—La forma en que Bradon aceleraba las cosas me hizo sentir que mi advertencia de antes debía haber tenido algún impacto en él. No se puede ganar una guerra entera en un día. Con esa creencia en mente, estaba contenta de haber ganado una pequeña batalla contra él hoy.
—Agarré su cabello cuando plantó besos en mi pecho antes de que sus labios se movieran para capturar uno de mis pezones erectos. Siempre que Bradon no podía darme las respuestas que quería, en cambio, me ofrecía sexo apasionado. Se sentía tan bien cuando comenzó a succionar fuerte mi pezón mientras jugaba con el otro rodándolo entre sus dedos.
—Ahh... Ahhh... —gemí más fuerte.
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