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Capítulo 189: La Sacerdotisa del Loto Rojo (2)

La Sacerdotisa del Loto Rojo (2)

[¡¡Ha subido de nivel!! ¡Tú nivel ha aumentado a 118!]

Muchas estudiantes presentaron peticiones a la academia.

Para mitigar las claras irregularidades de Pierre Flanche, presentaron todo tipo de ejemplos de sus buenas acciones y pidieron clemencia.

Dijeron que Pierre no era así, que era una persona de excelente carácter y bondad, y que debía haber algún tipo de malentendido.

'¿Es esta la vida de un puto macho alfa?'

Lo había visto en la televisión.

Hubo un caso en el extranjero en el que los medios de comunicación informaron sobre un criminal atroz y una multitud de personas surgió protestando por su liberación solo porque era guapo.

¿Podría ser Pierre un caso así?

Hubo algunos jóvenes tontos que dirigieron su resentimiento hacia mí, pero dejaron de molestarme después de recibir la mirada asesina de Luce.

En momentos como estos, no había nadie tan confiable como Luce.

Después del incidente de Pierre, el Gran Festival se desarrolló sin problemas.

Nuestro equipo obtuvo el primer lugar en la Carrera de Bola de Arco.

El último día del Gran Festival se llevó a cabo la Ceremonia de Premiación de la Carrera de Bola de Arco.

El vanidoso noble rubio, Tristan Humphrey, dio un paso adelante como representante de nuestro equipo y levantó el trofeo del primer lugar con ambas manos, y nuestro equipo vitoreó unánimemente.

El premio del primer lugar irradiaba colores vivos de maná y estaba grabado en el aire, existiendo sólo como una forma sin forma.

Su entrega estaba prevista tras la conclusión del Gran Festival.

Me burlé de Lisetta diciendo: "No hay nada de que avergonzarse por perder", ella arrugo las cejas y apretó los dientes, murmurando: "Este bastardo..."

Ya sea que el momento de tomar el primer lugar fuera pura alegría o no, yo también parecía estar de buen humor.

Contrariamente a lo que se pensaba, la Carrera de Bola de Arco resultó ser una experiencia valiosa.

Tan pronto como ganamos el primer lugar, mi nivel subió de 117, que había alcanzado durante el período de preparación para el Gran Festival, a 118.

Fue un resultado satisfactorio.

Si había algo que lamentar...

'Realmente no pude disfrutar nada más'.

Mientras caminaba por el campus, había todo tipo de cosas dispuestas y varios puestos.

Aunque hubo muchos juegos y meriendas preparadas ambiciosamente por los estudiantes, realmente no disfruté nada más que la Carrera de Bola de Arco.

Incluso cuando Dorothy se quejaba de querer jugar juntos, yo tenía que soportarlo con paciencia.

Porque tuve que entrenar.

Mi condición no era mala y el campo de entrenamiento estaba vacío porque era el período del festival.

Fue realmente una situación deliciosa.

Quería dominar la magia de 7 Estrellas lo antes posible.

Por eso decidí contentarme con simplemente disfrutar del ambiente del festival.

No tenía intención de tomarlo con calma.

Incluso si me arrepiento ahora, supongo que debería posponer el disfrutar cómodamente de los festivales o cualquier otra cosa hasta después de derrotar a Nefid, la Diosa Maligna.

Antes de darme cuenta, una profunda oscuridad azul se había deslizado por el cielo.

Salí del campo de entrenamiento tambaleándome como siempre.

Lentamente me dirigí a la ceremonia de clausura.

Deliberadamente no llevé ninguna herramienta mágica ya que mi cuerpo necesitaba estabilizarse por un tiempo.

Después de calmar mi respiración durante dos minutos, pude caminar con normalidad.

Ahora vámonos.

El campus estaba desierto. Todo el alumnado habría estado en el estadio mientras hacía alarde de sus espléndidas luces.

Me dirigí directamente allí.

Quizás porque mi entrenamiento se centró en cálculos complejos y manipulación de maná, el maná gastado fue mínimo.

Mi fuerza física podría recuperarse fácilmente con sólo un poco de descanso.

Incluso en medio del duro entrenamiento, conservé mi maná y energía física para el evento inminente.

'El Acto 8...'

Caballero Mágico de Märchen❱ 「Acto 8, Capítulo 2, La Sacerdotisa del Loto Rojo」.

Durante la ceremonia de clausura del Gran Festival, en el último acto la Sacerdotisa Miya sube al escenario.

Cautivó a los alumnos con la tradicional Danza del Fuego de la Tierra de las Flores de Fuego.

Sin embargo, en el momento en que terminó el baile, de repente se volvió loca y disparó llamas a varias personas.

Para Ian, fue para resolver un rencor de un duelo, y para los demás, fue porque les molestaba que hablaran mal de ella a sus espaldas.

