Epílogo: 1

"¿Que es un rey demonio? Vuelvo a preguntar"

"Tal vez como todas las cosas tenga un mayor o menor significado, pero igual es algo que mantiene el mundo en un equilibrio constante de poder."

Ni siquiera había pasado un año desde que llegó, máximo 8 meses, los héroes no han aparecido, los generales del rey demonio tanto se paseaban con sus unidades (todas) como se instalaban libremente cerca de aldeas, lagos o montañas, era de esperarse que todas las alarmas de todos los reinos estaban en alerta máxima, si antes era algo predecible (dígase de solo estar en un lugar) ahora sería imposible saber el lugar casi exacto de donde podrían atacar, o si lo harían juntos o solo un general.

No había muchas esperanzas en sobrevivir un tiempo, había una pequeña, pero que solo entre los altos mandos sabían que era un doble riesgo, ya que por todo lo que se había escuchado en el festival era tan cierto como incierto a la vez, aquel ser estaba en el lugar más cercano posible al castillo... o mejor dicho a su castillo.

—Mañana... quisiera caminar ♪... — la misma voz del principio de esta historia cantaba de una manera tranquila, aunque decir tranquilo en su idioma seria... eso mismo, sabría que algo pasaría muy pronto, así que solo decidiría seguir la corriente, lo había decidido, pero no por eso dejaría de ser lo que es ni lo que haría—, mañana... pero la luz se aleja♪...

...

Puede ser tu mejor aliado o tu peor pesadilla dependiendo la situación, ha habido pocos casos en los que aquel ser pueda arreglar algo roto, cuando ni siquiera el mismo puede sentir quebrarse cada día de su vida

...

Inclusive en la academia casi toda había cambiado, los alumnos inscritos no tenían miedo alguno sobre "el".

—¿Por qué sentiría miedo de alguien así? — pregunto un alumno mientras leía un libro de magia

—Es lindo, aunque es un Dullhalan... pero es linda persona— hablo una chica tomando agua de un cántaro después de entrenar

—¿Acaso no es increíble?, sé que... en algún momento puede cambiar de bando, lo sé, sé que todos y "él" lo sabe... creo que muy en el fondo todos aquí, y lo digo con toda certeza, maestros, alumnos y soldados, saben que él es peligroso... que no sabemos mucho sobre él, pero también sabemos que está haciendo esto por algo más grande que si mismo, y deberíamos agradecerle a ese antiguo héroe por cambiar al menos un poco la perspectiva de Azrael... los detalles en el mundo por más pequeños que sean pueden hacer algo muy significativo y grande— respondió una profesora de sombrero puntiagudo y un parche en el ojo izquierdo

Era lo que pensaban algunos, no toda la mayoría de ahí, claro que habían desconfiados, pero no podían negar que era bueno en su trabajo, además que un día dijo a todo mundo.

—"Sé que la frustración de todos por lo que ha pasado es grande, así que si quieren o realmente lo harán, pueden intentar matarme de cualquier forma, no habrá rencores, no habrá venganza por ello, aunque claro, no se las dejare fácil, así no sería divertido e inclusive satisfactorio para ningún lado o ¿no estoy en lo cierto?"

Así que desde ese día todo mundo o lo dejaba tranquilo o creaba trampas tan complicadas como básicas, aunque había otra parte que no hacía nada, aunque las explosiones y gritos desenfrenados por victimas indirectas hacían interrumpir las clases, así que había una regla que se había creado por ello:

*—"Aquel que tenga victimas seriamente heridas o en el borde de la muerte, tendrá que estar en el día especial con la señorita Carmilla"—*

Las primeras veces sonaba demasiado bien, pero el día especial consistía en ser abandonado lo más lejano de la academia no más que con 1 almuerzo y tu ropa, sobrevivir máximo 1 semana, la oferta era que si podías evitar a Carmilla máximo por 4 días podrías regresar y ella te daría un beso en la mejilla y servirte un día, si no es así y ella te marcaba con una letra en la frente tendrías que estar la semana completa, los primeros que volvían, estaban más delgados que como fueron y casi con algún trauma solo con verla a ella.

Y solo uno había podido contra ella, pero era el odiado de los chicos más que nada, no por tener a Carmilla, sino porque en vez de sentir la juventud, el solo pedía que ella le entrenara aún más exhaustivamente que antes.

—Sé que dijiste que tenías que mejorar, pero... ¿no estas exagerando? — pregunto Carmilla mientras lo veía correr alrededor de la escuela

—Claro... que... no... solo me... importa... matarlo... nadie... — su habla era cada vez que volvía a donde estaba ella en cada vuelta

—Si si, "nadie puede ser más fuerte que yo", no entiendo ese complejo, ¿no se sentirán aburridos una vez que no encuentres un reto más grande que tú?

