—Ja, un gran mosquito debe haberme picado anoche —después de decir esto, agarró su teléfono, tomó una foto de la marca roja y la envió en un mensaje a Song Yu Han.
[Un gran mosquito me picó... ¿Puedes comprar un mata mosquitos después?] La foto que acompañaba este mensaje era un emoji malvado: una cara sonriente con dos cuernos.
La respuesta llegó más rápido de lo esperado.
[YH: Innecesario. La marca de la picadura te luce bien.]
Mientras Ran Xueyi todavía tenía un buen inicio de mañana al ver las respuestas de Song Yu Han, recibió otro mensaje.
Esta vez, vino de un remitente inesperado. Era Ran Yue.
Ran Xueyi miró el nombre de Ran Yue durante unos segundos sin presionar el mensaje para leerlo. Después de lo que pasó la última vez, ¿qué querrá Ran Yue esta vez? —se preguntaba Ran Xueyi.
Aunque tenía curiosidad por saber por qué su hermana menor le había enviado un mensaje, Ran Xueyi no se molestó en abrir el mensaje y lo dejó sin leer hasta la tarde.
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