- La Península de Acero

"¿La península de Acero?", tanto Gokú como Krilin preguntaron.

"Sí, es un lugar con mucha historia", respondió Roshi, "Se le llama así debido a que es un lugar con muchos metales en sus tierras, algunos científicos teorizan que pudo haber caído un meteorito en ese lugar hace miles de millones de años, aunque es una teoría bastante descartable, después de todo no se ve ningún cráter", Roshi aprovechó para contar detalles del lugar al que iban.

"Wow, ¿por qué piensan que cayó un meteorito si no hay un cráter?", preguntó Gokú curioso, Krilin asintió al serle robado de las palabras que iba a decir. "Sí, ¿por qué?", pero aún así preguntó también.

"Porque aparte de los metales, había varias piedras preciosas que no se generan ni en las cuevas más preciosas, lonsdaleta o algo así se llama", dijo Roshi rascando su barba, avanzaban a buena velocidad en medio del mar.

"Otra razón por la que recibe el nombre es por el Imperio de Acero de hace 800 años", dijo recordando los datos, "un imperio cruel que usaba esclavos de todas las razas para minar todos los metales que pudiese del Este del continente, los usaban para fabricar armas…"

Roshi se dedicó a contar datos del lugar al que iban, hasta que finalmente, a medio día habían arribado a tierra firme.

"Aquí estamos", dijo bajándose, y tomando la maleta de la cajuela. Tanto Gokú como Krilin bajaron también y Roshi los guio por un bosque hasta llegar a una explanada amplia que tenía una casa rosada con letras rojas en grande que decían "KAME HOUSE". "Hogar dulce hogar", dijo Roshi sonriente.

"¿Tienes otra casa igual hasta acá?" Gokú preguntó con una sonrisa, le hacía gracia el hecho.

"Tengo varias casas a lo largo del mundo, yo solía moverme mucho cuando era más joven", admitió, Roshi caminando hacia la casa, "Vamos, entremos".

Roshi notó que la casa estaba polvorienta, así que se arremangó el gi.

"Muchachos, ayúdenme a arreglar el lugar donde viviremos"

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Ni a Gokú, ni a Krilin se les complicó limpiar, y ayudaron bastante bien a Roshi, Gokú era bastante bueno limpiando ya que era parte de su disciplina limpiar su choza cada poco tiempo, y Krilin era un Monje Shaolin, donde la disciplina obligaba a los jóvenes monjes a aprender varios métodos para focalizar la atención.

Asi que en un par de horas los tres habían terminado de limpiar.

Después de limpiar, Roshi sacó su maleta y la dejó en su habitación, dejando las revistas que Krilin le había regalado en un estante y varias otras cosas, también reabasteció el refrigerador y se movilizó a la puerta de la entrada.

"Gokú, Krilin, vengan conmigo", el par de jóvenes que revisaban el primer piso de la casa interesaron se giraron, Gokú dejó sus cosas y su cama en el suelo de la casa, y ambos siguieron a Roshi. "Muy bien, Gokú, asumo que fuiste entrenado por Son Gohan por bastante tiempo", a lo que Gokú asintió. "Y Tú Krilin, tienes vestimenta de Monje Shaolin, también fuiste entrenado, ¿no?", Krilin asintió.

"Sí maestro, por 8 años", respondió, Roshi sonrió.

"Muy bien asumo que tienen bien establecido lo básico, así que probaré sus habilidades", dijo mientras arribaban a una zona abierta, a su lado había una piedra grande algo oscura, la tocó con la mano, "¿ven el árbol de allá?", preguntó señalando con su bastón, Gokú lo divisaron, estaba como a 200 metros. Roshi sacó un cronómetro. "la distancia de aquí a allá es de 200 metros, voy a medir su velocidad", dijo caminando hacia ella, pero se detuvo un instante. "Ustedes esperen aquí, cuando yo alce el bastón tienen que correr hasta el árbol, yo mediré el tiempo con éste cronómetro", dijo, y tras ver a Gokú y Krilin asentir a las indicaciones fue hasta el árbol, alzó el bastón y ambos Gokú y Krilin partieron con su máxima velocidad, primero llegó Krilin con 6,1 segundos bajo su bandera, era bastante rápido, Gokú llegó a los 6,5 segundos.