—Eso no su...

—Claro que sucederá, yo lo he vivido

Esas palabras lo detuvieron instantáneamente que la onda de choque por su carrera levanto polvo, pero ignoraron eso.

»Estarás tan aburrido que empezaras a maldecirte, a no saber qué hacer, pelear será la única cosa que tienes en mente, pero inconscientemente no sabrás que más hacer además de eso, vendrán sujetos a retarte, no te preocuparas de ser derrotado, pero una vez que venzas a todos poco a poco caerás en cuenta, que no importa lo fuerte que seas... lo satisfactorio de haber logrado eso solo será por hacer una sola cosa, dejando de lado lo demás, lo que conoces, tus amigos, tu familia, sé que tú no tienes familia, nunca te he escuchado decir nada de eso... pero no puede ser diferente de lo que pienso...

Por primera vez Raven se había quedado estático.

»Soy la sirviente de un rey demonio... todo por querer ser fuerte... no de la manera tuya, sino de una manera en la que pude pensar en otras cosas, pero decidí serlo por aquellos que me echaron... además, conozco a ese idiota algo mejor que nadie, y puedo decirte que él era alguien que solo pensaba en pelear pero toco fondo, y tengo la esperanza que al menos pueda pensar más que en eso, y créeme si te digo que esto es porque la cima que quieres alcanzar es disfrutable una vez que la saboreas la primera vez, pero aquel sabor desaparece cuando pruebas la soledad de no tener algún otro obstáculo enfrente

Ambos se quedaron en silencio.

—Por cierto tú actitud cambio a cuando enfrentaste a Azrael la primera vez, ¿Realmente eres un homunculo?

—Te diré lo que le dije a él, mi cuerpo es compatible con la Saints Row, si tienes la suficiente magia o espíritu para poseerla cuerpos puedes usarlos como les plazca, a mí me usaron por ello tengo mi fuerza, pero busco más para vengarme de aquel que me hizo así en primer lugar

—Eso explica mucho

Pudo escuchar una explosión y más gritos además de un...

—¡¿OTRA VEZ?!

Gritado muy fuerte en algún lugar, Carmilla suspiro muy fuerte y corrió hacia el lugar del incidente junto con Raven.

...

Hay demasiados resultados para poder entender del todo como es y que es en si aquella existencia, para los dioses sería una aberración, para los humanos y seres antropomórficos con el poder del pensamiento, seria alguien que superar, pero mi favorita es solo tener el resultado propio cuando se enfrenta a uno de esos seres "Malvados" 

...

Carmilla suspiro cansada, tal vez porque ya estaba empezándose a acostumbrar. Raven la siguió sin decir nada, pero se puso a pensar algo en ello aunque quería evitarlo.

Llegaron al lugar, era el sitio de entrenamiento, algunos alumnos en el suelo, otros en guardia nerviosos si podían atacar, inclusive con soldados de diferentes países, todos rodeándolo, inclusive Zartremist y su nueva arma, pero parecía esperar su turno. Carmilla llego junto a Gabrielle y Ritsumary, ellas y los de la clase especial parecían planear algo ya que estaban reunidos casi en la esquina de toda el área ya que había mucha gente ahí.

—¿Cuantos días llevamos así? —pregunto ella a la niña

Ritsumary conto con los dedos hasta cinco.

—Un mes seguido desde que el hizo la nueva regla, aunque me preocupa si él puede con esto— dijo Gabrielle

—Créeme que lo está disfrutando, ¿no lo escuchas? — pregunto Carmilla sonriente ante su respuesta

—¿Escucharlo? — pregunto Gabrielle casi sin comprenderla

Carmilla les hizo señas que escucharan, ellas lo hicieron, entre toda la sensación de muerte en el aire podía escucharse un tarareo muy oscuro, como si estuviera recitando un conjuro mágico maldito lo más bajo posible, aunque ellas no se les erizo la piel por alguna razón.

—Nananaaa♪... aquel que no será el día.... Nananeeaaa♪♪... solo vendrá con la luz de luna— la voz cantante podía escucharse

Azrael estaba inmóvil en el centro de todo, los ojos cerrados, las manos en los costados y con una expresión sonriente de labios cerrados, los demás rodeándolo con miradas furtivas, algunos queriendo ya atacar, otros en guardia pensando su movimiento, y algunos tratando de ocultar su presencia, él ahora era un rey demonio, pero no tenía más poder que un general humano, así que se habían confiado en que podían ganarle de alguna manera ya que le veían como el segundo escalón en la tabla de reinado y poder, pero los que le conocían por sus entrenamientos y enfrentamientos, sabían que no tenía que tomarse mucho y ni un poco a la ligera.

