Capítulo 30: Hechizo fallido.

Fanny y sus amigos vuelven del pueblo. No hizo falta ir al pueblo para saber un poco sobre el "odio" que siente la maestra Amelia por ellos. Encontraron respuestas, pero no solo eso. Hechizos que relacionados con el Cambio de Cuerpos, pareciera que Amelia estuvo en pueblo meses atrás de que les tendiera la trampa a Fanny y Kevin.

Al llegar a casa ve que un chico rubio está husmeando por la ventana de su casa. Pareciera que busca a alguien.

Fanny baja del auto, se despide de Andrés y se dirige al chico.

—Disculpa... ¿perdiste algo? O por qué husmeas en mi ventana, puedo llamar a la policía si sigues de mirón...—se anuncia Fanny mientras se lleva las manos a su cintura y espera una respuesta del desconcido.

—Ah, hola Fanny. Soy Henry, te dije que vendría hoy y me diste tu dirección de hecho. Querías conocerme, ya que en la escuela nunca me pones atención—sonríe ante su comentario.

Fanny no puede evitar sentir atracción por el, su sonrisa es hermosa. Su cabello es rubio y el es un poco más alto que ella.

—No lo recuerdo—ríe. —La verdad he andando muy atareada estos días y de hecho ahorita estoy ocupada con unas cosas—responde mientras lo evade y se coloca fuera de su puerta.

—Lo entiendo, no quise molestar sólo que quería conocerte. Eres más hermosa de lo que imaginé, bueno, te había visto de lejos y pues por eso digo que eres más hermosa de lo que imaginé, no se si me di a entender—ríe nerviosamente.

La sonrisa de Fanny la delata y al mismo tiempo se sonroja. —No te preocupes entendí, y gracias; tú también eres hermoso—guiña el ojo. —si quieres te puedo ofrecer algo de tomar, pero es que mis padres llegarán pronto y debo salir—encogió los hombros y responde tristemente.

—No te preocupes, ya me voy. Espero luego podamos salir juntos, sería cool—dice mientras camina y se aleja de la casa.

—Cuid...—dice Fanny antes de que Henry se tropiece con la manguera del jardín.

Se levanta rápidamente y disimula un poco el dolor—Lo siento—ríe tímidamente y un poco sonrojado.

Fanny solo sonríe por lo que sucedió y cierra la puerta. Se recarga de espalda sobre la puerta y no deja de pensar en lo ocurrido en los últimos minutos. Siente una conexión que hacia tiempo no sentía.

Toma una manzana del frutero y sube las escaleras, abre la puerta de su cuarto y se recuesta en la cama. Toma su teléfono y le envía un mensaje a Henry.

Henry G.

Fanny: Podemos vernos en Pizza Hut mañana a las 6, si quieres...🙃

Henry: Claro que quiero...🤗

Fanny: Nos vemos allá entonces.👌

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Se levanta de la cama y coloca su teléfono a cargar y medita la situación más reciente en el pueblo, sin dejar a un lado a Henry.

—¿Qué me está pasando? Comienzo a sentir atracción por los hombres, más con el paso de los meses... y lo peor de todo es que siento que es normal, siento que es mi destino...—se dice a sí misma mientras se ve al espejo y le sale una lagrima.

—Quizá deba dejar que todo fluya, creo que es normal y lo siento así. Pero en el fondo se quien soy, o quien solía ser...—agrega mientras toma una foto que está en el tocador.

Recibe una llamada de Kevin, va en camino con unos hechizos misteriosos a casa de Fanny, aprovechando que sus padres ni su hermano están.

Al cabo de media hora llega Kevin y toca el timbre de la casa, Fanny baja las escaleras y lo recibe en la sala. Para su sorpresa lleva una bolsa negra, algo grande y al parecer oculta muchas cosas. Parece escucharse copas o algo de vidrio.

—Le tome fotos a los hechizos, ademas tome unas hojas prestadas del baúl. Así que intentaremos hacer el hechizo al más puro estilo de las brujas...—dice motivado mientras saca cada unas de las piezas que se requieren para el "ritual".

—¿Estás loco? Explotaremos mi casa o algo saldrá mal, ya lo intentamos todo...—expresa un poco molesta mientras se aleja.

—Todo puede ser como antes, nuestras vidas serán como solían ser antes. Ya no podemos cambiar el tiempo, pero si el futuro y lo lograremos solo confía en mí—responde Kevin mientras saca unas velas junto sal y hojas.

—¡Es que ya no quiero ser normal! Soy normal y me siento normal, me acostumbre tanto que ahora ya no quiero volver...—responde rápidamente y manifestando un poco de inquietud por no querer volver a su antiguo cuerpo y su anterior vida...

Kevin se sorprende al escucharla decir eso, no media ninguna palabra pero su rostro dice más que mil palabras, expresa un poco de descontento y molestia las palabras de Fanny. El desde luego quiere volver, pero sufre la misma situación que ella.

—Te entiendo Fanny. Más de lo que puedas creer, estamos pasando por lo mismo y también tengo sentimientos encontrados. Pero no puedo dejar que eso me domine, faltan días para que me vaya y no habrá más tiempo de realizar un intento, si fracaso al menos quiero haberlo intentado...—comenta Kevin mientras se acerca y la abraza al verla confundida.