"Son bastante rápidos", Asintió Roshi. Gokú estaba viendo su smartwatch.

"Maestro, ¿puedo volverlo a intentar? Me distraje un momento", dijo Gokú alzando la mirada.

"¿Hmm? ¿Con qué te pudiste haber distraído?", preguntó y Gokú señaló su muñeca, vio el smartwach. "Hmm, muy bien", Roshi no le tomó mucha importancia y Gokú regresó donde la piedra, Gokú se preparó y se concentró, Roshi alzó el bastón y Gokú despegó llegando casi inmediatamente.

"4 segundos redondos", dijo Roshi con una sonrisa. Krilin abrió los ojos sorprendido, eso era muy rápido, más rápido que una motocicleta sin duda.

"Muy bien, Krilin 6,1 segundos, y Gokú 4 segundos, son velocidades bastante grandes, abarcan velocidades superiores a un vehículo como en el que venimos, sin embargo, es una velocidad todavía muy básica, un artista marcial ordinario debe superar esas velocidades con facilidad, en cuanto a un maestro, ¡Deben obliterar las barreras que los dejan a velocidades mortales!", dijo con una sonrisa, se quitó el caparazón, "Déjenme les muestro la verdadera velocidad de un artista marcial", dijo dándole el cronómetro a krilin, y dejándole el bastón a Gokú, caminó estirando sus hombros, "Krilin, concéntrate como si fueras a morir, porque quiero que captures el momento en el que llegue al árbol. Bueno, si no lo logras no hay problema", Krilin asintió y Roshi se posicionó al lado de la piedra y se preparó.

Gokú y Krilin se sincronizaron y en el momento en el que gokú puso el bastón en alto y krilin activó el cronómetro, en ese instante Roshi desapareció.

Todo pasó en el mismísimo momento que Gokú y krilin dieron la indicación, porque en menos de que se lograron dar cuenta, Roshi ya estaba a sus lados. Pero Krilin logró darse cuenta de que había pasado, pues un borrón logró darse frente a él y por el rabillo de sus ojos lo capturó:

0,1 segundos. O, un milisegundo.

Y cuando dio un segundo se escuchó un Boom.

"Un milisegundo…", dijo Krilin incrédulo.

"¡Qué rápido!", Gokú miró a Roshi que se medio estiraba.

"Esa es la velocidad de un Maestro de las Artes Marciales", dijo Roshi. "Y esa es la velocidad que alcanzarán en los siguientes 8 meses", añadió poniéndose el caparazón. "Vengan, vamos a almorzar".

Roshi guio a los muchachos de vuelta a la casa, y resultó que solamente Gokú tenía una buena noción de cocinar, por lo que él se volvería el encargado de hacer la comida, después de almorzar, los tres descansaron un poco y exploraron el pueblo cercano, Krilin se compró varias cosas y Roshi también. Tras un pequeño acoplamiento al lugar, Roshi guio a los dos a una colina relativamente alta de la península. Para éste momento el sol estaba cerca de ocultarse tras el horizonte.

"Muy bien éste es buen lugar, muchachos, hoy no empezaremos el verdadero entrenamiento, pero les pondré un ejercicio para probar otras de sus cualidades", Roshi fijó su mirada en una piedra y sacó un plumón, dibujando un carácter, era el carácter "Kame". La alzó y se las mostró, "Memoricen la forma de ésta piedra".

"¿Maestro?", krilin preguntó. Tanto él como Gokú miraron a la piedra y luego a Roshi.