Una daga paso por su mejilla pero él no se movió , ni dio un paso, solo movió la cabeza para esquivarlo, tan rápido como la daga se fue regreso enseguida ahora si apuntándole a la nuca, la daga extendió su hoja formando ahora un tridente muy pequeño de solo 10 centímetros de longitud con las nuevas 3 puntas que aparecieron, Azrael levanto un poco el pie derecho en punta y arrojo su zapato hacia arriba, este golpeo el mango de la daga desviando su trayectoria y haciéndola caer, aunque su zapato no volvió a su posición, eso hizo que algunos le empezaran a atacar, él seguía ahí, pero solo levanto una mano y la movió hacia atrás manteniéndola, y antes que ellos llegaran chocaron contra algo, no era una barrera, el movió su mano hacia enfrente de una manera que era parecía a un látigo golpeando al aire, habían sido repelidos solo con su fuerza .

—Nanana... nana el sol oscurece♪♪

Otros tomaron ventaja de eso atacando desde el aire, más exacto, con ayuda de la iluminación del fuerte sol del día. Azrael ladeo a un lado sus rodillas doblándose hacia la izquierda,  bajando su centro de gravedad, las espadas pasaron tanto por la nariz como por la espalda tan cerca que apenas y cortaron un poco su ropa, al regresar a su posición los ahuyento de un golpe a todos como si fueran hojas.

Los demás que lo habían visto no podían creer el nivel de habilidad de Azrael, algunos estaban escépticos, y otros que lo habían experimentado antes seguían sorprendiéndose.

...

"

Tal vez nuca se comprendan algunas razones por las cuales ellos decidieron tomar el poder por sí mismos, tal vez por causas buenas, causas malas o simplemente por querer sentir algo en vez de algún vacío en su alma, o simplemente porque si"

...

—Oiga Profesor, ¿no parece que usted los está subestimando a todos? — pregunto Marcus

—Claro que no, si así lo hiciera siempre, muy pronto moriría por eso— respondió él sin abrir los ojos—, todo ellos son buenos, solo que aún se sienten presionados por la noticia y no saben cómo actuar libremente frente a mí, ¿ustedes no? ¿O se han ablandado por el tiempo que llevo aquí?

Gabrielle se desacomodo el cabello guardando sus lentes, Marcus saco su espada, Ritsumary solo esperaba la orden de salida para hacerlo, los demás alumnos de él estaban con ansias de derrotarlo más allá de su miedo a ser lastimados, eso se dejaba ver en el aire, y más porque sabían que el realmente era no dejarse llevar por nada

Azrael abrió los ojos y extendió su postura a una de ataque, preparándose para ellos.

—Si dejas que te consuma el miedo, tú mismo arderas más rápido que lo que te puede hacer este mundo antes, ¿qué seria del mundo sin locos por las peleas ni tontos de corazón aventurero como ustedes?

—Sería un mundo donde usted se aburriría de él y lo destruiría ¿no es así? — respondió Irona

—Tienes toda la maldita razón

Ambos grupos (aunque solo una persona de un lado) empezaron a caminar hacia el enfrentamiento.

—Tal vez cante esa canción en otro momento... tengo que preparar todo para la gran fiesta que no me perdería una aunque muriera antes del clímax...

...

Pero no importaba como se mirara, "el" era lo que se podría decir, "La oveja rebelde de la familia" con un sentido común tan disparatado que podría hacer reír al más serio de los Reyes Demonio de otro mundo solo por observarle, y sentir curiosidad de ver cómo es su vida de principio a fin

...

Podía ver todo a una velocidad lenta, ellos yendo hacia él con toda la intención asesina en sus cuerpos, el solo esperando sus ataques, en ese pequeño transcurso suspiro, no era un suspiro normal, era un suspiro de querer hacer algo más que todo lo que había planeado, pero sabía que no podía, todo estaba siendo escrito por alguien o algo, y él, por muy extrovertido en el tema, no podía más que esperar a saber que más cosas podrían depararle en este y próximos eventos, y sabía que sus alumnos y la gente que le rodeaba tenían el mismo sentimiento.

—En serio, necesito vacaciones de verdad... pero aun no es tiempo de descansar... ¿no es así Delta? — pregunto al aire esperando que esas palabras llegaran a su amigo

Dejo pasar el tiempo otra vez y se enfrentó a sus alumnos con la seriedad que portaba siempre, ya que eran quienes le acompañarían a descubrir las cosas y el plan que le tenían preparado a todos...