—Estoy conociendo a alguien, mi vida tiene sentido y creo que estoy bien. Se que no es normal, pero dentro de mi me siento tan bien, tan normal; como si esta fuese mi vida y la disfruto, pero no niego que en estos me siento confundida y triste—dice Fanny mientras toma a Kevin de los brazos y lo mira fijamente a los ojos.

—Yo también estoy enamorado de Valeria, créeme. Y es muy duro saber que me iré, saber que en realidad ella quizá termine con el corazón destrozado si todo esto vuelve a la normalidad. Quisiera poder volver en el tiempo y que ambos fuéramos normales, sin tantos problemas en nuestras vidas. Pero no se puede y lo sé, por eso al menos quiere hacer un intento, aunque ella haya dicho que no se puede revertir, a veces hay excepciones—responde alentado y con mucho optimismo en el hechizo y ritual.

Fanny solo asiente y lo ayuda. Hacen un circulo de sal alredor de la sala. Colocan hojas que Kevin consiguió y encienden velas. Después de la mochila sacan una prenda de Kevin y una de Fany, cada uno toma la del otro. Ambos se sientan dentro del círculo y Kevin suspira antes de abrir el libro.

—La última y nos vamos...—dice riendo y antes de abrir el libro.

Fanny sonríe y suspira.

—Invocó a las fuerzas del universo, a hacerse presentes esta noche. Son bienvenidas a esta casa. Venir, venir a su convenir. Los invocamos para realizar la transición. ¡FUERZAS INTERCAMBIEN NUESTRAS ALMAS! ¡Cambien nuestros cuerpos!—de pronto algunas velas se mueven y se disipa la llama dentro de ellas.

Ambos se toman de la mano. —Deseamos está noche cambiar nuestras almas. Fuerzas del universo hagan su voluntad. ¡INTERCAMBIEN NUESTROS CUERPOS! Venire ventus venire—pronuncian ambos.

De pronto el círculo de sal se rompe y ambos salen disparados cada uno por un lado. Fanny cae desmayada al igual que Kevin. Las velas se apagan y las hojas comienzan a encenderse para terminar hechas polvo.

Después de unos minutos Kevin se levanta confundido... abre los ojos y se soba su cuello. Tiene una pequeña herida en el cuello. Pero rápidamente corre hacia Fanny que está desvanecida en medio de la sala.

—¿Fany?, vamos háblame....—dice Kevin un poco desesperado.

De pronto el comienza a escupir sangre, se siente mareado y confundido.

Fanny despierta y de inmediato escupe sangre, se lleva las manos a la cabeza intentando recordar lo sucedido.

—¿Qué carajos hiciste?—dice ella mientras toma papel para secarse los labios y tomando aire lentamente.

—Quizá estos son los efectos secundarios, solo recuerdo que una luz nos expulsó del círculo y caímos desmayados—responde Kevin mientras la ayuda a levantarse y a sentarse en sofá.

—Tenemos que limpiar esto antes que lleguen mis padres...—dice rápidamente mientras intenta levantarse, pero se marea y se vuelve a sentar.

—Yo lo haré, calma. Te golpeaste la cabeza con el mueble, por eso estás tan confundida y mareada—comenta Kevin mientras recoge las velas y la sal.

Comienza a guardar las cosas cuando de pronto se escucha que llega un coche. Son los padres de Fanny que están a punto de ingresar a la casa.

Kevin se apresura y mete todo a su mochila, disimula el desorden qué hay y se levanta antes que entren.

Los padres entran y se quedan estáticos al ver a ese chico a media sala y sin mediar expresión.

—Hola—comenta Kevin con una risa nerviosa.

Al ver a Fany con una pequeña herida su madre la toma de la cabeza y su padre se acerca rápidamente a Kevin.

—Habla o en unos segundos estarás recogiendo tus dientes del suelo—dice mientras se acerca a él.

—Papá tranquilo, él es mi mejor amigo. Vino por qué le llame, me desmaye y fue el primero en venir a verme... agradécele mejor y déjalo...—agrega Fanny mientras se levanta lentamente.

El padre de Fanny le cree y le pide una disculpa. Kevin solo asiente y pide que la lleven a un medico.

Su madre la ayuda a entrar al auto y su padre sube para llevarla al médico. Kevin pide su Uber y se dirige a casa, comienza a sentirse mal durante el trayecto. Se hace presente un poco de fiebre y mareos. Finalmente llega a casa y se da una ducha rápidamente.

Fanny llega al médico y la revisa por completo y no encuentra nada grave. Ella no comenta que escupió sangre. Se retira a casa para tomar reposo, se baña y se acuesta, sus padres deben salir pero su hermano estará en casa por el tiempo que ellos estén ausentes.

—Una vez más eres mi sirviente...—dice Fanny apenas pudiendo mover los labios.

—Estás delirando, mejor descansa—responde su hermano con una sonrisa y mientras deja un vaso con agua en el tocador a lado de la cama de su hermana.

Después de unos minutos se queda profundamente dormida.

...

Kevin sale de la ducha y se recuesta para después quedar profundamente dormido por un extraño pero extremo cansancio.

Esta dormido pero siente dolor, una sensación extraña recorre su cuerpo...

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Gracias por leer y perdón por tardar en tanto en actualizar.

Chicos editando el capítulo, al momento que leí el hechizo me dio un espasmo en todo el cuerpo JAJAJAJA. Una simple casualidad quiero creer.

Próximo capítulo: Capítulo 31: Amelia.