"El primer entrenamiento que les voy a impartir es éste", Roshi lanzó la piedra más allá del risco. "Cayó a buena distancia". Dijo colocando su mano en su frente.

"¿Vamos a lanzar piedras?" Preguntó Gokú arqueando una ceja.

"No, ustedes", Roshi los señaló, "van a buscar la piedra que acabo de lanzar", y señaló al risco, "Es un ejercicio para que entrenen su mente y resistencia física, tienen hasta media noche", dijo mirando al par directamente, "y para darles una motivación, si no la encuentran para entonces, no habrá cena, pero si al menos uno de ustedes la encuentra, aquel que la encuentre podrá cenar", Gokú y Krilin arquearon ambas cejas, e instantáneamente Roshi señaló más allá del risco con su bastón, "Hale, vayan", indicó Roshi, Gokú y Krilin reaccionaron sorprendidos.

"¡No me quiero quedar sin cena!", dijo Gokú apresurado corriendo al risco, frunció el ceño, Krilin también llegó al lado de Gokú, ambos tuvieron pensamientos distintos, mirando bajo el risco.

'Debí haber memorizado donde cayó', pensó Gokú 'De qué modo…' y su mirada se iluminó, una idea le había llegado.

'Maldita sea, ¿quiere que lo busquemos en ese masivo bosque? Y está por debajo de un risco…' Krilin tragó saliva, estaba traumado por lo que le había pasado al anochecer, caer de varios kilómetros de altura lo habría matado per su entrenamiento lo salvó afortunadamente, no es que precisamente tenga resistencia inhumana, pero no era un debilucho tampoco.

Y con éstos pensamientos, el primero en actuar fue Gokú, que se lanzó sin pensarlo dos veces.

"¡¿Eh?!", Krilin se sintió sorprendido, "¡Estás Loco!", exclamó asustado, su mente se aceleró, realmente no quería hacer lo mismo que gokú, pero intentar acortar con una bajada le tomaría mucho tiempo.

Y entonces una idea le llegó.

Mientras Gokú, detuvo su caída usando una rama y aterrizo en el suelo, inhalo duramente y múltiples olores llegaron a su nariz. Sus ojos se posaron hacia el frente y avanzó rápidamente, fijando su mirada en piedras sueltas de su camino, escaneando y evaluando su entorno.

Krilin había logrado encontrar una piedra parecida a la que Roshi había encontrado.

"Ahora… cómo le hago…", Krilin divisó un poblado y sonrió, llegó a la primera casa y llamó a la puerta. Una señora de piel oscura le abrió.

"¿Necesitas algo?", preguntó la señora, estaba preparando algo en una olla.

"Señora, ¿me prestaría un Marcador negro?", preguntó Krilin. Con una sonrisa confiada, la señora asintió y sin mucho escrúpulo le dio un marcador, Krilin dibujó el carácter Kame y le devolvió el marcador, "¡Gracias!", krilin corrió de vuelta mientras la señora asentía con su cabeza y cerraba la puerta.

Roshi vio a Krilin regresar, parecía estar falto de aliento.

"¡Maestro-!", Kriling jadeó y se puso frente a Roshi, poniendo sus manos sobre sus rodillas, "¡Lo- Haaah, lo conseguí!", dijo mostrándole la piedra, Roshi la tomó y la miró cuidadosamente, y luego la lanzó contra la cabeza de Krilin.

"No seas méndigo", dijo Roshi indiferentemente, "Vi tu pequeño plan a leguas, te hacen falta siglos de experiencia para engañarme con tu pequeño acto, ve", Roshi señaló el risco con su bastón, Krilin maldijo en voz baja y corrió hacia ael risco con ojos cerrados.

"Maldita sea, maldita sea", Krilin suprimió su miedo al máximo y se lanzó deteniendo sus manos temblantes, usando una rama para detener su caída, un cierto dolor pasó en sus brazos, '¡esto no es nada!', pensó recordando cuando tuvo que aterrizar sobre un árbol, casi se rompe todos los huesos del cuerpo esa vez, ¿esto? Esto era un cosquilleo en comparación, Krilin frunció el ceño y manifestó un rostro serio, una de sus manos temblando de los nervios.

