Evento 88: Jardinería
El sol brillaba en su punto máximo, los rayos del sol cubrían toda la zona específicamente un quitasol en medio de un desordenado jardín.
Bajo aquella sombrilla habían dos sillas de playa plenamente estiradas con una pequeña mesa entre las dos sillas.
Sobre una de las sillas descansaba una joven que mostraba su notable figura usando un pequeño bikini color negro y un par de lentes de sol, la joven no estaba recostada sino más bien sentada mirando hacia el frente, Kiyoko Shimizu la manager del club de volleyball Karasuno.
Por otro lado en la otra silla estaba Haruta con los brazos detrás de su cabeza disfrutando la escena frente a él
"No existe nada similar, debo aceptarlo" dijo Haruta con una sonrisa de satisfacción en su cara
Al otro lado del jardin habia una podadora manual que estaba siendo empujada por una frágil y arrogante chica.
Usualmente una persona imaginaria una situacion al reves pero ahora mismo la persona que estaba a cargo del trabajo en el jard��n de Haruta era Saya Takagi la genio escolar.
-----------MOMENTOS ATRÁS----------------------
"Vaya, pensé que no vendrías"
Haruta estaba de pie en la puerta exterior donde también estaba Takagi vestida con elegantes ropas, digna de una señorita perteneciente a una gran familia.
Takagi cruzó sus brazos haciendo que sus pechos rebotaran frente a Haruta "¡Claro que vendría, siempre cumplo mi palabra!" exclamó Takagi con desprecio
"Si si,si, lo que digas, vamos sígueme tienes mucho trabajo"
Ambos caminaron por el jardín donde Takagi comenzó a sentir un poco de presión, desde un comienzo en su mente estaba la imagen de la casa de Haruta como la de una familia promedio pero la mansion frente a ella estaba fuera de su imaginación, solo en el jardín de la casa de Haruta podrían construir un parque.
"¿Quieres que limpie todo esto yo sola?" pregunto Takagi apuntando al jardín con su dedo índice mientras la expresión en su cara parecía afligida
"Claro, no tengo dinero para los jardineros y ademas queria una belleza limpiando"
"¡¿be-belleza?!"
Takagi se sobresaltó en cuando escucho la forma en la que Haruta se dirigió a ella pero pronto la imagen del jardín cruzó por su mente.
"¡Este jardín estaba fuera del trato, es inmenso, no podré terminar todo yo sola!" reclamo Takagi con enfado mientras Haruta colocaba su mano en el mentón
"Bueno, realmente no dijiste nada de las dimensiones del jardín cuando estábamos haciendo la apuesta ¿recuerdas?"
"¡ugh..!"
"Pero no te preocupes puedes tardar lo que sea necesario, será reconfortante tener a una chica limpiando mi jardín todos los días. Tómalo como tu primer empleo de primera mano, te aseguro que será una experiencia gratificante en tu futuro"
Ambos siguieron caminando hasta un pequeño almacén apartado en el jardín, dentro del almacén había diferentes cosas guardadas algunas de ellas llamaron la atención de Takagi como es el caso de la cantidad de químicos en el estante.
"Aquí están las herramientas"
Haruta se fijó en tijeras, guantes y una podadora manual que estaban en el final del almacén guardadas como si fueran reliquias.
"¿Una podadora manual?" pregunto Takagi con una forzada sonrisa en su rostro mientras miraba la podadora como si se tratara de lo más molesto en el mundo.
Haruta que estaba a un lado de Takagi señaló la podadora con un dedo mientras en su cara descansaba una refrescante sonrisa "Solo tienes que tirar de la podadora con tu cadera para que funcione, si usas tus brazos solo te cansaras mas rapido"
"Ese es un gran consejo Haruta, es muy reconfortante"
"Gracias, me gusta ser de ayuda para las personas"
La sonrisa radiante de Haruta solo formo una mas forzada sonrisa en la enfada Takagi que no podía dejar de maldecir a Haruta en su mente.
Pronto ambos sacaron las herramientas del almacén para que Takagi pudiera comenzar sus labores.
"Uff..." suspiro Takagi limpiando su frente
Haruta le dio una mirada a Takagi de pies a cabeza y abrió su boca "¿Piensas trabajar con esas ropas?"
La pregunta de Haruta hizo que Takagi inmediatamente se mirara a sí misma fijándose en las ropas que llevaba puestas
"...."
El rotundo silencio de Takagi le dijo a Haruta muchas cosas y entre ellas surgieron varias locas ideas.
"No te preocupes, tengo justo lo que necesitas"
Desde el almacén Haruta saco un traje de cuerpo completo utilizado principalmente en labores de jardinería, el traje parecía ser abrigador y no parecía que fuera de la talla de Takagi.
La pelirrosa miró el traje fijamente y luego cambio a la sonriente expresión del pelinegro "¿es una broma?"
"Claro, tengo otro traje para que puedas usar mientras trabajas y este de seguro sera de tu talla"
Bajó el tono suave de Haruta, Takagi sintió que algo no estaba bien y algo en su mente le decía que debería haber aceptado aquel traje que se había presentado.
Ambos entraron en la casa de Haruta donde Kiyoko estaba preparando el desayuno en la cocina "¿Shimizu-senpai?" pregunto Takagi al reconocer a Kiyoko como una de las mujeres que siempre estaba alrededor de Haruta.
Kiyoko no tenía muy claro de quién se trataba por lo que solo se le quedo mirando pero pronto se dio la vuelta para seguir con su trabajo en la cocina.
"¡Ahhh!"
La cara de Takagi estaba completamente roja al ver que detrás del delantal blanco de Kiyoko no había nada de ropa, técnicamente ella estaba desnuda llevando su figura al aire.
"¡¿Por qué estas desnuda?!" exclamó Takagi apuntando a Kiyoko con su dedo índice mientras esta le presta atención nuevamente
"Lamento que me vieras de esta manera, usualmente nadie viene a la casa y como novia de Haruta suelo estar desnuda durante la mañana" dijo Kiyoko honestamente sin esconder nada
La mente de Takagi daba vueltas al notar lo que sucedía "Si tu estas desnuda en la casa de Haruta y eres su novia eso quiere decir que ustedes.... ustedes"
"Si, tenemos relaciones sexuales todos los dias, bueno al menos todos los días que estoy aquí. Últimamente debo aceptar que controlar a Haruta por mi cuenta es demasiado duro su virilidad es demasiada, desearía que Asuna estuviera aqui" la ultima parte la murmuro Kiyoko mientras volvía a su trabajo dejando a Takagi de pie como si estuviera petrificada
'¡¿Yuuki-senpai también?!' exclamó Takagi en su mente recordando a la castaña, una de las bellezas más grandes de la escuela y había caído a los pies de Haruta '¡Es un monstruo pervertido!'