Los ojos fuertemente cerrados de Xiao Yan se abrieron lentamente en una habitación. Un brillo destelló en sus profundos ojos negros antes de desaparecer rápidamente.
Un bocado de aire turbio siguió la garganta de Xiao Yan mientras era exhalado lentamente. En ese momento, Xiao Yan no solo no mostró ninguna apariencia de fatiga incluso después de una gran batalla espiritual sino que también había fortalecido su Fuerza Espiritual debido a que había engullido un montón de aura remanente. Su cuerpo originalmente algo cansado volvió a estar lleno de energía.
Luego de abrirlos, los ojos de Xiao Yan se deslizaron lentamente hacia las alas de hueso jade suspendidas frente a él. Después del refinamiento de antes, parecieron verse incluso más cristalinos. Además, el aura feroz que antes se había filtrado vagamente de ellas se había vuelto mucho más débil. Claramente, los efectos del refinamiento fueron beneficiosos.
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