¡ROAR!

El rugido de un tigre dientes de sable lo sorprendió y rompió su compostura, sintió su cuerpo volverse gelatina y se dio la vuelta escapando del tigre, que lo persiguió a gran velocidad. Krilin notó que la velocidad del tigre era bastante lenta así que le hizo la envolvente, usando un ataque con el canto de mano, matando al tigre de un golpe en la nuca.

"Dios…", Krilin jadeó dejando ir su miedo, escuchó un paso pesado y se escondió tras de un árbol, un dinosaurio de patas gruesas pasó y tomó el tigre con su hocico, comenzando a mordisquearlo y retirándose de ahí, "¡Qué clase de bosque es éste…!", Krilin volvió a jadear, ésta vez sintiendo el miedo tomar presa de él otra vez, sin embargo, focalizó toda su atención a la tarea en cuestión.

Mientras tanto Gokú se detuvo un segundo.

"Sí, está cerca", su olfato aumentado lo hizo achicar sus pupilas, buscando con extrema atención, Gokú tocó con su pie una piedra, "¡Ah! ¡Aquí está!", Gokú sonrió por completo al ver una marca familiar en la piedra.

Krilin llegó justo detrás, corriendo y jadeando por miedo y cansancio, se había estado peleando con múltiples bestias.

"¡¿Eh?! ¡¿Ya la encontraste?!", Krilin exclamó sorprendido.

"¡Claro!", Dijo caminando de vuelta a su hogar.

"¿Cómo le hiciste?", preguntó Krilin suspirando y siguiéndolo, seguía bastante agitado.

"Rastreando su olor", respondió caminando alegremente.

"¿Eh? ¿Cómo los perros?", Krilin mostró una expresión de suave sorpresa. Miró la piedra en la mano de Gokú, una idea maquiavélica le vino a la mente, "Oye Gokú".

"¿Hm?"

"¿Seguro que es la piedra? ¿Me dejarías verla?", preguntó alcanzándolo.

"Claro, tiene la marca", dijo dándosela, Krilin la tomó.

"¡Matanga dijo la changa!", dijo y salió corriendo a gran velocidad, Gokú se quedó quieto y miró su mano vacía.

"¡Ey! ¡Ven aquí, tramposo!, Gokú lo siguió con una cara enojada, despegando a máxima velocidad, Krilin vio la pared del risco y la usó para hacer un arco por sobre Gokú, y comenzar a moverse entre los árboles.

"¡Atrápame si puedes, lero lero lero!", se burló Krilin, aunque su expresión se volvió una de arrepentimiento, porque Gokú se estaba movilizando por los árboles como un mono, y lo había alcanzado en poco tiempo, Krilin se dejó caer y Gokú lo intento atrapar.

"¡Diablos, no tiene cabello!", Krilin sintió una vena marcarse, pero siguió corriendo rodeando el risco y llegando a un puente que conectaba ésta parte del bosque con una parte ascendente.

Krilin cruzó el puente a toda velocidad y destruyó las maderas que lo sostenían de una patada, Gokú llegó al borde de los riscos que estaban conectados por un puente y miró a un acaudalado río bajo los riscos, Gokú achicó los ojos. Y retrocedió sutilmente.

Krilin sonrió pensando que Gokú se había rendido, pero lo notó corriendo y salta muchísimos metros, acercándose al risco en el que estaba él, Krilin chilló sorprendido y reanudo su escapada, pasó el otro lado del bosque y ascendió por una subida pelona que tenía algunas palmeras y que conectaba directamente con el risco donde Roshi los esperaba 'Ya estoy cerca', Dijo Krilin con una sonrisa, creía haber perdido a Gokú en la parte de la subida, de pronto, el mencionado apareció saliendo de otra parte del bosque, interceptándolo.

