Ji Ning había avisado hace tiempo a través de la Alianza de los Dieciséis Realversos un mensaje para avisar que visitaría al Señor del Reino Vientoengracia, quien estuvo dispuesto a reunirse con Ning también.
Sol Negro. El grupo de cuatro de Ning se encontraba en un patio.
Hegemón Wuye sonrió y dijo:
—El Maestro te ha estado esperando por bastante tiempo. Cuando escuchó que ibas a venir se emocionó. Yo me emocioné también. Hace mucho tiempo que escuché de tu ilustre reputación, Norte Oscuro y también escuché sobre Dios de las Llamas, el Primordial del Caos. Hoy, finalmente los conocí.
No pudo ocultar su mirada interesada hacia Dios de las Llamas.
Dios de las Llamas era bastante gordito, pero era mucho más grande que Wuye. Cuando lo vio, murmuró:
—Se ve delicioso.
Al escucharlo, Hegemón Wuye se puso pálido y rápidamente abrió la puerta.
—¡Maestro! —gritó.
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