Cuando perdió espectacularmente el control frente a todos los estudiantes, el jugador, al ver la escena, no pudo evitar sorprenderse.

Afortunadamente, las tropas de combate afiliadas a la academia se posicionaron alrededor del auditorio y rápidamente erigieron una barrera para proteger a los estudiantes, pero Miya pronto huyó.

Y algunas personas testificaron que justo antes de que Miya escapara, vieron un demonio a su sombra.

Así, la academia entró en modo de emergencia, concluyendo que Miya había sido poseída por un Demonio.

Luego, la academia se dispuso a buscar a Miya.

Miya, escondida en la academia, derribaba a la gente e intentaba matar a aquellos que le molestaban.

Ian Fairytale, impulsado por el sentido del deber de derrotar a los Demonios con su Elemento Luz y sentido de la justicia para proteger a los estudiantes, convocó a sus amigos.

Por lo tanto, el jugador tuvo que formar un grupo de cuatro, incluido Ian, para perseguir a Miya, que estaba bajo el control de un Demonio.

Tuvieron que detenerla antes de que el daño se extendiera.

Ese era el contenido del Acto 8, Capítulo 2.

'No sé si todo irá según el escenario'.

La variable "Yo" ya tenía una enorme influencia en el escenario existente.

Así, el recuerdo del partido era sólo de referencia.

No sabía si Miya se volvería loca durante la ceremonia de clausura o no.

Sin embargo, era necesario ser cautelosos y estar alerta.

Mientras caminaba, un pájaro blanco voló hacia mí graznando:

'¡Kwek, Kwek!'

Era 'V', un mensajero de cartas usado a menudo para asuntos urgentes, una Bestia Mágica con una naturaleza gentil que no dañaba a los humanos.

Hice una pausa y extendí mi brazo.

V aterrizó en mi brazo y, con su largo pico, sacó una carta de la bolsa que llevaba y me la entregó.

"Gracias."

Tan pronto como V se fue volando, revisé el sobre.

Una carta negra con solo el nombre del destinatario.

No tenía ningún sello estampado. Parecía sospechoso desde cualquier ángulo, pero no sentí ningún maná sospechoso.

"Edén."

El maná de roca se acumuló en el aire, formando la forma de Eden, un pequeño Familiar Golem.

[¡Kyuuu!]

"Ábreme esto".

Cuando le entregué la carta, Eden rápidamente la tomó con sus cortos brazos.

El Edén, al estar hecho de roca, era inmune al veneno.

Incluso si algo surgiera de la carta, simplemente podría simplemente desconvocarlo.

Eden abrió la carta con sus adorables manos rocosas y sacó el contenido.

[¡Kyuuu!]

Eden me entregó la carta. Era una hoja de papel normal y corriente que sólo tenía escritura.

Tomé la carta y leí el contenido.

Aunque el remitente no estaba escrito, pude saber inmediatamente quién lo envió.

"De hecho, es diferente del escenario original..."

[Kyuuu.]

Ni siquiera me atrevía a esperar que las cosas salieran como pensaba.

Como era de esperar, el Acto 8, Capítulo 2, iba en una dirección diferente a la planeada originalmente.

***

Una escena que contrastaba con el cielo nocturno invadió un rincón de la Academia Märchen.

Era un estadio resplandeciente.

Estudiantes uniformados ocuparon las gradas. Todos estaban visiblemente emocionados.

"¡Ahora comencemos la ceremonia de clausura del Gran Festival 'Jeblem' de la Academia Märchen!"

Gritó la locutora Amy Holloway.

Los fuegos artificiales estallaron ruidosamente en el aire, marcando el inicio de la ceremonia de clausura del Gran Festival.

En medio de la espléndida actuación en el escenario y el disfrute de los estudiantes…

Luce solo estaba esperando a Isaac, Dorothy respondía con entusiasmo a la actuación y Kaya tragaba saliva nerviosamente.

Finalmente, la actuación de la ceremonia de clausura llegó a su secuencia final.

Una hermosa chica de cabello negro subió con gracia al escenario.

Su vestido rojo estaba adornado con adornos dorados colgantes.

Mana fluyó a su alrededor como agua de océano, enriqueciendo el escenario.

La Sacerdotisa estaba sola en el centro del escenario, preparándose para la actuación.

Con un aplomo elegante, su delicado cuerpo presentaba líneas elegantes.

Pronto, mientras la música de la orquesta tejía hermosas melodías, Miya desplegó su abanico negro con estilo.

Bajo la brillante iluminación de las luces de maná, ella mostró una danza de gran dignidad.

Su danza, ofrenda a los dioses, era verdaderamente artística. Los estudiantes, completamente absortos en la música, quedaron hipnotizados por el baile de la Sacerdotisa Miya.

Cuando la actuación alcanzó su clímax, las llamas de Miya estallaron espectacularmente en sincronía con el tiempo.