"¡Devuelve la piedra, ladrón!, dijo poniendo la mano abierta.

"Persistente perro mono", dijo molesto, "¡Si la quieres devuelta, pelea!", exclamó poniéndose en pose de combate. Gokú sonrió ligeramente.

"¡Qué así sea!", Gokú también se puso en pose de combate y Krilin comenzó dando una patada ascendente que Gokú esquivó y luego bloqueo la misma patada dada en descendente, "Qué fácil formas una apertura", Gokú le lanzó un golpe al estómago que Krilin bloqueó con su rodilla, Krilin sintió un dolor molesto recorrer su pierna y rápidamente lanzó un golpe que Gokú bloqueó aprovechándolo para retroceder y calmar el dolor. Gokú estaba haciendo uso de su fuerza innata.

"¡Con que así quieres pelear!", Krilin lanzó un golpe contundente y Gokú lo impactó con su propio golpe contundente, choque el cual Krilin perdió, pero Krilin no se rindió lanzó más ataques contundentes, bloqueando los propios ataques contundentes de Gokú, Gokú lanzó una patada normal, cosa que tomó a Krilin por sorpresa, aprovechando éste hecho, Gokú lanzó un golpe que lo mandó lejos, Krilin hizo unas volteretas para enderezarse y regresar a la lucha, ambos chocaron patadas e intercambiaron golpes contundentes, y en una de esas Gokú aprovechó a aplicar una técnica de Aikido, redirigiendo el ataque de Krilin y dándole un golpe en el mentón lo cual lo confundió, Gokú se agachó y lo tiró pero Krilin recuperó la compostura alzándose al aire y lanzando una patada área, Gokú la bloqueo pero en cambio resultó un pisotón que lo desestabilizó por un momento, Krilin lo apresó con las piernas y le lanzó algunos golpes directamente a la cabeza.

Gokú dio unos golpes a los muslos de Krilin y éste finalmente lo dejó ir, Gokú lanzó algunos golpes orillando a Krilin a retroceder, incluso hubo un punto en el que Gokú propinó un mordisco lo que los obligó a separarse y mantener uno frente al otro.

"Huf, huf", ambos se tomaron un descanso estando un ante el otro, preparados para el siguiente round, y sin esperar éste empezó, entre ataques y contraataques, Krilin finalmente perdió ventaja, terminando sometido y tirado al suelo

"Augh", Krilin se quejó, "Qué fuerte eres".

"¿Te rindes?", Krilin asintió y Gokú lo ayudó a levantarse. "¿Ya me das la piedra?, Krilin asintió y la sacó de entre sus ropas.

"¡Pero atrápala!", Krilin la lanzó a gran velocidad y Gokú achicó los ojos.

"¡Oh no!", Gokú corrió rápidamente hacia la piedra lanzada y Krilin despegó al lado contrario.

"Jaja, imbécil, esa no era la piedra verdadera", Krilin llegó rápidamente ante el maestro Roshi, jadeando igual que la vez anterior, solamente que esta vez sí era auténtico. "Aquí… Haah… está la piedra… Haaaaah, Maestro", dijo Krilin dándosela, Roshi la tomó y la vio atentamente.

"Hm, esta vez sí es la verdadera piedra, felicidades Krilin, ganaste".

"¡Kriliiiiiiiiiiin!", una voz gritó a lo lejos, era Gokú con la piedra que krilin había lanzado. "¡Ésta no es la piedraaaaaaaaaaaaaaaa!", y entonces notó como Roshi tenía la piedra que Krilin le había prometido dar, Gokú arqueó ambas cejas y entristecido se dio cuenta de su cruel destino: había perdido.

Gokú tuvo que prepararles un manjar, y quedarse mirando mientras su estómago rugía agresivamente.

El lado bueno es que pudo entrenar su voluntad y perseverancia.