algunas cosas... supongo que fue él el responsable de destruir Oto"
"Exacto, él fue a ese lugar para poder matar a Orochimaru y cuando volvió, apareció con el Rinnegan" - respondió Konan con seriedad - "Nagato en ese tiempo estaba durmiendo porque el consumo de energía en la invasión había sido monumental"
"Comprendo..." - respondió Kurama mientras se ponía a pensar. Él estaba seguro se había algo en medio de todo lo que estaba sucediendo, en especial porque no había forma clara de que un Rinnegan saliera de la nada - "¿Sabes como lo consiguió?"
"En lo más mínimo" - respondió Konan con seriedad - "Toda información relacionada con el Rinnegan, está en manos de Zetsu y Obito"
". . ." - Kurama se quedó en silencio unos segundos antes de soltar un suspiro de irritación. Él ahora estaba en una situación mucho peor porque a diferencia de con Nagato que sentía que podía negociar, ya que los dos eran Uzumaki y se podrían comprender, Obito era una persona que deseaba ver el mundo destruido si es que con eso lograba su objetivo.
"Por cierto, Nagato decidió también puso información sobre el Rinnegan, así como sus habilidades" - dijo Konan con seriedad.
"!" - Kurama abrió los ojos en sorpresa porque esta información valía millones.
Si él usara esta información para prepararse para su batalla contra Akatsuki, entonces las cosas serían mucho más fáciles.
"OK, creo que eso sería todo por ahora..." - dijo Konan mientras se daba media vuelta - "Será mejor que te retires"
Kurama se quedó en silencio unos segundos antes de asentir, pero no sin antes entregarle dos pergaminos.
"¿Y esto?" - preguntó Konan mientras levantaba una ceja.
"El primero contiene un sello para contactarme directamente, el segundo contiene un poco de mi chakra que puedes usar en caso de emergencia" - respondió Kurama con seriedad mientras miraba a la mujer - "Úsalas con cuidado porque si tus compañeros los descubren, entonces las cosas se pondrán feas, por cierto, ese pergamino tiene un sello de privacidad para prevenir que alguien más te escuche"
"Tranquilo, no planeo mostrar esto a mis compañeros, aunque me gustaría que me dieras un segundo pergamino para poder negociar tu ayuda por nuestra información" - respondió Konan mientras miraba al pelirrojo, quien sin pensarlo dos veces le dejó un pergamino antes de desaparecer en un destello rojo.
Konan se le quedó mirando unos segundos luego de desaparecer antes de soltar un suspiro.