Las ondulantes llamas rojas se extendieron como seda, cortando elegantemente el aire, armonizando perfectamente con los movimientos de Miya.

Esta era la tradición de Horan, la Tierra del Fuego en flor, la Danza del Fuego.

Los estudiantes que observaban el baile de Miya estaban hechizados con la boca abierta, perdidos en un trance o sonriendo con admiración.

Al ver esto, Dorothy rápidamente arrugo las cejas con expresión severa.

"¿Eh, Dorothy?"

"Esa es... falsa".

"¿Qué es?"

"... Regresaré enseguida".

"¿Eh? ¡¿Adónde vas, Dorothy?!"

Sin responder a su amiga, Dorothy abandonó las gradas y subió las escaleras.

***

Decenas de minutos antes.

Una vez finalizada la ruidosa ceremonia de clausura, la Academia Märchen quedó sumida en el silencio.

Apenas había gente alrededor del campus. Después de todo, todos los estudiantes estaban viendo la ceremonia de clausura.

Un estudiante con cabello azul plateado abandonó los terrenos del campus y llegó a un campo de duelo al aire libre cercano.

Estaba más tranquilo que en cualquier otro lugar, a pesar del festival en curso.

Sin una sola lámpara, el lugar empapado en oscuridad estaba iluminado únicamente por la débil luz de la luna y las Estrellas.

El campo de duelo tenía una estructura que se extendía hacia abajo. Isaac, después de pasar por el pasillo, se detuvo frente a las escaleras que conducían hacia abajo.

Bajó la cabeza y vio a una mujer con un vestido rojo, adornada con adornos ornamentales, parada en medio del campo de entrenamiento.

Sintió la presencia de alguien y giró la cabeza.

Como corresponde a la estrella de la ceremonia de clausura, su rostro bellamente maquillado, sus ojos penetrantes y sus pupilas sin vida ahora estaban dirigidos a Isaac.

"Has venido, Mayor".

El silencio del campo de duelo se rompió.

Habló en un tono quisquilloso mientras se recogía el pelo negro.

Era la Sacerdotisa, Miya.

Isaac bajó las escaleras sin decir una palabra.

Se quitó la chaqueta y la arrojó a un lado en las gradas, luego se aflojó la corbata tirando de ella.

Su comportamiento reveló que rápidamente había adivinado la razón por la que Miya lo había llamado aquí.

Miya soltó una carcajada ante eso.

En el campo de duelo, Isaac dejó de caminar, manteniéndose a distancia de Miya.

"Viniste solo. Me gusta que seas obediente".

"Me has estado observando todo el tiempo".

Isaac se quitó las gafas y habló en tono tranquilo.

Su mirada se había vuelto fría.

Había elaborado una estrategia con Kaya y Dorothy para el escenario del Acto 8, Capítulo 2.

Sin embargo, inmediatamente después de recibir una carta de Miya, Isaac supuso que todos sus planes se habían convertido en polvo.

La carta contenía un drama infantil hecho por uno mismo.

Exigió que Isaac fuera solo al campo de entrenamiento al aire libre por la noche, alegando que tenían a Blanca.

También hubo una advertencia de que las cosas no terminarían bien si intentaba algo tonto.

Inmediatamente después de leer la carta, Isaac escaneó el área con [Clarividencia].

Se dio cuenta de que un siervo observador hecho de llamas lo estaba observando desde lejos.

No sabía qué pasaría si no seguía las instrucciones de la carta.

Si hubiera intentado "cualquier tontería", Miya seguramente se habría dado cuenta, lo que podría provocar que ella hiciera algo que Isaac no podía predecir.

Sin embargo… dentro del rango de lo que se podía predecir, Isaac no estaba particularmente preocupado.

Más bien, estaba agradecido de que Miya no hubiera causado conmoción y simplemente lo hubiera llamado a solas.

"Tu percepción es aguda. Bastante impresionante para un insecto".

"En realidad no tienes a Blanca, ¿verdad?"

Usando [Clarividencia], Isaac había confirmado que Blanca estaba observando la ceremonia de clausura.

Miya, sin ser plenamente consciente de las habilidades de Isaac, lo había subestimado.

"Perdón por mentir. Pero sabías que eso era mentira y aun así viniste de todos modos, ¿no?"

Isaac asintió con la cabeza.

Después de terminar un ligero estiramiento, Isaac miró a Miya.

"... ¿Estás resentida conmigo?"

"¿No es normal aplastar a un insecto cuando te pica, Mayor?"

"Veo a lo que te refieres".

No había nada más que decir.

Isaac amplificó la intensidad de circulación de su circuito de maná.

Apretando los puños, asumió una postura de batalla con una expresión indiferente, generando un aire frío en sus manos.

Miya sonrió.

Las llamas la envolvieron y se levantaron tres colas de fuego.

A su sombra, los ojos de un demonio brillaron.

El momento que habían estado esperando se acercaba.